*Escuchen mientras leen y espero se entienda el sentir*

Louis no creía nada de lo pasado, habían regresado de la cabaña y por primera vez en muchos años podría decir que estaba realmente feliz pero con este sentimiento de creerlo y también vivirlo.

Guardó en lo más profundo de su ser todos los momentos de esa tarde desde Emy haciendo el intento de bailar con Zayn.

Gemma tratando de capturar en una foto la cara toda embarrada con postre de Niall, él alegaba diciendo que todos se enamorarían de él si las sacaba a la luz.

Liam sostenía unas pequeñas macetas con algunos injertos que Niall recolectó para hacer más grande su jardín, dejó a Liam a cargo diciendo que era él más lindo, tierno y responsable de todos.

Trisha compartió mesa con Magy, se la pasaron hablando todo el rato sobre medicina y de algunos casos, la alfa le contó resumida su historia de cómo Esteban la chantajeo para que hiciera lo que él exigía amenazando la vida de su hijo para después llevárselo.

El ambiente era muy hogareño, la tarde pasó y ellos bailarán e hicieron algunos juegos que los omegas organizaron. 

Cuando el sol se iba ocultando, Harry pidió su mano para bailar la última pieza, una versión acústica de una de las canciones que a él tanto le gustaban porque recordó a sus padres bailarla en el centro de la sala de su casa.

La melodía empezó e hizo una reverencia para luego extender su mano e invitar a Louis a bailar.

—¿Me permites? —preguntó para posar sus manos sobre la cintura del omega.

—Claro. —subió las suyas para enroscarlas detrás del cuello del alfa.

Liam y Zayn bailaban con su cachorro, Niall y Gemma también estaban abrazados siguiendo el ritmo de la música.

Louis cerró los ojos y se acercó más al pecho de Harry que tarareaba estrofas de la canción con esa voz grabe que le erizaba la piel y vibraba en su pecho. Este sin duda se convertiría en uno de sus momentos favoritos, era algo así como si sus almas se fundieron bajo un fuego, un fuego lindo donde la flama nunca se apagaría. No era nada parecido a aquellas cenizas que se las llevó el viento después de haber ardido tanto.

“When the night has come
And the land is dark
And the moon is the only light we'll see
No, I won't be afraid, oh, I won't be afraid
Just as long as you stand, stand by me
So darlin', darlin', stand by me, oh, stand by me
Oh, stand, stand by me, stand by me" —Harry susurraba en su oído.

Él bailó en los brazos de su alfa y sintió volar, ¿era posible tanta felicidad?

Porque verlos así te hacían sentir el deseo de tener algo similar.

Verlos así era querer vivir estas sensaciones, era parecido a lo que experimentas cuando escuchas canciones como It's Been a long, long time o can't help falling in love.

Ellos te hacían sentir eso, ellos eran eso que todos buscan.

Eran el amor en su máxima expresión.

Verlos te hacía desear estar enamorado y vivir una vida así un amor como el de ellos.

Se abrazó fuerte, transmitiendo todo esto que sentía por ese simple acto, amaba a ese alfa.

🍁🍁🍁

Volvió de sus pensamientos cuando escuchó a Emy suspirar casi dormido.

Ahora se sentía en familia y con un hogar.

Apreció el anillo en su dedo y sonrió, Harry se acercó y le besó el hombro.

—¿Qué sucede amor?

—Creo que estoy en un sueño alfa, todo parece tan irreal.

—Pues lo es cariño, es real. —Picoteó sus labios ¿Listo para dormir amor?

—Si gracias, ¿y tú tienes sueño?

—Siempre que sea dormir a tu lado, estaré dispuesto. —Se acercó más dándole muchos cariños.

Louis se movió para que Harry pudiera recostarse a su lado, este abrió sus brazos invitando al omega a que tomara el lugar que le pertenecía.

—Mi omega, mi lindo y dulce omega.

Nuevamente, gracias a la mezcla de sus olores lograron dormir toda la noche.

🍁🍁🍁

La mañana siguiente Louis y Harry se levantaron para prepararse para sus trabajos, en el día Harry iría a las oficinas y Louis debía preparar algunas mini tartaletas que habían pedido.

Pero había un pequeño problema, al parecer el alfa se negaba a salir de la pose en que se encontraba, su rostro hundido en el cuello de su omega le gustaba escuchar las pequeñas risas que Louis soltaba cuando lo besaba.

—Harry debemos levantarnos alfa, apresúrate o se te hará tarde.

—No.

—Te gusta tu escondite, ¿no es así?

—Me encanta. —Le habló haciendo que su aliento diera él la parte sensible de su cuello y esto provoco un escalofrío en todo su ser.

—Mamiiiiiiii —Emy dio un grito demasiado agudo llamando a Louis.

Con dificultad salió del agarre de Harry llegando con su bebé. Emy lo abrazó por el cuello y se recostó sobre su hombro. —Mami. —Emy acarició su cuello, aferrándose posesivo.

—¿Por qué tanta prisa omega?

—¿Será porque tú debes ir a trabajar y yo debo preparar las tartas que pidieron? —preguntó llenando la cabecita de Emy con besos.

—Creo que a este paso podrás abrir una tienda.

—No considero que sea para tanto alfa. —Lo observó curioso cuando Harry parecía resoplar, sacudiendo sus rizos de un lado a otro.

—No menosprecies tu trabajo omega, sea poco o mucho, tiene mucho valor y lo sabes.

—Sí, supongo que sí, pero tanto así. ¿No será mucho?

—No, por supuesto que no, necesito energía Louis, ¿podrías regalarme unos besos para terminar de despertar?

—Alfa tramposo. —ladeó la cabeza examinando al alfa, en tanto se acercaba dejando un par de besos en la comisura de sus labios.

—Me volverás loco, mejor iré a bañarme. —Harry acarició a Emy, pero el cachorro se escondió más en el cuello de su mami, justo donde se encontraba la fuente de su aroma.

Emy ya estaba preparado cuando el alfa salió de su baño. Mientras Louis iba a cambiarse, Harry se quedó vigilando al pequeño que solo estaba sentado, observándolo sin hacer gesto alguno hasta que ladeó la cabecita de un lado a otro. —No mami. —refunduñó con un leve gruñido. El alfa se sorprendió un poco.

Louis salió y fue por Emy para bajarlo y que caminara siguiéndolo, el alfa se quedó terminando de vestirse. Llegaron a la cocina y encontraron a Gemma preparando algunos tazones con cereales para cada uno, alguna fruta en cuadros y jugo de naranja natural.

—Hola, Gemma, buenos días.

—Hola, Lou ¿qué tal pasaron la noche? —cuestionó dejando un pequeño tazón frente a Emy para que comiera unas frutas.

—Bien gracias, ¿y Niall? —preguntó al fijarse que no estaba el omega con su peculiar sonrisa dando los buenos días.

—No se ha levantado, pasó la noche despierto, ha tenido muchos antojos y también muchas náuseas, me es imposible sacarlo del nido, pero llamé a Magy y me pidió cambiar el medicamento, ella dice que es causa del embarazo, pero no estoy segura de eso.

—Es normal estando en estado, pero si tu instinto no está seguro es mejor que lo lleves a revisar.

—Ahora está dormido, he agendado una cita para la tarde. Y te quería pedir si puedes estar pendiente de él, yo me quedaría cuidándolo, sin embargo, tenemos ciertas cosas que arreglar.

—Claro Gemma no es necesario que lo pidas, yo me encargo de él. —Le sonrió.

—No dejes que coma muchos dulces, no te dejes chantajear por su mirada de cachorro.

—No lo haré, Gemma no te preocupes.

Harry iba entrando justo cuando la alfa iba a darle un abrazo de agradecimiento a Louis. 

Aun así, el brazo del alfa se interpuso posicionándose en medio de los dos dando el abrazo al omega, Gemma se quedó un poco asombrada por la actitud de su hermano, debía ser porque la noche anterior se comprometieron y Harry era un alfa territorial.

—Harry, ¿te sientes bien cariño? —Louis inquiere.

—Mejor que nunca omega. —Le sonrió dejando un beso en su frente.

—Bien, creo que iré a darle un vistazo a Niall, te espero afuera Harry y muchas gracias, Lou cualquier cosa llámame y estaré aquí lo más rápido posible. —Gemma terminó de mencionar antes de salir.

—Claro, ve tranquila, yo te mantendré informada.

—No quisiera separarme de ti omega. —Harry demandó su atención.

—Pero debes alfa, anda, no seas perezoso amor.

—Me encanta cuando me dices así, la próxima agrega el “mi” cariño. —se separó de él buscando sus labios para dejar un beso.

Luego fue con Emy que le ofrecía un poco de fruta, pero de nuevo ladeo la cabeza examinando alfa cuando este acercó para tomar lo que le daba. 

Se despidió del pequeño con un beso sobre su rubia cabellera y partió en búsqueda de su hermana.

Louis fue a la cocina a preparar las tartaletas, Emy ahora estaba en el suelo jugando con algunas cosas que el alfa le regaló.

Se aseguró de tener todo listo y tiempo para no hacer esperar a este amigo de Magy, también fue a la habitación de Niall para cerciorarse de que todo estuviera bien con él.

Decoró todo con mucho cuidado dejando todos los pequeños postres sobre el mueble mientras se terminaban de arreglar, fue por unas cajitas que Niall le sugirió comprar para que se vieran lindas, claro que estaban hechas con material biodegradable.

Zayn le daba la idea de que empezara a buscar algún nombre, tenía muchos en mente, se presentaban en su cabeza, rebotando uno después del otro, pero aún no estaba muy seguro de eso.

A media mañana el timbre sonó y Louis salió para entregar las tartas, el señor quedó encantado y dejó un poco más del pago acordado.

Ahora estaba más confiado, pensó en tomar muy en serio el consejo de Harry para hacer formal su trabajo, durante la mañana se aseguró de ir a ver a Niall, pero el omega aún no había despertado, fue a la cocina con el cachorro en brazos.

—Nini lino. —Emy dijo antes de entrar a la cocina, el omega estaba sentado en una de las sillas tomando un poco de té.

—Hola, Lou, hola, amorcito bello. —saludó.

—Hola, Niall buenos días, ¿cómo te sientes amigo? —Se apuró a ir con él para poner su mano sobre su frente viendo si había algo de fiebre.

—Bien, Lou no te preocupes, me despertó la llamada de Magy me enviará unas pastillas con Grace, así que no hay de qué preocuparse ¿Me dejaste algún pastelito?

—En realidad no, Niall, pero —se apresuró a decir cuando vio en gran puchero de su amigo—, te hice uno especial para que no te haga daño.

—Eres un sol Lou.

—Lo sé. —rio mostrando la pequeña tarta—. Pero antes debes comer algo nutritivo. —dejó un tazón con frutas frente a él.

—Lo que sea cariño, comería lo que sea con tal de probar, ese postre que se ve delicioso

—Bien, eso es perfecto, ¿qué haremos hoy Niall?

—Quiero salir al jardín a ver a mis bebés, leí de un protector solar a base de aloe vera para mis pequeñas, necesito protegerlas para que no se quemen sus hojitas, además tengo que ir a trasplantar unas macetas que Gemma no tiene idea que llegaron a mis manos. —rio con algo de maldad.

—Bien, tú termina de comer mientras yo limpio todo.

—Gracias, Lou.

Niall continuó su desayuno y Emy llegó junto a él abrazándose por su cintura, Niall le vio con curiosidad cuando el pequeño acarició su estómago con su dedo índice.

—Lino.

—Alfita, bello de mi corazón, eres un terroncito de azúcar, a ver di be–bé.

Emy solo dio una carcajada moviendo su cabecita de un lado a otro para negar la petición del omega.

—Vamos amor, tú puedes. —Le animó tomando sus mejillas entre sus manos para acercarlo a su rostro y besarle la nariz.

—Mmmm lino.

—Be-bé. —Niall gesticulaba para que Emy le imitara.

—Be bé

—Muy bien Emy, eso es. —aplaudió. 

Louis terminó de acomodar la cocina y Niall fue a su habitación a cambiarse, mientras el castaño fue a la propia a ponerse bloqueador solar para protegerse del sol.

—Bien Emy ahora si estamos listos, bebé.

—Listo ami.

—Eso es bebé, ese es mi bebé. Estás listo.

El omega lo cargó alzándolo para hacerlo reír, Emy decía más palabras y él estaba muy pero muy orgulloso.

Magy informó a Niall que Grace iba de camino con los medicamentos prometidos, se puso una playera que ahora le quedaba ajustada haciendo una nota mental para ir de compras por ropa que le quedara más holgada.

Justo cuando salía de su habitación, el timbre sonó se apresuró para abrir viendo a la omega sonriendo alegre.

—Hola, Niall, que bueno verte de nuevo.

—Hola, Grace, ¿quieres pasar?

—No gracias, solo debo dejar esto y regresar.

—Bien Grace, siempre muchas gracias por tener la disposición de venir hasta aquí y traer lo que necesito.

—Es un gusto, bien nos vemos pronto.

—Con cuidado Grace que tengas un buen día.

Al cerrar la puerta hubo algo extraño como un presentimiento que viene de repente, pero lo ignoró. 

Fue por un vaso con agua para tomarse las pastillas.

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—Recuerden el plan muchachos.

—Omega de ojos azules.

—Bien, estén alertas de que en cualquier momento el plan estará en marcha.

—Está bien jefe.

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Niall estaba a punto de tomárselas cuando Louis entró con Emy en brazos, el pequeño se quedó viendo a Niall con la misma expresión de hace unos días.

El omega dejó el vaso y el medicamento sobre la mesa viendo curioso al alfita.

—Mami. —El cachorro se removió en sus brazos. 

Louis sintió la inquietud en su pequeño alfa.

—Amor, ¿qué sucede? —Intentó mecerlo en sus brazos, pero Emy hizo un pequeño forcejeó tironeando hacia atrás, empezando a llorar.

—¿Qué sucede cachorro? —Se hincó en el piso viendo a su pequeño para calmarlo, soltó un poco de su olor para que el alfa se tranquilizara, pero Emy solo se giró poniéndose frente a su mami con una actitud protectora viendo a todos lados con el ceño fruncido.

—Emy bonito, ¿qué sucede? —Niall se acercó, pero el pequeño lo vio parpadeando algo molesto.

—Emy ¿qué sucede?

El pequeño alfa se acercó a Niall acariciando su pierna, luego una ráfaga de viento vino moviendo algunas hojas de las plantas que Niall tenía en la cocina.

Emy se puso muy ansioso y empezó a llorar pidiendo los brazos de su mami.

—Mami ¿papi? —lloraba.

—Emy cariño, me estás asustando —Louis empezó a sentirse nervioso.

El pequeño lloró más fuerte en sus brazos, Louis se aturdió.

—Louis, ¿qué pasa? —El rubio mordía sus uñas.

—No lo sé Niall. —estaba asustado ni su olor fue capaz de calmarlo y Emy hablaba asustado llamando a Harry.

—Llévalo a la habitación para que sienta el olor de Harry, yo llamaré a Gemma para ver si hay posibilidad que él venga.

Louis obedeció con el pequeño que estaba inconsolable en sus brazos, entró a la habitación y tomó algunas prendas de Harry para que el bebé sintiera el olor y pudiera calmarse un poco.

Justo cuando Niall estaba a punto de marcar el número de su alfa, una llamada de un número desconocido llegó.

—Bueno.

—¿Señor Horan?

—Así es.

—Señor, me temo que tengo malas noticias…

Niall se pasmó cuando escuchó lo que decían por teléfono, su respiración se agitó y empezó a llorar de la nada muy alterada.

—¡Alfa! No mi Gemma. —Su mano sobre el pecho.

Louis salió aprisa de la habitación porque escuchó un fuerte sonido. 

—¿Niall que sucede? —preguntó al ver al omega sentado en el suelo llorando.

—Es Gemma Lou, llamaron que hubo un accidente y que ella está muy mal, debo ir al hospital lo más pronto posible.

—¿Qué? Bien espera iré por Emy y te acompañaremos, debemos llamar a Harry ¿Quién te llamó? —preguntó en tanto caminaba a toda prisa a su habitación.

—Del hospital, yo salgo a preparar el auto, te espero afuera. —Se puso de pie intentando calmar su corazón.

Niall intentaba desesperado sentir a su alfa, salió muy agitado abriendo la puerta para ir por su auto, de la desesperación olvidó su celular tirado.

Justo cuando salía en la pantalla estaba la llamada en tratante de su alfa.

Limpió sus lágrimas viendo que afuera no estaba ningún auto vigía, caminó desesperado para ir al garaje.

A punto de llegar a la puerta estaba, pero percibió unos pasos detrás de él y en un parpadeo alguien lo tomó del hombro hablándole al oído.

—Omega imagino que quieres ver a tu alfa, así que no deseas que te llene de plomo, camina y no hagas ninguna estupidez.

Las piernas de Niall flaquearon llevando sus manos sobre su vientre para protegerlo.

—Ahora camina. —demandó empujándolo.

—¿Adónde me llevan? Mi alfa está mal, debo ir con…

—Cállate y no te preocupes, pronto lo verás.

Lo empujó para que subiera a una camioneta y de inmediato sintió náuseas por el olor fuerte de los alfas que había dentro.

—A Esteban le gustará mucho saber que tenemos a su omega.

—¡Espera! —Niall pidió mientras uno de ellos se acercaba para amarrarle las manos.

—No conozco a ningún Esteban. —Niall negó enfurecido.

—¿Qué dices? Ese es tu verdadero alfa. —El que estaba de chofer volteó para verlo.

—¿Eres sordo? Que no conozco a ningún Esteban idiota, mi alfa se llama Gemma y es una mujer muy bella. —siseó furioso.

—Maldición, ¿este no es el omega? ¿Dónde está Louis? —preguntó otro.

—¿Te refieres al OMEGA de Harry, tonto alfa? Pues déjame decirte que está con él en su casa, pedazo de estúpido inservible, ahora díganme ¿dónde jodidos está mi mujer?

—No lo sé, de seguro en su trabajo y cuida ese tono.

El omega sabía perfectamente que estaba jugando con fuego, pero inmediatamente todo hizo conexión en su cabeza y no permitiría que estos tomaran a Louis.

Otro de los mastodontes se acercó a Niall viéndolo de cerca para después soltar una risa burlona. —No se preocupen muchachos, este —dijo señalando al omega—, tiene relación con el otro, podemos pedir unos quinientos mil.

—¿Qué dices? —el rubio se indignó—.  Cómo que quinientos mil? Yo valgo un millón de pedazo de mierda mal parida, si llamaras a mi alfa ella te daría millones por mí.

—No me digas. —respondió el conductor arrancando el auto.

—Pues si te digo estúpido, ahora quítame esto si no se verán de infierno cuando te encuentres con ella, es una fiera y no hablemos cuando está en su forma lobuna.  —habló furioso.

Uno de ellos sacó un celular marcando para hacer una llamada

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—Algo salió mal, tenemos al que debería estar desmayado.

—Mierda, ¿qué no pueden hacer algo bien?

—Lo siento, pero creo que con este puedes extorsionarlos.

Chasqueó la lengua. —Tengo un mejor plan, estamos cerca. Tráelo de inmediato.

—Bien, le recuerdo la paga, señor.

—La alfa la quiero igual, asegúrense de tenerla.

—Supongo que ya sé cómo. —colgó sonriendo por el retrovisor viendo a Niall.

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—Estúpidos idiotas me hicieron tener el susto de mi vida haciéndome pensar que algo le había pasado. —La desesperación empezaba a afectarlo. Niall se hiperventila.

—Cuida como hablas omega.

—Tú cuida tu maldita cara. —gritó—. ¿Y sabes una cosa alfa, estúpido? Nadie me dice que hacer o que no hacer, pareces una de esas plagas que una vez intentaron molestar a mis plantas, pero mi gran y fuerte alfa las rescató acabando con esas mal paridas.

El auto continuaba su rumbo y Niall no dejaba de hablar, unos se quedan callados, otros mueren de miedo y Niall era un parlanchín intentando distraerse confiando en que su alfa iría por él.

—Y entonces yo le dije que no debía hacerlo, pero es tan necia que llegó tratando de bajar al insecto, sin embargo, no sabíamos que volaría y entonces ambos salimos corriendo cuando la pequeña sabandija nos siguió por el jardín, cuando íbamos corriendo vimos un montículo de tierra de esos que tienen estas furiosas hormigas que te muerden duro…

—¿Muerden?, ¿qué no pican? —preguntó uno de los alfas que estaba junto a él, al parecer le pareció interesante la plática.

—Claro que no, ¿les has visto pico?

—No.

—Ahí tienes la respuesta muchachote, no pueden picar, aunque en ocasiones les dejamos algunas migajas con Gemma para que tengan que comer, ¿te imaginas todo lo que deben caminar para ir a llevar un poco de comida? Creo que a ustedes les vendría a tomar ese ejemplo, pero bueno, ese es otro asunto, así como cuando yo era pequeño un día salí de casa…

—YA BASTA, YA ME TIENES HASTA LAS BOLAS CÁLLATE O TE VOLARÉ EL PUTO CEREBRO Y NO ME IMPORTARÁ QUEDARME SIN RECOMPENSA. —vociferó el conductor.

—No me grites —respondió con los ojos rojos—. Estúpido, no vez que estoy embarazado hijo de puta.

—¿Y?

—¿Cómo qué? “¿Y?”, no ves que estoy sensible, animal, y quiero arrancarles el cabello, me han provocado a decir muchas palabras que no son lindas, y ahora mi cachorro las escuchó todo por ustedes infelices hijos de…

—Calma omega. —Uno de ellos se acercó aflojando sus manos.

—Ves, aprende de este otro idiota que es un idiota pero un idiota amable, no un idiota tan idiota como tu imbécil, ahora déjenme.

El auto frenó de repente, el alfa se bajó furioso y abrió la puerta sacando una jeringa para clavarla a un costado de Niall.

—¿Qué haces? No a mi bebé, le harás daño, idiota. —rogó en súplicas que parecían más una orden.

—Ya esto servirá para que duermas maldito, ya me tienes hasta el culo.

Cerró de nuevo y los ojos de Niall se apagaron antes de llegar a su destino.

—Llama a la alfa y dile que tenemos a su omega.

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Hola, ¿cómo están?

¿Qué tal la vida? Aquí con otro cap más.