Jungkook giró los ojos al ver el último Tweet de su jefe, estaba acostumbrado a sus tweets quejándose sobre él, aunque sabía de sobra que la mayor parte del tiempo lo decía bromeando, o eso esperaba. Siguió navegando hasta llegar al tweet por el cual se estaba quejando su jefe, se quedo analizando la foto un par de segundos hasta que notó que se trataba de Misuk, aunque las extensiones de cabello le habían una gran diferencia.

Suspiro cansado de estar en lo mismo, estaba tirado en el suelo de su sala de prácticas durante la última media hora, no tenía porque venir a ensayar pero no es como si tuviera algo que hacer. Jungkook mordió con suavidad su labio inferior antes de buscar el chat de aquella chica a la cual le había regalado la videollamada.

Dudó un poco en hacer aquello, estaba poniendo en juego su identidad pero... su pequeño corazón le daba una punzada indicando que ella era buena persona o eso esperaba. 

Una carcajada escapó de sus labios al ver el mensaje de la chica, esto no lo había dicho en público nunca pero tenía cierta ¿atracción? hacía las mujeres mayores que él. Siguió leyendo los mensajes y se sorprendió a la chica al leer que tenía su propia tienda pero eso explicaría porque tanto tweets sobre ídolos.

Se rió una vez más, se notaba que ella era fanatica de su hyung, y nunca mintió, si bailo con él unos días atrás, en Just Dance pero lo hizo. Aunque sintió algo feo al no decirle la verdad sobre su trabajo no pudo evitar mentir, tal vez en algún futuro le diría si es que siguen en contacto.

Una cálidez se instalo e su pecho, no podía decir con orgullo que tenía amigos virtuales pero algunas veces podían ser más sinceros que los reales; había pasado mucho tiempo desde que había hecho alguno, la mayoría de ellos estaban ocupados en comebacks y si tenían suerte en alguna cita. 

Dejó su celular a su lado cuando leyó el último mensaje de "Ji", tal vez dormiría un poco ahí.