TN;

Llegamos de noche a la casa puesto que la conversación con mis padres se extendió. Ver la cara incómoda de Jungkook era divertido pero cuando las preguntas se tornaron demasiado incómodas hasta yo me sentí enojada. Papá se pensaba que Jungkook por estar conmigo debe hacer lo que ellos piensan.

Dios que rabia.

Entramos a la casa y dejo mi bolso sobre el amplio sofá en forma de L, Jungkook suspira cansado mientras se frota la nuca.

-Disculpa a mis padres, por favor- le pido mientras lo miro apenada.

Jungkook me mira y niega- No pasa nada- habla.

-¿Seguro?- asiente y una pequeña sonrisa aparece en mis comisuras.

- Si, ven- extiende la mano y dudosa la acepto, no me da tiempo cuando me carga en brazos y chillo sorprendida por su acción. Sonrío en grande cuando comienza a correr mientras sube las escaleras, aprieto los ojos mientras me aferro a él.

Cuando llega al cuarto cierra la puerta con dificultad y me lleva al baño directamente.

No me quejo ni protesto, solo dejo que haga conmigo lo que quiera.

Me quita el cinturón de el vestido y me lo saca, dejándome en ropa interior. Luego procede con mis tacones de aguja y los saca. Sus ojos me miran ya desnuda y me sonrojo al instante.

Me sonríe pervertidamente y sé que algo trama.

El igual se desviste quedando desnudo y trago duro al ver su prominente erección. Éste me ve en el acto y me toma de la mano con una sonrisita que bien conozco.

Nos encaminamos hasta la tina y Jungkook prende el grifo y lo reduce a temperatura media.

Nos sumergimos en el agua y cuando me giro la boca de Jungkook atrapa la mía y nuestras lenguas danzan entre si. Siento el mundo paralizarse y el tiempo de detiene.

Nos entregamos mientras dejamos que el deseo nos consuma.

Sus caderas me embisten hasta dejarme en una burbuja de placer y solo puedo suplicar por más.

Sus manos tocan mi cuerpo con cariño y nos dejamos llevar por la pasión.

...

Nos secamos mutuamente con una sonrisa, aún siento mis piernas temblar un poco pero nada que no pueda soportar.

Tomo mi pijama y me la pongo mientras Jungkook igual se viste.

Luego baja en dirección a la cocina para hacer la cena.

Seco mi cabello con el secador y luego lo peino.

Mientras bajo las escaleras el olor de lo que parece ser pollo horneado bate mi nariz y me relamo los labios.

Entro por la puerta de la cocina y miro por encima de Jungkook.

Me cuelo por su lado y estiro el brazo para robar, digo tomar... un pedacito de carne.

Jungkook toma mi mano en el acto y me mira seriamente. Hace una mueca y continúa en lo suyo. Resignada me cruzo de brazos con mala cara y me doy la vuelta.

-Ya... disculpa- el brazo de Jungkook me toma por la cintura y me impide moverme.

-Te disculpo solo si me dejas probar lo que cocinas- le digo pensando y luego sonrío maliciosamente.

-De acuerdo, ya que no hay de otra- murmura y hace un pucherito adorable. Se ve tan tierno.

Me acerco a la fuente y olfateo el agradable aroma de la comida, pellisco un pedacito de la carne y me lo llevo a la boca, saboreo bien y admito que está delicioso.

Levanto mi pulgar y le sonrío gustosamente, cuando voy a tomar otro pedacito de carne Jungkook tira de mí.

Protesto en sus brazos y pongo carita de perrito.

-No se vale- digo indignada pero eso parece no importarle ya que continúa como si nada.- Tengo hambre, tengo hambre- hago una pequeña huelga tipo Masha y el Oso, si adoro esos muñecos. Ya se que paresco una niña pequeña pero es que ni yo misma me entiendo.

Jungkook bufa alto y exclama- ¡Podrías callarte!

Me asusto tanto así que pego un respingo, avergonzada y triste me alejo mientras el estómago me ruge.

Un pequeño mareo me hace tambalearme pero logro recomponerme y me siento en el sofá de la sala.

Subo mis piernas hasta que me tocan el pecho y juego con la tela de mi pantalón de pijama.

Me siento triste, tonta y estúpida. No siquiera entiendo porque hice eso.

Agacho la cabeza cuando recuerdo la forma en la que habló. Sacudo la cabeza como si eso fuera a eliminar las malas sensaciones que siento en el estómago.

Una figura se para frente a mí pero me niego a mirarlo, no quiero verlo porque aún me siento triste y enojada.

-Oye, discúlpame ¿si?- habla pero no digo nada, el estómago se me revuelve cuando siento el olor de la comida y el estómago me ruge.

Avergonzada me encojo en mi lugar y Jungkook parece reírse.

-¿Tanta hambre tienes?- asiento aún sin mirarle.- Mírame porfavor- su voz tiene ese toque suplicante y como siempre le miro.

Subo la cabeza aún con mi rostro triste. El pone el tazón en le mesita de centro mientras se agacha frente a mí, su mano acaricia mi mejilla y me restriego contra ésta. Hago un pucherito y el lo besa suavemente, me es imposible no sentir mariposas en el estómago y le regalo una corta sonrisa.

-¿Me dejas alimentarte?- pregunta y arqueo una ceja.

-¿Tipo sugar daddy?- mis palabras parecen surtir efecto porque se sonroja.

-Solo si tú quieres, pero sabes que para ello debes decirme daddy- habla y asiento con una sonrisa- Buena niña- su voz se torna ronca y me estremezco cuando lo miro a los ojos y veo el brillo que estos tienen.

-Si... daddy- digo mientras me relamo el labio inferior y Jungkook procede a alimentarme tal cual lo prometió.

Se que mi daddy esta noche me dará duro, de ello no tengo duda.

Pero la sola idea me hace fantasear y imaginar la escena. Quiero que por esta noche el sea mi daddy, quién me domine y por como me mira se que corro peligro y que posiblemente mañana no pueda caminar.

...

Hola, ya casi termino de corregir el fanfic, digan si les gusta.

Se que muchas dirán que ha cambiado mucho, pero si lo miran y leen detenidamente podrán darse cuenta que sigue siendo la misma historia, la misma trama, solo que corregida y editada.

Además de añadirle relleno y arreglar el diálogo.

Pero aún así sigue siendo la misma historia.

Es muy importante aclarar ello para los que tienen duda.