Cuando YoonGi miró a JiMin, sus nervios se dispararon. El chico llamaba su atención de muchas maneras. Era lindo y atractivo.
Su lindura radicaba en la forma en la que se sonrojaba y en como actuaba cuando creía que nadie le prestaba atención.
Y su atractivo, era alguien que no podía pasar desapercibido muy fácil, incluso para las animadoras de los diferentes equipos.

- YoonGi- le llama una de ellas.

- ¿Necesitas algo MooBin?- pregunta tomando su bolso donde esta su ropa práctica y las cosas que usa para la ducha luego de los entrenamientos.

- ¿Eres amigo del chico nuevo?- pregunta emocionada y varias se acercan a ella al escuchar la pregunta esperando una respuesta del mejor encestador y capitán del equipo.

- Lo conozco- menciona y mira las reacciones ilusionadas.

- ¡Se mira tan lindo de rubio! Ser su amiga es necesidad no es una opción- determina la animadora que reconoce como ChoRang.

YoonGi siente una sensación extraña al escucharlas. No sabe como interpretar ese nudo en el estomago.

- ¿Por qué?- pregunta de una vez y colocando su bolso en el hombro, como clara señal que debe irse.

- Vamos a dar uan fiesta- las dos gemelas Kang hablan desde atrás- Necesitamos que nos pase la receta para tener ese color de piel...- mencionan divertidas, pero sin malicia alguna en sus palabras.

- Lo siento chicas, para eso es mejor que hablen con TaeHyung- dice negando levemente, soltando un suspiro- Él es su compañero y amigo mas cercano...- hace una pequeña reverencia para despedirse escuchando a las chicas murmurar de como pueden acercarse a JiMin.

El chófer de su madre pasa a recogerlo y aprovecha para ver su móvil y mirar las fotos que SeokJin le envió de ese fin de semana donde salieron con JiMin.
JiMin lleva mas o menos un mes en la escuela y desde que se tiñó, todo el mundo parece interesado en querer acercarse a él, ese mes ha notado los comportamientos ansiosos del menor y también ha memorizado los gestps y ademanes que hace cuando esta nervioso o parece iniciar un ataque de pánico.

Llega a su casa, y su madre está sentada en el mismo lugar de siempre mirando hacia el jardín. Se acerca a ella dejando su bolso cerca de las escaleras que conducen al segundo piso. Toma asiento a su lado y le saluda.

- Volviste temprano- le dice y la mujer sonríe leve. Somrisa que oculta detrás de su taza de té.

- Hace media hora, soy la jefa- dice encogiendose de hombros y su hija hace una pequeña mueca inconforme. YoonGi proviene de una familia adinerada, su madre es dueña de un consorcio hotelero alrededor de Daegu hasta Seúl. Su hermano mayor ahora administra y es gerente de uno de los hoteles de su madre. A su hermano siempre le gustó eso de la atención al cliente.

- Bueno, jefa Min- dice con diversión.

- Tus chistes son tan malos como lo eran los de tu padre- la mujer menciona risueña. Es verdad, su madre es un poco dura y muy estricta pero con ella puede hablar de lo que sea.

- Mamá...- luego de unos minutos de silencio, YoonGi decide hablar con su madre- ¿Qué hago cuando me preguntan por una persona y siento un malestar en el abdomen?- espera que su madre entienda su enredada pregunta.

- ¿Cómo cuando alguien te gusta?- pregunta la mujer interesada. Su hijo a sus dieciseis años nunca mencionó que sintiera atracción por alguien.

- No sé, es la primera vez que me pasa- niega levemente- ¿Y si quiero cuidarlo?- y su madre disimula la sorpresa que la causa la propia confesión de su hijo. Un chico.

- ¿Hace cuanto conoces a esa persona?- a la señora Min, los negocios se le han dado muy bien, por ser tan persuasiva.

- Es una persona nueva- YoonGi dice mirando al jardín- Al parecer vino a vivir hace poco a Daegu... pero se ve tan frágil, y no solo soy yo, incluso SeokJin quiere meterlo en una cajita de cristal- dice recordando lo que su amigo había dicho de JiMin cuando estaban en el salón. La señora Min asiente, y sonríe al presenciar lo que parece el primer enamoramiento de su hijo.

- ¿Hablas con esa persona?- pregunta de nuevo, intrigada en lo que su hijo le esta diciendo.

- A veces, siempre esta nervioso, quizás está sobrellevando este cambio, mudarse de un lugar a otro no es muy cómodo- menciona YoonGi frunciendo el ceño al imaginarse empacar y desempacar.

- Bueno, yo diría que te gusta...- su madre lo dice sin filtro, y mirando a su hijo fijamente.

- Madre alguien no puede gustarme en un mes- YoonGi contradice, realmente desconoce como se siente que alguien le guste y le haga preocuparse. Tuvo mas de alguien que llamó su atención pero en cuanto conocía a las personas se daba cuenta que eran desagradables. No es que sea alguien que juzgue, pero algunos lo habían buscado solo porque conocían de quien era hijo.

- YoonGi, conozco a mi hijo, y esa persona puede que te atrae un poco, algo ha hecho que llame tu atención- menciona con seriedad y ternura en su voz.

YoonGi lo piensa y por un momento el recuerdo de aquellas chicas preguntando por JiMin le hacen sentir incómodo... de nuevo. Suspira y asiente.

- Quizás...- murmura- Solo quizás tengas razón... mamá- YoonGi se rinde, no intenta contradecir a la mujer que es su madre. Se despide para ir a su habitación y hacer sus tareas pendientes.

De repente un mensaje le llega. Es SeokJin, sonríe al notar que es el número de JiMin, agradece y luego se da cuenta que TaeHyung ha creado un grupo con todos ellos porque van a organizar una pijamada en casa de HoSeok.

Su sonrisa es mas grande. JiMin estará allí o al menos eso es lo que espera.