Un par de jóvenes se encontraban hablando con una mujer dentro de su oficina.

¿Entonces no podremos verla?, dijo una rubia con nostalgia.

Como les dije los niños del albergue no reciben visitas pero en este caso hare una excepción sobre todo porque creo que ella necesita alguien joven con quien platicar y que la aconsejen que le hagan entender porque motivo esta aquí. Sé que es difícil para ella estar separada de la única persona que tenía junto a ella, pero no solo será por un tiempo si el amor que sienten ambos es fuerte el tiempo para ambos pasara pronto........, decía la mujer.

Si eso es cierto señora, nosotras hablaremos con Milk, no se preocupe, dijo la peli azul.

Bueno entonces acompáñenme a su habitación, ella por ahora aún sigue en reposo, como les estuve comentando enfermo pero de tristeza........, decía la mujer mientras la peli azul y la rubia la escuchaban.

Albergue Naranja:

¿Qué?, decía alarmado Vegueta.

Lo que escucha joven, Gokú casi se muere debido a una descarga eléctrica, tal parece que él quería escapar de aquí, decía un hombre al tiempo que la jefa del albergue se acercó a ellos.

Ahora si jóvenes pasen, disculpen la espera, decía la mujer.

No, no se preocupe señora, dijeron Vegueta y Krilín a la vez.

Luego de algunos minutos la jefa del albergue y el par de jóvenes estaban dentro de una oficina.

Díganme jóvenes, ¿cuál es el motivo que los trae nuevamente por aquí?, dijo la jefa del albergue.

Quisiéramos platicar con el joven que ingreso hace algunos días al albergue, dijo Vegueta.

¿Con Gokú?, dijo la mujer.

Si, mire señora mis compañeros y yo les tomaba un gran cariño a ese par de jóvenes tras saber su caso y pues hemos decidido estar pendientes de ellos hasta que puedan encontrar una familia que los acoja, dijo Vegueta.

Pues me parece un gesto muy noble de parte de todos ustedes pero ahora Gokú está convaleciente, decía la mujer.

¿Convaleciente de qué?, dijo Krilín para obtener mayor información.

El ayer tuvo un accidente, intento escapar de aquí............, decía la mujer mientras los jóvenes la escuchaban con nostalgia.

Albergue Dragón:

Dentro de una pequeña habitación una ojerosa jovencita pelinegra se encontraba semi sentada sobre una pequeña cama con la mirada llena de nostalgia cuando de repente la puerta de la habitación sonó.

Toc toc toc

Pase, dijo Milk con nostalgia en su voz.

Milk, las agentes Brief y Android están aquí y quieren hablar contigo, dijo la jefa del albergue abriendo la puerta para que la peli azul y la rubia entraran.

¡Gracias¡ dijeron las jóvenes.

Bueno, las dejo para que platiquen, respondió la jefa del albergue antes de salir de la habitación.

Señoritas, dijo Milk sorprendida.

Hola pequeña, dijeron la rubia y peli azul mientras se acercaban al lugar donde estaba la pelinegra.

¿Están aquí para ayudarme a salir de aquí?, pregunto Milk con ilusión.

Ten calma pequeña tu saldrás de aquí pero ello toma tiempo, que te parece si mejor platicamos un poco antes de que digamos una gran noticia que traemos para ti, dijo la peli azul.

Bulma, ¿se lo dirás?, decía en voz baja preocupada la rubia.

Si, respondió en voz baja la peli azul.

Pero ello aun no es seguro, ¿qué tal si no lo aprueban?, además Vegueta nos dijo que mientras sus padres no tengan el documento de aceptación en la mano no deberíamos decir nada, decía la rubia en voz baja.

Si se lo que dijo mi Vegui pero también sé que ella necesita aferrarse a alguna esperanza para seguir viviendo, la pobrecita enfermo de tristeza además yo confió en que el pedido de los padres de mi Vegui proceda así como el de mis padres, respondió la peli azul en voz baja.

Sí, yo también confió en ello, dijo la rubia mientras la pelinegra las miraba confundida.

Disculpa pequeña aquí mi amigui que me entretiene con sus cosas pero mejor cuéntanos, la jefa del albergue nos dijo que te pusiste mal anoche, decía la Bulma mientras miraba a una entristecida pelinegra.

Albergue Naranja:

Y es ello lo que estuve pensando hacer para aminorar el dolor de la separación de ambos, al menos hasta que ellos dos puedan estar juntos nuevamente pensé en ello, decía la mujer.

Pues el contacto telefónico me parece una gran idea señora además habla de su gran sensibilidad como ser humano, dijo Vegueta.

¡Gracias¡ dijo la mujer.

¿Y ya hay algún pedido de adopción?, dijo el calvo por curiosidad.

Si, ya hay uno en archivo pero este aún no puede proceder hasta que se cumplan los tres meses. Bueno chicos acompáñenme a la habitación de Gokú luego que los deje con el me pondré en contacto con la jefa del "Albergue Dragón", dijo la mujer mientras se ponía de pie para salir de su oficina junto al calvo y al joven cabello de flama.

Albergue Dragón:

Adoptarme, decía emocionada la pelinegra.

Si, la familia de mi Vegui te adoptaran y la mía adoptara a tu bello novio, decía Bulma sonriendo.

¿Cuándo será eso?, ¿cuándo volveremos a estar juntos?, decía Milk feliz.

Pequeña toma con calma esto, los padres de Bulma ya presentaron la solicitud de adopción al igual que los padres de Vegueta pero esta no procede hasta dentro de tres meses ya que ese es el tiempo que se estima para que ustedes entren en proceso de adopción, decía la rubia.

¿Tres meses?, dijo Milk con nostalgia.

Si Milk, pero el tiempo pasa rápido además tienes que considerar que cuando mis padres y los de mi novio los adopten ustedes no podrán irse aun a Paoz, decía la peli azul.

¿Por qué?, dijo Milk con nostalgia.

Porque las normas así lo dicen ustedes tienen que vivir con su familia adoptiva en caso los huérfanos se enamoren siendo menores de edad ellos saldrán de la familia casados pero en su caso como fueron adoptados a los 16 años pues al menos tienen que permanecer un año como mínimo con sus familias adoptivas, decía la rubia con calma.

Entonces no nos veremos por mucho tiempo, respondió Milk con voz quebrada.

No, niña, no, Dieciocho a lo que se refiere es a que no podrán volver a Paoz al menos por ese tiempo, bueno podrán ir de visita pero no a vivir allá, además ustedes dos podrán verse todos los días Vegui y yo vivimos muy cerca, dijo la peli azul sonriendo.

Si Milk, lo importante aquí es que no estarás aquí mucho tiempo solo tres meses luego de ello podrás ver nuevamente a tu amado, dijo Dieciocho mientras los ojitos de la pelinegra se llenaban de alegría.

Albergue Naranja:

Un joven de cabello alborotado platicaba con un par de jóvenes que estaban frente a él.

Y es por ello que lo hice, se lo prometí a ella, a mi angelito bello además la extraño, la extraño mucho, decía Gokú con nostalgia.

Comprendemos lo que sientes pero no fue correcto lo que hiciste pusiste en riesgo tu vida, dijo el calvo.

Si ello es cierto, debes pensar primero bien las cosas antes de hacerlas jovencito, ¿haber que hubiera pasado si no te hubieran encontrado a tiempo?, ¿si quiera lo has pensado?, dijo Vegueta tratando de mantener la calma mientras el joven de cabello alborotado agachaba la cabeza.

Ya Vegueta, creo que ya entendió, dijo el calvo.

Eso espero, porque yo no voy a querer a un chico que no piense las cosas antes de hacerlas para cuñado, respondió Vegueta haciendo que el joven de cabello alborotado lo mirara confundido.

Hay Vegueta, ya lo confundiste al pobre, dijo Krilín riendo.

¿A qué te refieres con eso?, pregunto confundido Gokú.

Te daré una noticia pero tómalo con calma pues aún no sabemos el resultado en si aunque es un hecho que procederá ya nos lo confirmo la jefa de aquí, decía Vegueta.

¿Qué noticia?, pregunto Gokú confundido.

Probablemente en tres meses dejes este lugar, la familia de mi novia la agente Brief te adoptara y mi familia adoptaran a tu chica para que sea mi hermanita, así ambos saldrán de los albergues y podrán ser nuevamente felices........, decía Vegueta siendo interrumpido por el joven de cabello alborotado que se pudo de pie sin importarle que estaba convaleciente para ir a abrazar al par de jóvenes.

¡Gracias¡ ¡gracias¡ ¡gracias por ayudarnos¡¡gracias por esta gran noticia¡ decía Gokú.

No hay nada que agradecer, decían el par de jóvenes.

Estaré contando los días para ver a mi niña y volver juntos a Paoz, decía Gokú emocionado.

Bueno no podrán volver tan pronto a Paoz al menos no para quedarse pero lo importante es que podrán verse todos los días, respondió Vegueta.

¿Qué?, ¿no comprendo?, dijo Gokú.

Ahora te explico............, decía Vegueta mientras el joven de cabello alborotado lo escuchaba con atención.

Mientras tanto:

Las jefas de los albergues se encontraban platicando por vía telefónica.

Y es por ello que me estoy comunicando contigo, decía la jefa del "Albergue Naranja".

Yo también estuve pensando en ello, la niña enfermo de tristeza, ayer nos dio un gran susto a todos,........., decía la jefa del "Albergue Dragón".

Pobrecillos, ellos solo se tuvieron a ellos por eso ambos se extrañan tanto, claro además están enamorados, eso es algo que no podemos negar aunque son muy jovencitos ambos se aman,......., decía la jefa del "Albergue Naranja".

Luego de varios minutos de plática el par de mujeres llegaron a un acuerdo permitir que ambos pelinegros platicaran por teléfono una vez a la semana.

Habitación de Gokú:

Bueno ya nos tenemos que ir, tal vez otro día vengamos a verte nuevamente futuro cuñado, dijo Vegueta estirando su mano.

Tienes que tomarla, dijo Krilín al ver la cara de confusión del joven de cabello alborotado.

¡Ah¡ si, si, ¡gracias¡ ¡gracias por lo que están haciendo por mi niña y por mi¡ dijo Gokú con una amplia sonrisa.

No es nada, solo no vuelvas a cometer una tontería más, respondió Vegueta.

No, ya no, dijo Gokú mientras Krilín sonreía.

Albergue Dragón:

Fue un gusto platicar contigo niña, cuídate mucho y ya no estés triste que pronto estarás con tu amorcito, dijo la rubia sonriendo mientras la pelinegra se ruborizaba.

Ya Dieciocho no la avergüences, dijo Bulma sonriendo.

Una vez que el par de chicas salieron de la habitación de la pelinegra esta tomo en una de sus manos el pequeño dije de madera que colgaba de una cadena de hilos que el joven de cabello alborotado le había dado.

Tengo que soportar estos meses sin ti, tengo que soportarlo pues pronto todo esto acabara y podremos nuevamente estar juntos, pensaba la pelinegra.

Días después: "Albergue Naranja"

Un joven de cabello alborotado se encontraba ayudando a un hombre de bigote a colocar unos sacos en un almacén cuando una mujer de lentes entro al lugar.

Gokú, hijo, la jefa te llama, dijo la mujer.

Si, si, ya regreso para seguir ayudándole, dijo Gokú mirando al hombre de bigote que solo asintió.

El joven de cabello alborotado camino presuroso hacia la oficina de la jefa del albergue al estar fuera del lugar toco la puerta.

Pasa, escucho el joven de cabello alborotado al tiempo que giro la perilla de la puerta.

Ven hijo, acércate, vamos a llamar a tu amiguita, dijo la mujer.

¿En serio?, respondió Gokú con una amplia sonrisa.

Si, ven toma asiento, tendrás 10 minutos para hablar con ella, dijo la mujer.

¡Gracias¡ ¡gracias¡ decía Gokú mientras la mujer marcaba un número en el teléfono.

Albergue Dragón:

Me mandó llamar, decía una hermosa jovencita pelinegra mientras entraba a la oficina de la jefa del albergue.

Si hija pasa, toma asiento, dijo la mujer al tiempo que el teléfono empezó a sonar.

Disculpa, dijo la mujer tomando la llamada.

¡Alo¡ si, si, ahora te la paso, dijo la mujer entregándole el fono a la pelinegra.

¿Qué?, dijo Milk confundida.

Alguien quiere hablar contigo, dijo la mujer.

¿Conmigo?, respondió Milk intrigada.

Si linda, toma, respóndele, el pobre debe estar impaciente, dijo la mujer sonriendo.

¡Gokú¡ dijo Milk tomando el fono y colocándolo en su rostro tal como vio que lo hizo la mujer mientras esta sonreía.

Voy a ir acomodando mis cosas por aquí, dijo la mujer sonriendo mientras escuchaba a la pelinegra decir: ¡Gokú¡

Si mi niña, soy yo, escucho la pelinegra.

¿Cómo estás?, dijo Milk con voz entrecortada.

Extrañándote mi niña pero ahora que escucho tu voz estoy muy feliz, muy feliz, decía Gokú a través de la línea telefónica.

Yo también estoy muy feliz, respondió Milk mientras de sus ojos salían lágrimas de alegría.

No llores ¡por favor¡ escucho la pelinegra.

No estoy llorando, dijo Milk con voz quebrada.

No lo niegues angelito bello sé que estas llorando y no quiero que llores, no quiero que lo hagas, porque ello me duele mucho, mucho porque ¡te amo Milk¡ y si tu sufres yo también sufro, respondió Gokú.

Yo también ¡te amo¡ dijo Milk mientras la jefa del albergue sonrió al escuchar a la jovencita decir ello.