Me rebajé, realmente me rebajé. Pero era de vida o muerte, tenía el pie y mi zapato de diseñador en agua de pis, no interesa que nadie haya usado ese baño en años, de igual manera es asqueroso.

Lily no dejó de reír mientras me ayudaba a caminar, ya que mi tobillo había hecho un sonido horrendo cuando lo sacanos.

Ahora de nuevo a la enfermería.

—Silencio Potter, que yo también podría reírme, digo, ¿Quién es ese que no se ha fijado en tu belleza?

Me miró con un deje de susto por un momento y luego fruncio el ceño.

—No sé de qué hablas.

—Vamos Lilian, te oí.

Me soltó y yo caí al suelo con una mueca de dolor.

—¡Qué maldita!

—¡Qué chismosa! —Contraatacó dándose la vuelta para irse.

—¡Lily Potter! No puedes dejarme así. Siquiera puedo caminar.

La vi volver con cierta satisfacción.

Eso estaba en su sangre, simplemente no podía dejar a nadie desamparado.

Tiró de mi brazo con una fuerza algo increible dado que yo la supero por una cabeza y media. Seguimos con nuestro camino a la enfermería.

—¿Me dirás quién es el chico? —Inquiri.

La curiosidad me mataba.

—No.

—Pero...

—Pero nada, Malfoy, tú y yo ni somos ni amigas o algo por el estilo, sólo te ayudo porque luego no quiero remordimientos —Cerré la boca y seguí saltando en una pata y ella me sujetaba.

Llegamos a un punto donde pude ver a Potty y sus amigos charlando a gritos.

Los ojos de Potter me vieron por un instante y ya estaba caminando hacia mi.

—Mierda —Mascullo y miro a Lily—. Finge que te agrado.

Aprieta los labios—. No me agradas, rubia falsa.

Chasquee la lengua intentando sonreír —. No quiero preguntas de su parte, no quiero que sepa cómo me lastime el tobillo, así que ayuda.

—¿Por qué debería?

—Le cuento que te gusta alguien y ese alguien no te corresponde.

—Que zorra eres —Gruñe y sonríe de inmediato—. Cassie, en verdad amo tu pintalabios, ¿Qué color es?

—Coral, querida —Respondo y sigo saltando —. Si quieres te consigo uno.

—Muchas gracias.

Reímos como tontas cotillas, y fingimos sorpresa al ver a su hermano (Nito, chiquito, enanito Ja) llegar.

—¿Qué haces ustedes dos juntas y todavía con el cabello donde debe ser? —Inquiere cauteloso—. ¿Se drogaron o algo?

—Oh no, verás Potty, me agradan tus hermanos, son mucho mejores que tú, ahora lo noto con Lils —Puse mi mejilla en la nuca de ella—. Es un amor.

—Si James —La sentí tensa—. Cassie es genial, envidio que sea metamorfomaga.

—Bueno, si nos permites —Lo aparté mientras seguía saltando—. Debemos irnos.

—¡Esto es genial! —Le miramos confundidas —. ¡Porque serán cuñadas!

Cerré los ojos. Maldito Potter y sus tontas ideas para molestarme.

—Juro que voy a matarlo.

Lily me arrastró lejos de él mientras yo le enseñaba el dedo corazón de ambas manos y él me lanzaba besos y guiños.

—Joder, Malfoy, como son de parecidos —La oí jadear cuando giramos la esquina.

—¿Parecidos? ¡No es verdad!

—Son unos inmaduros. Sus egos están por los cielos. Él es una perra. Tú eres una perra. De diferentes maneras pero perras al final... Deberían salir, ser perras juntos.

Le miré con la boca abierta. ¿Me ha llamado perra? ¿Perra como Potter?

¡Pero si soy virgen!

—Tu amor no correspondido te hace pensar cosas locas....

—¡Nop! Nada que ver. Debes admitirlo, has cambiado igual que él —Vi la enfermería cada vez más cerca—. Podrás seguir siendo torpe y divertida si te lo propones, pero de alguna forma lo maldita popular se impregnó en ti, igual que con James... Pero el se volvió prostituto barato.

Quise reír por la explicación de lo que James es ahora. Pero eso de que me he vuelto muy maldita en verdad duele, y duele porque es la realidad.

—Bien, si no quieres que te pisoteen, debes hacer algo.

—Más fácil sería ganarse su cariño...

—No quiero su cariño —Mascullo con una mueca ya que mi pie lastimado tocó el suelo—. Ya no busco eso desde hace tiempo.

Desde que se burlaron hasta hacerme llorar... ¡Si! Tenía 7 años, pero hay cosas que simplemente no puedo superar.

Ella respiró hondo antes de entrar.

—Me gusta mi mejor amigo, Malfoy —La oí susurrar.

—¿Qué?

Me miró —. Me gusta mi mejor amigo... Y él no gusta de mi.

Guau.

—¿Enserio?

Frunce el ceño y mira al frente de nuevo.

—Si, me gusta tanto y no me quiere, ese maldito, no todos los días tienes a Lily Luna a tus pies, pero no, ¡Él prefiere a otras!

¿Cómo se llamaba ese flacucho? Era Slytherin, lo se, los había visto antes.

Es muy alto, pero demasiado delgado, pálido, su cabello es liso y algo largo, tal vez he hablado con él en algún momento sobre que si no mejoraba yo sería su tutora de Pociones.

—¿Cuál era su nombre? ¿John? ¿Javier? Era con J, enserio.

—Josh —Respira hondo—. Bien, ahora lo sabes, ya no molestes.

—Bien, bien... Si quieres te ayudo —Tosí un poco apartando la vista.

—¿Qué?

—Si quieres te ayudo —Hable arrastrando las palabras —. Diablos, Potter, me has ayudado, debo devolverte el favor.

—¿Eres de esas Ojo por ojo?

Tal vez si.

—¿Si o no?

—¿Cómo me ayudarías? —Cambio el peso a su otra pierna.

—Por favor, él es Slytherin, yo soy Slytherin, y tal vez tambien su próxima tutora, podría hablar bien de ti con él... ¿Decir que hueles bonito?

La miré de reojo, estaba sonriendo un poco divertida.

¿Es enserio? Yo aquí ofreciendo mi ayuda y ella riendo. Estúpida.

—Vaya Malfoy, me halagas, si así lo deseas, pues bien. Resalta mis atributos —Reí viendo como sacaba pecho—. Yo hago lo mismo con James para ti, aunque él solito lo hace desde hace años.

—¿Qué?

Tocó la puerta desesperada. Madame Pomfrey abrió y Lily me lanzó a ella para luego salir corriendo.

—¡Lily Luna Potter!

—¡Cassiopeia Malfoy! —Se volteo corriendo de espaldas y con una amplia sonrisa—. ¡Sigo odiandote! Sin importar qué, rubia maldita.

—Tonta pelirroja —Murmuro riendo—. ¡También te odio!