- ¿Estás bien con esto?- YoonGi pregunta con voz baja. JiMin asiente con su cabeza...

- Son los nervios... estoy nervioso, Hyung- JiMin susurra con tono confidente. Le da vergüenza mostrar su cuerpo ante su novio, y nunca había llegado tan lejos. Sí se besaban, se abrazaban, pero nunca habían llegado a un encuentro tan intímo, mostrando su desnudez ante el contrario.

El cuerpo de YoonGi era trabajado, tenía músculos desarrollados en sus brazos y piernas, era un poco más alto que él y le daba pena que viera las marcas que había dejado el pasado... las marcas de los cambios...

Suspira, cuando YoonGi vuelve a besar su mejilla y baja hasta su cuello. Los movimientos son un poco torpes debido a la lentitud con la que se acercan al cuerpo ajeno. Es diferente a todo lo que ha sentido antes, es más que solo buscar una satisfacción corporal o del momento. Es algo que va más allá de una simple palabra o descripción... no importa que tanto lo piense, no podría poner en palabras lo que está sintiendo en ese momento.

- No olvides que eres hermoso, y soy el novio celoso que quiere valorarte y amarte mucho...- YoonGi le dice mirandolo a los ojos.
JiMin sonríe y deja una caricia dulce sobre la mejilla del mayor.

YoonGi puede verlo, a sus ojos, JiMin es tan hermoso. Puede ver la confianza que ahora tiene, sin temor de decir lo que piensa pero siempre siendo prudente. Siendo amable y respetuoso con su trato a los demás, dando todo eso que a él le negaron. El menor es adorable cuando no entiende algo y pide que se lo expliquen, es tierno incluso cuando solo le da una sonrisa tímida, tratando de ocultarse en su chaqueta, es el mejor novio del mundo y le gusta... le gusta irlo descubriendo en todas sus facetas, incluso adora cuando niega. Y todos lo saben, JiMin trata de verse firme, pero él que ha aprendido a conocerlo, sabe que su novio es una masita de belleza y ternura, que piensa en todos...

Susurra palabras bonitas al oído de JiMin, porque es tan hermoso, tan sublime que no importa las marcas que hayan dejado los diferentes cambios, YoonGi las admira y aprecia, las acaricia con las yemas de sus dedos, porque siendo un inexperto, lo único que sabe con certeza es que quiere cuidar de su novio... de su bonito novio...

Besos y caricias son repartidos con cuidado y vehemencia por parte de ambos, lentos movimientos y roces delicados, quizás solo es el instante que ha llegado en ese punto de su relación, porque JiMin ha aprendido a confiar en YoonGi, que el mayor será honesto, que no va a lastimarlo o recibirá una traición, es ese sentimiento que lo embarga siempre que el mayor está presente... es la forma en que lo mira, porque aún recibiendo tanto daño, JiMin sabe ver la sinceridad en los ojos de los demás...

Y justo en ese momento, se siente tan completo, que se abraza al cuerpo de YoonGi, dejando que su cuerpo se envuelva en esas emociones.

Para YoonGi, es JiMin y sus sonrisa, es esa forma tan única de ser, esa fortaleza que a veces ignora de sí mismo, pero él sabe que su bonito novio la tiene, esa forma en que lo besa, es todo el tiempo que han compartido juntos, desde los abrazos, pasando por las salidas juntos, el tiempo yendo por el parque, las caminatas a la orilla de la playa... los besos que han compartido y el sentimiento que llena su pecho... justo en ese instante dónde puede ver los ojos brillantes de JiMin...

Es todo eso junto lo que les lleva al momento de culminar... de susurrarse suaves palabras, promesas en medio de cortos besos y suspiros...

Cuando salieron un una cita esa tarde, no esperaron que terminaran en esa situación, YoonGi le había dicho a JiMin que podían ver una película en su casa, que había una muy interesante y había escuchado buenas referencias pero sí les aburría, podían pasar un tiempo en el estudio dónde estaba el piano, YoonGi tocaría y JiMin leería algun libro disponible mientras las notas y armonías lo arrullaban y a veces le dan tanta tranquilidad que dormía por una hora, despertando avergonzado por no disfrutar completamente el concierto que su novio le daba en exclusividad. Así lo había dicho TaeHyung una vez...

Sin embargo, un beso los llevó a otro y entraron a esa zona donde ambos se sentían tensos y nerviosos. Pero justo en ese instante, disfrutaban de los brazos cálidos rodeandoles.

- Te amo, Mochi...- YoonGi le dice mientras deciden descansar bajo las suaves mantas de la cama del mayor. JiMin sonríe y se oculta en el cuello de YoonGi, abrazandolo.

- Te amo... Yoon...- dice en medio de un susurro, dejandose llevar por las caricias que son repartidas en su espalda y cintura. Le gusta esa calidez del ambiente, dónde puede refugiarse entre los brazos de su novio.

- Descansa... Mochi...- YoonGi le dice, aparta un poco el flequillo que cae por su frente y sonríe. Y al igual que su novio, se deja llevar por la alegría que le embarga hasta caer dormido.

Una hora más tarde, YoonGi despierta.

Estira su mano y alcanza su telefono, la luz de la pantalla lo ciega un poco. Recién son las seis de la tarde y su madre y hermano no regresarán hasta el día siguiente.

Pero, no puede dejar que su novio no tenga una cena bonita, además, seguro su suegro va a querer colgarlo porque JiMin aún no llega.

Decide llamar al señor Park, luego de ponerse un simple pantalón de pijama.

- YoonGi...- la voz del señor Park se escucha.

- Hola, disculpe que aún no lleve a JiMin a casa, pero nos quedamos dormidos viendo una película...- menciona avergonzado. No quiere mentirle al señor Park, pero es algo que deben hablar de frente, y no piensa huir, nada de tener miedo.

- Gracias por llamar, cuida de mi hijo...- el señor Park dice con un suspiro- ¿Vendrán a cenar?

- Sí... estaremos allí, quizás en media hora.- dice, el señor Park le dice que no se apresure y que regresen cuando JiMin despierte. YoonGi suspira- ¿Ahora cómo le digo a tu padre que hicimos el amor?- pregunta mirando a su novio bajo las sábanas. No se arrepiente, pero, tiene miedo de lo que pueda pasar con JiMin, no sabe lo que sería sí el señor Park se entera, a YoonGi no le importaría que lo golpeen, pero que no toquen a su novio... que nadie lo dañe ni destruya esa personalidad brillante que tiene.

- Yoon...- la voz suave de JiMin se escucha.- ¿Qué sucede?- pregunta sentandose con cuidado en la cama.

- Llamé a tu papá para que supiera que íbamos a llegar luego de nuestra siesta- le dice sonriendo. JiMin asiente aún medio dormido.- ¿Quieres tomar una ducha?- pregunta.

- Sí... por favor...- JiMin responde tímido y lleva sus manos a su rostro. Está avergonzado.

YoonGi le sonríe y asiente, va hasta el baño dentro de su habitación y toma una toalla para cubrir la desnudez de su novio. A él realmente no le importa mucho, pero entiende que JiMin está avergonzado.

- Uh...- YoonGi lo envuelve- No quiero que pienses que soy un pervertido, pero quiero que tengas la confianza de mostrarte conmigo sin límites... ni cohibiciones, me gustas mucho, no quiero que pienses lo contrario... iremos paso a paso...

JiMin sonríe y besa los labios de YoonGi, sorprendiendolo, y corre al baño. YoonGi ordena su habitación y pone a lavar las sábanas, sin quitar la sonrisa de su rostro.

Se cambian y salen rumbo a la casa de JiMin. El menor sonríe... porque este ha sido un gran paso para él...