❀ Smut, Fluff

❀ Bestfriends!au

❀ Advertencias: sexo explícito

❀ 1336 palabras

 Realmente no era cómo había esperado acabar la conversación, se dijo Chanyeol.

Estaba con Baekhyun, su mejor amigo de toda la vida, tirados en la cama de Chanyeol, viendo en el portátil un capítulo de El Maravilloso Mundo de Gumball. Los señores Park habían salido a una cena con los señores Byun, y los habían dejado al cargo de la casa. Era una de las pocas veces que los padres del alto salían de casa, hecho que frustraba mucho al alto, y así se lo hizo saber a su mejor amigo.

- No puedo ni masturbarme tranquilo, joder -terminó diciendo, después de exponer largo y tendido todas las razones por las que la costumbre de sus padres de no salir de casa era una mierda-. Tengo necesidades, estoy al límite y no puedo ni hacer eso porque en mi casa no saben lo que son las puertas cerradas.

- Podrías acostarte conmigo.

Chanyeol cree que le crujió el cuello de lo rápido que se giró hacia Baekhyun.

- ¿Qué? -preguntó, la voz más aguda de lo normal.

- Sí -se encogió de hombros el chico-. Tú tienes una necesidad, y yo estoy aburrido y dispuesto a ayudarte, ¿qué hay de malo?

Todo, pensó Chanyeol. Porque no iba a admitirle a su mejor amigo que si pudiera masturbarse, lo haría pensando en él. Cree que soltó un sonido de garganta estrangulado que Baekhyun interpretó como un sí, porque sonrió travieso y se colocó rápidamente sobre él, sus manos sobre sus hombros y su entrepierna peligrosamente cerca de la del más alto.

- Es sólo un amigo ayudando a otro amigo a desfogar, no estés tan tenso -le dijo con voz tranquila el otro, rotando suavemente sus caderas contra las de Chanyeol e inclinándose sobre su oreja, jadeando suavemente para encenderlo.

- Joder -susurró él, y Baekhyun sonrió, atacando su cuello.

El muy bastardo de su mejor amigo sabía cómo encenderlo, dejándole bonitas marcas rojas en el cuello que tendría que molestarse en tapar pellizcándole con suavidad los pezones o mordiendo de forma sensual los sensibles lóbulos de sus orejas.

Baekhyun se deshizo de la camiseta propia y la ajena con rapidez, moviendo sus caderas contra las de Chanyeol mientras el alto, finalmente, comenzaba a tomar un rol más activo en todo aquello. Sus manos grandes recorrieron los costados del más bajo, su boca marcó la piel de su pecho y de su cuello , pasando su lengua por el pulso de Baekhyun. No se acercó a sus labios, sin embargo, no quería hacerse ilusiones y un beso era mucho más íntimo que todo aquello. Además, Baekhyun no lo había hecho.

Ya tenía un doloroso bulto entre las piernas cuando se quitaron los pantalones y Baekhyun coló su mano bajo la tela elástica del bóxer, sus manos frías entrando en contacto con su caliente erección y haciéndolo boquear por aire.

- Estás tan caliente, Chanyeol -murmuró Baekhyun, el erotismo en su voz tan palpable que su miembro se movió en el agarre de las manos del más bajo. Él sonrió-. Parece que molesta la tela, ¿eh?

- Cállate -consiguió decirle con voz estrangulada, tirando sin miramientos de la ropa interior ajena.

Su propia ropa interior siguió el mismo camino que la de Baekhyun, y pronto estuvo desnudo en toda su gloria antes Baekhyun, quien se encontraba en el mismo estado. No pudo evitar admirar cada curva y cada recoveco del cuerpo del más bajo, pero tampoco se perdió el brillo en los ojos ajenos y cómo se pasó la lengua por los labios cuando el fin se enfrentó a su miembro sin tela de por medio.

Baekhyun llevó dos dedos de Chanyeol a su boca, humedeciéndolos mientras lo miraba a los ojos casi sin pestañear. Cuando los liberó, él mismo los llevó hasta la entrada ajena, introduciendo uno de ellos y viendo con placer cómo Baekhyun cerraba los ojos suavemente y gemía quedo por la intrusión. Se dedicó a dilatarlo, poco a poco, introduciendo el segundo dedo cuando Baekhyun se lo pidió, y deleitándose con sus expresiones y con cómo se movía, haciendo que sus dedos entraran y salieran de su interior.

Chanyeol no tenía lubricante, pero no le hizo falta cuando Baekhyun usó su saliva y el preseminal que ya se derramaba para cubrir su palpitante erección. El chico posicionó el punta contra su entrada y se apoyó en los hombros del alto en busca del equilibrio antes de dejarse caer poco a poco sobre su pene. Chanyeol notaba cómo se iba abriendo paso poco a poco, cómo sus paredes lo ahogaban y asfixiaban porque lo había dilatado pero aún así Baekhyun era jodidamente estrecho. Sin embargo, tan sólo podía pensar en que eran él y Baekhyun volviéndose uno, y el placer que sentía sólo estando dentro de él, ya era suficiente como para hacerlo explotar.

No ocurrió, de todas formas, y cuando el más bajo estuvo listo, comenzó a moverse, cabalgando a su mejor amigo. Al principio lento y suave, rápido y duro cuando sus cuerpos de acostumbraron. Chanyeol había atrapado las nalgas de Baekhyun y movía también sus caderas en contra del movimiento ajeno para ir más profundo y más certero en su interior. Ambos gemían de placer, la habitación estaba cargada de olor a sexo y del incesante sonido de piel desnuda chocando contra piel. El miembro de Baekhyun dejó de estar desatendido cuando él mismo comenzó a masturbarse, el preseminal manchando el estómago de Chanyeol mientras lo llevaba a la locura.

No sabe cuánto llevaban, pero sabe que notó el bulto al golpearlo y que Baekhyun gritó, clavándole las uñas en los hombros momentáneamente y dejando que un pequeño rastro de saliva descendiera por la comisura de su boca. Chanyeol se colocó, comenzando un ritmo rápido que golpeaba aquel punto de placer incesantemente, y quizá llevado por el éxtasis y el placer del momento, lamió con su lengua aquel rastro de saliva, su lengua rozando los labios de Baekhyun al retirarse.

Lo siguiente que nota son los labios de Baekhyun contra los suyos, besándolo y gimiendo contra ellos, sus paredes apretando su miembro de forma deliciosa, y Chanyeol simplemente se deja llevar y corresponde al beso, aún con su miembro golpeando muy dentro del más bajo.

Es Baekhyun quien llega primero, gimiendo el nombre del alto contra sus labios mientras su esencia sale disparada, manchándolos a ambos. Aún sensible por el orgasmo, besa a Chanyeol de nuevo, quien sigue entrando y saliendo de él, murmurándole entre besos que se corra en su interior.

Es esa simple petición la que lo hace llegar, sus manos sujetando firmemente las caderas de aquel chico mientras tiñe sus paredes de blanco, gimiendo su nombre junto a una confesión de amor. Estaba tan perdido en el éxtasis que no fue consciente de la expresión de Baekhyun hasta que su respiración se normalizó y sus ojos se encontraron con los negros ajenos, ambos cuerpos aún unidos.

- ¿Es verdad? -preguntó Baekhyun con suavidad-. ¿Me quieres?

- Sí -Chanyeol admitió, prefiriendo no esconder su desliz tras mentiras que sabría no podría mantener mucho tiempo, no después de tener a Baekhyun como lo había tenido-. Hace mucho que me gustas, Baekhyun.

- Eres un idiota -dijo el más bajo.

Pero estaba sonriendo brillante y bonito, tal y como le gusta a Chanyeol, y lo besó de nuevo, esta vez lento y suave, como probando por primera vez a qué sabían los labios del alto.

- Si lo llego a saber, no me veo obligado a esto para estar contigo -susurró Baekhyun con una sonrisa.

- ¿A esto?

- A fingir que sólo pretendo ayudarte a que te corras, Chanyeol -rodó los ojos, pero no perdió el brillo en su mirada ni la sonrisa en sus labios-. Quería estar contigo.

El tercer beso que se dan es Chanyeol quien lo comienza, demasiado feliz, demasiado risueño y sintiéndose la persona más afortunada del mundo con aquel chico entre sus brazos.

Porque él quería a Byun Baekhyun, y Byun Baekhyun lo quería a él.