#70
❀ Fluff, slight pero que muy slight angst
❀ University!au
❀ Advertencias: age gap
❀ 1310 palabras
Chanyeol no sabía bien qué hacía allí, rodeado de personas y eligiendo un brazalete con Byun Baekhyun.
Para ser justos, era él quien había aceptado salir con el mayor, a pesar de sus reticencias. Byun Baekhyun era un vecino suyo, uno al que no conocía mucho debido a la diferencia de nueve años que los separaba, pero al que alguna vez había mirado con ojos brillantes, asombrado de su belleza. Conocía a sus padres de vista, eran gente amable y simpática que no dudaban en saludarlo cuando lo veían pasar por la calle. Quizá por eso lo sorprendió verlo en su puerta el día antes de empezar el último curso cuando la abrió, dispuesto a salir a por su coche para conducir hasta el dormitorio universitario con sus cosas.
- Hola -lo había saludado el hombre-. Cuánto tiempo, Chanyeol.
- Hola, Baekhyun -respondió, dudoso-. ¿Vienes a ver a mis padres o...?
- Ah, Baekhyun, estás aquí -la voz de su madre lo saludó, haciendo que el mayor se inclinara educadamente mientras la mujer se acercaba a ellos-. Perdona, ha sido todo tan rápido que no nos dio tiempo de avisar a Chanyeol.
- No se preocupe -respondió con amabilidad, confundiendo aún más a Chanyeol.
- ¿Avisarme de qué? -se metió en la conversación frunciendo el ceño.
Su madre miró con preocupación al mayor, pero éste sonrió y miró a Chanyeol.
- Mi padre murió hace unos días y tenía varias deudas pendientes que hemos conseguido pagar a última hora vendiendo mi coche -su voz era suave y pausada, y el alto se sintió mal por haber sido tan brusco-. Este año me había apuntado a un máster en la Universidad para perfeccionarme y, aunque le ofrecí a mi madre darme de baja para recuperar el dinero de la matrícula y de la residencia, ella se ha empeñado en que vaya -hizo una pausa en la que volvió a sonreírle suavemente-. Pero no tengo coche y tus padres se ofrecieron ayer noche amablemente a que me llevaras contigo.
En otra ocasión, Chanyeol quizá habría puesto el grito en el cielo por que hubieran tomado una decisión así sin consultársela, pero no fue capaz de decir nada y tan sólo asintió, montando a Baekhyun y sus cosas en su coche antes de emprender la hora de camino que los separaba de la universidad. En ese tiempo, Chanyeol descubrió que Baekhyun iba a hacer un Máster de Inglés Avanzado, que tenía treinta y tres años mientras Chanyeol apenas iba a cumplir los veinticinco y que le gustaban las películas de ciencia ficción. En realidad, tenían muchos gustos en común y, a pesar de la pérdida que había sufrido, Baekhyun rió con sus bromas y lo hizo reír también, haciéndolo sentir especial en cierto modo.
- Espero que nos veamos pronto, Chanyeol -se despidió el chico cuando hubieron llegado, sus ojos brillando con esperanza-. No conozco a nadie después de tanto tiempo y es muy agradable hablar contigo.
- Puedes venir a mi casa esta noche -se encontró diciendo, mirando cómo el mayor lo miraba sorprendido-. Bueno, mis compañeros de piso se llevan bien con todo el mundo, así puedes conocer a más personas.
La sonrisa que le dedicó Baekhyun hizo que se le acelerara el corazón.
Sin embargo, Chanyeol se arrepintió de sus palabras. Efectivamente, ni Sehun ni Jongin tuvieron problema alguno con Baekhyun a pesar de su edad, sin embargo era él quien no terminaba de encajar en aquel grupo y sus noches yéndose pronto a dormir acabaron siendo noches en las que no aparecía. Dado que su habitación quedaba en la parte de arriba del piso de dos plantas, no los oía más que cuando iba a su pequeña cocina a prepararse algo o cuando iba al baño, pequeñas pero ruidosas reuniones en las que invitados e invitadas pasaban a su salón y reían, hablaban e incluso flirteaban con Baekhyun. Pero igualmente era doloroso para él que Baekhyun los prefiriera a ellos antes que a él, aunque no supiera bien por qué.
Quizá por eso, dejó de saludar a Baekhyun cuando se lo cruzaba por los pasillos, desviando la mirada y apretando el paso hacia la salida para no tener que saludarlo. Le dolía que lo hubiera desechado tan pronto, como todos los demás habían hecho con él. Pensaba que Baekhyun sería especial, pero no fue así.
Pero se equivocó.
- Chanyeol -una mano en su muñeca lo detuvo, haciéndolo girarse para ver a Baekhyun mirarlo con ojos suplicantes-. ¿Por qué me evitas?
- No te evito -mintió.
Baekhyun lo miró, claramente no convencido por su respuesta, pero no dijo nada más. Su agarre se apretó y tiró de él, arrastrándolo hasta su propio piso en la residencia, el que compartía con la dueña de los edificios. Lo sentó en la pequeña mesa de su cocina y, sin mediar palabra, le cocinó rápidamente un bibimbap, su plato favorito. Chanyeol lo miró con la boca abierta, sorprendido, mientras Baekhyun se sentaba frente a él y le tendía una cuchara antes de empezar a comer.
- Come, o se enfriará -le dijo con calma.
Asintiendo, Chanyeol comió aquel bibimbap que, para él, era el más delicioso que había probado nunca.
- Oh, Baekhyun, estás aquí -lo saludó la mujer-. Y éste debe ser el chico del que tanto me hablas, Chanyeol.
Chanyeol miró a ambos, sorprendido. ¿Baekhyun hablaba de él?
- Sí, señora Lee -le sonrió.
- Qué monos quedáis juntos -comentó la señora, despidiéndose tras eso y dejándolos solos.
Baekhyun no dijo nada, tan sólo terminó de comer con él y fregó los platos a pesar de que Chanyeol se ofreció a hacerlo. El alto estaba cada vez más confuso, y lo estuvo aún más cuando Baekhyun lo invitó a acompañarlo a comprar un regalo.
Así que allí estaba, delante de un puesto callejero lleno de bisutería bonita hecha a mano mientras Baekhyun intentaba elegir un brazalete.
- ¿Qué te parece éste, Chanyeol? -le sonrió, levantando una pieza fina de cuero con un par de gruesas cuentas de color azul claro.
- ¿Por qué te importa? -le preguntó de repente, saltando finalmente molesto por su comportamiento errático y extraño-. ¿Por qué de repente te interesa invitarme a comer y pedirme que te ayude a elegir un estúpido regalo para dios sabe quién?
Baekhyun lo miró intensamente, haciéndolo sentir pequeñito e indefenso, recordando entonces que el otro era nueve años mayor que él. Baekhyun pagó el brazalete y lo cogió de la mano, una mano cálida y suave, llevándolo hasta un banco y haciendo que ambos se sentaran.
- Supongo que no he sido muy claro -empezó el más bajo, abriendo el paquetito en el que habían metido la joya-. Empecé a ir a tu piso por ti, pero luego no fui capaz de decirles que no a Sehun y a Jongin cuando me invitaban porque me caían bien, a pesar de que tú dejaste de aparecer -desenvolvió el regalo, dejando a la vista el brazalete-. Cuando intentaba hablar contigo, me rehuías, y así hasta que hoy decidí que no iba a dejar que ocurriera más.
- ¿Y por qué hoy?
Baekhyun sonrió, tomando su muñeca y enganchando en ésta el brazalete.
- Feliz veinticinco cumpleaños, Chanyeol.
Si Chanyeol estaba sorprendido, eso no fue nada comparado con la sorpresa de Baekhyun acercándose a él para darle un corto beso en los labios, uno que le supo dulce y demasiado a poco.
- Sé que soy mayor que tú y...
- No importa -Chanyeol sacudió la cabeza. Era estúpido, pero aquel beso lo había hecho comprender al fin por qué le molestaba tanto que Baekhyun lo ignorara-. Me gustas.
Baekhyun sonrió amplio, haciéndolo sonreír a él también y se besaron de nuevo. En opinión de Chanyeol, Baekhyun era el mejor regalo de cumpleaños que jamás había recibido.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro