Capítulo Extra 2

Willow.

Con mis dedos limpio el polvo que ensucia el cristal de un marco vintage que adorna una vieja fotografía, hay una pareja de novios que lucen felices, posiblemente ansiosos por empezar una vida juntos, vivir su felices para siempre y envejecer viendo los años pasar y los hijos crecer.

Esos éramos Darren y yo en nuestra primera boda, una boda que debía ser un simple trato de negocios pero que luego se convirtió en la mejor historia de mi vida, la llevé a mi pecho y el vacío seguía ahí dentro consumiendo todo de mi. Mi yo de ese tiempo hubiese estallado en llanto pero yo ya no era esa chica con la idea equivocada en su cabeza de que con llorar las cosas se arreglan porque era patético si quiera pensarlo.

Pongo el marco en la mesita de noche y con una tenue luz de la lámpara veo a mi hijo dormir abrazando su oso de peluche favorito, me siento a un lado y acaricio su cabello y recuerdo cómo ha estado preguntando por su padre y sufriendo su ausencia entonces un vendaval de recuerdos más vienen, veo claramente el día que nació y Darren estuvo ahí sosteniendo mi mano mientras sentía cómo si arrancaran las entrañas sus palabras eran —Amor eres fuerte, vamos después de todo este dolor solo habrá felicidad. —Luego el primer cumpleaños de Ben, su primer día de colegio y las veces que enfermó se desveló junto a mí, porque éramos un equipo.

Recordar todo eso me hace sentir culpable, beso la frente de mi hijo y apago la luz, y salgo a tomar aire para asimilar todo, entonces sigo recordando todo.

Luego que Darren y yo volvimos fuimos felices y estábamos en nuestro mejor momento viendo a nuestro hijo crecer y juntos luchando cada uno por sus sueños y planeábamos cinco años después del divorcio un día volvernos a casar usábamos nuestros anillos y planeamos algo grande después de todo nos lo merecíamos pero entonces su madre enfermó de cancer y ella me pidió que quería pasar su último tiempo en la tierra con su marido y sus hijos, y lo respeté. Le dije a Darren que nos tomáramos un tiempo, nos alejamos y nuestros planes de una boda real se perdieron entre el estrés de los negocios, tomé su lugar en la compañía que él dirigía y también estaba al frente de mi marca.

Hace unos días volvió y me propuso casarnos, ya lo había hecho y le había dicho que si pero luego dije que no, pero él dijo que no podía con la idea de estar separados y no acepté porque quería seguir respetar la petición de su madre, Darren me conocía siempre soñé con casarme por absurdo que sea y nos lo merecíamos después de todo. Esa noche sentada en el potaje de la casa de mis padres me di cuenta que solo estaba siendo débil, nunca tuve que decirle que se fuera yo debí ir con él porque yo no quería una relación donde solo fuéramos pareja porque hacíamos un tremendo equipo y eso muy pocas personas lo logran.

—¿Estás bien? —Escucho la voz de mi hermano a mis espaldas y entonces se se acerca hasta mi y se sienta a mi lado. —Tú mirada me dice que ya te diste cuenta que cometiste un error.

—Me conoces bien Tyler. —Responde sintiendo como mi pecho se desarma al darme cuenta que podría perder a mi otra mitad.

Porque él es eso, me complemento y mi otra mitad, la persona con la que quiero pasar lo que le resta de vida y a la que quiero llamar el padre de mis hijos porque sí, quería hermanos para Ben y que él tenga a su padre presente en todo momento de su vida. Supe lo que tenía que hacer en aquel momento.

Siempre fue inmadura y dramática pero sabía reconocer cuando me equivoco, solo encontrarás una persona con quien encajes y no importa si al principio la odias o eso crees pero si lo encuentras no dejes que se vaya.

Esa noche tomé un vuelo a Suiza, durante el vuelo sentía mi corazón latir fuerte y mi respiración era pausada por momentos y apresurada luego, al usar el jet de la compañía de papá tenía privacidad y podía estar nerviosa y ansiosa sin que la gente me mire y me juzgue.  Luego de horas y horas por fin estaba allí.

Cuando llegué a la clínica donde la madre de Darren estaba en su tratamiento rogué a Dios que él no estuviese presente, necesitaba hablar con ella a solas, por suerte Darren no estaba ahí; esperé que le avisaran que quería verla y me permitió verla. Cuando entre una enfermera estaba ayudándola con la comida, me sentí nerviosa aún más.

—Hola. —Fue lo que mis labios pronunciaron.

Ella pidió privacidad y entonces la chica se fue de la habitación, todo se miraba muy esterilizado y limpio; solo había una cama y un sofá, un precioso ventanal ilumina las paredes que tienen un papel tapiz verde menta suave. Me quede de pie frente a ella y antes que hable me apresuro a decir:

—Sé que te prometí alejarme para darte lo que querías, pero ya no puedo y sabes qué no me importa si dices que soy egoísta pero amo a tu hijo, Ben lo ama también y yo no puedo hacerle esto Darren es su padre y él lo necesita. —Trato de controlar mi furia pero casi estoy a punto de gritarle y no quiero hacerlo. —No voy a alejarme más de él y siento mucho por lo que estás pasando pero eso no te da derecho a quitarle la felicidad a Darren porque sé que él no es feliz y no te lo dice porque no quiere herirte y... —Me interrumpe.

—Lo sé, hace unos días le dije que yo te había pedido esto y que debía buscarte. —Lágrimas comienzan a salir de sus ojos. —Yo me voy a morir pronto Willow, pero ahora sé que eres buena para él y estoy segura que cuidarás de él porque lo amo y me duele perderme su vida y la de mi nieto pero la vida es así —Su voz es casi susurros debido al avance del cancer. —Espero puedas perdonarme por lo que hice antes, Darren te ama y no puedo estar más feliz de que así sea.

—Jenn yo... —Estoy reprimiendo mis lágrimas. —No tengo nada que perdonarte, me diste el mejor regalo que alguien pudo darme y te lo agradezco de todo corazón. Solo deseo que encuentres La paz y algún día se que nos volveremos a ver.

Jenn Monette murió ese mismo día en la tarde al lado de sus hijos y su esposo. Darren estaba destrozado, tomé su mano toda la noche en su cuarto de hotel mientras procesaba que su madre ya no estaba más en el mundo, se había ido muy joven pero así es la vida. Ella fue específica y pidió que sus cenizas descansaran en un mausoleo en la casa en NYC donde creció y así se hizo, volvimos e hicimos un funeral íntimo para la familia.

Darren saludaba a todo mundo, se mostraba fuerte y no habíamos hablado de lo nuestro porque no era el momento, luego de la reunión en la casa de los Monette se realizó en el jardín la ceremonia y colocaron sus cenizas donde ella pidió, el mausoleo estaba en el jardín y era una especie de escultura de piedra, todos dieron el pésame a la familia, mis padres estaban ahí con Ben. Mi hijo se acercó a mi e hizo una carita tierna de tristeza lo cargué y fuimos a una banca que estaba ahí y entonces empezó:

—¿La abuela estaba encerrada en cajita que metieron ahí, mami? —Lucía preocupado.

—No amor, tú abuela ya no está aquí, verás ella se fue al cielo y esa cajita solo es un símbolo.

—¿Papá va estar bien y volverá con nosotros?

—Sí.

Veo a Darren y está diferente no si es por la barba o porque sus ojos se ven cansados y tristes pero aún así siguen brillando azul como el océano y su perfume aún es el mismo. Mis padres llevan a Ben a casa y todos se han ido, Darren está frente al lugar donde fueron puestas las cenizas. Tiene sus manos en los bolsillos de su pantalón negro y aún no se cómo acercarme a él.

—Lo siento Darren. —Digo poniéndome a su lado.

—Mi madre me dijo lo que sucedió pero aún me duele que te fueras Willow. —Dice mirándome a los ojos y noto que está furioso.

—No tengo ninguna excusa, debí estar ahí para ti y entiendo si te duele y no me perdonas pero tienes que saber que te amo y voy a luchar por ti.

En ese momento siento miedo de perderlo y que nuestra historia termine así pero no voy a huir porque cometí un error grandísimo. Así que le dije lo que sentía.

—Te amo Darren, te amo posiblemente desde la primera vez que te vi y creí odiarte, te amo desde que me propusiste matrimonio falsamente en el baño de la empresa de mis padres, te amo desde que nos divorciamos. Te amé, te amo y te amaré toda mi vid hasta que un día mis ojos ya se abran más y este mundo quede atrás y me lo permites estaré contigo siempre y no me iré jamás, quiero casarme contigo y tener más hijos contigo porque eres mi compañero, mi equipo y el amor de esto que llamo vida y si no puedo decírtelo ahora que nos damos cuenta de cuán corta que es entonces no sé cuando.

Entonces él me besa, el tiempo se detiene y por un momento ya no hay dolor, no hay realidad y solo siento como todas mis piezas se complementan. Al separarnos nos abrazamos, puedo sentir como él llora y está destrozado y es normal su madre se ha ido, pero yo sabía que con el tiempo dolería menos.

Darren tuvo depresión durante un tiempo y estuvo en un lugar muy oscuro, mezcló antidepresivos con alcohol y estuvo a punto de perderse pero juntos lo logramos, el chico odioso de mi adolescencia, el sexy Playboy millonario era un ser humano y la muerte de su madre me mostró su vulnerabilidad y su lado más sensible, Ben fue su motor para levantarse y seguir y yo no podía estar más feliz de ser su compañera de viaje

Por eso aquella tarde en la playa mientras caminaba por la alfombra roja de pétalos de rosa sobre la arena me sentí lana mujer más afortunada del maldito mundo. Nos volvimos a casar y esta vez fue real, no habían acuerdos prenupciales ni contratos. Mi familia quería una boda elegante y lujosa pero yo solo quería unir mi vida a la del hombre que amo así que fue una ceremonia en la playa solo con nuestras familias y amigos cercanos.

Todo era perfecto, el paisaje, las luces en camino al altar, una brisa de verano y mi hijo llevando los anillos, mientras caminaba al altar donde Darren esperaba mi corazón latía como loco. Mi padre me acompañaba, Darren estaba vestido de blanco desaliñado y yo no tenía un vestido de alta costura ni tampoco elaborado simplemente un vestido blanco con tirantes y largo muy playero. No puedo comparar lo que sentí al casarme por segunda vez con él porque esta vez se sentía real y perfecta.

Esa tarde éramos sólo dos personas que se aman con el corazón, al llegar al frente me ofreció su mano y al tomarla se sintió como electricidad correr por todo mi cuerpo. Entonces entendí que no era la boda lujosa y los invitados que hacen especial el matrimonio sino sólo dos personas que se aman y están dispuestas a permanecer juntas hasta el final.

—Estamos acá para unir estas dos almas en matrimonio, por segunda vez —Todos reímos. —Ojalá está sea la definitiva, Darren y Willow ustedes han decidido hoy reafirmar su amor y han reconocido sus errores y han luchado el uno por el otro y eso los ha traído acá justo donde deben estar, no si se crean en la suerte o el destino pero ustedes han escrito el suyo, posiblemente tuvieron que renunciar al primer problema pero no lo hicieron es por eso se han dicho Te amo de la mejor manera.

»Ahora les pregunto. Darren ¿Aceptas a Willow Dawson como tú legítima esposa para amarla, respetarla y serle fiel en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y pobreza o hasta que la muerte los separe?

—Acepto . —Responde con una sonrisa maliciosa.

—Ahora Willow ¿Aceptas a Darren Monette como tú legítimo esposo para amarlo , respetarlo y serle fiel en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y pobreza o hasta que la muerte los separe?

—Acepto. —Respondo.

—Ahora escucharemos sus votos. —Dice el señor de manera amable.

—Willow por donde comienzo, estoy seguro que tú y yo fuimos hechos el uno para el otro y créeme que agradezco lo afortunado que soy al haberte pedido que te casaras conmigo en aquel baño hace muchos años ya, tú me has hecho muy feliz, lamento haber sido un cretino en nuestros días de adolescencia. Me has dado tanto, nuestro hijo es el mayor regalo y quiero decirte que hacerme viejo junto a ti será toda una bendición, créeme que aunque pasen muchos años te amaré con la misma fuerza que lo hago ahora.

Estoy llorando y tengo un nudo en la garganta pero quiero decirle lo que siento así que tomo fuerza.

—Darren, amor gracias por hacerme fuerte, sé que cometí errores pero ahora estamos aquí y esta vez es de verdad y eso me hace feliz —Sonrió entre lágrimas. —Estoy agradecida de que seas tú con quien comparto mi vida yo, yo no imagino a nadie más, te amo como nunca amé a nadie más, no fuiste mi primer amor pero eres el último y mi verdadero amor así que no puedo estar más agradecida con Dios, el destino o la suerte. Muero porque empecemos nuestra vida juntos y esta vez para siempre.

Nos entregamos los anillos y la sonrisa de Ben es enorme.

—Ahora por el poder que me confiere Dios y la iglesia, Darren y Willow los declaro marido y mujer. Darren puedes besar a tú esposa.

Darren entre risas y risas me besa.

—Les presento a el señor y la señora Monette.

Todos aplauden, mi madre está llorando y la entiendo ella siempre fue Team Darren.

Luego de la ceremonia vea a mi familia junto a Darren y su familia y me siento completa, Darren me observa y tiene la mirada de Playboy justo la que tenía ese en aquella junta a la que llegué tarde y de mal humor, quién iba a pensar que terminaríamos enfrentando nuestro destino y terminaría casada con el enemigo que al final era el amor de mi vida.

Fin.

•••

Darren y Willow fueron felices después de todo.

Es oficial esta historia termina aquí, decidí hacer estos dos capítulos extras porque quería mostrarles su segunda boda ya lo pidieron es lo mínimo que merecen ya que ustedes me han hecho sentir muy feliz al leer esta historia jamás imaginé ni siquiera llegar a 1M de vistas y ahora son 6M y he leído sus comentarios y wow solo puedo decir gracias.

Tardé en actualizar y es porque estaba insegura sobre los capítulos extras sí alargarlos o simplemente terminar acá y he decido terminar acá. Tengo otras historias en la plataforma y tengo otras en proceso espero poderlas compartir con ustedes.