Universidad Kiss Die.

El día era tranquilo y silencioso, las semanas de exámenes habían comenzado, y eso solo significaba una cosa, los estudiantes de derecho estaban en su último semestre.
Así que si llegaban a perder aquellos exámenes tirarían todo su esfuerzo de un año, a la basura.

Y Jeon Jungkook, no se atrevería a perder, eso Jamás.

°°°

El susodicho era el típico chico popular, inteligente, divertido, obviamente hetero, de personalidad encantadora y adinerado, que no odiaba ni era odiado por nadie, siendo gentil con cada persona que le pedia un favor, siempre y cuando tuvieran en cuenta su unica regla: No tocarlo sin su permiso.
Siempre respetaba el espacio personal de los demas y esperaba ser respetado de la misma forma; Ahora se paseaba por los enormes pasillos de la universidad en busca de su casillero.

La clase de música ya habia empezado y si no fuera por qué su salón quedaba en el quinto piso, cuando el de música estaba en el primero, el hace mucho estaría al lado de su compañero seguramente callando lo para que no dijese ninguna estupidez que de seguro lo distraería.

Al ir bajando casi corriendo las escaleras, tropezó con uno de los escalones, cayendo torpemente en el espacio de pare lastimando se un poco el tobillo, maldito profesor Min! maldijo por alto ante la subida de irá, se levanto con dificultad sacudiéndose la ropa, ya un poco mejor para seguir bajando las escaleras.

Refunfuñando bajo los últimos escalones, llegando finalmente a su tan adorado casillero; Pronto se percató de la presencia de un grupo de chicas que lo miraban entre risas a sus espaldas, sin importar le menos abrió su casillero y saco de este unos cuantos libros que contenían información musical.

Sin mucho ánimo cerro su casillero, y cuando estaba a punto de irse, una linda chica de cabello castaño se lo impidió tomando su brazo con delicadeza.
Suspirando bajo se giro para verla, pensaba en rechazarla educadamente, pero cuando la chica se inclino hacia el para abrazarlo, inmediatamente la alejó de un empujón, siendo cuidadoso de no lastimar la.

Había invadido su espació personal.

La miro con su ceño levemente fruncido antes de dirigirle la palabra. —Oye! Que te pasa? Acaso no sabes lo que es el espacio personal? —Exclamo, completamente enojado.

Minji, como se llamaba la chica, pegó un pequeño brinco ante lo profunda que había sido la voz del mayor, avergonzada bajo su rostro, soltando pequeñas lagrimas que caían sin parar por sus regordetas mejillas coloradas, haciendo toda una escena.

Oh no, eso no funciona conmigo cariño.

Jungkook ya sabiéndo a la perfección lo que quería dar a entender la menor, la ignoró y en lugar de consolarla le exigió una disculpa.

—Discúlpate. —le exigió siendo frío, evitando mirarla a los ojos.

La castaña levanto rápidamente su rostro luciendo confundida, Que había dicho?

—Que- —titubeo, sintiéndose nerviosa con la incómoda indiferencia que recibía por parte del mayor.

—Como lo escuchaste, discúlpate. —repitió con fastidio, ya cansado de la actitud contraría.

Minji lo pensó un poco pero finalmente acepto, se inclino respetuosamente hacia el pelinegro haciendo una reverencia y pidió perdón por su atrevimiento.

—No lo volveré a hacer, lo prometo! —Finalizo con nerviosismo, yendo sé casi corriendo con sus amigas por el pasillo.

Jungkook bufo, con esta ya eran seis las que le arruinaban la mañana, que acaso las chicas no lo podían dejar solo y respetar su espacio personal!?

Un poco alterado empezó a caminar hacia el salón de música, logrando en el transcurso olvidar casi todo lo ocurrido con Minji. finalmente llegó al salon B212, en donde lo recibió su tan amado profesor Min.

—Llegas tarde. —Dijo lo obvio, en un tono poco amistoso, permitiéndole el paso.

Asintiendo a las palabras del mayor paso al aula y luego a su puesto, en donde lo esperaba su mejor amigo Min Yoongi.

—Lo siento profesor Min, no volvera a suceder. —le aseguro, ya desde su puesto.

Al mayor ya no le quedó de otra más que asentir de mala gana, no discutiría con el “Magnate de Oro” de la institución mas prestigiada de toda Corea del Sur, seria una total pérdida de tiempo.

Volviendo al adolescente, este ya se encontraba sacando su libreta y lapiceros, prestando estricta atención a la información en el tablero, Pero... primero hablaría con su mejor amigo.

—Volvio a suceder. —le comento al chico a su lado, mientras escribía algunos apuntes en su cuaderno.

El mayor lo miro algo sorprendido, dejando de lado sus audífonos inalámbricos y acomodándose mejor para ver a su compañero.

—Estas bromeando?. —Pregunto sin creer en las palabras del pelinegro.

Jungkook dejo de lado sus apuntes y se giro un poco para verlo incrédulo.

—No estoy bromeando, una chica de primer grado se me acercó y me abrazo! ew fue horrible. —se quejo por bajo, haciendo una mueca de asco.

Yoongi bufo, a veces su mejor amigo en serio exageraba, estaba conciente de que no le gustara que invadieran su espació personal, pero ante el toque de una chica? Acaso estaba loco!?

—Bueno no es para tanto, es una chica después de todo. —Intento razonar el peliblanco.

Pero se calló de inmediato al ver la  caracteristica mueca que hacía Jungkook cuando se empezaba a irritar, empujaba bruscamente su lengua contra el interior de su mejilla y fruncia sus cejas sutilmente.
Abandono la idea de seguir cuestionando lo, prefiriendo mejor cambiar de tema, asi se ahorraba una gran discusión sin sentido con el menor.

—Bu-Bueno, Al menos no fue como esa otra chica, como se llamaba? Jihyoo... Jisol-

Ya más calmado y sin prestarle mucha atención, el menor lo interrumpió. —Ji-soo. —Dijo, volviendo a sus apuntes.

El contrario sonrió al recordar a la chica, apuntando muy alegre con su dedo índice al pelinegro.

—Eso Kim Ji-soo! Aun recuerdo el día en el que te robó tu primer beso. —solto lo último con gracia, riendo bajo por la expresión ofendida de su amigo.

—Ni me la nombres, aun tengo pesadillas con ese día. —le confeso, sintiendo un extraño escalofrío en su cuerpo.

—No es para tanto, tu le gustabas y lo único que ella quería era besarte al menos una vez. —Comento, ahora jugando con sus lapiceros.

Jeon lo miro mal, dejando de lado los objetos en sus manos.

—Eso no la justifica en nada, debió aceptar el primer no. —declaro. —Pero, mejor dejemos de hablar de idioteces, ponte a escribir que la próxima clase sin falta habrá exámen. —le advirtió, de volviendo su vista al tablero.

Min asintió, dejando de lado sus innecesarios comentarios molestos, prestando toda su atención a las aburridas palabras de su profesor.

—Esta clase será larga~ —musito aburrido, ganándose un poco de la atención contraría.

Jungkook río, y vaya que lo sería.

A las 10:40 am la clase de música había terminado, y daba paso al receso, la campana resonó en todos los pasillos y en cuestión de segundos estos mismos se llenaron, Jungkook junto a Yoongi salieron del gran edificio a pasar su descanso en el patio de básquetbol,  encontrándose en este a su amigo Hwang Hyung-jin, el líder del equipó.

—Hola Hwang. —lo saludo seguido de un choque de manos.

El susodicho saludo de igual forma al peliblanco, fijando al terminar su mirada en el pelinegro.

—Como vas? —pregunto siendo superficial.

—Ya sabes, entrenando con el equipo y esperando a que aceptes ser uno de mis corredores. —planteo sutilmente, riendo al ver la sonrisa contraria.

Jeon nego aún riendo. —Ni loco, sabes que lo mío es el arte y las motocicletas. —le recordo vagamente, palmeando el hombro del rubio.

—Si desafortunadamente lo tuyo es el arte. —admitió siendo sarcástico. —Bueno, debo irme al parecer no pueden vivir sin mi por allá. —Señalo al grupo de chicos, para después dejar al par solo.

Ambos asintieron y se fueron a las gradas, teniendo un pequeño tiempo de paz en dónde Jungkook dibujaba rostros y Yoongi leía un libro de historia; Unos cuantos minutos faltaban para que el receso terminara, el menor se percató de ello y junto a su amigo dejaron el patio para llegar a tiempo a su siguiente clase.

Ya estando nuevamente dentro de la universidad, pasaron por sus casilleros a guardar los libros que habían utilizado, y en cuanto terminaron vieron a lo lejos como dos chicas conocidas se acercaban a ellos, Mierda.

Jungkook se tenso al ver a su hermana sonriéndole con malicia, mientras que esta con mucho cuidado sacaba de su mochila un papel mediano y colorido.
Tomándolo desprevenido cuando se lo acercó a la cara seguido de sus palabras.

—Sin falta, irás al club mixto Fantazy. —Dijo la mayor sonando más como una orden, mostrándole el afiche.

Confundido miro el papel en la mano de su hermana y lo leyó, Club Fantazy: Disfruta de tu diversidad y sexualidad. Frunció el ceño ante el lema tan confuso, pensando en que se trataba de algún tipo de club nudista o espiritual.

—No ire- —Se iba a negar, de no ser por qué fue interrumpido por unas manos es su boca.

—Si, si iras, ya pague mucho por las entradas VIP así que vas por qué vas. —sentencio, dejando a su hermano con sin mas opciones.

Por otro lado, Min disfrutaba de la autoridad de la chica mayor sobre su amigo, le parecía divertido ver como este no se podia negar ante los caprichos de su hermana, pobre Jeon. Se dijo mentalmente mientras reía en silencio.

Pero lastimosamente fue descubierto por Nayeon, la amiga de So-Yeon, que cuando lo vio le sonrió y lo señaló.

—Oh! si tu también irás Min, no creas que te vas a librar de mi, me oyes! —exclamo la chica rubia, en un tono divertido.

Estaba muerto.

Ahora fue el turno de Jungkook el reírse de su mejor amigo.
Le dió dado tanta gracia, que si no fuera por qué su hermana le gritó que parará, seguramente le hubiera dado un paro cardíaco.

—Ya! —chillo la mayor. —Los cuatro vamos ir, ok? —mas que una pregunta fue una afirmación demandante.

Los tres asintieron, algo intimidados por la profunda voz de la pelinegra.

—Muy bien, Jungkook paso por ti a las 9:10 pm, ni un minuto mas ni uno menos. —le advirtió, tomando el brazo de su amiga antes de irse.

Los amigos rieron en cuanto las chicas se fueron, ambos estaban jodidos y lo sabían.

—Supongo que no dormiré esta noche. —supuso el mayor con sarcasmo.

El pelinegro le sonrió de nuevo. —Supones bien, pero... aún creo que no es una buena idea, recuerda, la última vez casi te acuestas con un chico de secundaria, como se llamaba... Jinoo... Jinchul-

—Se llama Jimin, de dónde sacas esos nombres? —pregunto frunciendo el ceño, interrumpiendo las aburridas quejas de su amigo.

Este se encogió de hombros, restándole importancia a la pregunta contraía.

—Da igual, vamos que el profesor de inglés nos espera. —Dijo, señalando con su mentón al susodicho, el cual los esperaba en las escaleras principales.

—Estamos jodidos. —solto el mayor al ver las hojas de exámen en la mano de su profesor.

El menor asintió al absurdo comentario del peliblanco, suspirando ruidosamente ante la mirada poco amigable del profesor Kim, ambos siguieron al hombre mayor hasta el aula, y allí tuvieron el examen mas jodido de sus vidas.

Pensarían en otro momento como sería aquel club y demás, aun cuando Jungkook no estuviera del todo convencido de ir.
Sentía una extraña sensación que no lo dejaba casi pensar, lo ponía nervioso y no le gustaba.
Solo esperaba que en el lugar respetarán un poco su espacio personal, si no, estaría molesto con su hermana por el resto de la semana.

Club Fantasy.

—Todos mueva se por favor! —Grito una chica del personal, mientras empujaba una caja de sonido.

Los demás le hicieron espacio, pero en cuanto se fue volvieron a lo suyo.

Varias personas corrían de un lugar a otro organizando sillas, mesas y entre otras cosas para tener todo listo a las 9:10 pm, ya que a esa hora se abría el club entre semana, todos estaban estresados por que está vez habían tenido problemas con el personal, y la eficiencia habia disminuido horriblemente, por ello tuvieron que acudir a los artistas del lugar para poder terminar de organizar.

Momo, la baterista del club buscaba desesperada sus baquetas rojas, pero en su lugar se encontró con la caja de maquillaje perteneciente a Kim Taehyung, el vocalista y maquillista de Fantazy.

—Kim! Ven por tu caja de maquillaje! —exclamo a lo lejos la pelinegra, continuando su búsqueda en el “baúl del tesoro”

El susodicho dejo de limpiar mesas y fue directo a recoger su maquillaje, por poco y lo olvidaba, se maldijo mentalmente ante su descuido, no podía perder su maquillaje, era muy preciados para el y perderlos era un golpe bajo en sus habilidades.

—Gracias Momo. —le agradeció en un susurró, antes de tomar sus cosas.

—No hay de que. —le respondió bajito, sin mirar lo.

Miro dentro de la caja y verifico que todo estuviera en su lugar, al ver que todo estaba bien sonrió feliz y continuo ayudando limpiando mesas.

En media hora finalmente habían terminado de organizar todo el lugar, lo único que faltaba era la lista de las canciones que presentarían esa noche y las manillas brillantes que verificaban cuáles eran las personas que tenían permitido entrar al club.

Solo faltaban tres horas más para que el club Fantasy abriera sus puertas, y Taehyung aprovecho aquello para ir a su camerino, en dónde muy alegre empezó a arreglarse para su presentación.

Como esa noche celebraba su regreso al Club Fantasy, decidió irse por un atuendo clasico pero a la vez glamuroso, que consistía en: Un abrigo rosa corto de peluche, una camisa blanca sin mangas aterciopelada de cuello en V, unos pantalones de campana negros de cuero, botas del mismo color de 5 cm y unos aretes circulares dorados.

En cuanto a su cabello solo lo hidrato un poco y luego fortaleció sus rulos, dandole ese toque ochentero que tanto quería, el maquillaje que se haría sería básico pero estruendoso, sombras rosas en y alrededor de los ojos, brillos en el mismo lugar, un labial rosa opaco seguido de un gloss y para finalizar un toque de iluminador que lo hacía resaltar aun mas.

Estaba listo.

Al salir de su camerino pudo ver cómo la mayoria de sus compañeros ya estaban preparados  para empezar el show, entre toda la gente vio a su mejor amiga Shin Ryu-jin, la cual estaba muy concentrada en afinar su guitarra.

Dispuesto a ayudar la se acerco a ella y con cuidado palmeo su hombro.

—Hola Ryunnie~ —la saludo en un tono meloso, sonriéndole.

Esta le devolvió el gestó y lo abrazo.—Hola Tae! Que bueno verte aquí de nuevo. —Dijo antes de separarse por completo de su amigo.

—Si, supongo que uno siempre vuelve a dónde fue felíz. —confesó un tanto melancólico.

—Muy cierto, me alegro de que estés de nuevo con nosotros, no sabes cuánto te extrañé! —lloriqueo volviendo a abrazar al mayor, pero está vez con un poco más de fuerza.

Taehyung con una pequeña risa le correspondió el abrazo, pero se separó rápidamente de la menor, evitando un momento posiblemente triste.

—Ya, ya, mejor déjame ayudarte con eso, tienes suerte de que haya venido temprano al club, de lo contrario quien estaría aquí ayudándote sería Riki. —Le aseguro con algo de burla, haciendo reir a la peliazul.

—Ni lo menciones, es capaz de dañar las cuerdas aún sin siquiera tocarlas. —le siguió la burla al mayor.

Ambos rieron al recordar a su torpe pero tierno amigo Nishimura Riki, un joven universitario que hacia parte de los bartenders del club, siendo servicial y muy amable con todos, queriendo siempre ayudar aun sin siquiera saber un poco sobre la problemática y su solución.

Era un buen chico.

—Mejor terminemos de afinar esto para poder empezar a ensayar. —Dijo, tomando la guitarra de su amiga.

—Como quieras. —solto en un susurro, antes de ayudar al contrario.

Hora de apertura del
Club Fantazy.

—Jeon Jungkook! —Grito la mayor, ya fuera de su casa.

Este rodeo los ojos en una mueca, por qué su hermana era tan ruidosa!?
Rápidamente termino de arreglar su cabello, si tardaba mas su hermana lo dejaría sordo y posiblemente sin bolas, ya estaba listo, pero antes... tomo un pequeño hidratante de labios que guardo en su bolsillo, Jungkook era un hombre muy limpio que se preocupaba bastante por su apariencia, y no iría a ningún lugar sin su hidratante labial.

Cuando termino de alistar su bolso, volvió a escuchar la ruidosa voz chillona de su hermana llamándolo, en suspiros bajo del segundo piso, apresurando se en llegar rápido a la puerta principal, que en cuanto la abrió pudo ver a la pelinegra junto a su mejor amiga.

—Hola Jungkookie- —Lo iba a saludar, pero fue rápidamente interrumpida por la voz de su amiga.

—Casi que no eh! —lo regaño siendo sarcástica, mientras le lanzaba las llaves del auto.

Jungkook algo torpe las agarro a tiempo antes de que se cayeran.

—Lo siento, estaba estudiando para mí examen de música y me quedé dormido. —Se disculpo en un susurró, siguiendo a las chicas hacia el Mercedes negro.

Soyeon lloriqueo, le estaba doliendo la conciencia!!

—Ya ok!? —grito no tan alto, subiéndose en el asiento del copiloto. —Mejor, conduce rápido que Yoongi hyung nos espera en el club. —musito con un pequeño puchero en sus labios.

—Esta bien. —Musito, antes de empezar a manejar a una velocidad moderada.

En 15 minutos llegaron al dichoso lugar, en donde los recibió Min con una pequeña sonrisa desde la cafeteria frente al club.

—Que tal chicos? —pregunto vagamente, mientras saludaba a su amigo con un choque de puños.

—Estaremos bien cuando entremos a ese paraíso! —Afirmo Nayeon con su voz chillona, señalando con su dedo la entrada del club.

Ambos amigos rieron ante la actitud tan infantil de la menor, menos Jungkook.

—Entonces vamos. —dijo muy obvio, riendo ante el tierno puchero de la rubia.

Cuando la rubia iba a hablar para defender se, jungkook la interrumpió.

—Déjala. —Increpo, parando en seco la posible burla del mayor.

Este asintió aún sonriendo. —Entonces nos vamos? —indago, acomodando su cabello hacia atrás, en un intento de quitar los mechones rebeldes.

Los tres asintieron, yendo muy animados a la puerta principal del club, en donde los esperaba un muy simpático guardia de seguridad apodado Jay.

—Hola So-Yeon. —La saludo el hombre musculoso en un tono duro pero agradable.

La pelinegra le sonrió en grande, sonrojándose cuando esté le regaló una pequeña sonrisa devolviendo le el gestó.

—Hola Jay... Amm aquí tienes las identificaciones. —Musito timida, entregándole su identificación y la de los chicos.

Jay tomo las tarjetas y las vio unos segundos, cuando verifico que todo estaba en orden, osea que estaban en la lista VIP, se las devolvió.

—Gracias. —Le agradeció el menor, tomando las identificaciones.

El contrario asintió, para luego sacar cuatro manillas luminosas con sus nombres, así el personal del club no tendría inconvenientes en dejarlos pasar a la zona VIP.

—Aqui tienen. —les entrego a cada uno las manillas, y cuando ya estaban listos los dejo pasar. —Que tengan una buena noche.

La pelinegra le sonrió en grande, agradeciéndole con la mirada por su buen trato, se suponía que era un momento íntimo entre los dos hasta que su mejor amiga los interrumpió.

—Gracias Jay! —Le agradeció la rubia, gritando en el proceso.

—agh! ya vamonos Nayeon. —exclamo, llevándose a su amiga adentro del club.

El susodicho soltó una pequeña risa nasal antes de volver a su trabajo, recordando la hermosa sonrisa que Soyeon le había dedicado.

Tal vez estaba enamorado...

Volviendo con los universitarios, estos entraron a la sala principal en dónde fueron recibidos por 7 Rings de Ariana Grande a todo volumen, la banda local estaba haciendo covers y sonaban grandiosos.

La gente a su alrededor se movía mucho, en realidad demasiado, bailaban con sentimiento y aun que era lo esperado a veces se pasaban, necesitaban llegar al bar, ya que allí podían ver por donde quedaba la sala VIP, con mucha dificultad Nayeon logro llegar a la barra junto a Jungkook, quien no dudo en ayudarla para evitar que la tocaran sin querer.

Por otro lado soyeon intentaba no distraerse con el peliblanco a su lado, el cual no dejaba de empujarla para que bailará con el.

—Baila conmigo! —le grito el mayor acercándose a la pelinegra, rodeándola con sus brazos.

—Jungkook nos matara. —murmuro, antes de seguirle el baile.

Cuando finalmente llegaron al bar, Nayeon se percató de que sus amigos no venían con ellos, en un intento de buscarlos se acercó un poco a la multitud, siendo empujada inconscientemente por una chica que bailaba muy animada, Jungkook vió aquello y la alejo del lugar.

—Debes tener más cuidado Nayeon. —le advirtió en un tono suave y agradable.

—Si, lo siento. —se disculpo, volviendo con el mayor a la barra.

Al volver pudo ver a su mejor amiga bailando muy pegada con un chico desconocido, hizo una mueca y antes de llamarla fijo su mirada en el peliblanco, quién estaba bailando descaradamente con una chica... semi desnuda!?

Un fuerte rubor se apodero de las regordetas mejillas de la menor, quitando la mirada rápidamente de la pareja.
Jungkook por otro lado estaba en la barra pidiendo un cóctel para la menor, olvidando casi por completo la ausencia de su hermana y amigo.

Cuando la rubia se calmó, volvio su mirada a la pelinegra, debian irse a la sala VIP antes de las 10:30 pm y por culpa de sus amigos iban a llegar tarde.

—Chicos! Debemos ir a la zona VIP! —Les recordó la rubia en un grito.

Pero no la escucharon, la música estaba muy alta y su voz apenas se escuchaba a un metro de distancia, iba a volver a gritar pero fue interrumpida por el mayor.

—Aquí tienes Nayeon, un Cherry Sling. —le entrego el cóctel de cereza y se sentó a su lado.

—Gracias Hyung. —le agradeció con una sonrisa. —Amm podrías ir por los chicos, creo que se distrayeron un poco en la pista de baile. —Le aviso, poniéndose nerviosa al ver el ceño fruncido del mayor.

Esté suspiro pesado, asintiendo. —Esperame aquí Nayeon, y no te alejes. —le pidió, entregándole su chaqueta negra de cuero para que cubriera sus hombros descubiertos.

La menor asintió regalando le una media sonrisa. —Lo haré no te preocupes hyung.

Jungkook la miro por última vez antes de irse a por sus amigos, cuando iba a entrar en la multitud la música cambio radicalmente a una mas tranquila pero con ritmo, Fantasize de Ariana Grande empezó a sonar por todo el lugar, pero quien la cantaba no era la chica de antes sino un chico.

Quien era él? Y por que le llamaba la atención su voz?

Quiso girarse para verlo pero fue detenido por un chico borracho que  choco con el, distrayendo lo del chico de la voz encantadora, afortunadamente no derramó su bebida sobre él sino que cayó al suelo como una roca, ignorando el incidente anterior volvió su vista a la pareja que bailaba con mucho entusiasmo.
Con algo de dificultad se acerco lo suficiente al dúo, muchas personas tocaban sin querer su cuerpo en medio del proceso y eso lo disgustaba, queriendo salir rapido de allí tomo con cuidado el brazo de su amigo y la mano de de su hermana, jalando los con algo de fuerza hacia la rubia, quien los esperaba muy tranquila en la barra con su cóctel de cereza.

Cuando ya estaban en el bar Jungkook se volteó para ver a su hermana, la cual estaba enojada, a diferencia de su amigo que estaba tranquilo.

—Oye! Suéltame! —le exigió la mayor, soltándose de mala gana del agarre que mantenía el pelinegro.

Jungkook la miro con el ceño fruncido, estaba enojado.

El peliblanco iba a hablarle a su amigo pero cuando lo vio, cayó de inmediato.

Ahora los cuatro estaban cayados, solo se escuchaba la música de fondo y la bulla de las personas animando a la banda, el menor ignoro el incomodo ruido y tocó el puente de su nariz en un intento de no explotar frente a sus amigos, bebió un poco del agua que habia en la barra y respiro profundamente antes de hablar.

—Vamos a ir a la sala que nos asignaron, ahora. —Dijo, casi en una orden, tomando la mano de la rubia para llevarla consigo al lugar indicado.

Esta lo siguió en silencio mientras bebia alegremente de su cóctel, en cuanto a su mejor amiga y su hyung, bueno estos lo seguían cabizbajo, no queriendo empeorar las cosas; Jungkook podía ser una masita, pero cuando se enojaba era completamente diferente, y eso lo sabían perfectamente sus amigos.

Al llegar a la sala VIP, Jungkook junto a la menor se sentó en los cómodos sillones morados del lugar, mientras que el dúo se acercaba a la lujosa barra dorada, en donde pidieron tres bebidas con alcohol, Soyeon pidió una piña colada, Yoongi un martini seco y para el menor Champagne rosa.

Al recibir las bebidas fueron a su mesa reservada, en dónde Min se sentó al lado de su amigo siendo ignorado por este mismo.

La pelinegra algo incomoda, se paró frente al menor. —Ten, Champagne para tí. —Le ofreció, Dejando la bebida en la mesa frente a ellos.

El pelinegro miro de reojo la bebida, aún no tomaría nada, o al menos hasta que la rubia terminase su cóctel, quería estar sobrio para cuidar bien de ella y su hermana.

—Gracias, pero lo tomaré en otro momento. —Rechazo la bebida, evitando el contacto visual con la mayor.

Esta asintió aún avergonzada, llendo se a sentarse al lado de su amiga, la cual terminaba de tomar su cóctel.

—uf! hace mucho que no me tomaba un cóctel de cereza tan bueno! —comento feliz, dejando la copa vacía sobre la mesa. —Bueno, que te parece si vamos a la pista a bailar, escuché que hoy habría especial de pop! —Dijo muy animada, levantándose del gran sillón.

—Nayeon yo- —se iba a negar pero fue interrumpida por la rubia.

—kook hyung. —llamo al mayor a su lado y este la volteo a ver. —Iré con Soyeon Nona a la pista de baile, quieres venir con nosotras o prefieres quedarte aquí? —Le pregunto, pero recordó lo que le dijo el bartender anterior, así que interrumpio la posible respuesta del pelinegro. — Escuché que la banda local vendrá en unos minutos a tocar un poco de música clásica, la llaman la hora dorada, tal vez te agrade escucharlos. —Supuso, dejando hablar al fin al mayor.

Jungkook lo pensó un poco, quería cuidar de las chicas, pero también quería escuchar nuevamente al chico de la voz encantadora, miro a su amigo, que por cierto hablaba muy animado con una chica pelirroja, suspiro cansado de su mejor amigo y volvio su vista al par de amigas frente a él, ya habia tomado una decisión.

—Y bien..?

—Me quedaré aquí, tengan mucho cuidado, Soyeon cuida bien de Nayeon, que nadie la toque sin su consentimiento, por favor. —Le advirtio con voz severa.

La susodicha volteó los ojos en una mueca. —Lo sé, lo sé, ya hasta parece tu novia! —le reclamo al menor siendo irónica.

Este suspiro. —Ya deja eso, váyanse antes de que cambie de opinión.

—Ok ok. —solto su hermana a siendo su voz mas chillona y aguda.

La menor la siguió entre risas hacia la pista de baile en dónde sonaba a todo volumen Unholy de Sam smit y Kim petras, a la rubia le había dado gracia que su mejor amiga pensara que Jungkook y ella pudieran ser pareja, ja! como si le gustaran los chicos.

Cuando el menor las perdió de vista se permitió mirar hacia el escenario que estaba vacío, curioso se acercó al mesero que estaba a solo unos pocos metros de el, tocó su hombro con delicadeza y le preguntó:

—Disculpe joven, sabe a qué hora empieza la hora dorada?

El contrario se volteó y asintió. —Sip, en 5 minutos si no estoy mal, mientras tanto puede probar una de nuestras mejores bebidas en el bar, claro si gusta. —le sugirió algo nervioso.

—Oh, amm claro, gracias. —le agradeció antes de volver a su mesa, en donde lo esperaba su fiel amigo junto a un grupo de mujeres mayores.

—Hey donde estabas? Da igual, mira que lindas chicas quieren conocerte. —hablo con picardía, señalando a las bellas mujeres a su lado.

El menor se inclino un poco para ver a las damas, estás le sonrieron muy coquetas, les de volvio gesto y se sento al lado de su amigo antes de saludarlas como se debe.

—Buenas noches señoritas, discúlpenme pero está noche no podré bailar con ustedes, si quieren hablar y beber estoy a su disposición. —les comento siendo cordial y caballeroso.

Las chicas rieron fuertemente, pero que lindo chiquillo! Pensaron, era la primera vez que un hombre las trataba con tanto respeto y les encantaba.

Irene la mayor del grupo no perdió su tiempo y fue directo hacia el menor, llevando consigo una copa de champagne rosa.

—Vaya pero que caballeroso eres, quieres beber un poco de champagne rosa conmigo cariño? —Le pregunto, en un tono meloso ya sentada a su lado.

—Por supuesto. —acepto con gusto, tomando la copa que antes le había servido su hermana.

Habían pasado ya 5 minutos, en los cuales el grupo de chicas no paraban de reir tanto por chistes malos del peliblanco como por lo tierno que se veia en menor cuando se avergonzaba, Jungkook no se molestaba casi en hablar, pues su amigo lideraba muy bien la charla y no había necesidad de interrumpir lo, en cuanto a la rubia a su lado está se estaba empezando a acercar cada vez mas a él, invadiendo por completo su espacio personal, el pelinegro se percató de ello y cuando esta quiso tocar su pecho disimuladamente, la detuvo al instante tomando suavemente su muñeca, mientras la miraba algo confundido.

Cuando le quiso reclamar, una voz melodiosa lo distrajo, era el chico de la voz encantadora...

—Muy buenas noches a todos, me presento soy Kim Taehyung, mas conocido como V, y hoy junto a mi banda vamos a cantarles algunas joyas clásicas. —Anuncio muy emocionado el chico en el escenario.

Jungkook lo miro de pies a cabeza, se veía bellísimo, nunca en su vida pensó en creer a un chico hermoso pero ahí estaba, apreciando la belleza de un hombre.

Quiso ir hacia una mesa mas cerca del escenario pero fue detenido por una delicada mano femenina en su brazo, era Irene.

—Cariño, a donde vas..? —indago la mayor, teniendo su brazo preso en sus manos.

Cuando la iba a alejar esta se le lanzo y planto un baboso beso en su mejilla, se habia pasado y mucho.

—ups? —solto con falsa inocencia, logrando enojar aún más al menor.

Esta sería una noche larga...

Holaaa! Como tan?

Sisi ya se que público y público fanfics posiblemente largos y nada que actualizo T-T

Bueno con este no sera así, o al menos eso depende de ustedes uwu

Que dicen lo hago Two shot o mini serie? 🤨

Ahi les dejo la decisión final

Bye :3

•Kimie-shi