— ¿Deberíamos ir a comer? — preguntó Mingyu rodeando la cintura de su pareja— Quiero disfrutar cada segundo contigo...

— Sí sabes que solo son parciales y no me voy al otro lado del mundo ¿verdad?

— Mhm... lo sé pero te la pasas estudiando y no te veo durante todo ese tiempo

— ¿Por eso el viaje a última hora?

— Sí. Tome mis vacaciones para ser solamente tuyo estos días, si hacen alguna babosada durante mis vacaciones será problema de ellos

— Me gusta como se te ve el cabello ahora  — comento la chica mientras pasaba su mano por el cabello, ahora largo, de su pareja— No deberías cortartelo

— Mhm... confiare en tu palabra  — el chico dejó de lado su celular con el cual estaba jugando— Vayamos a la piscina

— Iré a cambiarme de ropa

— Está bien

La pareja había realizado un pequeño viaje de última hora a una playa; Mingyu se había encargado de reservar una habitación en uno de los mejores hoteles del lugar.

Y vaya que no se había arrepentido.

Cuando la chica salió del baño usando una de sus camisetas blancas se levantó del sofá en el que estaba, suponía que tenía el traje de baño abajo de su camisa. Misuk siempre usaba trajes de una pieza.

Camino con emoción y al llegar a la piscina fue el primero en lanzarse con energía, sintiendo el agua mojar su cuerpo y su cabello pegarse a su rostro; con una mano apartó su cabello notando que Misuk estaba sentada en la orilla de la piscina entrando poco a poco.

Mingyu nado hasta estar cerca de ella, manteniendo una gran sonrisa.

— ¿Puedo hacer una pregunta?

— Ajá — Misuk aún dudaba en entrar en el agua pero terminó haciéndolo, Mingyu la tomó en sus brazos puesto que la chica trataba de no mojarse el cabello.

— ¿No estás usando traje o porque la camisa?

— No quería sentir tanto frío

— Eres como un pequeño gato, siempre escapando del agua — el chico la salpico un poco haciendo que empezará una pequeña guerra de agua y risas— Misuk-ah

— ¿Mhm?

— Te amo

— Yo también te amo

Mingyu la tomó de la cintura y sin dudarlo un segundo, la beso.

— Eres el más hermoso accidente que me pasó Sukie

— ¿Sukie? — una risa nerviosa salió de los labios de la coreana, sus mejillas se colorearon de un color rosa sin embargo, sin sufrir de pena alguna abrazó el abdomen desnudo y mojado de su novio— Fuiste el mejor desperdicio de frappe que me pudo haber pasado

Mingyu soltó una carcajada al escucharla. Y a Misuk, en verdad le encantaba escucharlo reír.