❀ Fluff

❀ Non!au

❀ 618 palabras

Baekhyun suspiró, deslizando su dedo por la pantalla y vio cómo Chanyeol desviaba la mirada un momento de la carretera para dirigir sus ojos hacia él antes de volver a ponerlos en el asfalto.

- ¿Qué ocurre, Baekhyun? -preguntó con la vista de nuevo en la carretera. Baekhyun suspiró antes de hablar.
- Saben que me llevas a Pyeongchang. Las fans -aclaró, haciendo que Chanyeol asintiera mudamente-. Una fan me ha visto y me ha echado una foto, y como el coche es tuyo...
- Simplemente sumaron dos más dos, ¿no? -sonrió de medio lado, complacido-. Hay que reconocer que son buenas... Y rápidas.
- Sí -asintió Baekhyun, suspirando y apagando la pantalla-. Pero ya no podré disfrutar a solas contigo... Como quería.

Se hizo el silencio. Chanyeol no dijo nada y él casi que lo prefirió, tenía expectativas de pasar unas horas tranquilas y románticas junto al más alto, pero eso se había estropeado ya. Pararon en un semáforo y Chanyeol aprovechó para girarse hacia él y tomar su mano con delicadeza.

- Eh -lo llamó, sonriéndole mientras acariciaba sus finos dedos con el pulgar-. Tenemos este rato, ¿no? Estamos los dos solos en el coche; en lugar de ir con Jongdae y Minseok-hyung, hemos venido los dos juntos.

Eso era cierto, pensó él, sonriendo suavemente.

- Lo sé -respondió susurrando-, es sólo que pensé que pasaríamos juntos más tiempo.

Chanyeol dejó ir su mano para meter las marchas, pero pronto volvió a cogerla de la misma manera suave y con aquella sonrisa en la cara que hacía que Baekhyun se enamorara cada día un poco más de él.

No tardaron en llegar, dejaron pasar a Chanyeol al aparcamiento del edificio donde se encontraban los coches de los trabajadores para que Baekhyun pudiera bajar y reunirse con Jongdae y Minseok que ya estaban allí. El más alto aparcó en un hueco libre y miró a Baekhyun quitarse el cinturón con reticencia.

- Sólo van a ser algunas horas -lo consoló el alto-, y luego te invitaré a algo rico, ¿te apetece?

Le dedicó una de sus sonrisas más brillantes y Baekhyun asintió, sonriendo a su vez. Realmente poco le importaba la comida, él quería estar con Chanyeol y se lo habían quitado. De repente, una idea cruzó su mente.

Aprovechando que se había quitado el cinturón, la baja iluminación del sitio y que estaban en un sótano, giró hasta quedar sentado en el regazo de Chanyeol, mirándolo a la cara con sus muslos rodeando sus caderas. Cogió su cara con suavidad y entonces lo besó, moviendo sus labios con ganas y necesidad, la necesidad de intoxicarse de él antes de alejarse, porque Chanyeol era su aire y lo necesitaba para vivir.

No sabe cuánto tiempo estuvieron besándose porque sus manos habían bajado a agarrar al alto por el cuello de la sudadera que llevaba y Chanyeol había colado sus manos bajo su camiseta para acariciar su piel como sabía que le gustaba; pero cuando se separaron los labios del rapero estaban rojos e hinchados y suponía que los suyos tenían un aspecto parecido y que iba a ser reprendido de nuevo por el equipo de maquillaje.

- Prométeme que estarás cuando vuelva -susurró, sus labios aún tan cerca que casi se rozaban.
- Lo prometo -le contestó con voz más ronca de lo habitual, robándole otro beso que lo hizo gemir-. Y ahora, ve.

Baekhyun salió del coche y lo despidió con la mano mientras salía solo de vuelta a casa, esperando a que desapareciera para subir las escaleras. Las subió con una sonrisa, una imborrable porque sabía qué lo esperaba al llegar a casa, y no era una buena comida o un buen descanso, no.

Era Chanyeol y eso era mucho, mucho mejor.