— ¡Hoseok levántate!— Jungha se incorporó de golpe, los brazos de Hobi estaban enroscados en su cintura y él seguía dormido.— Niño, despierta. El Ride es en media hora.

Hoseok escuchaba lejanamente a su novia, respiró hondo y abrió tan sólo uno de sus ojos. Una gran sonrisa nació en él al verla ahí, a su lado, despeinada y en sus brazos. Se habían quedado dormidos a la mitad de la película, la mejor parte es que lo hicieron abrazados.

Simplemente estar entre los brazos de Hoseok era seguro para Jungha, haber sido abrigada, con el olor de su colonia y piel, sin duda era ahora su situación favorita.

— Cinco minutos más.

— Nope, esta vez no eres el último en correr. Tenemos que llegar a tiempo.— Jungha lo miró y soltó un bufido divertido.— ¿Por qué sonríes como bobo?

— Porque desperté a tu lado, por eso.

Jungha se inclinó y le dio un beso. Hoseok sonrió en el acto. Ella empezó a moverse, arrastrándose fuera de la cama, llevando a Hoseok consigo, consiguiendo exactamente lo que quería: sacarlo de la cama.

— Apresúrate.— Dijo y tomó su ropa. La verdad Hoseok prefería que se quedara con la suya.

Él sacó un nuevo cambio al de esa mañana, todo de negro. La miró, ella enfrentó su mirada y con los ojos le preguntó cuál era su problema. Hoseok sonrió con picardía.

— ¿Qué sigue?— Tiró de su cabeza, la sonrisa seguía.— ¿Bañarnos juntos?

— ¡¡Hoseok!!

***

One Love de Blue era lo que sonaba esta vez en el Mustang. Decisión de Hoseok. Jungha estuvo la mitad del camino burlándose de Hoseok por tal elección de canción y estuvo argumentando que era mejor Everybody de los Backstreet Boys. O cualquier otra canción de ellos.

Así que Hoseok la complació y la puso.

Hoy el Ride sería interesante, o algo así. Los amigos de Jungha iban a asistir. Después de haber insistido una semana entera, Ryumi y Dorim consiguieron ser invitadas, además pusieron de excusa su interés por el mundo del nuevo novio de Jungha, ya que era alguien que jamás llegaron a imaginar.

Jungha estaba un poco nerviosa, porque las acompañarían los chicos, y estaba rogando para que Sungjun no mostrara una actitud pesada como acostumbraba. No estaba segura si él ya estaba enterado de su relación con Hoseok, sabía que estaban juntos, pero no de manera oficial. De hecho, las únicas con tal conocimiento eran sus amigas. Hablaré con él.

No era como que estuviera obligada a decírselo, pero lo haría, ya que Sungjun había sido un personaje importante en su vida y estaría presente para largo.

— ¿Qué pasa?— El roce de Hoseok la sobresaltó.— Tranquila, nadie se meterá con tus amigos.

— No era eso, realmente. ¿Lo harían? Es decir, si se ponen pesados.— Su curiosidad fue aclarada con tan sólo ver la expresión de su novio. Diablos.— Bueno, mi preocupación era que supieran llegar.

— Boukdo no tiene pierde.

Y era verdad, las hileras de autos adornaban el bulevar solitario por el día, pero por esas noches de los sábados, era un lugar de adrenalina pura. Jungha lo veía como la entrada de Disneylandia, tenía colores y música, igual que el famoso parque, pero con una diversión que de poco en poco despertaba mucho gusto en ella.

Ubicados en el semáforo de la avenida Chae-Sun-IL, se encontraban los Marvel, sus autos estacionados como exhibición, ellos con la música provenientes de sus bocinas, bebiendo alcohol y divirtiéndose. Hoseok unió el Mustang a los autos de sus amigos y antes de bajar del auto, detuvo a Jungha.

— No le digas a nadie que somos pareja.— Dijo con seriedad, Jungha poniéndose seria de pronto, un destello de decepción en su rostro.— Yo quiero ser el que anuncie la gran noticia.

Bajaron del auto y todos al verlos festejaron su presencia. Después se separaron, Hoseok se fue con los chicos y Jungha con las chicas. Bastaron unos minutos para que Ryumi se contactara con Jungha, pero los chicos estaban demasiado perdidos, por lo que Jungha fue por Hoseok y juntos fueron a buscar a sus amigos. En el transcurso, mucha gente los saludaba, chicas se acercaban a Hoseok y chicos miraban a Jungha, y ellos dos se encargaban de dejar en claro que eran el uno del otro.

— ¡¡Ryumi!!— Gritó Jungha al ver a su amiga, con Dorim, Sungjun y Suwoong. La pelinegra dejó de prestarle atención a un pelirrojo de un Nissan 370Z y se giró para encontrarse a Jungha.— ¡Ven aquí!

Pero la primera en reaccionar fue Dorim, quien corrió a la pareja.

— ¡Siento que estoy en Rápido y Furioso!

— Lo mismo dije yo.— Jungha sonrió, Hoseok también y dijo:

— Bueno, si te basas en la primera película, está bien. Al fin y al cabo, ellos se basaron en la vida real.

Dorim se inclinó a Jungha y susurró:

— Amo a tu novio el guapo, ¡es muy genial!

— Escuché eso.— Se burló Hoseok. Las mejillas de Dorim tiñéndose rosadas.

Ryumi saludó a Hoseok. Los dos chicos, Sungjun y Suwoong se fueron acercando con morosidad en sus pasos; no dejaban de ver a su alrededor. Ellos solían tener arrancones también, pero no de manera tan oficial y clandestina, sus carreras eran productos de borracheras post-fiesta y en las residenciales donde eran las fiestas. Un lugar seguro y donde mandaban. Habían asistido a Boukdo varías veces, pero hace años; habían perdido la sintonía.

— Así que este es el famoso Jung Hoseok.— El desconocido para Hoseok sonreía como si conociera todo el mundo. Desde ese momento Hoseok supo que era un desvergonzado.— Soy Suwoong.

— Creí que iba a venir Minsoo o Dabin.— Jungha arqueó una ceja. Suwoong siempre fue parte de su círculo de amigos, su padre era amigo del suyo, pero aún así, era el que menos soportaba Junie. Un chiquillo engreído la mayor parte del tiempo.

— Yo también te quiero, cariño.

Hoseok apretó la mandíbula e inconscientemente sus puños también. Eso no había sido música para sus oídos.

— Basta los dos.— Sungjun habló, calmado pero con autoridad.— Por lo menos un día, no peleen.

Los dos miraron al piso, como niños regañados y asintieron. Entonces Hoseok supo que no sabía nada sobre los amigos de Jungha, tampoco quería, lo que él quería era que experimentara en un nuevo mundo y con nuevas personas, sin embargo, en ese momento se sentía un ignorante ante su novia, y, se notaba que ese grupo (y los que faltaban) eran muy cercanos.

Hoseok y Sungjun se miraron con dagas en los ojos. La última vez habían quedado en malos términos, casi en una pelea. Hobi no lo quería aquí, pero aún así, no lo correría.

— Iré con ellos a dar la vuelta, si quieres vuelve con los chicos.— Dijo Jungha, Hoseok la miró y asintió. Aunque quería estar con ella, también quería darle su espacio.

— Bien, sólo vuelve antes de que sea mi turno, ¿sí?

— Por supuesto.— Jungha sonrió. Hoseok se inclinó y le dio un casto beso en los labios, sintiendo los ojos de los invitados sobre él. Ella es mía, imbéciles.

Jungha enganchó sus brazos a los de Ryumi y Dorim y empezaron a caminar, Sungjun y Suwoong tras de ellas. Y se quedó ahí parado hasta que desaparecieron entre la multitud y autos.

Volvió con sus amigos, topándose con Songkyu y una chica en su regazo, a unos metros estaban Kangmin y Jaehyun sacando unas cervezas del auto del último. Los dos se acercaron a Hoseok antes de que él pudiera llegar a Jimin y Jinyoung.

— ¿Quiénes son esos payasos?— Preguntó Kangmin antes de darle un largo trago a su cerveza.

— Son los amigos de Jungha.

— Bueno, diles que dejen de ver a todos como si fueran mierda. Se creen los reyes del lugar.

Hoseok asintió. Era verdad, ambos estaban viendo a todos de manera despectiva y caminaban entre la gente con aires de superioridad, casi como si fuera un honor tenerlos presentes.

— Lo haré. Sólo no te alteres.

Kangmin asintió, pero no lo prometía. Hoseok se alejó, yendo con su objetivo principal. Jimin y Jini estaban en el cofre del Camaro, él abrazándola por la cintura y Jini recostada en su pecho. Bien, puede que Hoseok no haya visto a Jinyoung los últimos días, sin embargo, estaba al tanto de su amiga y sabía que había sido una dura semana en la escuela.

— Te ves muy jodida.— Dijo, poniéndose entre ellos dos.

— Puede que hayas dejado de hablarle meloso, pero aún así sigues interponiéndote en nuestro espacio, lo sabes, ¿no?— Reprochó Jimin, fulminándolo con la mirada.

— Algo es algo, Jiminnie.— Dijo Hoseok sonriendo con burla, Jimin puso los ojos en blanco.— Oye,— Se volvió a Jini.— puedo darle unos consejos a Jimin para que te quite ese estrés.— Jugó con sus cejas.— Aunque, cabe la posibilidad de que termines más cansada.

— Cierra la boca, Jung Hoseok. Sé a dónde vas con esto.— Acusó, la pesadez en su voz era notoria. Hoseok sonrió a lo grande y la despeinó.— ¡Basta! ¿Eres así con Jungha?

— Un poquito, sí.

— Pobre Junie.

— Te lo dije una vez, ser así es lo que las vuelve locas y las hace aferrarse.

Jinyoung rió y lo empujó.— Sí claro.

La primera carrera ya había pasado y cuando fue el turno para que Hoseok se preparara, Hyukjo se había encargado de avisarle, y Jungha llegó justo a tiempo para subirse con él al Mustang y acompañarlo a la línea de salida. Le había ido bien en su paseo con sus amigos, Dorim había conseguido algunos números y Ryumi estaba muy emocionada por estar en tal lugar tan "exótico" según ella.

El Mustang competiría con un Toyota ZX esta ocasión. A Hoseok no le preocupaba. De hecho estaba emocionado por lo que iba a hacer. Jungha estaba poniendo Mic Check de GTA & TJR en el reproductor. Cuando estuvo lista, le dio un beso y le deseó buena suerte.

— Espera, antes de que vayas con Hyukjo para volver, necesito que te quedes.

— ¿Por qué?

— Sólo hazlo.

Jungha asintió, salió del auto y se quedó parada enseguida de él como le fue indicado. Hoseok salió del Mustang, y como si fuera lo más normal del mundo, se subió al cofre del Mustang. Estaba de pie a la vista de todo el mundo.

— Hobi, ¿qué haces?— Preguntó ella, viéndolo sorprendida. Él sólo le guiñó un ojo.

— ¡¿Cómo están?!— Gritó y como era de esperarse, el público gritó emocionado. Ellos amaban a Hoseok.— Antes de empezar con esta mierda, tengo algo que decirles.— Jungha, sus amigos, todo el mundo, estaban atentos.— Chicas, lo siento, pero este guapo ya tiene dueña. Y chicos, todos aquellos que pusieron sus ojos en esa bella chica— Señaló a Jungha, quien estaba colorada.— es mía. Y si los vuelvo a pillar viéndola, los dejo sin culo.— Saltó al pavimento y extendió sus brazos.— ¡Así es! ¡Tengo novia!

La gente gritó celebrando la noticia, más que sentirse ofendidos, apoyaron a Hoseok. Él fue con Jungha y le dio un beso.

— Eres increíble, Jung Hoseok.

— Nena, eso no ha sido nada.

Había sido todo. Jungha sabía quién era Jung Hoseok en este mundo y lo que representaba, él simplemente había roto todos sus códigos para gritar a los cuatro vientos que tenía novia, y lo hizo tan orgulloso. Jungha no podía estar más agradecida con un chico.

Hyukjo se encargó de preparar a los dos conductores y después de eso, volvió con Jungha y todos sus amigos. La castaña tomó lugar al lado de Sunmi, quien no dejaba de molestarla por el acto de Hoseok, pero cuando los autos arrancaron, ambas prestaron atención, Sunmi pendiente de la carrera, Jungha pendiente de su novio.

El Mustang aceleraba por la acera, y como si Hoseok tuviera prisa para terminar el encuentro, estaba dejando en total ridículo al Toyota. Estaba dispuesto a ganar, limpio y rápido, sin embargo, nunca podía faltar su toque. Jungha y Sunmi estaban casi paradas sobre el cofre del Charger, viendo al Mustang correr furioso por el largo del bulevar.

— ¡Lo hizo!— Jungha festejó al verlo cruzar el semáforo que indicaba el final.

Y todos se desprendieron de sus lugares, yendo a rodear el Mustang para festejar la victoria. Sunmi alentó a Jungha para que fuera también. Jungha se escabulló entre la multitud que rodeaba a Hoseok y celebraban su reciente victoria. Hoseok miró a su novia salir entre la gente, cerró la puerta del Mustang y estiró su brazo, rodeando su cintura y pegándola a él. La gente alrededor festejó la cercanía de la nueva pareja y ella se escondió en el pecho de Hoseok, totalmente sonrojada, Hobi rió y besó su frente.

— Entra al auto, nena.

Hoseok abrió la puerta piloto y Jungha se subió, pasándose al asiento pasajero. Hoseok entró también y cerró la puerta, sellando todo ruido exterior y nuevamente sólo estaban ellos dos en su mundo. Jungha se estiró, capturando los labios de su novio con los suyos, Hoseok sonrió por la sorpresa.

— ¿Qué fue esa vuelta, eh?

— Sólo para que veas que puedo correr de otra manera que no sea la tradicional.

Hoseok subió a primera y empezó a avanzar entre la gente. Aún faltaba una carrera. Había hecho una especie de drift en la carrera, dejando a todos con la boca abierta, incluso a su novia y amigos. Knock Knock de Mac Miller sonaba desde el equipo de sonido.

— La la la la...— Jungha tarareaba la canción.— Lo hiciste genial, Hobi.

El castaño le lanzó una sonrisa en agradecimiento y apretó el agarre de su mano. Se detuvo al lado del Camaro de Jimin, se bajaron del auto, se tomaron de la mano y caminaron hasta donde estaban sus amigos, quienes parecían tener un debate. Conforme se fueron acercando, las palabras "Mustang" y "Camaro" salían de las bocas de todos. Hoseok frunció el ceño, interesado ahora en su plática y antes de que pudiera pedir explicaciones, Jimin apareció frente a ellos, empujó lejos a Hoseok e hizo que Jungha se girase hacia los dos autos.

— Olvida que Hoseok es tu novio y que ese es su auto.— Pidió.— ¿Qué auto tiene mejor apariencia?

— ¿Por qué me preguntas a mí? No sé nada de autos.

— Es sólo apariencia, Jungha.

Junga centró su atención en las dos maquinas frente a ella. Bien, tenía entendido que el auto de Hoseok era el modelo más nuevo y el de Jimin era de unos años atrás, pero aún así ambos lucían nuevos y poderosos. Mientras el Mustang era más ligero y con extensión más larga, el Camaro se veía más tosco y potente. Frunció los labios y suspiró. Se giró a ver a Hoseok, él estaba ahora parado al lado de Jini, ambos la miraban impacientes por la respuesta. Volvió a los autos, donde Jimin sonreía como maniaco.

— Lo siento, Hobi.— Suspiró.— Pero si lo ponen así, el Camaro tiene mejor apariencia.

La mandíbula de Hoseok y Jini cayeron al piso; sus ojos llenos de confusión e indignación, mientras Jimin empezó a saltar, feliz y victorioso por la respuesta de Junie.

— ¡Se los dije! Ford se ha vuelto una mierda en el diseño de autos.

Hoseok lo fulminó con la mirada.

— Pero en potencia y rendimiento es mucho mejor que Chevrolet, así que cállate Park.

Jimin sonrió con malicia.

— ¿Qué se siente que tu chica prefiera mi auto que el tuyo?

Déjà vu.

— Lo mismo que sentiste cuando Jini prefirió mi auto.— Lanzó de vuelta y todos los demás aullaron por tal ataque.

— Basta de pelea de gatas, todos sabemos que Dodge le gana en diseño y potencia a Ford y Chevrolet.— Llegó Yoongi. Ahora los tres amigos se miraban entre sí, desafiándose el uno al otro.

Jungha, Sunmi y Jinyoung se miraron entre sí también y a comparación de sus chicos, ellas sonrieron emocionadas y cómplices. Junie tomó la iniciativa y habló.

— Cada quien está diciendo que su auto es el mejor.— Los chicos la miraron.— ¿Por qué mejor dejan los argumentos y defienden su honor en una carrera?

Hoseok, Yoongi y Jimin sonrieron, tentados por tal idea. Hoseok satisfecho porque esa idea había salido de la boca de su novia. Era loca y emocionante. Le encantaba.

— Me encantaría patearle el culo a Jimin y Yoongi.

Jimin bufó, cruzándose de brazos sobre el pecho y poniendo cada músculo de su cuerpo rigido. Jini lo miró y se emocionó al verlo tan atraído por la carrera. Sus ojos brillaban como cuando iba a tener una pelea o combate.

— Ya no eres tan bueno como antes, Hobi. Fácil podría superarte.

Hoseok casi se ríe en la cara de su mejor amigo. Entonces Yoongi carraspeó su garganta y los menores se giraron a verlo. Casi olvidaban que él era parte de esto también. Y que así como Hoseok le enseñó a correr a Jimin, Yoongi le había enseñado a Hoseok. Sin embargo, por el desinterés de Yoongi, postergaron ese dato.

— No me subestimen, mocosos.

— ¡El abuelo ha hablado!— Gritaron Sunmi y Kangmin.

— Cariño, se supone que me apoyas.— Yoongi miró con los ojos entrecerrados a Sunmi. Ella levantó las palmas de sus manos, liberándose de toda culpa.

— Te estoy apoyando, Yoongi.— Llegó a su lado y lo abrazó por la cintura como acostumbraba.— Pero eso no quita que eres un abuelo.

Jinyoung fue junto a Jimin, lista para apoyar a su hombre y en este caso, a su Camaro.

— No menosprecien a Daisy.— Comentó con una voz cantarina.— La nena está estrenando neumáticos.

Jimin miró orgulloso a Jini y la pegó a él.

— Entonces,— Hyukjo se abrió paso entre todos ellos.— pongan día y hora, yo consigo el lugar.

— En dos semanas.— Demandó Hoseok.

Y todos estuvieron de acuerdo.

Ryumi y Dorim se acercaron a Jungha y ella se separó del resto para hablarles. Tras ellos venían Sungjun y Suwoong. Se habían quedado a ver la última carrera, además lo habían hecho desde un buen lugar. Por sus rostros, por lo menos los de las chicas, Jungha supo que estaban anonadadas. Ella seguía igual a pesar de que no era su primera vez.

— ¡Este lugar es genial!— Exclamó Dorim.— Y tu novio el guapo es cada vez más genial. Es decir, en su auto, triplica esa asombrosidad.

— Lo sé.— Rió, le gustaba que se expresaran así. Sin embargo, podía sentir la mirada demandante de Sungjun.— ¿Qué pasa?

— Nada.— Dijo rápido.— No sabía que tenías novio.— Comentó, un brillo raro estaba en sus ojos.— Y no sé, es extraño. Este lugar, él, el ambiente... No va contigo.

— ¿Y tú qué sabes de lo que va con ella o no?— Preguntó Ryumi ya un poco molesta.— Dios, déjala vivir, Sungjun.

— No peleen.— Pidió Jungha.

— Jungha, ¿quién es la castaña bonita de allá?

Junie se giró en la dirección que Suwoong le había señalado y sonrió al ver de quién se trataba. Fácil pudo adivinar las intenciones de su amigo. Pobre iluso.

— Ella es Im Jinyoung.— Señaló a la persona que estaba al lado de Jini.— Y ese, es Park Jimin, su novio, lo mejor será que no intentes algo si no quieres terminar sin alguna extremidad.

Suwoong bufó.—Bueno, ¿y esa sexy pelinegra?

Y antes de que Jungha pudiera advertirle que si tan sólo miraba a Sunmi, Yoongi podía dejarlo bajo tierra, todo se volvió descontrol. Varias chicas gritaron asustadas, mientras los chicos las tomaban y gritaban cosas como "retirada". De pronto, las calles fueron iluminadas por luces rojas y azules, las sirenas se escuchaban fuerte y la gente empezó a correr a todas partes como loca. Jungha se congeló, entrando en shock y sin saber qué hacer, sus amigas estaban igual, viendo a todas partes como ovejas perdidas. Sus cuerpos siendo empujados por las personas que corrían a sus autos. Varias llantas ya habían patinado contra el pavimento y probablemente muchos ya estaban lejos.

Hoseok.

Jungha empezó a alterarse. ¿Qué se suponía que haría? Hoseok y los demás se habían perdido de su vista y si corría, seguro se perdería y eso terminaría peor.

— Nena, vámonos .— Hoseok tomó el brazo de Jungha y un alivio al verlo fue lo que sintió. Podía sentir su firmeza. Y también supo que no había tiempo.— Y ustedes— Les dijo a las cuatro caras perplejas.— Salgan de aquí.

Corrieron al Mustang, la adrenalina había ahogado el shock de Jungha, y por alguna razón loca, estaba emocionada, incluso aunque su papá se pondría furioso y su mamá la mataría. Subió al auto y abrochó el cinturón, Hoseok al confirmar lo que había hecho, arrancó el auto, haciendo que las llantas patinaran. Cuando se alzó por el bulevar, dos patrullas le venían de frente, subió a quinta y al ver el espejo retrovisor, ambas giraron y ahora iban tras él.

— Hijos de puta.

— ¿Pasa algo?— Preguntó Jungha y miró para atrás también.— Oh, diablos

— Agárrate.— Hoseok giró en la primera apertura del camellón. El motor rugiendo desde lo más profundo.— Escucha, me meteré por tres calles más para perderlos.— Jungha lo miraba y por un segundo olvidó que eran perseguidos por dos patrullas, ¡él se ve jodidamente sexy!— Cuando pare, necesito que te bajes corriendo y subas al auto de Jimin.

Jungha abrió los ojos con sorpresa. No lo quería dejar. Además, ¿si no alcanzaba a llegar? Esto no era simplemente salirse del salón de clases y escapar de los supervisores, o brincarse la barda de la escuela. Esto era real y había policías de por medio.

— Pero...

— Nada, nena. Le prometí a tu padre que te mantendría fuera de problemas.

Hoseok confiaba que Jimin la sacaría de aquí.

Miró por los espejos, estaban a unos metros todavía. Así que aprovechó para acercarse a ella y besarla.

— ¿No tenía que faltar eso, verdad?— Se rió mientras se quitaba el cinturón, lista para saltar fuera.

— Claro que no.

— Pues tampoco el soundtrack.

Y Jungha puso Back in Black de AC/DC. Hoseok literalmente aulló y metió directamente el cambio, bajando a sexta, haciendo que el auto volara. Junie estaba apoyando una mano sobre el tablero y otra el puerta, y no dejaba de ver hacia atrás. Las luces iluminando el interior del carro y los motores junto a las sirenas llenando la silenciosa calle. Un giro a la derecha, otro a la izquierda. Las patrullas no eran tan rápidas como Hoseok y su Mustang. Ya iba entrar a la última calle, la cual era en corrida recta. Justo cuando dio el giro, el Camaro de Jimin entraba por la última avenida de esa calle, Hoseok corría por la calle sin fijarse en las avenidas.

— Listo, Junie.— Fue frenando.— ¡Ahora!

Frenó de golpe y Jungha lo miró antes de empujar la puerta y saltar fuera del Mustang. El carro aceleró por la calle y justo en ese momento, para perder a las patrullas que se acercaban, el Charger de Yoongi se atravesó por la avenida anterior. La puerta del Camaro se abrió y pudo ver a Jimin.

— ¡Corre, Jungha!

Se echó a correr por la acera, las patrullas a unas dos calles de distancia, prácticamente saltó dentro del Camaro y cerró la puerta.

— ¡Arranca, Jimin!— Gritó Jini, quien hacía guardia desde el asiento trasero.

— ¡Estoy en eso, amor!

***

Los policías no podían impedir la fiesta que seguía después del Ride de ninguna forma. La mayoría había escapado a la casa donde sería la fiesta. Los Marvel ya estaban ahí. Excepto Hoseok.

— Él vendrá.— Jinyoung reconfortó a Jungha.— Siempre logra escapar.

— ¿Así que esto pasa seguido?— Los ojos de Jungha estaban tan abiertos.

Estaba preocupada, Hoseok no aparecía y había una gran posibilidad que estuviera tras las rejas en ese momento mientras ella estaba en una fiesta.

— Siempre.— Aseguró Sunmi.— Hoseok tiene un tipo trato con los policías, cada tercera vez que lo ven presente, tienen el deber de perseguirlo.— Explicó. Jungha no estaba en humor para entender.— Y esta vez fue una tercera.

Oh Dios mío...

Sentía que el alma se le iba para arriba. Había pasado ya más de una hora. Todos estaban tan normales, como si esa situación no fuera turbia, Jungha era la única lunática en ese momento. A la mierda... No le importaba, apenas se acostumbraba y su novio estaba involucrado.

Jimin se iba acercar a decirle algo, pero en ese momento, la puerta principal se abrió y por ésta entró Hoseok, sonriendo como si acabara de cumplir una misión secreta. El corazón de Jungha latió con fuerza, ella saltó del sofá y corrió a Hoseok, aterrizando en sus brazos y rodeando su cintura con las piernas. Hobi la aseguró por los muslos.

— Estaba a punto de llorar, idiota.

Hoseok alargó una carcajada y negó con la cabeza, le dio un rápido beso en los labios y la miró.

— No tienes nada de qué preocuparte, Junie. Siempre volveré.

••••
WASSUPPPPPPPPPPPPPP, omg este cap sí se los hice larguitoooooo, well, ¿les ha gustado? espero que sí <3 <3.

lol, estoy desde la pc y no te fucking emojis :(

aquí les dejo los dos moods de Hoseok con Jungha:

Y MIREEEEEEEEEEEEEEEEN, esto me lo hizo una amiga así de la nada y no saben, sigo llorando por tan hermosa edit. ALE TE AMO <3.

bueno pedorras, me despido por hoy, no sin antes decirles que wattpad me tiene hasta la madre y lo odio por sus pinches actualizaciones cULERAS, AGHHHHHH, bueno bais <3