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C A P Í T U L O 73

¿Volver?

Sonic.

Recién me despertaba, yacía sentado en el borde de la cama mientras que mi mirada se hallaba divagando en el suelo.

Fue una pesima idea salir de fiesta hasta la madrugada, había olvidado que hoy tendría que acompañar a mi madre a la clínica. Sin embargo, no me arrepiento de nada.

Ayer no se veía muy segura de lo que habíamos hecho. ¿Tendrá remordimientos en cuanto despierte? ¿Volverá a pedirme que me aleje? Sea lo que sea, no lo voy a permitir.

Sonic:
Buenos días. —Acompañé con emojis.

Chaos, jamás me habría imaginado ser yo el que hiciera esa cursilería.

Me levanté de la cama, subí el volumen de la bocina conectada a mi celular y caminé hacia el baño para darme una ducha.

—¡Sonic! ¡Algunos intentamos dormir! —Escuché a mi hermana gritarme desde su habitación.

¿Qué? ¿Les molesta mi música a las nueve y media de la mañana?

Regresé a mi pieza, aumentando aún más el volumen.

—Qué lástima ¡pero yo no! —Bromeé respondiéndole a Sonia.

Volví a la regadera. Abrí ambas llaves, tras un par de combinaciones, logré alcanzar la temperatura ideal para el agua.

Terminé de asearme, salí de la ducha con una toalla en mi cintura. Busqué entre los cajones de mi cómoda qué ropa ponerme, en cuanto concluí con su elección, me vestí y perfumé.

Apagué el altavoz y abandoné mi cuarto, encontrándome a mi madre en el pasillo. Le sonreí, ella bajó las escaleras.

—¡Por fin apagas esa cosa! ¡¿Por qué esa manía de escuchar The Chemical Brothers en la madrugada?! ¡Cada que pones eso siento que estoy consumiendo éxtasis!

—¡Pues ellos al menos siguen juntos! Acéptalo, One Direction no regresará. —Respondí pegado a su puerta.

—¡Mamá! —Chilló.

Miré a mi madre, quien me esperaba de brazos cruzados al termino de las escaleras. Bajé, le sonreí con nerviosismo.

—Amanecí muy hiperactivo. —Compartí.

—Creo que Sonia lo notó. —Se burló.

Ambos salimos de casa, la hice que subiera a mi auto, encendí el estéreo y conduje hasta la clínica.

—¿Qué opinas de esta pista? —Cambié las distintas canciones hasta toparme con la anteriormente mencionada.— Aún no tiene letra, ya tengo la idea principal pero ¿le ves potencial?

—Es muy tranquila, casi como Can't Help Falling In Love, me gusta.

—Para que algo sea exitoso no necesariamente debe de parecerse a algo de Elvis Presley. —Reclamé frustrado.

—A él le funcionó muy bien. —Bufoneó.

Llegamos a la clínica, aparqué el automóvil en el estacionamiento. Salí del asiento del conductor, dirigiéndome al del copiloto para abrirle la puerta a mi madre.

—Qué caballeroso. —Felicitó alegre.

—Aún tengo secuelas del trabajo de Shadow.

—¿Qué?

—Larga historia.

Ingresamos al hospital, nos sentamos en las bancas destinadas a la espera de los asistentes a consulta. Mi madre tenía una cita con el médico para continuar con el manejo de su enfermedad.

[...]

De mi bolsillo saqué una pequeña libreta, Mina me la había obsequiado cuando éramos pareja. Por lo visto, ella se percató de lo incómodo que me resultaba cargar con una tamaño profesional. No sólo me era más práctica, sino que el aroma de las páginas y el estampado creativo de la portada me encantaban. La única desventaja era que para escribir la letra de una canción debía usar un sinfín de hojas.

—¿Qué escribes ahora? —Indagó mamá.

—Nada importante, se me ocurrió hoy en la regadera y terminé de planearlo mientras veníamos en el auto. —Reí.

—"Nadie más borró tu cicatriz en mí". —Leyó en voz alta.— ¿Nada importante dices?

Reí ligeramente, odiaba que me conociera tan a fondo, lógico si era mi madre.

—Hay algunas cosas que tengo que contarte. —Admití.

Desde aquel desagradable incidente nuestra comunicación y relación se habían vuelto minúsculas. Debía de recuperar eso.

—Terminé con Amy hace varios... Muchos meses. Lo sabías ¿verdad?

—Manic y Sonia me lo dijeron. No es que yo no quisiera hablar del tema, sino que tú lo quisieras platicar conmigo. Sé que no debo meterme en tus asuntos, tú sabes cómo lidiar con ellos y tengo muy en claro que si necesitas ayuda, irías directo a decírmelo.

—No quiero que esto te desencadene culpa o algún otro sentimiento horripilante. Pero la razón de nuestro rompimiento fue por ti, tu situación necesitaba atención y el tiempo de caridad con Amy se había pulverizado. Jamás me reclamó nada, pero no quise arriesgarme a que tu coma se extendiera y bueno... Ella se aburriera de mí.

—¿Por qué creíste que ella haría tal cosa? ¿Alguna vez te dio indicios?

—No, por supuesto que no. Pero temí no ser el indicado, pensé en que tal vez Amy sólo gastaba su tiempo en esperarme. Ya me han engañado por "descuidar a mi pareja" —Hice comillas con los dedos. Sin duda una excusa absurda.— sufrí mucho en esa ocasión, no quería repetirlo, menos si hubiese sido ella quien me traicionara.

—¿Aún no logras avanzar? ¿Sigues estancado con ella?

—Me enteré que Amy comenzó a salir con alguien más poco tiempo después de nuestra ruptura, no quise quedarme atrás así que en cuanto despertaste... Bueno, inicíamos una absurda competencia por quién olvidaba más rápido al otro. Ambos cambiábamos más de pareja que Manic de dealer. —Reí.

—¿Qué es dealer? —Ehhh...

—Baquetas en inglés.

—Ah.

—Pensé que nuestra relación ya estaba sumergida en mediocridad, o al menos lo creí hasta ayer.

—Explícate. —Pidió reapareciendo una ancha sonrisa.

—Salí con mis amigos y me topé a Amy en el antro. —Reí.— Bailamos y —Ni estando ebrio le cuento que me acosté con ella.— arreglamos todo.

—¿Qué entiendes por arreglarse exactamente? —Sonreí.— No se volvieron a casar fraudulentamente ¿o sí? —Me carcajeé.

Mi teléfono celular vibró, revisé la notificación en la pantalla de bloqueo. Sonreí embobado.

—Hablando de ella...

Amy:
Buenos días ♡.

Amy.

Chaos, ¿qué he hecho?

—¡Rouge! —Grité su nombre mientras bajaba apresuradamente las escaleras.

Mi compañera de piso permanecía sentada en el pequeño comedor de la cocina, vestía un minishort y una ombliguera.

—¿Qué pasa? —Se giró a verme.— ¿Se puede dormir así sin ser considerado como crimen?

Miré mi vestimenta, consistía en una sudadera de manga larga en color gris, muy holgada y decolorada por su constante uso, mientras que abajo de mi cintura se hallaba un pantalón con estampado de corazones.

—¡Eso no es de lo que te vengo a hablar!

—Siéntate, no creo que tu crisis sea un impedimento para comer.

Rouge se volteó, dándome la espalda y dirigiéndo toda su atención a su plato.

El móvil que llevaba en mi mano sonó con el tono predeterminado que tenía para Sonic. Cuando nos separamos ya no nos mensajeabamos, había olvidado que lo tenía puesto.

Sonic:
¿A esto llamas día? Ya casi van a dar las doce jaja.

La murciélago rápidamente llevó su vista hacia mí. Arqueó una ceja y me examinó cuidadosamente.

—¿Por qué tu tono de notificación sonó con una canción de Sonic? Reconocí el ritmo.

—¡Justamente de eso quería hablarte!

—¿De que cambiaste tu tono?

—No, idiota. Es el tono que le tengo asignado a Sonic.

—¡Por Chaos! ¡¿Qué?!

Sonic:
No me claves el visto :(
¿Qué haces?

¡Rouge sigue hablándome!

—¿Y por qué se están hablando? —Respondió casi igual de alterada que yo.

Presioné sobre mi teclado, mi roomie se había parado de su silla para poder colocarse detrás de mí y lograr observar la conversación.

Amy:
Perdón, me entretuve preparándome un cereal jaja.
Nada, apenas desayunaré. ¿Y tú?

—Respondiendo a tu pregunta... Puede que ayer nos hayamos topado.

—Dime que no se besaron.

—Nos besamos.

—Ay maldición, entonces ya no le contestes.

Sonic:
Vine con mi madre a una cita médica :(.

Acaba de decir que está acompañando a su madre al médico. No puedo dejar de responderle, será muy cruel de mi parte.

—Pero si le continúas hablando pensará que realmente quieres algo con él.

Sus ojos se engancharon con los míos, mis mejillas se calentaron a raíz del sonrojo. Rouge abrió sus párpados enormemente, yo desvíe la mirada a la pantalla de mi celular.

—¡¿Aún quieres algo con él?!

Amy:
Qué mal :(. Pero al menos ya está mejor ¿no?

Sonic:
Afordunadamente :").

Creí que ya estabas superándolo.

—Las cosas no son tan fáciles, Rouge.

—¿Sabes todo lo que conlleva volver con tu ex? Quiere decir restaurar fotos, buscar excusas y formas que al explicarlas te permitan seguir teniendo dignidad, ¿a cuántos les has hablado mal de él? —Advirtió.

—Estaba tan afligida que nunca borré las fotos, sólo seleccioné la opción de "sólo yo". —Confesé avergonzada.— Sólo he hablado mal de él con Blaze y tú, pero eran momentos de ira, no cuentan. —Suspiró exhausta.

—Bueno, no pinta tan mal... Al menos no tuvieron su "remember".

—¿Por remember te refieres a...?

—Follar, sí.

Sonic:
¿Te la pasaste bien anoche? —Acompañó con emojis con claras connotaciones sexuales.

—¡¿Sí te acostaste con él?!

—¡La situación se dio! No es mi culpa.

—¿Y qué pensarán tus padres si ustedes llegan a emparejarse otra vez? De seguro ya lo odían por haberte dejado.

—De hecho a mi madre le agrada y papá lo quiere más que a mí.

Amy:
Bastante. —Correspondí del mismo modo.

—¿En serio? —Cuestionó con un tono sarcástico.— ¿Van a tener una conversación hot mientras yo estoy aquí leyendo y él seguramente tiene a su madre a un lado?

—Síp.

Escrito: 24/12/2018.
Publicado: 25/11/2019.

Créditos a Maag13-Rose.

Créditos a user93538706.

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