Capítulo 26

¿Así Es Como Termina?

Willow.

No sabía con exactitud lo que había sucedido, de un minuto a otro Darren se había convertido en padre; esa noche él conducía a casa luego de ese tormentoso encuentro con su pasado. Mi familia me esperaban ansiosos, me habían secuestrado un día. Mientras él conducía yo miraba por la ventanilla del acompañante; todo estaba en densa oscuridad. Ninguno de los dos decía nada.

—Willow. Te quiero eso no cambia lo que siento por ti. —Aparta la vista de la carrera para mirarme.

—Darren —Dije con mi voz débil que amenazaba cortarse. —Tienes un hijo.

Podía notar el sufrimiento en sus ojos. A mi me dolía, no podía con la idea que él hace unos años se casaría con ella quizá porque la amaba, ahora volvía y no sola; con un hijo. Un hijo pesa más que cualquier cosa en en mundo.

Darren no era un patán, si era su hijo obviamente él se haría cargo.

—Ni siquiera se si es mi hijo. —Suspira. —Si puede ser cierto, lo nuestro sucedió hace dos años; Brandon tiene un año y tres meses.

—Debes ser responsable con él —No lo quería ni mirar. —No hay lugar en tu vida ahora para mi.

Vi que habíamos llegado a casa, le pedí a Darren que no entrara yo daría todas las explicaciones. Acordamos que diríamos la verdad. No sabía que pensaría mi mamá y como le rompería el corazón por mentirle.

—Willow. —Toma mi mano antes que yo entre. —Lo nuestro no tiene porque terminar. Me di cuenta que, eres lo que más quiero en la vida.

Yo ya estaba llorando.

—No llores por favor. —Me abraza fuertemente escondiéndome en su pecho y besando mi frente.

—Tengo miedo. —Susurré.

—Voy a luchar por ti, nada nos va separar. Willow eres lo mejor que me pasó y quizá desde siempre he estado enamorado de ti. —Sonríe y luego apreta sus labios. —Me aseguraré que lo de Brandon sea verdad.

Teníamos historia, con ese pensamiento entré por la reja del jardín, Aún no le diría a mis padres del matrimonio falso. Tendría que decirles el porque del secuestro y el supuesto hijo de Darren.

Y así lo hice, les conté y estaban asombrados. Le dije a mamá que me quedaría esa noche en casa. Me dejaron quedarme en mi antigua habitación salí a la terraza y me senté en el balcón. Dentro de mi habían tantos pensamientos.

—Sentada ahí hasta el viento puede derribarte —Dice mi madre que me trae un té.

—Sería lo mejor. —Bromeo.

—Se que piensas que Darren te cambiara por su hijo ¿No? Sientes que ahora pasarás a un segundo plano y máximamente cuando la madre de ese niño esta viva después que la consideraban muerta.

—¿Crees que deba alejarme de él? —La miro desesperada.

—Él te ama, tu lo amas ¿No? —Encojo mis hombros y ella solo sonríe y se va.

Mientras tomo mi té veo que mi móvil suena y en la pantalla el nombre de él. No respondo. Con una revolución en mi mente voy a mi cama y dejo caer sobre mis sábanas, espero a que esto sea una pesadilla y mañana todo desaparezca.

Llegué a la oficina temprano, quería evitar verlo. Me asuste cuando la puerta se abrió de golpe. Para mi suerte era una rubia sonriente.

—¡Al fin te veo! —Se sienta frente a mi.

—Hannah, ha sucedido tanto que ya no se que hacer. —Suspiro.

—Estuviste secuestrada ¿No? —Solo asiento. —Pero ¿Estás bien?

—Darren tiene un hijo y una ex novia que resucitó de entre los muertos. —Sonrío con ironía.

—¿Te drogaron? —Pregunta preocupada.

—No se que hacer. Él dice que me quiere pero yo no se si pueda. —La miro y esta confundida.

—Ustedes son la pareja perfecta Willow, no renuncies a él por eso, él puede ayudar a su hijo si es cierto, pero eso no cambia el que te quiera. —Dijo tan segura que cualquiera se convence de sus palabras.

Decidí concentrarme en el trabajo, desde que la empresa de mis padres se unió a la de Darren tenemos más trabajo y más responsabilida, teníamos demandas que responder, obras de caridad que ejecutar en África. Pronto habría una fiesta para celebrar la nueva asociación.

Estaba revisando los informes ejecutivos, cuando llamaron a mi puerta, era mi amiga pero estaba acompañada de un rostro que no hubiese querido ver.

—Si buscas a Darren esta no es su oficina. —Dije sin mirarla.

—Contigo quiero hablar. —Dice, le indico a Hannah que la deje pasar.

Está bien vestida, es alta e intimidante, tiene porte de europea sexy. Se sienta frente a mi.

—¿En que te puedo ayudar? —Trato de ser amable.

—Estoy acá porque antes de ti, estaba yo. Y no voy a renunciar a Darren. Regresé para recuperarlo.

—¡Suerte con eso! —Sonrío.

—Yo le ofrezco una familia, tengo un hijo con él, un hijo que lo hará más feliz de lo que tu o yo misma podemos hacerlo. —Se que tiene razón.

—Ese no es mi problema, somos esposos y si él quiere ayudar a Brandon no me opongo.

—Aja —Sonríe. —Tarde o temprano te va a dejar, se dará cuenta que aún me ama y estaremos unidos por siempre. ¿Tu pretendes que él siga contigo mientras un pequeño crece sin su padre? Crees que es justo para Brandon crecer sin un padre, tu no sabes que es que te falte un padre para darte amor y cariño.

Esas palabras hicieron eco dentro de mi, pensé en mi familia y lo afortunada que fui al crecer con una madre y un padre que me ayudaron a convertirme en quien soy.

—Willow. Sé que Darren no te ama. —Aseguró. —¿Te dijo que te ama? ¿Te dijo que te elegiría por siempre? Ayer me ofreció ayudarme y le pregunté si te amaba, no pudo responder. Estaba emocionado con Brandon.

—Tu no sabes lo que dices. —Dije a punto de llorar.

—No compliques más las cosas, no permitas que un pequeño que ha estado sufriendo crezca sin un padre. —Me rogó.

—No puedo hacer nada Dannia. —Le dije en un tono de susurro.

—Si de verdad amas a Darren dejalo. No lo separes de su hijo. —Dijo a punto de irse. —En tus manos está no desgraciarle la vida a un niño.

Se fue... En ese momento supe que debía hacer.

Darren.

Había intentado comunicarme con ella desde hace dos días, era la millonésima vez que la llamaba, había ido a su casa y no estaba. Sus padres me dijeron que no sabían de ella, que le había afectado lo de Dannia y Brandon. Estaba desesperado. El Wisky lo tomaba como a agua, la suite se sentía vacío sin ella.

Yo me sentía vacío sin ella.

Heche un vistazo a sus cosas, sus vestidos aún tenían su aroma, de pronto una serie de recuerdos vinieron a mi mente. El que más se repetía me torturaba, esa noche en que sentí que la amaba, no podía olvidar el que se siente besar su cuerpo, mis labios recorriendo cada espacio de su piel. Su manos entrelazandose en mi cabello. Otro trago.

El timbre sonó y corrí con la esperanza que fuera ella. Pero no, Dannia con su sonrisa y Brandon. Al principio se había molestado cuando le hablé de hacer una prueba de ADN.

—¡Hola! —Me da un beso en la mejilla. —Brandon quería verte.

La invité a pasar, se propuso hacer de cenar; aunque ella estaba ahí y ese pequeño. Mi mente no dejaba de pensar en Willow. Juge un rato con el pequeño y luego cenamos una deliciosa pasta. Lavó los platos, Brandon se había dormido en el sofá.

—¿Como estás? —Me pregunta sentándose a mi lado.

—Genial y ¿Tu? —Sonrío.

—¡Aun no sabes mentir Da! —Solo niego con mi cabeza. —¿Estas así por ella?

—Si. Willow me importa demasiado como te dije ayer. La amo. —Me sincere aun sabiendo que a ella le duele.

—Talvez ella no sienta lo mismo o no se hubiera ido —Dijo.

¿Que si Willow no me amaba? ¿Porque se había ido? Que pasaba con ella, sabía de mis sentimientos y decidía desaparecer. No soportaba no saber de ella.

Esa noche Dannia dejó a Brandon conmigo, lo observé dormir algo dentro de mi se sintió feliz.

Lo dejé dormir en mi cama, me quedé en el sofá. En la mañana me despertó el timbre, fui abir y era un citatorio de la corte. Lo abrí y era para esta tarde a las cuatro, ni siquiera me molesté en leerlo; seguramente era otra demanda que atender.

Dannia fue por Brandon, esa mañana llegué a la oficina y busqué a Willow. Quien no apareció en todo el día. Recordé lo de la citación, debía ir así que llegué a la corte, me sorprendí al ver a mis padre ahí no hablaba con ellos desde que le conté lo de Dannia.

—¿Que pasa? —Les pregunté.

De repente veo que Willow aparece junto con sus padres y un chico que ya conocía, Albert. Entonces comprendí lo que iba a suceder.

—¿Willow? —Pregunté.

—Estan acá porque necesito que hablemos —Dijo muy segura.  —Nuestro matrimonio con Darren fue... —Su madre la interrumpe.

—¿Una falsa? —Sonríen junto a mis padres.

Ella me mira, asumió que quizá yo les había contado.

—Lo sabíamos —Dice mi mamá.

—¿Porque lo permitieron? —Pregunta Ella sorprendida.

—Ustedes son el uno para el otro, sabíamos que terminarían enamorados, Por eso no lo impedimos. —Dice su madre.

Estamos shockeados.

—Se equivocan —Dice Willow. —No nos enamoramos. ¡Por eso hago esto!

—¿De que hablas? —Digo molesto.

—Seamos sinceros, solo nos utilizamos el uno al otro Darren. Sentimos atracción si, nos acostamos si. Pero no hubo amor. Tu ahora tienes la oportunidad de hacer una familia, no la desperdicies. —Dijo de manera fuerte, esa parte de ella no la conocía.

Entendí porque estábamos ahí, entendí que quería hacer. Sus palabras me habían dolido. Entramos con el juez únicamente ella y yo. Antes de él entrara estábamos solos en la sala.

—Willow no hagas esto. —Le supliqué.

—Darren no. —Toma aire, estaba utilizando una máscara frente a nuestros padres. —No hagas esto más difícil.

Me observa y sus ojos están brillosos.

—Merecemos ser feliz, ayer en la noche iba a buscarte y vi salir a Dannia y del hotel. —Sonríe.

—No es lo que piensas. —Trato de explicar.

—¡No importa! Es lo correcto, ahora tienes un hijo y amaste a esa chica. Recupera lo que tenían. Así que por favor cuando el juez y los ahogados entren firma los papeles. —Suplicó.

Iba a decir algo cuando entraron interrumpiendo. Nos íbamos a separar, firmaríamos el divorcio. Todo acabaría ese día en esa corte. Se inició el juez habló y dijo un montón de palabrerías de las cuales no escuché ninguna.

—Bien todo está listo. Ustedes se casaron y firmaron un prenupcial en el cual estipularon que al divorciarse ninguno compartirían sus bienes con el otro, estableciendo que cada uno conserva lo suyo justo como estaban antes de contraer matrimonio. Y debido a que no hay hijos dentro de esta unión no hay que llevar a discusión nada. Sin embargo la corte no puede anular el contrato firmado por veinticinco años de sociedad entre las empresas de cada uno. —Vi el rostro de ella totalmente confundido. No leímos ese contrato cuando lo firmamos, nuestros padres y sus abogados los habían redactado. —Así que seguirán siendo socios hasta cumplir con dicho contrato.

—Debe haber un error. —Protestó ella.

—No, no lo hay, tuvieron que haber leído las cláusulas de ese documento antes de firmar. También tiene un anexo que ambos deben compartir la presidencia ejecutiva de dichas empresas que han sido unidas.

¡Joder! Nuestros padres nos habían timado. Nos jugaron sucios, nos estaban uniendo por veinticinco años. Vi a una Willow furiosa. Y comprendí, esa era la venganza de ellos para nosotros por el matrimonio falso, se pusieron de acuerdo para darnos una lección.

Llegó el momento... Era hora de firmar. Luego de poner esa firma en esos documentos éramos libres. Estábamos de pie uno al lado del otro frente a una mesa, listos para firmar.

—¿Es lo que quieres? —La miré y esperé que se arrepintiera, deseaba con todo mi ser que saliera de esa sala sin firmar.

—¡Más que nada! —Sonrió.

—Willow yo te... —Me interrumpe.

—Eso es mentira. Darren no compliques más las cosas. Por favor.

Le pasaron los papeles y sin ni siquiera mirarme por ultima vez como en las películas, firmó. Luego sonrió y me pasaron los documentos, yo la miré y su sonrisa se fue borrando. Me tomé unos segundos.

—Señor Monette ¿Algo que apelar? —Me pregunta el abogado y yo sólo puedo mirar su expresión de: No hagas esto por favor.

—No. —Firmé.

Sólo firmé y salí de ahí. No pude soportar verla una vez más. Solo podía preguntarme ¿Asi es como termina?

¿Así es como termina? Yo amándola con todo mi corazón pero obligado a dejarla ir.

***

Ayyyyy 💔💔

Gracias por leer ❤❤