Esta mañana he oído sonar el timbre de la puerta,
nadie lo tocaba desde que tú te fuiste.

En la puerta no había nadie esperando a que abriera
pero sí un sobre con una carta en su interior.

"Te he visto dormirte llorando cada noche
de toda esta semana.

Y yo he llorado contigo también hasta dolerme
los ojos y el pecho.

Desde que me fui he querido volver
a la calidez de tu voz

pero me da miedo sentir el rechazo
de la única persona que me importa,

de estropearlo todo con mis llantos del pasado
que sólo tú sabes sanar."

El corazón me ha dado un vuelco
al leer tu letra

y notar el olor de tu perfume
invadir el pasillo.

Espero que vuelvas a llamar al timbre
y sea para quedarte.