Una vez llegaron al cine, Mika se encargó de abrirle la puerta a Yuu y de darle la mano para caminar uno junto al otro hasta la taquilla; habían personas mirándolos a cada rato, pero ellos estaban demasiado enfrascados en su burbuja de amor como para prestarles atención.

La chica de la recepción no reparó mucho en ellos, por lo que su ingreso a una de las salas fue tranquilo; ya dentro, y habiendo comprado palomitas de maíz para los dos, se acomodaron en sus lugares a esperar que la función empezase.

—¿A dónde quieres ir luego, Yuu-chan? —preguntó en voz baja el rubio mientras pasaba un brazo sobre los hombros de su novio.

—No sé, ¿a dónde quieres llevarme? —mencionó avergonzado el moreno.

—Creo que si te digo la verdad, me golpearás, así que diré que quiero llevarte a caminar un rato y escuchar más sobre ti —rió.

Yuu tardó unos segundos en entender lo que el ojizafiro había querido decir, pero en cuanto comprendió, le dio un golpe en la cabeza al mismo tiempo que un sonrojo crecía sobre su rostro; el rubio se rió adolorido.

—Eres un idiota —se quejó pudoroso el más bajo.

—Así me quieres —canturreó.

—Empiezo a arrepentirme.

Mika se rió y se abalanzó sobre el moreno, estrechándolo en sus brazos y plantándole un beso que este no pudo rechazar; quizá hubiesen continuado, pero las luces de la sala se apagaron, lo que les indicaba que la película estaba por empezar, así que se separaron.

El azabache se quedó todo agitado y sonrojado sin saber qué hacer o dónde meterse por la vergüenza; era la primera vez que hacía esas cosas en público con una pareja que de verdad quería y se sentía extraño que así fuese.

Lentamente, dejó caer su cabeza en el hombro del más alto, lo que este respondió poniendo su propia cabeza sobre la ajena con cuidado y estrechando su cintura para acercarlo a él; fueron las mejores dos horas del mundo.

[05:22 PM] Shiho👻: Hola, Yoichi, estaba pensando si querías ir a ver una película conmigo, es la última de mi saga favorita y está bien si no quieres ir, solo dime

Nervioso, el pelirrosa envió el mensaje, y se puso más nervioso al esperar respuesta; esperaba que su economía le alcanzara para invitar a su reciente novio a ver una película y este quisiese ir.

Era algo tonto, pero se sentiría sumamente mal si era él quien lo invitaba a su primera cita, por lo que decidió dar el primer paso él antes de que el castaño tuviera la misma idea; en medio de su pánico y mientras se comía las uñas, la respuesta llegó.

[05:25 PM] Pequeño❤: Claro que me gustaría muchísimo verla contigo, Shiho-kun (｡･ω･｡)

[05:25 PM] Pequeño❤: Quieres que nos veamos allá?

[05:26 PM] Shiho👻: Puedo ir a recogerte, si quieres...

[05:26 PM] Pequeño❤: Entonces te espero, no tardes (^(I)^)

Kimizuki soltó un grito de victoria al aire, y luego cayó en cuenta de que esto era mucho más; ya no era solo llevar al ebrio Yoichi a su casa en la madrugada y que lo recibiera una sirvienta, sino que ahora cabía la posibilidad de ver a sus padres.

Sintió repentinas ganas de vomitar, pero tuvo que controlarse para poder irse a cambiar de ropa; en el camino se preocuparía por el resto del asunto.

En la casa Eusford, exactamente en la sala, Rene y Lacus estaban recostados en el sillón viendo un documental sobre el deshielo en el Antártico; el pelipúrpura hacía caras de preocupación cada tanto y el ojeroso lo miraba atento, disfrutando de ellas.

—Lo siento —soltó de la nada el azabache; el más bajo lo miró atento y a la vez asustado.

Temió lo peor: que le terminara; que todos esos días que habían estado juntos simplemente hubiesen sido para que se sacara a Yoichi de la mente y todas esas cosas de que "un clavo saca otro clavo".

—¿P-Por qué? —se atrevió a preguntar preso de pánico, pero simulando curiosidad.

—No sé qué estaba pensando cuando rechacé el compromiso —suspiró; Lacus abrió los ojos con sorpresa—. Es que te describieron, no sé, ¿genérico? Y cuando te vi por primera vez, lucías aburrido.

—¿A qué viene todo esto? —rió el más bajo—. Normalmente no hablas mucho de estas cosas —se mofó.

—Supongo que tenía que decirlo —respondió levantando los hombros con desinterés—. Además, te invité a salir luego de terminar con Yoichi porque...

—¿Querías superarlo? —interrumpió.

—¿Qué? No —casi se rió, lo que sorprendió al ojirubí menor—. Quería pasar el rato y ver qué sucedía contigo —sinceró—. Horn me convenció de que las apariencias engañan y que debía darte una oportunidad.

—Ya sé a quien agradecerle entonces —rió él.

Rene miró a Lacus profundamente, se preguntó seriamente qué era lo que había en él que le gustaba tanto, y se lamentó un poco por haberlo rechazado tanto antes, sin saber que la verdadera conexión estaba con él y no con alguien más; no pudo resistirse a besarlo, llevando lentamente las cosas a otro nivel.

—¡Esta casa no es un motel! —se oyó un grito enojado.

Asustados, los dos se separaron, viendo a Crowley parado en la entrada de la sala con los brazos cruzados y Ferid colgado de sus hombros; Rene se puso nervioso, lo cual era raro en él, mas trató de disimularlo y acercarse a su suegro.

—Eh, Eusford-san, siento que haya visto eso, yo no... —trató de disculparse.

—Vete de mi casa —ordenó el pelirrojo hecho una furia.

El ojeroso le dio una mirada al pelipúrpura y suspiró yéndose; luego, Crowley miró a su hijo frunciendo el ceño.

—No lo apruebo —sentenció.

—Un amor prohibido será —rió echándose a correr a su habitación.

Tuvimos un poco de cada shipp :'3, personalmente, amé el ReCus <3

Espero les haya gustado el cap

Bye!