Historia Original de UpBitto26

No sabía con diablos Gulf había entrado a su oficina y tampoco a que hora lo hizo, pero le tomó por sorpresa todo lo que ahora decoraba  su oficina. Muchos globos con helio flotaban en el techo, de colores, su escritorio estaba lleno de post-it en amarillo y encima de estos, una caja de chocolates con vino y un ramo de rosas amarillas.

Sonrió inconscientemente y tomó la caja de chocolates, la abrió y sacó uno de esto para después comerlo. Colocó la caja y el ramo en la silla y se
dispuso a leer lo que decía en los post-it, pudo ver un corazón formado con los rojos y los azules a su alrededor. Tomó de uno en uno.

Y más notas como esa, sus mejillas le estaban empezando a doler de tanto sonreír, Gulf era muy lindo, guardó los post-it, las rosas y los chocolates en el cajón más grande de su escritorio y se sentó en su silla admirando la ciudad. No podía hacer nada con los globos, tendría que reventarlos pero lo haría al final del día.

Su vista se posó en el cajón, sacó los chocolates y comió uno, no sabe como Kanawut se enteró que le encantan los chocolates envinados pero no le importaba.

—Wou, ¿Hiciste una fiesta aquí? –Frunció el ceño, ya nadie respetaba su privacidad.

—¿Qué no sabes tocar la puerta antes de entrar?

—Soy tu primo, no hay pierde.

—Tsk, no importa, tienes que tocar.

—Ya, esta bien, lo haré a la próxima, ahora dime, ¿Qué significa todo esto?

Mew sonrió y comió otro chocolate.

—No me preguntes como, pero Gulf lo hizo.

—¿Cómo le hizo para entrar?

—Te dije que no me preguntarás como, Jimmy.

—Ya, lo siento –Pronunció mientras reía apenado. —Vaya, parece que no se rendirá, ¿Hace cuanto que comenzó a hacerte lindos detalles?

—Dos meses, uno por semana –Se encogió de hombros y comió otro chocolate.

—Ya dile que si, Mew, se ha esforzado mucho.

—No me convence cuando aún sale con ese chico, mientras siga así no lo aceptaré Jim.

—Ugh, pero es el quien lo busca, lo sabes.

—Lo se –Afirmó el menor. —Pero Gulf es perfectamente capaz de pedirle que se aleje y no lo ha echo –Volvió a encogerse de hombros comiendo otro chocolate.

—Eres tan...

—Celoso, y aún más cuando se trata de Gulf.

—Iba a decir raro y bipolar pero eso también sirve –Jimmy de encogió de hombros para después reír por la expresión de ofendido del menor.

—Mal, primito, muy mal –Mew negó pero después también rió.

—Te vas a emborrachar –Se quejó el castaño al notar que los chocolates tenían vino y su primo los comía como si fueran agua.

—Sabés que no pasará, ¿Quieres? –Ofreció extendiendo la caja, el mayor
se sentó frente al rubio y tomó dos chocolates para después comer uno.

—Estan deliciosos ¿A que si? –Preguntó al ver los ojos de sorpresa de Jimmy este asintió y comió el otro chocolate, para después tomar otros dos y también comerlos. —Ya, que tu si te emborrachas –Guardó la caja
para evitar que su primo siguiera comiendo chocolates.

Como solía pasar muy a menudo cuando no tienen nada realmente importante que hacer, botaron el trabajo y estuvieron hablando de
cualquier tema que se les ocurriera, hasta que llegaron nuevos intrusos a la oficina de Suppasit.

—¿Por que no fuimos invitados a la fiesta? –Alegó Gun, Mew rodó los ojos y volvió a sacar la caja de chocolates.

—Gulf lo hizo –Se limitó a explicar, la pareja asintió y se sentaron en el gran sillón que el rubio tiene en su oficina. Jimmy y Mew se sentaron frente a la pareja y siguieron hablando con normalidad. El celular del menor sonó indicando una llamada por lo que se puso de pie y se dirigió a su escritorio, tomó su celular y contestó.

—Hola papá, ¿Se t...

—Burbujita ya quiere nacer, justo ahora, tu madre, War y yo la estamos llevando al hospital –La voz agitada de Phak le hizo saber que era real, se quedó en estado de shock hasta que su padre volvió a habla. —Mew, tienes que ir al hospital de siempre, nos vemos.

Y colgó, miró a los mayores quienes le miraban expectantes. —Burbujita ya va a nacer –Musitó, los otros tres se sorprendieron, y al no ver al menor moverse se acercaron a él.

—Hombre, tienes que ir al hospital, tu hijo esta por nacer –Off Le obligó a moverse hasta la puerta de la oficina. —Corre, te veremos allá –El rubio no esperó más y se dirigió con prisas al hospital.

—¿Cómo quieres llamarlo? –Preguntó con una sonrisa y burbujita en brazos, era un bebe tan lindo, de ojos negros y cabello castsño. Mirei sonrió y pensó por varios segundos.

—Quiero que tenga un nombre tailandes y que tu lo elijas.

—¿Segura? –La menor asintió y Mew le pasó al pequeño, sacó su celular y comenzó a buscar nombres, hasta que encontró el indicado.

—¿Qué te parece, Kasem? –La castsña miró a su bebe y sonrió.

—Kasem, me gusta, es perfecto... Hola pequeño Kasem –Le habló a su pequeño, el rubio sonrió ante eso y acarició con suma delicadeza la cabecita de menor.

—Llegaron los tíos –Pronunció un alegre Jimmy, detrás de él iban War, Off, Yin, Tommy y Gun. Todos con una caja de regalo en manos.

—Shh, Kasem esta durmiendo –Calló Mirei, los mayores le miraron
confundidos. —Burbujita se llama Kasem –Sonrió.

—Muy lindo, ¿Lo elegiste tu? –Wqr ser acercó a la chica y miró al bebé de cerca.

—No, Mew lo eligió.

—¿Puedo cargarlo? –Mirei asintió, paso a Kasem a los brazos de War con mucho cuidado y el mayor sonrió al sentirlo tan ligero.

—Aún lado, los abuelos han llegado –Phak y Prhaewa entraron a la habitación sonrientes, se dirigieron hasta donde el bebé se encontraba y lo observaron.

—¿Cómo se llamara? –Preguntó Phraewa acariciando las mejillas del
pequeño.

—Kasem –La mujer se sorprendió al escuchar el nombre para después ensanchar su sonrisa.

—No mentías cuando dijiste que querías llamarle Kasem a tu primer hijo, Mew –El mencionado le miró confundido. —Verás, cuando tenías ocho, Phak te regaló una jirafa de peluche a la que le llamaste Kasem, dijiste que cuando tuvieras un hijo te gustaría llamarlo así –Explicó, los mayores sonrieron ante el recuerdo de un pequeño Mew de ocho años diciendo que la jirafa era su hijo y que cuando tuviera un bebé real le llamaría Kasem.

Un par de sollozos resonaron en toda la habitación, los presente miraron a Mirei, la chica esta llorando y ninguna entendía por que.

—¿Mirei, por que lloras? – Preguntó Phraewa.

—Es que... Yo... Me estaba haciendo a la idea de criar sola a mi hijo y de pronto, estoy aquí y Kasem esta siendo tan querido... Muchas gracias por ayudarme así –Explicó entre sollozos, la mujer mayor se acerco a ella y la abrazó.

—Oh linda, ahora ustedes dos son parte de la familia, nos hace muy felices tener a nuevos integrantes –Mew no dejaba de mirar al bebé en
brazos de War, era tan pequeño y frágil que temía volver a cargarlo y romperlo, dirigió su mirada a Mirei y se prometió a sí mismo cuidarlos por siempre.

Kasem: Este nombre se parece mucho al nombre árabe Kasim, que significa “caritativo y generoso”. Sin embargo, Kasem se traduce como “felicidad” en tailandés.