❀ Fluff/smut

❀ Actor!au 

❀ Advertencias: sexo

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Chanyeol rió junto a Baekhyun, aplaudiendo incluso por lo gracioso de su chiste mientras se quedaba casi sin respiración.

Estaban en un descanso entre tomas del nuevo dorama para una de las cadenas más importantes de la televisión coreana. Park Chanyeol, actor de fama y renombre, hacía uno de los papeles principales. Como ya era habitual en cada uno de aquellas series, había al menos un idol o cantante probando su suerte en el mundillo de la actuación, y aquella vez había sido el turno de Byun Baekhyun.

Byun Baekhyun era uno de los solistas más aclamados de los últimos años. Sus discos se vendían por cientos de miles, llenaba estadios con sus conciertos y no había marca que no quisiera su cara promocionando sus productos. Sin embargo, aún no había probado a actuar, y su agencia consideró que era un buen camino a tomar, por lo que la productora y la agencia se pusieron de acuerdo para darle el papel del mejor amigo del personaje de Chanyeol.

En un primer momento, a Chanyeol le preocupó la inexperiencia de Baekhyun con respecto a su actuación, pero el cantante al que le sacaba apenas dos años tenía muchas ganas de aprender y de hacer bien su papel. El primer día que se vieron fue fuera de plató, Chanyeol consideró oportuno que se conocieran antes para poder entablar así una relación real y ver cómo podían adaptarse el uno al otro a la hora de actuar. Baekhyun acudió perfectamente puntual, se proclamó su fan incondicional y le brindó una de las sonrisas más bonitas que Chanyeol había visto nunca.

No tendría que haber tenido miedo, pensó Chanyeol media hora después. Baekhyun y él encajaban tan perfectamente que bien parecían mejores amigos de verdad, y esa química la traspasaron a la pantalla, donde tanto espectadores como equipo se quedaban estupefactos ante lo cómodos que estaban el uno con el otro.

- Baekhyunnie, por favor, no más -le rogó el alto, secándose una lágrima que había caído por su mejilla de tanto reírse.

- Está bien, está bien -levantó las manos en señal de derrota, pero siguió sonriendo con esa sonrisa deslumbrante que hacía latir rápido el corazón del actor.

Chanyeol se había dado cuenta de que sentía atracción por Baekhyun apenas un día después de conocerlo, se dio cuenta de que era amor tras un mes. Incluso después de estar con él la mayor parte del día por las grabaciones, el alto llegaba a su casa y no podía dejar de pensar en el cantante, en cómo le gustaría estar con él, abrazarlo y besarlo lentamente hasta caer dormidos en la cama.

Sin embargo, no había hecho movimiento alguno de acercamiento más que a modo de amigo, le daba miedo perderlo si se descubría ante él como homosexual y la verdad era que jamás había encajado con alguien tan bien como lo hacía con Baekhyun y se negaba a dejarlo ir.

Así que en los descansos se iban juntos a por café, comían juntos y luego dejaban que su inmejorable relación hiciera maravillas en pantalla, donde a pesar de que muchas veces improvisaban más de lo que debían, el director jamás los cortó o regañó. Era real, era tangible, y eso valía más que un guión.

- Tenemos que empezar a pensar en la siguiente escena -dijo Chanyeol, levantándose al fin del sofá y estirándose, una especie de gemido saliendo de sus labios ante la sensación de estirar sus miembros agarrotados.

- S-sí, deberíamos -apoyó Baekhyun, levantándose y pasando la lengua por sus labios, mirándolo fijamente. Maldita sea, contrólate, Chanyeol-. Tengo que ir al baño antes, ¿da tiempo?

- Claro -miró el alto su reloj-, aún tenemos quince minutos.

El más bajo asintió y desapareció camino a los baños. Chanyeol se concentró en pensar en ponis, arcoiris y en que le tocaba casi besar a la protagonista en su siguiente escena, aunque preferiría mucho más besar a Baekhy...

- Chanyeol -lo llamó Kyungsoo, el director de escena-. ¿Sabes dónde está Baekhyun? Vamos a empezar la escena y no lo encontramos.

Chanyeol miró su reloj, ciertamente habían pasado ya diez minutos y Baekhyun no aparecía. No creyó conveniente proclamar dónde había ido el menor, así que le dijo a Kyungsoo que él se encargaba y fue al baño.

- ¿Baekhyun? -llamó suavemente, entrando al baño.

No hubo respuesta así que se adentró aún más, mirando el par de cubículos. Uno estaba abierto mientras el otro tenía la puerta firmemente cerrada. Se acercó a ése, dispuesto a tocar a la puerta cuando escuchó un gemido ahogado. Se quedó congelado con el puño en alto, secándosele la boca. ¿Estaba llorando?

El morbo y la curiosidad le pudieron a la decencia, así que se encaramó al váter del cubículo contiguo para asomarse por encima de los tablones de madera. Lo que vio no era realmente lo que esperaba encontrar. Baekhyun gemía, sí, pero tenía su duro y erecto miembro fuera de sus pantalones y calzoncillos, y se estaba masturbando con los cascos puestos mientras miraba fotos de Chanyeol en su móvil.

Chanyeol dejó salir el aire que no sabía que estaba aguantando, comenzando a sentir mucho calor por la erótica imagen del hombre de sus sueños masturbándose con sus fotos. Con cuidado, volvió a la puerta del baño y la cerró por dentro, no quería ser molestado para lo que pensaba hacer. Probó a abrir la puerta del cubículo de Baekhyun con cuidado, notando con sorpresa y alivio que el menor no había cerrado con llave, y entró, sorprendiéndolo.

- ¿C-Chanyeol? -casi chilló mientras el alto cerraba la puerta.

El chico intentó cubrirse, pero Chanyeol fue más rápido. Lo besó con fuerza, dejándolo clavado en el sitio y consiguiendo arrancarle uno de esos gemidos que él había malinterpretado cuando rodeó la palpitante erección con sus dedos y comenzó a bombearla.

- C-Chanyeol... -suspiró Baekhyun contra sus labios, abriendo más las piernas de forma inconsciente mientras se agarraba a los hombros del mayor.

- Te estaba buscando porque la escena va a empezar -susurró, llevando sus labios a la oreja ajena y mordiendo el lóbulo de forma erótica-. No pensaba encontrarte así.

- Yo... yo... -balbuceó el cantante, pero a Chanyeol no le interesaban sus explicaciones, no ahora.

Lo besó con fiereza de nuevo, usando su mano libre para liberar su propio miembro semi erecto y llevar una de las manos de Baekhyun a éste. El menor captó enseguida lo que quería, comenzando a masturbarlo al ritmo que marcaba el actor sobre su miembro. Siguieron besándose tratando de ahogar los sonidos mientras se masturbaban el uno al otro, saliva y gemidos mezclados en los besos.

Baekhyun llegó al clímax muy pronto, cubriendo los grandes dedos de blanco, ya que él llevaba un rato aliviándose a sí mismo, pero no paró de masturbar ni besar a Chanyeol hasta que éste, unos minutos más tarde, también alcanzó el cielo entre sus dedos.

Se miraron a los ojos en aquel momento íntimo, sonriéndose, hasta que unos golpes en la puerta los hicieron salir de su mundo particular.

- ¡Chanyeol! ¿Está ahí Baekhyun? -era Kyungsoo, seguramente agobiado porque ya pasaban cinco minutos de la hora a la que debía empezar el rodaje.

- Sí, ahora salimos -le dijo alzando la voz.

Se limpiaron y vistieron, pero antes de salir, Chanyeol cogió a Baekhyun de las manos.

- Pensé que llorabas antes.

- No eran exactamente mis ojos los que lloraban, Chanyeol -le sonrió altanero el cantante, sin perder aquel humor y carisma que tanto amaba el más alto.

- ¿Quieres... salir conmigo algún día? -preguntó, nervioso, ya que no sabía si Baekhyun lo correspondería de la misma manera.

Aguantó la respiración mientras el bajo se ponía de puntillas para acercarse a él, pasándole los brazos por detrás del cuello.

- Todos los días -susurró, antes de besarlo de nuevo.

Poco después, la prensa se haría eco de la noticia del noviazgo del actor y el cantante, pero a Chanyeol poco le importaba eso. Baekhyun lo quería, y eso era lo importante.