Cassiopeia Malfoy acepta que James Sirius le gusta, un poco, sólo un poco.

Que tal vez le gustan sus ojos y su voz, sólo tal vez.

Que tal vez le encanta cuando le besa.

Porque por más que ya tengan una relación, siempre habrán ciertas cosas que irán más allá de su orgullo.

Me gusta, Dios, James me encanta, Adela, y decírselo... decirle lo que siento va más allá de mi orgullo.

Hay momentos en los que debes soltar el orgullo, Cassiopeia, porque si sigues así vas a perder todo lo que quieres.

Yo estoy enamorado de ti, Cassie, pero... pero lo que me pregunto es que si lo que sientes por mí es igual de grande o sólo soy alguien con quien pasar el rato.

Yo... no puedo.

James no quiere que le rompan el corazón, su primer gran temor es que ya se lo ha dado a Cassie.

Cassie está horrorizada con eso y su pecho duele porque no puede aceptarlo, y tampoco es capaz de dar el suyo a cambio. Eso va a causar varios problemas.

Sumando la telenovela que se armaron, están los ataques de furia de Cassiopeia contra el periódico escolar, el enorme perro que la directora ha pillado y que Adela protege con su vida (al igual que Hagrid), Lily Luna intentando ser amiga de Cassie y esta corriendo de ella, unas vacaciones lejos de las personas importantes y cerca de otras que no serán bien recibidas.

Su séptimo y último año en Hogwarts ya comienza, tal vez al fin aprendan a madurar, tal vez se dejen llevar por los sentimientos... esperemos que sean los buenos.

Malentendidos, celos rabiosos, peleas con algún que otro arañazo, gritos, posesividad que llega a ser insoportable y tiempos de amor diabético. Cassiopeia apenas saldrá con vida de ese colegio.

Oh, casi lo olvido.

La pregunta del año es...

¡¿QUIÉN COÑO ES ESA PELIRROJA?!