-¡Ya, papá! -Se quejó Min al ser fotografiada por Jeff junto a sus hermanos por milésima vez.

-¡Sonrían! ¡Una vez más!

La familia Satur volvía a la rutina. De hecho, era el primer día de clases y de trabajo luego de unas bien merecidas vacaciones.

-¿Cuánto más vas a tardar?—Nunew fastidiado preguntó.-El señor Han nos está esperando.

Barcode vió la escena desde la puerta de la hermosa casa. Jeff tomándole fotos de recuerdo a sus cuatro hijos bajo la luz del perezoso sol que apenas iluminaba.

El ambiente era familiar y lo amaba, aún así, sabía que debía hacer algo o los niños llegarían tarde a la escuela y ellos al trabajo.

-Bebé, creo que ya son suficientes fotos, ¿No crees?

Su esposo era sentimental cuando de sus hijos se trataba.

Según Jeff debía ser especial porque era el primer año de escuela primaria para los gemelos y quería un bonito recuerdo.

-Está bien...-Dejó de apuntar con la cámara a sus hijos ya impacientes. No podía contradecir a Barcode -Bien, ya pueden irse.

-Al fin.- Suspiró con fastidio- Nos vemos en la tarde- El adolescente se despidió a lo lejos agitando su mano de forma rápida, Jeff asintió a su dirección. Nunew dió media vuelta y se montó en la camioneta negra. Su movilidad privada.

Min se acercó a ellos para dejar un beso en la mejilla a Jeff como despedida. Miró a Barcode cuando se alejó y le sonrió un poco -Adiós, Barcode -Se dió media vuelta y caminó hasta la camioneta que los esperaba.

Los niños que esperaban su turno abrazaron ambos a su papá y recibieron besos toscos en la cara. Jeff no era del todo delicado, además sus manos eran un poco rasposas. Bueno, a los niños no les importaba mucho pues se habían acostumbrado.

-Los amo, por favor tengan mucho cuidado, obedezcan a su maestra y no se metan en problemas. Y eso va para ti, Win -Dijo Jeff acomodando sus uniformes de escuela privada.– Los amo.

-¡Yo también, papi!-Exclamó Up

-¡Pero yo más, pa!-Puchereó Win

El pelinegro sonrió por la escena.

-¡Bye, Barcode!

El mencionado parpadeó sorprendido viendo como Up se despedía de él agitando su manito emocionado y a Win también pero más calmado, ambos a tan solo pasos frente suyo. Barcode les devolvió el gesto con una sonrisa que le hizo cerrar sus ojitos, atrapando su atención y la de Jeff

-Cuidense mucho, y hagan muchos amigos. –Dijo con voz suave y poniéndose a su altura, acariciando sus cabellos.

Los niños se sintieron bien porque Barcode tenía esa calidez.

-¡Síp, bye! -Win tomó la manita de
su hermano y salieron corriendo hasta la movilidad.

Al menos tratar con ellos es más fácil.

Eran tiernos y bien portados, aunque Win hiciera unas cuántas travesuras.

-Vamos, llegaremos tarde.

║◈ ° • . ❁ . • ° ◈ ║

—¡Mi bebé! ¡Te estaba esperando! Tú nunca llegas tarde. –Barcode fue rodeado por dos delgados brazos.

Era Lawan, su mejor amiga.

-Necesito que me cuentes todo de tu luna de miel, pícaro– Le guiñó un ojo haciéndolo sonrojar y ver de costado a Jeff que se veía muy tranquilo.

-Lo sé, lo sé, te contaré todo, pero ahora debo ir con mi hermano.-Dijo apenado y Lawan asintió para dejarle un abrazo. –Luego, ¿Sí?

-¿Lo prometes?

-Claro.

-¡Bien! Te quiero - Respondió mientras le daba un último abrazo- Adiós, Jeff. -Se despidió ella para caminar lejos.

Barcode volvió a tomar la mano de Jeff quién lo sujetó con fuerza, cruzando las oficinas para poder llegar a la oficina de Apo, el jefe de la empresa. Pronto estaban dentro de la gran y elegante oficina siendo abrazados, o bueno, solo Barcode

-Mi pequeño.- Apo se separó del menor y dejó un último beso en su frente. Jeff trató de disimular una mueca.-Te estaba extrañando.

Si bien Apo y Barcode se decían ser hermanos no lo eran, al menos no de sangre. Ambos fueron adoptados por dos mujeres que, según Apo le contó, eran unas hijas de... Bueno. Eran malas madres, demasiado exigentes y los maltrataban. Sólo se tenían ellos y a nadie más, por lo que son realmente muy unidos.

Jeff sabía que Apo era su mejor amigo y Barcode su esposo, pero a veces verlos tan cariñosos sacaba su pequeño lado celoso.

¿Porqué? Porque Apo siempre robaba la atención de Barcode

-Bebé...-Su esposo lo llamó con una pequeña sonrisa y las mejillas rojas por haber sido apretadas. Culpa de Apo. -Te dejo, debo ir a mi escritorio. Apo tiene unas reuniones que debo organizar. -Dijo rápidamente, robándole un beso en la comisura de sus labios. Jeff posó una mano en su cintura y le dió un pequeño apretón.

Barcode era secretario de Apo y tenía siempre trabajo que hacer.

-Nos vemos en el almuerzo.

-Claro que sí.– Le sonrió sin mostrar sus dientes y soltó su cintura.

-¿Podríamos comer en tu oficina?

-Todo lo que quieras.—Dijo rápidamente, porque Jeff hacía todo lo que Barcode le pedía, quería o deseaba. Sin peros.

-Hasta entonces.– Se dirigió a Apo– Adiós, Phi– Se separó y caminó lejos. Jeff sonrió por su elegante andar,
moviendo ligeramente las caderas y
luciendo sus largas piernas.

-Eh, no lo mires tanto, hombre.

-No podría no hacerlo.

La mirada seria de Apo lo hizo carraspear. Era muy protector con Barcode, eso nadie se lo quitaba.

-Ya eres un hombre casado. –Se acercó a uno de los sillones en su oficina donde una bolsa de regalo descansaba, sus manos la tomaron y de ahí sacó una botella de vino.– Y eso hay que celebrarlo. –La movió con diversión.

Jeff soltó una pequeña risa pues pronto ya tenía una copa de vino en su mano derecha.

-Me alegra que al fin te hayas dado otra oportunidad, además con Barcode, el más lindo de todos.

-Sí...-Movió el contenido de su copa.-El más lindo.

Estaba casado, compartía techo y recibía las atenciones del más lindo y dulce de todos... Pero había algo que lo molestaba y es que no sentía su corazón completo, es más, el mismo no se sentía completo como pensó que lo haría. Y sabía el porqué.

-No te ves muy animado.- Apo frunció en ceño cuando Jeff lo miró como si no hubiera escuchado lo que dijo.

-¿Hm? ¿Como dices?-Perdido en su mente.

Apo suspiró.-Lo que sea... sólo diré que si lo lastimas te parto las piernas.

Jeff carcajeó.-Nunca lo haría– Respondió dándole otro trago a su copa.

Pero no convenció a Apo. Y se prometió luego hablar seriamente con él, por ahora, debía ver como iban las cosas.

Jeff tendrá que aprender a superar o perderá lo que tiene enfrente. 🖤