—Jungkookie, vamos, solo estaremos jugando en la tarde. La noche será de nosotros —contestó el mayor ante su queja mañanera de ese día.

—¡Pero Taehyung!, ¡no nos hemos visto en todos estos días! Yo solo quería...—cerró la puerta de su casillero, observando como varias personas cerca los observaban. Por el bien de paciencia, tal vez solo debía resignarse a perder—. Olvidado. Suerte con tus amigos.

Dando media vuelta se dispuso a irse. Estaba cansado de las vanas excusas que Taehyung le daba y de los bajos comentarios y chismes de la universidad; no iba a seguir los juegos de ninguno. Sin embargo, los brazos morenos de su novio lo envolvieron antes de poder dar siquiera dos pasos.

—Fresita, no te enojes —besándole la mejilla, la acaricio con su nariz—. ¿Qué te parece si... vienes con nosotros? Cuando se vayan haremos lo que quieras.

Era un manipulador, los mimos y tratos dulces eran su mayor debilidad y los estaba usando en su contra; lo hacía desde que tuvieron su primera discusión sentimental cuando solo tenían catorce años y lo seguía haciendo ahora.

—¿Lo prometes? —Quería creerle a pesar de que tan solo dos días atrás le había cancelado por algo "importante" que debía hacer con sus amigos.

Taehyung no parecía del todo seguro, sin embargo, sello la promesa con una sonrisa y un corto beso.

—Lo prometo bebé —volteándolo a su dirección, regó varios besos en su rostro y se despidió para ir directo a sus clases.

Solo pudo rezar por suerte.

Aún se encontraba molesto con su pareja, casi tres meses se cumplían sin tener a su chico por un tiempo prudente, siempre estaba rodeado de los Park o de Choi; permanecían detrás de él, hablando de un dichoso juego, el cual poco le interesaba, pues ese mismo se había encargado de secuestrar a su novio varias tardes.

Y, para su desgracia, los murmullos navegando por los pasillos de la universidad solo le recalcaban ese hecho, pues por esta razón crearon una popularidad inusual; era algo de trasmisiones y vistas que Jungkook no lograba comprender y que Taehyung no había podido explicarle bien.

Solo sabia que su novio estaba teniendo demasiada atención y lo estaba dejando de lado por todo eso; se desvivía por el puntito rojo de la cámara grabando, las ganancias que conseguía, las chicas que le coqueteaban y los chicos que lo admiraban. Parecían estar en mundos diferentes en donde poco cabía su persona, generándole tantas inseguridades, enojos, incomodidad por ver tantos ojos puestos en su novio y los de él en ellos.

Tal vez era mejor no ir y permitirle a Taehyung su espacio, estar más de doce años juntos, de los cuales seis eran en una relación, podía llevar a querer un poco de distancia. Pero Jungkook no sentía que lo necesitaran y lo extrañaba. Tal vez podría buscar como encajar en ese mundo sin agobiarlo y, si tenía suerte, este le dedicaría más tiempo haciendo que sus amigos pasarán a segundo plano, sobre todo el mayor de los Park: Seojoon.

Ese chico parecía que perdería los ojos de tanto observar a su novio o que sus manos se caerían si no le tocaba aunque sea un pelo, que se asfixiaría si no respiraba el aire que Taehyung antes había consumido y perdería la razón si este no le dirigía al menos un monosílabo. Y, ¡carajo!, ese era su papel, ¡suyo!, de nadie más.

Seojoon no le quitaría a su chico.

Entre pensamientos, horas y clases a las que poca atención prestó, la tarde llegó y con ello la tal reunión. Antes de llegar compro las frutas favoritas de Taehyung, sabía que amaría el detalle ya que se encontraba cuidando su alimentación. Un poco de nutritivos snacks le vendrían bien.

Tenía el humor un poco más elevado, ¡Por fin estaría con su hyung! Solo deseaba tener a Taehyung a su lado mientras se divertían, podría darle la oportunidad a sus amigos y entre todos se divertirían por lo menos ese día.

Tocó la puerta varias veces, con una sonrisa amplia gracias a la idea de querer a su Taetae cerquita suyo, misma la cual se iba borrando con cada segundo que pasaba y seguía en el umbral de la puerta sin que nadie apareciese. Se convenció de que de pronto estaba en el baño o arreglando algún desastre en la cocina, armándose de paciencia y eliminando cualquier pensamiento negativo.

Uno, seis minutos, tal vez diez, solo sabía que sus pies dolían tanto como su pecho cuando por fin se escuchó el seguro de la puerta ser abierto.

—Kookie, amor, ¡perdóname!... Emm Seojoon... sí, Seojoonie casi no me libera de la partida —El beso que le dio como saludo se sintió tan vacilante como su respuesta. Eso solo avivó la frustración que quiso mantener oculta.

Solo fue dejado afuera de gratis, sin motivos y con una disculpa estúpida.

—Traje esto —Empujar el paquete hasta golpear su pecho no fue más que un pequeño reflejo de su ira—. Comételo o bótalo, haz lo que quieras.

Juraría que en ese momento quiso dar media vuelta y volver a su hogar, presintiendo que nada saldría bien. Sin embargo, hacerlo sería como una demostración de derrota.

Y él no perdería por default.

—Fresita, no te enojes, creí que te tardarías más en llegar... Pensé, pensé que era Woosik —La mano de su moreno quiso enredarse en la suya, cosa que le había impedido al alejarse para ir directo al cuarto de este.

—¿Está Jimin? Iré a saludarlo —era el único de las amistades de su pareja que soportaba, siendo un chico dulce y alegre, le era fácil contagiarse de su energía, una que en ese momento necesitaba.

Taehyung no le dijo nada más y le permitió subir las escaleras, tal vez porque sabía que fue un idiota o porque no quería amargar su tarde con sus amiguitos; pero, sea lo que sea, en el fondo habría esperado que lo hubiera detenido en ese momento, que le dijera algo más para consolarlo, esperaba que lo reclamara cómo suyo en ese instante con un beso, un abrazo, un cariñito, cualquier cosa...

Alguna pequeña demostración de amor, solo eso.

Bueno, inició la resubida de este fic. lksjkjskd  Dios, aun no soporto la idea de que tengo que hacer esto solo porque wattpad así lo quiso. Pero bueno, aprovecho a re escribir para que no me odien a mi Tae... Y la historia cumpla su objetivo de ser soft JAJAJAJAJ 

Es pero les guste, es la segunda vez que reescribo, valórenlo jajajaja ahre, los amo mucho 😭💖