Después de años de estar detrás de la sombra de Robin, por fin, su tiempo de brillar en los Titanes había llegado para el Superchico.

Jonathan Kent era líder de su propio equipo.

Bueno, técnicamente no era su equipo, ni tampoco era precisamente el líder.

Hace unos meses la torre comenzó a ser el lugar receptor de varios jóvenes con habilidades especiales. Estos jóvenes se encargarían de cuidar del futuro de la tierra en la lucha por la justicia. Y él, Jonathan Kent, fue nombrado por el mismo Nightwing a ser el mentor de un grupo conformado por los cuatro más pequeños de los recién llegados.

Se sentía tan orgulloso de si mismo al contribuir a la historia de los superhéroes de tal forma. Jonathan Kent los prepararía para el futuro, siendo así el mejor mentor de todos los tiempos.

¡Además!, por primera vez en su vida tendría el completo poder de dar ordenes.

¡Genial!

Y, Precisamente en estos momentos se encontraba frente a los futuros héroes bajo su tutela:

Bart Allen/Impulse; un velocista del futuro-nieto del actual Flash.

Mar'i Grayson/Nightstar; mitad alíen mitad humana, con poderes Tamareanos y la intuición de un verdadero detective.

Liam Harper/Speedy; Arquera e hija de Roy Harper.

Tula/Aquagirl; una princesa sacada del océano.

Para decir verdad, Jon, se había imaginado que estos pequeños niños llegarían con todas las ganas de trabajar, de obedecer y con muchos deseos de aprender.

Pero, la realidad fue tan distinta.

Ser mentor de alguien se había convertido en una pesadilla para él.

Sus expectativas iban desapareciendo conforme sus ojos observaban como sus niños del futuro hacían un desastre en la sala de entrenamiento. Tenían ganas de aprender, deseos de trabajar, pero cero motivaciones a obedecer.

Ahora comprendía porque Damian le había insistido tanto en que tomara el cargo de este grupo. El demonio que tenia por amigo sabia que esta sería una tarea bastante tediosa. Prácticamente lo hizo a propósito para molestarlo.

"¡Equipo! ¡Equipo!" El mayor trato de llamar la atención del grupo.

Fue ignorado brutalmente.

Mar'i flotaba por la sala de entrenamiento evitando ser golpeada por las flechas de Lian Harper. Bart corría sin sentido por todos lados y Tula simplemente presenciaba todo el espectáculo sentada en una esquina con una aburrida expresión en su rostro.

Cuatro pequeños niños entre 8-13 años y Jon era incapaz de disciplinarlos.

La disciplina nunca fue un fuerte del mitad kriptoniano. Entonces, si quería que esos niños lo obedecieran debía ser un poco más como Damian.

"¡Suficiente!" Jon grito y con un gran soplido hizo que todos los niños cayeran sobre el suelo. El mentor levantó sus manos sobre sus hombros en pena cuando cuatro pares de ojos lo miraron con asombro y temor. "Lo siento niños, pero ustedes no prestaban atención"

"¡Jon, interrumpiste nuestro entrenamiento!" Nightstar se elevó de nuevo en el aire, lo miraba con ese ceño mortal que uno únicamente aprendería después de convivir diariamente con el clan del murciélago.

"¡Tengo flechas de Kryptonita en mi poder!" La hija de Roy Harper lo señalaba con una flecha verde.

Ok. Tal vez Jon confundió temor con ira.

"Eso seria maravilloso, pero..." Bart desapareció de donde estaba para en un segundo reaparecer recargado sobre el hombro de la pequeña Lian, curiosamente ahora traía una galleta en la mano. "¡¿Acaso están locas?!. ¡No podemos matar a nuestro mentor!"

"La influencia de Red Hood y Arsenal es mala para ellas." Tula se levantaba del suelo.

"Deja a mi papá y al tío Jay fuera de esto, chica pez"

"¡No soy una chica pez!, Robin Hood."

"Lian, ¡Jason no es tu tío!"

"¡Es amigo de mi padre Mar'i!, Por lo tanto es mi tío también."

....Y ahí iban de nuevo.

Las tres chicas discutían mientras Bart iba y venía observando la escena con un alimento nuevo en sus manos cada vez que aparecía.

Jon suspiro pesadamente. ¿Que haría Damian en estos momentos?Probablemente causarles traumas de por vida con una tarea imposible.

Un pequeño juego psicológico.

"Nightwing tenia razón sobre ustedes" Jon dijo en voz alta.

Ante la mención del líder de los Titanes, el pequeño grupo de niños por fin pararon su discusión, muy atentos a lo que Jon podría decir.

Una cosa era cierta; Damian era temido y respetado tanto por los viejos como por los nuevos miembros de los Titanes.

"¿El tío Nightwing?, ¿Dijo algo sobre nosotros?" Los ojos verdes de Mar'i brillaban con esperanzas de escuchar algún halago.

"Si, me temo que tenía razón...ustedes no están listos. Me comento sobre regresarlos al entrenamiento básico"

De inmediato las protestas se dejaron oír.

"¡Nooooo!"

"Estamos listos para las misiones Jon."

"Lo siento Mar'i, pero las palabras de Nightwing son ley aquí. Si tan solo pudiera acatar ordenes en el entrenamiento" Jon fingió pena por ellos "Ni hablar, regresaremos a los ejercicios de calentamiento"

"Estamos hartos de los calentamientos, Jon" Lian empuño sus manos molesta.

"No somos bebés " Mar'i flotaba en el aire con los brazos cruzados.

"Yo ya soy adolescente" Bart simplemente agrego.

"Estamos preparados para retos mayores."

"¿Estas segura de eso Tula?" Jon encogió los hombros cuando los cuatro niños cabecearon un si en respuesta. "Bien, les daré una misión, si tienen éxito Nightwing y yo podremos considerarlos para participar en entrenamientos mas avanzados"

Los niños esperaban con anticipación a sus ordenes. Los tenía comiendo de su mano.

"Bien...Como saben, Nightwing y yo acabamos de llegar de una misión del espacio."

"No me gusta a donde va esto" Los susurros de Bart lo interrumpieron.

"Como decía....niños" De inmediato el silencio reino de nuevo en la sala de entrenamiento. "Para demostrar sus habilidades hay una cosa por hacer: Deben robarle las espadas a Nightwing"

Los gritos de asombro se escucharon, angustiados los niños se observaban uno a otros.

"¡Eso es un suicidio!" Bart se escondía detrás de Tula.

"Incluso mi padre le teme a Nigthwing" La pequeña Liam había perdido un poco de su confianza.

"¿Tu padre?, ¡Toda la Atlántida le teme!"

Si, no había nada mejor castigo y lección para niños desobedientes que enfrentarlos a su mayor temor: Damian Wayne.

"Es la única opción niños, pero si no pueden...."

"No, nosotros podemos Jon." Nightstar se puso frente a su equipo con manos en las caderas "Somos un equipo, trabajando juntos podremos lograrlo. ¡Confiemos en nosotros!"

Si, definitivamente había mucho de Dick en la pequeña Mar'i, era una líder por naturaleza.

Jon vio con satisfacción a los jóvenes escabullirse con gritos de confianza a la búsqueda del líder de los Titanes.

Esto sería perfecto, su plan tenía dos objetivos.

Uno; los chicos aprenderán a trabajar en equipo y, Dos: Esto sería una sutil venganza en contra su amigo por engañarlo a trabajar con un grupo de niños rebeldes.

—————

Damian podía pensar en miles de razones negativas por la cual odiar la Torre Titan; era fría, para nada discreta, había demasiada gente viviendo bajo su techo. Pero aun así, no podía negar que regresar a ella después de un largo tiempo le daba una sensación de haber llegado a su hogar.

Hace cuatro días llegó de una misión compartida con todos los supers.

Fue casi una tortura para el nuevo Nightwing estar dos semanas en el espacio en una pequeña nave con todos los miembros de la familia Kent.

Una gran tortura de la cual nunca volvería hablar.

La sencilla parte de toda su aventura fue la misión en sí, lo difícil fue lidiar con Superman y su nefasta prima Supergirl.

Estaba estresado y pensó que el llegar a la tierra le ayudaría a disipar un poco la tensión de su cuerpo. No fue así....cuatro días en la tierra y seguía sintiendo la bola de estrés en su cuerpo.

Algo le hacia falta para permitirse relajarse por completo.

Malditas Las Vegas y Maldito sea Garfield Logan.

Su tensión pronto se transformo en el rostro de una chica con zafiros violetas por ojos. Le costaba admitirlo, pero, la necesitaba.

Damian gruño frustrado conforme avanzaba por los pasillos de la torre.

Esto era un problema, un problema grave.

Comenzó todo como una mera curiosidad, una forma en la cual darle un 'cierre' a ese extraño fin de semana que ambos compartieron en Las vegas.

Encontrar una explicación al principio de todo este juego de placer al que habían caído.

Quería pensar que en cierto punto esto entre los dos era normal. Ella era su amiga, eran jóvenes adultos, el libido era algo que todos los seres humanos compartían. Él era un hombre fuerte y ella la mitad de un pecado errante en la tierra. Era compresible que tuvieran deseos de ese tipo, el sexo era normal. Una situación ganar-ganar donde ambos pasaban un buen rato; él se relajaba y ella descansaba de sus meditaciones para controlar sus poderes.

Era un arreglo entre los dos, ¿Verdad?. Nada fuera de lo común en estos días.

Y esa patética excusa le daba un poco de calma a su conciencia por un tiempo.

El problema era que siempre caían en la tentación de ir por más, siempre con una excusa.

Ambos han intentado darle un cierre a este circulo vicioso por meses desde aquellos acontecimientos en Las Vegas sin mucho éxito. Al final ambos terminaron siendo ser una clase amigos con derechos que buscaban darle un cierre digno a este circulo vicioso al cual habían caído.

Fallaban miserablemente.

Damian se había encontrado entre las piernas de la mujer mas veces de las cuales le gustaría admitir. El juego de curiosidad pronto se transformó en una necesidad para él. Un largo lapsus de tiempo sin tenerla le hacia pensar en volver a la cama de la chica como un desesperado. Una curiosidad que muchas veces había explorado pero parecía no ser suficiente para saciarla.

Damian nunca había actuado de esa forma con nadie en su vida, era como si esas drogas siguieran dentro de sus cuerpos quemándolos con el deseo.

'Pero esas pastillas nunca fueron la droga, la mitad demonio lo era.' - Una traicionera voz resonó en su mente.

Su cabeza le dolía, como siempre, al intentar encontrar una explicación racional a esta extraña relación con su amiga y compañera.

Un juego muy peligroso...

Lo bueno en todo esto es que además de su nueva actividad pasional nada había cambiado entre ellos. Seguían siendo amigos, excelentes compañeros de trabajo, conversaban como siempre, disfrutaban de la compañía del otro y...por lo menos una vez a la semana se metían entre la sabanas juntos en busca de liberación sexual.

Pasaban de una casual charla como buenos amigos a pasionales amantes en un segundo. Era como un click, un cambio en la atmósfera y en un instante se encontraban devorándose.

Si, nada extraño ahí....todo normal.

Necesitaba encontrarla, hablar con ella seriamente de esto, nuevamente.....y esta vez darle un digno cierre a sus actividades...

Seria sencillo.

¿Verdad?.

"¡Nigthwing!, Detente justo ahi"

"¿Mar'i?"

Mar'i Grayson, con uniforme puesto, le tapaba el final del pasillo con Impulse, Aquagirl y Speedy detrás de ella como una emboscada.

"Mi nombre es Nightstar" La menor le sonrió con orgullo mientras flotaba por encima de sus compañeros.

"¿De que se trata esto?" Damian impuso su presencia, con los brazos cruzados miro a los cuatro niños en sus posiciones de ataque "Ustedes deberían estar entrenando y no jugando en los pasillos."

"En eso estamos, Nightwing. ¡Señor!. " Impulse temblaba inquieto, demasiado nervioso.

"Así es Nightwing, prepárate."

El mencionado miro extrañado a su sobrina.

En donde estaría Jon, este era su grupo. ¿Que clase de entrenamiento era este?

Su respuesta no tardo en aparecer.

"¡Equipo ataquen!"

A la orden de Nightstar los niños comenzaron a moverse.

Este grupo de pequeños mocosos se creían capaces de derrotarlo. Él no dudo ni un segundo en contraatacar.

La puntería de la joven arquera era buena pero la velocidad de sus flechas demasiado lenta, con facilidad las pudo partir a la mitad con sus espadas antes de que fueran una amenaza para él.

Damian se dejo golpear por el agua de Tula, un ataque inofensivo para él pero no para el velocista que ahora se resbalaba con el charco de agua en el suelo, en su camino golpeo a Speedy y Aquagirl, haciendo que los tres terminaran sobre el suelo.

"Tenemos una misión, te quitaremos esas espadas" Mar'i seguía en el aire con sus puños brillando en poder. La mueca de orgullo en su rostro le recordaba a los guerreros del planeta de su madre.

'Esto me huele a una idea de jon'

"Vamos, equipo. Arriba"

De nuevo, ante las ordenes de la niña de larga cabellera oscura, los niños se prepararon para el ataque.

Reconocería la determinación del equipo, era buena. Y Mar'i...ella era tan valiente como un murciélago lo sería. Tal vez debería hacerse un tiempo para entrenarla...

"Pueden intentarlo mil veces, pero con tan patéticos intentos nunca lo lograran."

Bart fue el primero en intentar atacarlo, Nightwing lo tomo del brazo con facilidad y lo empujó hacia Lian quien ya lo apuntaba con su arco. Cuando ambos colindaron la flecha de la aquera termino golpeando a Mar'i en el aire, la inocente de Tula fue la encargada de amortiguar su caída esta vez.

"Patético, los derrote dos veces sin esfuerzo. Necesitan más entrenamientos." El hombre dio media vuelta sin darles otra mirarla.

Debía hablar seriamente con Jon sobre su equipo. A este paso no podrían derrotar ni siquiera a un simple ladrón de carteras.

"'¡Espera!, esto aun no termina" Mar'i apareció frente a él, frenando su paso con una mano."Tío Damian, danos tus espadas."

"Muy poco profesional Nightstar. Si esto fuera un campo de batalla real ya estarías muerta."

La niña seguían sin flaquear, en lugar de eso su sonrisa se volvió casi macabra.

"Entrega tus armas o le dire al abuelo Bruce quien fue el responsable de descuartizar su tan adorado dinosaurio en la pasada reunión familiar."

Damian la miro admirado, casi sin poder creer lo que estaba escuchando.

¿Acaso su sobrina lo chantajeaba?.

"Mar'i Grayson, has pasado demasiado tiempo con el imbecil de Todd"

"El tío Jay es un buen maestro del arte de la manipulación, pero en realidad aprendí todo de Raven." Mar'i mostraba arrogancia, sabia que había ganado la batalla "E imbecil es una mala palabra, tío Damian"

"Una que acabas de decir, malcriada"

Tras de ella, su equipo imitaban su posición, arrogantemente esperando a que él cediera ante la manipulación de su pequeña líder.

"Tu me la enseñaste." La niña levanto un brazo a nivel de su cabeza para amenazarlo con sus starbolts "Ahora, entrega tus espadas"

Para nada temía las consecuencias de sus actos ante la disciplina de su padre. Estaba mas impresionado por saber que Raven, de todas las personas en esta torre, había logrado poner en su contra a su sobrina con tácticas tan viles como las del Simplon de Todd.

Raven, ¿Quien lo creería?, ahora ponía a su familia en su contra.

Definitivamente esa mujer iba a ser su final.

Pagaria muy caro su traición..

Se dio por vencido únicamente por el hecho de estar complacido por el liderazgo de su sobrina.

Desfundó sus espadas, las bajó sutilmente en sus manos a los lados de sus piernas para demostrar su derrota. En un segundo las armas desaparecieron de sus manos.

Malditos velocistas.

"¡Las tengo!" Bart Allen grito emocionado conforme se iba corriendo lejos del grupo.

"Bien....¡Titanes ataquen!"

"¿Ataque?" Damian miro confundido a la pequeña versión de Kori "Ya tienes las espadas, tu niña egocéntrica"

"¿Huir de una batalla?...nunca. Eso lo aprendi de ti. Y no lo hagas difícil....Recuerda tío Damian, el dinosaurio ..Raww""

Esa niña era el diablo, demasiado tiempo siendo ignorada por sus padres y siendo cuidada por Raven había causado todo esto.

Y así fue como Damian Wayne, líder de los titanes, temido por muchos, respetados por otros, antiguo Robin e hijo de Batman fue 'derrotado' por un grupo de niños de entre 8-13 años.

Lo dejaron tumbado en el suelo, con el orgullo golpeado mientras ellos se alejaban con risillas traviesas y con sus armas bajo su posesión.

Jon lo iba a pagar y Raven recibiría el doble del castigo.

Tuvo suerte de que nadie hubiera presenciado este ataque a su orgullo.

"¡Dami!,Dami!"

Habló demasiado pronto.

"¡Ugh ....!"

De un momento a otro sintió una fuerte presión en su estomago, un peso extra se apoderaba de él en la forma de Jake Grayson. Con dos años de edad, la mini versión de Richard Grayson con ojos verdes, pesaba lo suficiente como para que su brincoteo en su estómago amenazara por sacarle el aire de sus pulmones.

"Jake.." Damian dijo con un gruñido queriendo detener al infante, pero este simplemente se divertía al estar sentado sobre un trampolín personal.

¿Cómo llego el infante aquí por su cuenta?

"¿Necesitas refuerzos?, ¿Una ambulancia?. Tus atacantes te dejaron muy mal."

Reconocería esa voz burlesca en donde fuera.

Lo ultimo que necesitaba en estos momentos era tener un testigo...especialmente a ella.

Con solo una pequeña mirada a su rostro, él sintió un calor revolverse dentro de su estomago.

Damian tapo sus ojos para evitar mirar los zafiros de Raven brillando con diversión ante su merced. De todas las formas en la cual la quería encontrar esta seria la ultima que pudo haberse imaginado; humillado y con el inocente Jake presente.

"Jake y yo vimos como un grupo de niños te pateaban el trasero." Raven se asomaba sobre él, con esa sonrisa traviesa que intensificaba el calor dentro de su estomago, o...quizás esa sensación solo era a causa de Jake, quien golpeaba su estomago como si fuera un tambor.

"Ese Jon me las va a pagar"

"¿Jon?."

"¿Quien más?, ese tonto esta cargo de ese grupo de mocosos y estoy seguro que los envío en contra de -Ugh—"

Él tenia más por decir, pero fue brutalmente interrumpido cuando Jake comenzó a saltar en su pecho.

"Dami, Dami"

"¡Alto infante!". El grito de Nighwing fue amenazante, detuvo los movimientos del niño quien lo miro serio unos segundos para después soltarse en festejadas carcajadas.

"Ven Jake, el 'gran' Nightwing ya tuvo suficientes derrotas por hoy" Raven tomo a Jake en sus brazos.

"Dami, ¿Perdió?" Los inocentes ojos verdes de Jake miraban con curiosidad a la chica.

"Si, pero no se lo digas, todavía esta en la negación."

"Ha.Ha,Ha, Muy graciosa." Damian se levantaba del suelo evitandola "¿Qué haces con Jake?"

"De algun modo me he convertido en la niñera oficial de tus sobrinos"

"TT...haces un pésimo trabajo con eso. Mar'i ya me informo de tus pequeñas lecciones."

"Me alegra compartir mis conocimientos" Ella acomodaba el peso de Jake en sus brazos sin borrar la mueca de satisfacción de su rostro "Especialmente si sirven en tu contra"

"Tienes suerte de que estés cargando a un miembro de la familia Roth" Damian frunció su ceño mientras apuntaba un dedo en la dirección de la joven "Si no fuera por Jake ya estarías inconsciente sobre el suelo. Esto es traición bruja."

Sabia que había dicho algo mal cuando la mueca en el rostro de Raven se engancho tanto que podría jurar que el mismo diablo saldría de ella para jugar.

"uhh...Damian, ¿Con tu sobrino presente? ¿Acaso no puedes tener control?"

"¡No seas idiota!" Un intenso calor se adueño de sus mejillas ante la insinuación. "¿Por que cuidas a Jake? ¿En donde esta Starfire?"

Damian rápido intento mover el tema y de controlar el intenso calor de su cuerpo. Ella bromeaba con él, al parecer se encontraba en muy buen humor.

El inocente Jake escuchaba todo, atento a los dos adultos a su alrededor.

"Kory entrena a la nueva Wonder Girl y, aunque Dick también esta aquí, esta muy ocupado revisando los archivos de tu computadora como para poder encargarse de su pequeño hijo."

"¿Grayson esta aquí?, ¿Quien cuida Gotham?"

El trato de ignorar como Jake reía cada vez que las plumas de la capa de Raven rozaban sus regordetas mejillas. Una pintoresca visión.

"No lo se. Llego hace poco, me entrego a Jake y se largo a tu oficina"

"Debe de ser algo importante. Iré a buscarlo"

"Espera.. Llévate al Infante contigo."

"No. Jake es tu responsabilidad" Damian se negó a tomar al niño de los brazos de Raven.

"No es mi responsabilidad, es tu sobrino. Yo solo le hacia un favor a Dick" Raven de nuevo le acerco a Jake pero Damian solo se hacia para atrás "Vamos Damian, Victor necesita mi ayuda con un psicótico que no quiere hablar y después de eso debo pasar a la editorial"

"Jake es tu compromiso, no el mío. Llévalo contigo."

"¡No seas necio!. No puedo llevar a un niño a un manicomio"

El niño disfrutaba el vaivén de su cuerpo. Ser acercado y rechazado por Damian era meramente un juego para él.

"Su Padre es Dick Grayson...sobrevivirá fácilmente en un manicomio" Damian cruzo sus brazos.

Raven había perdido toda su paciencia y ahora lo se encontraba frustrada.

Pero nada en este mundo, ni siquiera Raven, lo harían cambiar de opinión.

"Dami, carga a Jake....pofavol" El pequeño llevaba un puchero en sus labios y hacia señas con sus brazos para ser tomado por el mayor.

Demonios.

Tenia que resistirse.

"Yo no fui entrenado para cuidar niños" Damian respondió, como si eso fuera excusa suficiente.

"Nadie es entrenado para eso. Tu hermano tiene dos y es un desastre como cuidador. ¿Que vas hacer el día que tengas hijos?"

"Entrenarlos hasta que se ganen el título de poder ser llamados mis hijos"

"Para que preguntaba...." La mitad demonio negaba con la cabeza. "De todas formas Jake es tu responsabilidad ahora."

Antes de que Damian pudiera protestar los ojos de la mitad demonio se volvieron blancos, en un instante sus brazos pudieron sentir el peso de Jake en ellos.

"¡Dami!" El niño grito feliz abrazándolo al notar como se encontraba en los brazos de su tío.

"¿Vez?...¿Tan difícil era aceptar cuidarlo?"

"Solo cuando me obligan. Necesitaba entrenar..."

"Si quieres entrenar con él, hazlo, pero recuerda...es solo un niño." La mueca de cinismo de nuevo apareció en la chica "Así que nada de sangre. ¿Escuchaste Jake?, No lastimes a tu tío."

"¿Tanto extrañas a Logan?, ¿Necesitas rellenar su ausencia con tantos chistes de mal gusto?"

"¿Que puedo decir?....Estoy de buen humor"

"¿Porque?" Damian pregunto curioso, anticipando su respuesta.

Raven únicamente encogió sus hombros y se acerco para pinchar una de las regordetas mejillas del infante.

El olor a lavanda llego a él como un golpe, haciendo que todo su cuerpo se estremeciera, lamentablemente antes de que pudiera seguir disfrutando del aroma ella se alejó.

En inercia él la detuvo con su mano libre, atrapando gentilmente la muñeca de la mujer para evitarle su escape.

"¿Qué?, ¿También quieres un pellizco en los cachetes?" Ella se burlaba pero escondía en su tono de voz un poco de coqueteo.

'Un cierre' Las palabras se repetían como un eco dentro de la mente de Damian.

"Hoy en la noche Raven." él dijo, con firmeza para ocultar su nerviosismo.

"¿Hoy?, ¿Que vas hacer hoy?" Ella le contesto con indiferencia, una ceja se levantaba en su rostro, totalmente curiosa por saber cual seria la verdadera explicación del hombre.

"Te espero en mi casa."

"¿Me estas ordenando?" La voz de la chica se escucho como un murmullo mientras él cabeceo como un idiota " y..¿Desde cuando acepto tus ordenes?

"Todavía no resolvemos nuestro asunto"

"Ah...el asunto.." Raven logro soltarse de su agarre para alejarse de él, flotando hasta el centro del pasillo. "Pensé que ya lo habíamos resuelto cuando te fuiste a esa misión con los super"

"Hablo en serio"

"Yo también hablo en serio Damian".

Ella si que hablaba en serio, ninguna emoción en su voz. Sus poderes comenzaron a envolverla en sombras oscuras preparándola para desaparecer.

Ahora Damian se sentía como un completo imbecil, patético al pedir por ella como un desesperado.

Quizás el juego ya había terminado.

"Consideraré tu petición"

Damian alzo su vista, presenciando como ella desaparecía entre las nubes oscuras de sus poderes con una engreida sonrisa en sus labios.

Ughhhhh Maldita bruja. ¿Como podía siempre caer en sus juegos?

"Bye Rae" Jake se removió en sus brazos, observaba el punto donde antes Raven se encontraba con fascinación. Él aun era muy joven como para comprender la complejidad de la magia.

"No te emociones Jake, las mujeres son satánicas."

Y él era un idiota por caer en un juego con la princesa del mismo infierno.

El niño lo miro confundido, con un dedo atrapado entre sus pequeños labios.

"Cuando tengas la edad suficiente comprenderás mis palabras Mini Grayson" Damian saco el dedo de la boca de Jake para juntos caminar hacia su oficina personal.

El problema con Raven tendría que esperar, ahora él debía encontrar al procreador del niño en sus brazos.

Para ser sincero, él tenia un lado suave para Jake. El niño era idéntico a Dick, contagiaba alegría a su alrededor. Incluso para Raven era imposible resistirse a los encantos del menor y nunca se negaba a la oportunidad de cuidarlo.

¿Como culparla?. El niño era un ángel a diferencia de la traviesa de su hermana. Y claro, que no compartiera los poderes aliegenigenas de su madre facilitaba mucho la tarea de cuidarlo.

"Veo que Jake paso a otras manos . ¿Donde quedo Raven?"

Tal como se lo imagino, Dick Grayson, el nuevo Batman de la ciudad gótica se encontraba relajado sobre la silla de su oficina con los pies sobre su escritorio.

"Tu y tu mujer háganle un favor a la sociedad y dejen de tener hijos. Ni Raven o yo somos tus niñeros personales. Tenemos vidas, ¿Sabes?"

"A esa diablilla le encanta cuidar de Jake y de Mari...Ademas, es fácil de manipular."

"No sabes cuanto le encanta" Damian rodó los ojos al recordar esa vez que Raven uso su poderes de empatía para poner a dormir a Mar'i cuando esta no paraba de llorar. "Quitate de mi silla Grayson"

El mayor no se negó y se levanto de la silla para tomar a Jake en sus brazos.

Damian ignoró el momento padre e hijo que ocurría frente a su escritorio y prefirió concentrase en su computador. Estaba demasiado atrasado con el trabajo de la torre, esa misión en el espacio con los super le quito bastante tiempo.

"¿Que haces aquí Grayson?, ¿Quien se quedo en Gotham?"

"Gotham estará bien, Tim y Jason esta allá." Dick tomaba asiento en el sillón negro en la esquina de su oficina, con Jake en su regazo, "Vine a dar una vuelta por aquí, para ver como van las cosa. Te fuiste por mucho tiempo."

"Lo sé, pero confío en Jaime y Raven para hacer un buen trabajo mientras yo no estoy"

"E Hicieron un excelente trabajo, pequeño D." Dick le sonrío.

Dick era un Batman muy alegre. Una muy mala imagen para el murciélago de la noche.

"Entonces...¿A que debo tu visita?"

"Hay muchos niños nuevos en el equipo, pero ninguno listo para las misiones. Haz tenido bajas-"

"Bajas temporales" Damian interrumpió.

Si, el equipo se encontraba en un momento muy delicado, faltaban manos para poder encargarse de tantas misiones. Había muchos reclutas nuevos, pero todos demasiados jóvenes o sin la experiencia suficiente para estar allá afuera sin ponerlos en peligro.

Emiko se fue hace unos años, poco después Wallace West regreso al equipo Flash en Central City, una inesperada llamada de Themyscira hizo a Donna irse a luchar junto a las amazonas y, Garfield junto a Tara ahora andaban por el mundo como un par de viajeros enamorados.

"Lo se, lo sé. Garfield y Tara van a regresar, lo se." Dick recostó a un dormido Jake entre unos cojines para él poder relajarse en el respaldo del sillón. "Pero, me gustaría que consideraras llamar a algunos viejos compañeros, nunca esta de mas el tener manos extras en el equipo"

"Que seas Batman, no significa que necesito tomar tus ordenes Grayson"

"Es un consejo Damian. Hay mucho trabajo por aquí."

La respuesta del menor fue un molesto bufido, desquito su atención del hombre sonriente en su sillón para mirar de nuevo el monitor de su computadora. Ignorar al mayor siempre era una buena táctica para hacerlo desaparecer.

Una táctica que muchas veces le fallaba.

"¿Sabes quien esta disponible?" La nefasta voz de Dick Grayson se volvió a escuchar "Zachary Zatara, lo vi hace unos días y me dijo-"

"Ni menciones ese nombre"

"¿Porque?"

Dick no comprendía el porque Damian se había sobresaltado tanto al oír el nombre del mago.

'¿Zachary Zatara?, no mientras él fuera el líder de los Titanes.' El actual Nightwing pensó amargamente.

La ultima vez en la cual trabajó junto al mago fue contra Eric Forester, un acontecimiento que no le gustaba recordar por muchas razones.

Trabajar con el mago aquella vez no fue tan difícil, después de todo buscaban un objetivo en común; Salvar a Raven. Pero Damian no sabría como el egocéntrico mago se comportaría ante otra clase de misiones.

Ademas, un mago de quinta como lo era Zachary Zatara no merecía ser parte de su equipo.

"Bien, Zachary queda fuera." Dick dijo después de darse cuenta que el menor nunca le iba a dar una razón por la cual negaba al mago. El mayor se detuvo en pensamiento, buscando otra opción. "¡Ya se!, Acabas de trabajar con los supers, ¿Qué tal Kara?"

"¿Que con ella?" Damian respondió seguro, pero bien sabia él que poco a poco se comenzaba a sentir incomodo con la mención de la superchica.

"¿Super Girl?, seria un gran elemento para el equipo."

"Ya tengo a un Kriptoniano, uno es suficiente"

"¡Dos serian una bomba!"

"Paso"

"Mmm....Extraño, pensé que estarías mas emocionado con la idea. Justo ayer me tope con ella en la atalaya y me contó lo mucho que le gusto trabajar contigo, ¿Paso algo interesante entre ustedes dos durante ese viaje?, ¿Algo que quieras contarle a tu hermano mayor?" Las cejas de Dick se movían de manera sugestiva.

"No. No ocurrió nada."

"Vamos pequeño D, cuéntale todo a tu hermano mayor" El nuevo Batman le dijo en forma de burla "Puedo darte algunos consejos para adular a las señoritas si quieres"

"Prefiero matarte primero"

"Te acostaste con ella ¿Verdad?"

"¡No!, No soy como tu!"

"¡Ha!, negación. Definitivamente algo ocurrió entre ustedes dos." Dick se sobaba la barbilla altaneramente "Seguramente Kara me lo dirá si se lo pregunto. ¡No puede ser! Mi hermanito por fin es un hombre"

"¿Acaso eres una mujer Grayson?, ¿Vives del chisme?"

El mayor bromeaba con él, pero para su mala suerte algo de verdad se asomaba entre sus bromas, claro esto era desconocido para Dick Grayson.

Ese viaje con los super fue casi un infierno para Damian, un infierno que involucro Kryptonita roja y a Kara Zor-El.

Gracias a eso Supergirl entro en su lista negra junto a Zachary Zatara. La chica simplemente no sabia manejar correctamente un rechazo.

"Pero me interesa tu vida Damian" Dick se levanto del sillón con Jake en sus brazos, la emoción en sus ojos se desbordaba conforme se acercaba al escritorio "¿Quieres consejos?, ¿Sabes usar condones?, ¿Las pastillas? ¡¿Sabes todo!?"

"Largate Grayson" Damian se levanto de un golpe, una mirada asesina al parlanchín de su hermano.

"WOW, es sospechoso que tengas tanta prisa por deshacerte de mi"

"Nunca es sospechoso, siempre es un deseo constante cuando estoy contigo"

"Lastimas mis sentimientos hermanito" El mayor hizo un grotesco puchero "¿Que pensara tu sobrino de ti?

"Probablemente que soy mejor modelo a seguir a comparación de la excusa de su propio padre"

Ambos se encontraban parados frente a frente en medio de la pequeña oficina; uno demasiado alegre mientras él otro fulminaba con molestia.

"Ouch, doble golpe. Me has matado con tus comentarios"

"Basta, Largate" Damian lo miro con seriedad, mas el hombre no hizo ni un solo movimiento por irse, por lo tanto él mismo se encargaría de sacarlo."Lo digo en serio Grayson, Vete."

El menor empujaba por la espalda al mayor hasta la puerta, con cuidado de no lastimar al niño en sus brazos, pero el hombre se lo hacia imposible.

"No puedo, estoy muerto gracias a las heridas de tus desprecios"

"Maldito bastardo."

"Quieres que me vaya...¿Por que tanta prisa?, ¿Tienes una cita con Kara?"

"¡Largo!" Con un final empujo Damian logro sacar al otro hombre de su oficina.

Él todavía escuchaba la risa burlona de Dick conforme este se alejaba en el pasillo a quien sabe donde.

No podía seguir con las estupideces de Dick Grayson.

Después de todo tenia razón en algo más. Damian realmente si tenia una cita, un encuentro pendiente en su departamento al cual no podía faltar.