Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

III. Lamento parte III


Wei Ying se aferró a él, sonriendo contra su hombro, con una respiración tan serena inmerso en un sueño profundo que suponía gran alivio para su agotado ser.

Lan WangJi, por otro lado, luchaba por sostener aquel cuerpo desnudo buscando asimilar las sensaciones que producía el contacto íntimo. Sintiendo la piel de Wei Ying emanar agradable calor contra su cuerpo pese a que normalmente era frío como un carámbano de hielo.

Su temperatura y aroma a lotos dulces erizaban todos los vellos de la nuca y lo mantenían alerta como un adicto.

Wei Ying luchó por un tiempo tratando de calmar los temblores en su cuerpo, sus manos se sacudían inestables por momentos hasta que el calor de la chimenea y el abrazo de Lan WangJi mejoraron la situación. Su respiración irregular se cortó en cada movimiento que hacía. Lan WangJi se sintió torpe y nervioso.

Wei Ying pareció interesado en saber cada detalle de su día; sentía que de ese modo eran más cercanos. Lan WangJi aprovechó la oportunidad para hacer promesas como cualquier amante.

La realidad es que aún no eran amantes.

Wei Ying se había escurrido de sus dedos por años. Cuando se era regente del mundo algo como la diferencia de edad resultaba irrelevante. Pero a Wei WuXian sí pareció molestarle la brecha.

Desde que regresaron del hospital, el joven Wei se mostró cooperativo y flexible al manejo de Lan WangJi.

Trató de acostumbrarse a su presencia. Y Wei WuXian luchó contra las alarmas al interior de su mente que señalaban que algo parecía extraño .

***

Wei Ying era la única persona para él en el mundo.

Así fue desde la muerte de su madre.

Él lo veía con ojos verdaderos y no con el título que le heredó su padre al morir. Para Wei WuXian era nadie más que Lan Zhan , un hombre cualquiera que profesaba devoción ciega a él y se esforzaba por su felicidad en conjunto. No era el segundo heredero del legado maldito de los Lan ni el regente tirano al cual fue resumido.

Por supuesto, Wei WuXina no conocía aquella verdad. Para él era Lan Zhan. Lan Zhan no podía ser Hanguang-Jun , ese nombre era propio de un mito maldito.

Las horas pasaron en oscuridad sumidos en su propia burbuja. Observando el rostro alabastro de Wei Ying hasta el amanecer gracias a la luz cálida proyectada en sombras de la lámpara de noche.

A Lan WangJi le gustaba la manera en que su larga melena se desparramaba a lo largo de las mantas, sus pestañas, y aquellos hombros desnudos de piel suave donde siempre florecía un pequeño ranúnculo .

"... Lan Zhan... "

Siempre perdía el aire habido en sus pulmones cuando escuchaba murmurar su nombre entre sueños. La mandíbula de Lan WangJi se contrajo y cerró dolorosamente, en un deseo enloquecedor por arrancar aquel brote con sus dientes.

Serenó su mente y recordó las palabras de su tío, que le recordaba constantemente que no eran animales de ningún tipo.

***

"¿Está bien así?" interrumpió Wei Ying después de un rato.

"mmhm"

"¿Estás seguro?"

"Es perfecto"

"Lan Zhan, tu... puedes tocarme si quieres" fantaseó a media vigilia.

Lan WangJi observó la figura pálida, de labios rosados y manchas púrpuras bajo los ojos.

Se acercó con ternura, como haría un depredador en traje de cordero y besó su frente con gentileza.

Lan WangJi lo apoyó contra su pecho valorando su oferta.

Aún no estaba listo para eso.

Para él.

Para convertirlo en su butonia.

***

Lan WangJi logró conciliar una hora de sueño o poco más. Cerró los ojos momentáneamente para encontrar algo de descanso a su apesadumbrado cuerpo tras varios días en vela angustiado por la salud de Wei Ying.

Se permitió disfrutar del voluble y manejable Wei WuXian una vez que su apesadumbrada respiración se niveló. Este se apoyó en su brazo, en la cercanía de su desnudez parcial.

En algún punto del amanecer Wei WuXian abrió los ojos ante el destello luminoso del exterior. Lo primero que presenció fue a Lan WangJi. Quien despertaba sensaciones desconocidas en su cuerpo, cada vez que presenciaba el brillo peligroso y cálido en su mirada ámbar.

Lan WangJi retiró mechones de su rostro. Y él le correspondió con una sonrisa igual de descansada; desperezándose como un gato doméstico.

Reconoció en la semi inconsciencia la voz de Lan WangJi, llamando con un tono suave:

" Wei Ying... "

Se volvió a quedar dormido.

Wei Ying despertó entrada la mañana. Las trazas de oscuridad del amanecer se esfumaron, y la luz del exterior pintó la habitación hasta iluminarla.

Recordó con agudeza que estaba mayormente desnudo una vez que el frío azotó su piel. Había yacido cálido bajo las mantas, hasta que las mismas se congelaron en igual medida.

Lan WangJi le miró con profundidad, sin sonreír; con una peonía roja que terminó colocada en su cabello.

"Se mí compañero de Boutonniere " dictó.

La voz de Lan WangJi sonó atractiva, un poco rasposa por el desuso, haciendo que Wei Ying sintiera un cosquilleo en el pecho.

La confesión le robó el aliento.

Lan WangJi pensó entonces, que le gustaría darle un bonito anillo, un jardín interior y una propuesta más memorable cuando el momento fuese el apropiado.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro