Capítulo 10: La cena
Capítulo 10: Cena.
28 de abril de 2017
Matt.
Alexa Wood es un sube y baja de emociones en mi vida en estos momentos, reencontrarme con ella no estaba en mis planes, aunque nunca pude sacarla de mi memoria a veces deseaba hacer una lobotomía para olvidarme del color de sus ojos, su voz, sus escazas sonrisas, sus miradas odiosas o lo terca que puede llegar a ser. Alexa no es la chica perfecta, ordinaria, millonaria, caprichosa, ingenua y buena, dudo que Alexa alguna vez en su vida haya sido buena persona, es una chica dura, controladora, demasiado sincera, odiosa y rencorosa, no nos olvidemos mencionar que es una mentirosa, nunca sabes que piensa o quiere, sus ojos casi nunca muestran una emoción y tampoco sabe gestionar sus sentimientos de manera sana.
Por eso mientras subo las escaleras al set de grabación me debato entre si Alexa, me odia, me tolera o pasa por un proceso de aceptación de que he vuelto a su vida y esta vez para quedarme. Nuestras conversaciones han sido escasas a veces hablamos por celular, que es una tortura para mí, ya que Alexa siempre finge demencia cuando intento coquetearle, rápidamente cambia el tema a su prometido, preparativo de la boda o me pide sugerencia sobre el lugar donde debe llevarse acabo la boda, ignoro sus comentarios, porque escucharla hablar de ese hombre, me quema por dentro y no mentiré me provoca inquietud, ¿y si es verdad que ella esta enamorada de su prometido?
Es bastante estúpido de mi parte pensar que luego de siete años sin hablar o tener contacto físico, ella iba a esperarme, pensar que otro hombre la hace reír, sonreír o simplemente tienen sexo me causa malestar. Y a pesar de la inseguridad, voy a jugar mi última carta con tal de quedarme en su vida. Por eso decido mandarle un mensaje luego de tres días sin hablar con ella.
Matt: Cuando vuelvas, hare una fiesta de bienvenida para ti en mi casa, una cena de amigos.
Amigos, lo último que quiero es ser tu amigo.
Alexa Wood: ¡Dios!, primero debería poner como prioridad cenar con Liam.
Matt: Vamos a ir a cenar juntos ¿o prefieres que vaya con ustedes?
Alexa Wood: No... Está bien, voy a cenar a tu casa.
Alzo la mirada, cuando llego al set de grabación donde estamos grabando la segunda temporada de lazos de sangre, un serie policial en la que trabajo hace seis meses y va por su segunda temporada, que fue renovada hace poco, por la buena acogida del público. Miro al frente todo se encuentra en caos, desastre y locura, como cada mañana, como es natural en mí me tropiezo con unos cables.
-Lo siento - me disculpo y me concentro en mi celular de nuevo, el hombre finge una tos - ríete con confianza.
Trato de ser cuidado mientras camino hacia mi camerino, necesito llegar a la seguridad de mi espacio, no me siento preparado el día de hoy para responder preguntas raras desde que murió Corina recibo muchas de esas, a la única que consigo en mi camino es a mi coestrella Shania que me da una media sonrisa y me saluda con un beso en la mejilla.
-Hola, ¿Cómo estás? - me saluda - ¿y Alaia? - me pregunta por ella, Shania le encanta preguntar por Alaia o que la traiga al set.
-Hola, estoy bien - respondo con tranquilidad y ella parece no creerme y antes de que me pregunte por Corina decido hablar de Alaia - ella esta muy bien, les manda muchos saludos, ¿y tú cómo vas? Te quedamos esperando ayer.
Ayer era el cumpleaños de Alan, al no poder viajar a Londres con su familia decidimos con Laslo organizarle una fiesta de cumpleaños, donde Alan lloro mucho cuando logramos convencer a su mamá de viajar a pesar de su miedo a los aviones, Alan estaba muy agradecido y sorprendido al ver a su madre.
-Oh, ese compromiso - se ríe nerviosa - se me olvido por completo.
Y no creo que se le haya olvidado, Shania es muy rara y reservada, nunca se reúne con nosotros, tampoco le interesa tomar cervezas con nosotros o salir. A veces cuando Alaia esta en la ciudad la llevo a su casa para que la anime y es allí cuando la vemos sonreír.
-Hiciste falta, Fallon - digo refiriéndome a la madre de Alan - preguntaba por ti a cada rato, estaba muy extrañada que no fueras.
Alan y Shania son ingleses y al parecer la madre de Alan le dio clases a Shania.
-Quedare a almorzar con ella hoy - me dice y asiento con la cabeza.
Voy a decirle algo, pero el sonido de su celular me desconcentra, no quiero ser entrometido, pero mientras ella lee de quien se trata, el brillo de alegría de sus ojos desaparece.
-Tengo que ir a cambiarme, nos vemos en un rato, Matt - con eso se despide, y puedo jurar que es la conversación más larga que hemos tenido que no sea de trabajo. Me encojo de hombros y sigo mi camino dejando a mi coestrella hablar por celular en el pasillo.
Abro la puerta de mi camerino que es el más grande, el lugar tiene un ramo de flores que me enviaron ayer, dibujos de Alaia, un oso de peluche de mi hija que tiene grabado un mensaje de ella gritándome que me ama y no la olvide, hay un enorme espejo, una silla con mi nombre, un sofá y una mini nevera. Tomo asiento en el sofá de color negro y saco una botella de agua de la nevera. Es la primera vez que tengo un poco de paz y privacidad, esta paz terminara cuando a parezca uno de mis imprudentes compañeros de trabajo y amigos.
Los quiero, pero a veces son demasiado entrometidos o preguntones para mi gusto, la puerta de mi camerino es abierta con violencia y Candy corre abrazarme, luego de abrazarme se roba una de mis manzanas, detrás de ella viene Laslo que cierra la puerta con seguro y se sienta en la silla, ambos me ven extrañados cuando sonrió al ver mi celular un mensaje de Alexa enviándome emoji, jamás pensé que Alexa Wood usara emoji.
-¿Por qué sonríes como idiota? - me pregunta Candy, pocas veces la llamamos por su nombre real desde que Blake decidió llamarla Candy, todos nos acostumbramos a llamarla así.
-Porque hoy es buen día para sonreír - le contesto simplemente, creo que Alaia y yo no sabemos responder preguntas.
-Entonces decidiste dejarnos en suspenso - contesta Laslo ofendido.
-Ustedes son muy chismosos - me quejo y Candy rueda los ojos.
-Nosotros no somos chismosos, somos comunicativos que es muy diferente - se queja Laslo peinando su cabello rojo hacia atrás - solo queremos saber porque andas tan sonriente, misterioso y relajado. Luego de lo que paso - murmura Laslo en voz baja.
-Al parecer las vacaciones y la compañía de tu acompañante misteriosa, te tienen muy emocionado - comenta Candy y niego con la cabeza, riéndome de ellos y Alexa responde.
Alexa: ¿debo llevar algo especial a tu casa?
Matt: Lencería cómoda o mejor no uses nada.
Alexa: pensé que íbamos a tener una conversación de amigos.
-Porque no hablamos sobre tu chica misteriosa - me pide Candy.
-¿Qué chica misteriosa? - pregunto con ingenuidad.
-A la que cubriste con tus brazo para que no observara aquella aterradora escena - responde Laslo - te veis muy enojado.
-Y luego huiste con ella - completa Candy.
-¿Y así se enojan cuando les digo que son unos chismosos? - les pregunto y ellos ruedan los ojos.
-¿Quién es ella? - preguntan los dos al mismo tiempo.
Ahora si los ignoro, porque hago mi mayor esfuerzo por no responder a sus preguntas y dejarme convencer por sus rostros de angelitos, alejo mi celular un poco cuando Candy decide acercarse, cuando este suena, ella quiere ver con quien hablo, la empujo con cuidado para que se aleje, le vuelvo a escribir a Alexa, esta vez recibo respuesta.
Matt: No quiero tener una conversación de amigos contigo, Alexa, hemos pasado mucho tiempo separados como para sentarnos a conversar como si nada.
Niña sucia: En pocas palabras quieres ser mi amante.
Matthew: No me rebajaría a tanto. Porque el único hombre que se volverá tu esposo seré yo.
Niña sucia: Dios, Matt suenas tan seguro de ti mismo, que me da hasta lastima romperte la burbuja.
Matthew: Alexa, vas a ser mía.
Niña sucia: A la próxima me orinas encima, ¿Qué has hecho?
Matthew: grabar, recoger el guion de un nuevo proyecto en el que trabajo, luego debo reunirme con mis mejores amigos que me están llamando ingrato y en la noche tú y yo vamos a cenar.
Niña sucia: Entonces vas a tomar un avión a New York por mí.
Matthew: Puedo hacer muchas cosas por ti, Niña sucia.
Niña sucia: Ya estaba realmente aterrada de que no me llamaras niña sucia, eso de Alexa, se lo dejamos a Liam. Nos vemos. Actor porno,
-¿Actor porno?, ¿niña sucia? - lee Laslo y cuando lo encaro me da una sonrisa que tal vez enloquezca a todo el gremio femenino y a uno que otro hombre, ruedo mis ojos y la chismosa dos termina de leer.
-¿Qué sucede con ustedes dos, no hay nadie a quien atormentar en este lugar? - les pregunto, escuchamos el grito de Blake y las disculpas de su asistente, que para decir verdad le tiene demasiada paciencia, debería golpearlo un día de esto.
-Ashton permanece encerrado en su camerino con su maquillista, Blake está aprendiendo sus líneas y regañando a su asistente, Shania es rara, Alan no ha llegado, River está desaparecido y tú eres el único disponible y es de mal gusto no responder las preguntas que se te hacen - exclama Candy con la mano en el pecho.
-Algunas veces ustedes me asustan, peluchitos - les digo sus apodos y ellos besan mis mejillas, a veces ellos suelen ser adorables, a veces no siempre, la mayoría de tiempo son irritantes, pero ya todos hemos aprendido a vivir con ellos - No les debo explicaciones a ninguno de los dos, pero alimentare su vena chismosa - ellos están por quejarse y decir que no son chismosos, pero los detengo de hablar con la mano -. Niña sucia es mi ex novia de la adolescencia y ella y yo estamos intentando retomar nuestra relación.
Ellos van a volver a preguntar y a enloquecerme con preguntas, pero mi salvación llega, cuando puerta se abre, mi maquillista y asistente con mi café frio, llegan a mí, antes de que pueda la última cerrar la puerta, nuestro productor entra, rueda sus ojos al encontrar a los peluchitos aquí sentados, como si nada, como si fuera un día normal, no hubiera nada que hacer en este lugar, ellos le dan una gran y hermosa sonrisa, el hombre nos tiene paciencia para decir verdad, Ashton suele hacerle bromas pesadas, Blake siempre se queja por todo, los peluchitos son irritantes y raros, Shania, suele asustarlo con su presencia silenciosa y yo suelo traer a Alaia.
-¿Qué hacen pastel italiano y postre agrio, aquí? - nos reímos a carcajadas cuando pronuncia nuestros apodos, que nos hemos ganado luego de una apuesta - gomita acida - niego con mi cabeza, ¿hay alguien normal en este lugar? - empezamos grabaciones en cinco minutos, parece que fruta podrida, ya está listo. Llevo media hora buscándolos - les dice irritados.
-Nos estabas buscando mal - le asegura Laslo mientras escribe en su celular.
-Eres muy malo jugando a las escondidas - se ríe Candy, haciendo que la maquillista se ría y me uno a su risa, ya he aprendido a convivir con esto, le doy un solo sorbo a mi café cuando Candy se lo roba.
-¡Oye! - me quejo, siento un jalón en mi cabello y vuelvo acomodarme, como siempre ella se sale con la suya.
-Quiero que la saques de este lugar - entra Blake a mi camerino, gritando y siendo la reina del drama.
-¿Es que nunca voy a tener privacidad en este lugar? - pregunto, fingiendo estar irritado.
-No - gritan los tres y Blake me da una sonrisa juguetona y muerde su pircing.
-Luego hablamos de tu chica sucia - me dice y me guiña el ojo, reviso mi celular y soy el tema de conversación de nuestro grupo de chat - pero volviendo al tema oficial, por él que estoy en este lugar, esa mujer es desesperante, casi me quema, no la soporto.
-Lo siento - entra la asistente - pero tú también eres un poco idiota, nada te gusta, te hago preguntas, te haces el idiota y nunca las respondes, es como si pusieras tu pie para sabotearme, no eres mi jefe. No soy tu sirvienta, Blake, deja de ser un niño caprichoso y arreglemos las cosas como adultos.
-¿Esto huele a tensión sexual? - pregunta Laslo, oliendo el lugar - porque eso parece, aunque lo disimules estas igual o peor que Matt.
-Casi nunca le doy la razón a Laslo, pero es verdad, ella no es fea - le digo y ella me sonríe agradecida - es una joven común, que no desea venir al trabajo como si fuera la invitada a una pasarela de modas.
-Exactamente, porque he visto tus fotos en Instagram y eres un bombón - le asegura Candy - Karla, peina su cabello hacia la izquierda.
-No, la escena de hoy me exige que este un poco más alocado, despeinado - le contesta sonriente.
-Lo que pasa es que Blake, es un poco idiota, necio y terco - le digo volviendo al tema inicial - y no sabe manejar muy bien el espacio que comparte con las mujeres - con ese comentario me quedo callado, nuestro productor rueda sus ojos y luego mira a Blake.
-Voy a buscar a Ashton, ustedes son unos raros.
-Tu nos llamas por nombres de comida.
-Porque perdí una apuesta con Blake y Ashton hace dos semanas, cuando uno de ellos me termino emborrachando, muévanse a trabajar - dice con dureza - no les pago para hacer chisme o juegos estúpidos.
Sus palabras son de advertencia, los tres se alejan y todo se vuelve caótico, hay gritos, personas corriendo de un lado al otro, nuestro productor dando órdenes el director esperando por nosotros, saco mi celular y le escribo a Alexa, el último mensaje del día.
***
Estoy realmente cansado, pero este cansancio desaparece en el preciso momento que veo a Alexa frente a la puerta de mi casa, ella me entrega una bolsa con un postre, ella no espera que la invite a pasar, ella se abre paso a mi hogar y la veo entrar a la cocina, buscar unas copas y abrir el vino, servirse una copa de vino. Me siento frente al desayunador y Alexa bebe en completo silencio. Y aunque suene loco eso fue lo que me cautivo de ella en un principio, lo misteriosa, intrigante y odiosa que es, ese rompecabezas que quieres terminar de encajar, pero te faltan piezas para terminarlo, Alexa, no era una simple niña rica, era mucho más y eso es lo que me llama la atención de ella.
-Buenas noches, niña sucia. Pensé que en esos colegios elitistas te enseñaban modales - le digo y pongo el postre sobre el desayunador - entonces ¿hoy adoptaste la personalidad de una chica muda? - la cuestiono y ella rodando los ojos, me responde.
-En tu colegio de niños ricos, no te enseñaron que es de muy mal gusto conquistar a la mujer de otro hombre - me cuestiona y cuando va a volver a servirse la detengo. Niego con la cabeza y ella bufa.
-No - le respondo simplemente.
Al ser hijo bastardo de un Coleman debía estudiar en un colegio elitista de mierda, mi madre no viene de una familia rica como Alexa, Aisha, Belén o Dean. Azul, Max y yo, éramos de familias promedios, solo que a mi madre le gustaba fingir que era millonaria, por eso al igual que Alexa sabia fingir muy bien, mentir, engañar y aparentar frente a la gente. En mi adolescencia no me considere un chico bueno, tal vez hice cosas de las que hoy no me cuestiono y arrepiento, dar resultados de exámenes, espiar, robar información, hackear el servidor de BELI S.A en más de una ocasión, pelearme, nada grave. Por eso Tony se convirtió en mi hermano favorito, era el ángel de la guarda que llamaba en momentos de apuro.
-Voy a casarme - me repite y Alexa parece disco rayado diciendo eso a cada segundo de su vida, bajo la mirada a sus manos y como era obvio ella no lleva su anillo de compromiso - ¿Qué parte de eso no comprendes? No puedes aparecer en mi vida y descontrolarla, no voy a volver a ser tu novia de nuevo, en esta realidad - dice señalándonos con el dedo - no me gustas y tampoco quiero estar contigo de nuevo - ante su queja le doy un pequeño beso en los labios.
-Por hoy olvídate de Liam y relájate - le pido - simplemente es una cena, no te estoy pidiendo matrimonio o hijos, hoy vamos a conocernos de nuevo.
-Matt no estoy para juegos - dice molesta.
-Alexa, no voy a pelear contigo hoy, para eso tenemos toda la vida, niña sucia - le pido y ella por fin parece bajar la guardia.
-Está bien, ¿Qué quieres saber? - me pregunta, rindiéndose.
-Algo básico, ¿Por qué decidiste el nombre de Alexa? - la cuestiona y ella piensa un poco, luego habla.
-La primera vez que me inscribí a una competencia usé ese nombre. Grave error, me acostumbre fácilmente a él y no fue difícil acostumbrar al mundo entero a llamarme Alexa, las personas siempre pensaban que la hija de Clary era Charlie por su parentesco, las pocas amigas de Clary a las que corregíamos, no le daban mucha atención, me encanta desligarme de mi familia de mi apellido y de toda la mierda que gira en torno a ella. Era el nombre perfecto y encajaba perfectamente conmigo, ser Alexa es ser fuerte, valiente e independiente.
-¿Nadie en tu circulo te llama Odette? - pregunto curioso.
-No, todos en la escuela, universidad y trabajos me conocen como Alexa la patinadora, si siquiera tu padre lo hace - dice orgullosa -, lo mejor de ser un mentiroso es convencer al otro de tus engaños, Matt. Así como tú jugabas a ser un chico rico, bueno y ordinario, yo jugaba a engañar a todos y dejar una marca en la vida.
-Interesante - digo asombrado.
-Matt quiero que seas sincero conmigo con esta simple respuesta, ¿Por qué piensas que los demás hombres han pasado por mi vida sin dejar marca?
-Fácil, Alexa, todos esos hombres buscan tu cuerpo y se aterran al conocer tu mente, tus miedos, tus temores y tu personalidad, ellos solo quieren sexo, mientras yo quiero todo de ti, me gusta tu mente retorcida, tu cuerpo y el misterio que habita en ti, conozco los peligros de aceptarte en mi vida de nuevo y estoy convencido de correrlos todos - digo con seguridad.
Alexa se queda en completo silencio y esta vez soy yo quien le sirve una copa de vino. La familia Lee le enseño a no dejar que sus sentimientos la gobernaran, a no amar o aferrarse a una persona de manera intensional. Alexa jamás ha podido manejar sus emociones porque no sabe como gestionarlas con naturalidad.
-Eres demasiado arrogante, para pensar que el único hombre que a causado un orgasmo en mi vida eres tú - contesta con frialdad.
-Alexa, he visto lo peor de ti y no he huido.
-Porque al igual que yo, eres un ser lleno de suciedad y oscuridad, que va por el mundo fingiendo ser un ser de luz, paz y amor.
-Y eso es verdad - digo acercando mi rostro al suyo - haría lo que fuera por preservar mi vida, la de mi hija y mi reputación - le respondo encogiéndome de hombros.
-Y yo haría lo que este en mis manos por salvar a mi familia, mi compromiso y mi empresa. No te necesito en mi vida, Matt Keys - me recuerda.
-¿Dime que otra excusa tienes para mandarme a la mierda? Y no me salgas con lo del compromiso, porque suenas como un disco rayado con ese tema.
-Una razón válida es que no te tolero, me desagradas, te odio y desprecio - me dice.
-Aja, ¿algo más? - el pregunto y ella bufa ofendida, tomando su bolso del desayunador.
-No he venido aquí para que usted me tome del pelo como si fuera una niña - me responde - me da mucha pena no poderme quedar, tengo una cena con mi prometido.
-Típica rabieta de Alexa, antes de que te vayas, no voy a estar una temporada en New York, Alexa, no voy a rogar por tu cariño y aceptación, por mucho que me gustes, no voy a sentarme a escuchar tus rabietas todas la vida. Por eso te propongo como una ofrenda de paz invitarte a Los Ángeles.
-No, tengo que pasar tiempo con Liam... Él es mi prioridad.
-Piénsalo con calma, porque si te niegas a ir, no volveré a tu vida de nuevo - le doy un ultimátum.
Buenas tarde.
Ya bésense.
Matt robándole besos a Alexa, me encanta.
Nos vemos pronto con otro capítulo.
Que dicen, ¿Alexa viaja? ¿o no?
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