( chanel, three )
second chance at first line

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Durante el fin de semana, Elle tuvo que trabajar y explicarle a su gerente por qué llevaba gafas de sol adentro (¡Era claramente debido a las migrañas, Maggie!) no fue una experiencia divertida.

A veces, realmente odiaba su trabajo. Bueno, menos a su trabajo y más a los clientes. Trabajar en el comercio minorista fue una pesadilla sin la cual Elle realmente podría haber prescindido ese sábado por la mañana.

Sin embargo, había tenido suerte. Uno de sus colegas se dio cuenta de que estaba sufriendo y la dejó ir al baño, donde tácticamente había vomitado para sentirse mejor. En una hora estaba funcionando perfectamente bien. Sin embargo, todavía no podía detener su molestia por las quejas de los clientes.

* * *

Cuando llegó el lunes, estaba bastante tranquilo. La mayoría de la gente estaba consumida por los chismes de lo que sucedió en la fiesta del viernes. Parecía que una fiesta al comienzo del trimestre era exactamente lo que necesitaban los estudiantes. Y lo que necesitan, Lydia se complace en dárselos.

Hacia el final de la semana, Isabelle se había saltado la práctica de lacrosse porque tenía que ayudar a enseñar química a un chico. Pensó que si lo colocaba al mismo tiempo, podría escapar del clima frío y permanecer dentro de los edificios con calefacción.

Sin embargo, Lydia pronto vino y la encontró, asegurándose de quejarse de Scott McCall. De alguna manera había herido a Jackson durante el entrenamiento, lo que no le sentó bien a ninguna de las chicas.

* * *

Durante las matemáticas, tanto ella como Scott fueron llamados al frente para resolver los problemas presentados en la pizarra. —¿Por qué corre el rumor de que no jugarás mañana?

Después de la práctica de la mañana del día anterior, y la amenaza de Derek más tarde esa noche, Scott había tratado de persuadir al entrenador para que lo dejara fuera del juego ese fin de semana debido a su falta de autocontrol sobre su transformación en hombre lobo, pero eso no fue un éxito.

Por supuesto, Isabelle no tenía idea de esto y tampoco Lydia, Allison, Jackson o el Entrenador o cualquier otra persona aparte de él, Derek y Stiles.

Hablando de Stiles, ni Isabelle ni Stiles se habían hablado desde la fiesta en la que tuvieron un pequeño momento (si pudieras llamarlo así. Isabelle no lo haría, pero Stiles realmente lo haría) y aunque a Elle realmente no le importaba, Stiles había estaba furioso consigo mismo (y con Scott) por tener que dejarla, especialmente porque estaba a medio vestir.

Había despotricado todo el camino de regreso a casa con Scott cuando lo recogió al día siguiente después de la luna llena. Él estaba diciendo que estaba 'perdiendo su tiro' y que 'tenía una oportunidad total con ella', en lo que Scott le recordó que estaba borracha.

—Porque en cierto modo no lo haré —Scott se encogió de hombros y suspiró frente a ella, harto de la discusión que ni siquiera había tenido todavía y que estaba a punto de salir de ella.

—Creo que lo harás —corrigió Elle—. Especialmente cuando hieres brutalmente a uno de mis mejores amigos al chocar contra él.

Scott detuvo su concentración en el tablero y se volvió hacia la chica baja. —Se lastimó brutalmente al chocar contra mí —Odiaba que Jackson siempre fuera el chico perfecto y nunca fuera su culpa.

—Jackson va a jugar mañana. Pero él no va a estar en su mejor momento, y Lydia prefiere a su novio en el mejor rendimiento, así que solo te advierto ahora, Lydia también va a hablar contigo hoy- bueno, digo hablar, pero no creo que realmente tengas elección.

—¿De acuerdo? —Scott realmente no vio el sentido en nada de esto, era una simple lesión y Jackson se curará con el tiempo.

—Lydia sale con el capitán del equipo ganador de lacrosse, y si comienzan la temporada perdiendo, Lydia sale con el capitán del equipo perdedor de lacrosse. Lydia no sale con perdedores, y no tienes que aguantar sus quejas —Elle se estremeció con solo pensar en Lydia quejándose de cómo Jackson estaba perdiendo su toque.

Continuó con el problema y lo terminó solo necesitando corregir la respuesta antes de poder irse.

—Perder un juego no va a matar a nadie —Scott declaró volviéndose para mirarla de nuevo—. De hecho, incluso podría salvar a alguien —siseó para sí mismo más que a la mujer a su lado y se volvió para resolver su problema de nuevo.

—¡Bien! No juegues —se volvió para mirarlo, moviendo su cabello—. Probablemente ganemos de todos modos. Luego saldremos después, como estábamos planeando- y le presentaré a Allison a todos los jugadores sexys del equipo —Y con un último movimiento de su cabello, dejó la tiza, se sacudió las manos y se alejó, terminando la conversación.

—Señor McCall, no está ni cerca de resolver el problema —le recordó el profesor suspirando con molestia por el tiempo que pueden tardar algunos estudiantes.

—Dígamelo a mí.

* * *

Scott estaba poniendo la cerradura a través de su casillero cuando Stiles de repente lo agarró. —Oye, ven aquí.

—¿Qué? —Fue empujado detrás de la pared fuera de la vista.

—Ven aquí. Dime lo que están diciendo. ¿Puedes escucharlos? —Stiles señaló a dos policías conversando con el director de la escuela, al final del pasillo.

—Queremos que todos los menores de 18 años estén en sus casas a las 9:30 p.m. Nos gustaría instituir el toque de queda, de inmediato —Preguntó el sheriff Stilinski.

—Mire, no queremos... —comenzó el director, pero Scott desconectó el resto.

—Toque de queda por el cadáver —Stiles lo suelta y levanta las manos con exasperación.

—Increíble. Mi papá está buscando a un animal rabioso, mientras que el imbécil que realmente mató a la chica está libre, haciendo lo que quiere.

—Bueno, no puedes decirle a tu papá exactamente la verdad sobre Derek.

—Puedo hacer algo.

—¿Cómo qué?

—Encontrar la otra mitad del cuerpo —Y con eso, Stiles se fue.

—¿Es un chiste? —Habló él para sí mismo. Suspirando, se dio la vuelta y vio a cuatro personas juntas en el pasillo. Allison, Isabelle, Lydia y un jugador de Lacrosse al azar. Las palabras de Isabelle de antes acerca de presentarle a Allison a todos los nuevos jugadores sexys pasaron por su mente cuando comenzó a caminar hacia ellas usando su oído de lobo para ayudar.

—Ella es Allison —introdujo Lydia.

—Hola, un placer conocerte.

—Es la chica nueva, se acaba de mudar —explicó Elle.

—Oh, ¿Qué te parece?

—Me gusta.

Cuando vieron a Scott cerca de ellas, Lydia y Elle se llevaron al compañero de equipo de Lacrosse y se marcharon, dejando a los dos solos.

—Entonces, ¿Lydia e Isabelle te están presentando a todos?

—Están siendo increíblemente amables conmigo.

—Me pregunto por qué.

—Tal vez comprendan cuánto puede apestar ser la chica nueva —dijo Allison, y Scott apenas se dio cuenta de la chaqueta en sus brazos. La chaqueta de la fiesta a la que fueron juntos.

—¿De dónde sacaste eso?

—¿Mi chaqueta? Estaba en mi casillero. Creo que Lydia o Elle me la trajeron de la fiesta, tienen mi combinación.

—¿Dijeron que la habían traído, o alguien se las dio? —preguntó Scott.

—¿Cómo quién?

—¡Como Derek! —exclamó Scott, poniéndose muy nervioso.

—¿Tu amigo?

—¡No es mi amigo! ¿Cuánto te habló cuando te llevó a casa?

—Mmm, no mucho, ¿por qué?

—¿Qué dijiste? —Scott se estaba volviendo cada vez más desesperado en este punto.

—Debo ir a clase —Allison estaba un poco asustada de lo persistente que era Scott con su chaqueta y Derek.

—Allison...

—No, en serio debo que irme —Y ella se fue.

* * *

Stiles y Scott estaban en el hospital cuando Scott tuvo que escapar para colarse en la morgue.

—Buena suerte, supongo —Stiles estaba pasando por una sala de espera cuando vio a Lydia y Elle en dos de las sillas. Haciendo una doble toma, entró en pánico y se inclinó sobre un escritorio que estaba contra una pared, mirando un par de veces antes de reunir el valor para hablar con ellas. Su corazón latía con fuerza y ​​se encontró con que le faltaba el aliento por los nervios para hablar.

—Hola, Elle. Tal vez no me recuerdes. Um, me siento detrás de ti en Biología y soy tu vecino. Uh, como sea, siempre pensé que teníamos esta especie de conexión. Tácita, por supuesto. ¿Quizás sería genial conocernos un poco mejor?

—Espera, dame un segundo —Lydia habló antes de sacar su auricular Bluetooth y empujar a Elle—. Oye, el chico Jeep te está hablando.

Elle se bajó la capucha y se volvió hacia Lydia, sacándose los auriculares en el proceso y pausando la música en su teléfono. —¿Qué?

—Ugh, te está hablando —Ella señaló con el pulgar en dirección a Stiles, él se puso rojo como una remolacha cuando se dio cuenta de que había dicho todo eso en público y ninguna de las dos lo escuchó.

—Sí, lo siento, no escuché nada de lo que acabas de decir, ¿puedes repetirlo? —Preguntó Elle, tratando de ser educada e ignorando la mirada de disgusto y sorpresa que Lydia le estaba dando.

—No, lo siento. Me sentaré, pero no te importa.

—¿Está seguro? —Preguntó Elle mientras se sentaba. Stiles asintió con fuerza mientras su confianza se desplomaba y estaba completamente avergonzado. Jackson luego salió de la habitación del médico.

Isabelle se puso de pie, dando un paso hacia su amigo. —¿Cómo se sientes? ¿Te duele?

—¿Lo hicieron? —Lydia interrumpió a su amiga.

Jackson miró a Elle y le dedicó una sonrisa herida. —Duele un montón, pero puedo soportarlo —Jackson se volvió hacia su novia y dijo—. Dijo que no lo hiciera un hábito, pero una inyección de cortisona no me matará —Jackson explicó.

—Deberías hacerlo antes del partido también. Los profesionales lo hacen todo el tiempo. ¿Quieres ser un pequeño aficionado de la escuela secundaria? ¿O quieres convertirte en un profesional? —Preguntó Lydia, antes de besarlo. Elle fue ignorada a través de esto y se volvió y vio a Stiles mirándola. Él se sonrojó y se dio la vuelta, pero no antes de ver a Elle sonreírle y luego se rio cuando él se dio la vuelta.