El Coronel McMichael me hizo ir a analítica para decirle que podía pasar en el lugar habían un enorme mapa sobre la mesa con soldados y banderas de tamaño pequeño como si fuera un ajedrez pero en batalla de verdad. Es un lugar horrible y decadente había una lámpara alumbrando la mesa donde se encontraba el mapa pero era una luz tenue, lejos de ser una oficina de analítica parece un cuarto de interrogación.

-Bueno puede tomar asiento, esperaremos a los demás - acercó un mullido asiento cerca de mi, se sirvió una copa de whisky y encendió un cigarrillo el aroma inundó la habitación de inmediato -

- ¿Quiénes más vendrán señor? - pregunté tímida -

-El Capitán Nicholls y Mallory, también Jamie - ese nombre aun causa revuelo en mi, me alarme un poco tengo miedo que tal si ahora si me mata - Tranquila sí, yo te protegeré - me dedico una linda sonrisa -

-Señor es que - agaché un momento la cabeza - El Mayor Jamie Stewart no es mi persona favorita - cuando alzé la mirada el me veía, de una forma tan tierna -

-Todo va a estar bien si lo prometo. Y ya no me digas señor dime Daniel - ese nombre aun cuando el chico que me gustaba se llama igual que él, no es nada grato para mi volver a escuchar lo, me  recuerda mi frustración al no ser correspondida -

-Está bien, Daniel - le sonreí sin mostrar los dientes -

-Perdón si te digo esto pero - tomó mi mano y le dio un pequeño beso - Eres una mujer muy linda, jamás había visto unos ojos azules tan lindos como los que tu posees - me sonrojé cual tomate y de pronto Nic y Mallory entraron al lugar, haciendo que me soltará de inmediato de la mano de Daniel - Caballeros tomen asiento - les indicó, el Mayor Jamie llegó y se notó molesto con mi presencia -

-Madeline - Mallory me saludando sonriente, quería sentarse al lado mio pero Nic se adelantó, tomó la silla y algo celoso, se sentó a mi lado, Mallory lo fulminó con la mirada -

-Bien Madeline es hora de que pongas para nuestro beneficio tus dotes en "analítica "-me dijo el Mayor Jamie y Daniel se molestó con su frío comentario -

-Pues - mi amiga me mando todo lo que necesitaba decir - Intentarán atacar aquí - señalé con un soldado de juguete en el mapa - y aquí -

-¿Cuando? - Daniel no dejaba de verme -

-Mañana y pasado pero van a bombardear Exeter y Bath. Seguirán los bombardeos aun con la oposición de la RAF - todos agacharon la mirada, lo que decía era horrible pero cierto - Aun que van a intentar atacar los cuarteles militares que están a 200 kilómetros serán pocos soldados pero muchos a comparación con los que tiene ese cuartel - volví a mover los muñecos de estrategia del mapa -

-Coronel, ellos son muy pocos para poder con ellos - Mallory comenzó a develar su estrategia como Capitán y era muy buena - Debemos cercar el área y mandar más soldados, todo lo que se mueva a 2 kilómetros alrededor deben dispararle, que no entre. Además tendrían de ayuda por lo menos doscientos soldados, probablemente crean que están solos, será una ventaja -

-Esa es una gran estrategia. Enviaré la orden en una hora con mis superiores, debe ser aprobada y así será - dijo con seguridad Daniel -

-Esperó y funcione Coronel - Jamie aun me subestimaba -

-Funcionará - Mallory me defendió, y lo ha hecho muy seguido hay algo raro en ello -

-Pueden irse, dama - me miró pizpireto Daniel - Caballeros - cada uno salió poco a poco, a excepción de Nic que antes de salir me dió un pequeño papelito, luego salió como si nada. Lo abrí y lo leí con detenimiento " Te espero en mi cabaña, te tengo una sorpresa. No tardes mucho, solo espera a que nadie te siga ".

Al salir del cuarto de analítica seguí a Nic, lo podía ver caminando directo a su cabaña, mantenía mi distancia para evitar sospecha. Entro a su cabaña pero no la cerró para que yo pudiera entrar. Cuando entré no lo vi cerca, me pasee por la cocina pero nada, escuché ruidos en la recámara entre despacio pero no vi a Nic, la puerta comenzó a cerrarse rechinando. Nic se acercó por detrás y Brincó

-¡Buu! - grité de espanto - Lo lamento cariño - el se reía y yo sentía el corazón latir rápido, le di una palmada fuerte en el brazo mientras intentaba calmar mi ritmo cardíaco -

-No fue divertido - yo le vía seria -

-Perdón. -

-Y me pediste que viniera para ¿espantarme? - su acción me molesto lo moraba impresionanda y molesta -

-Sólo fue una broma - se sintió mal -

-Nic está en definitiva no fue mi mejor semana, no tienes idea de como me siento cuando un soldado se me acerca - agaché la mirada -

-¿Qué te hicieron? - agaché la cabeza, y sentí que rompería a llorar -

-Jamie mando soldados a encuartelarme, me trataron horrible. No sólo Jamie casi me rompe el cuello si no que un soldado me soltó una patada y creo que me rompió algo - Nic me abrazó como loco -

-Perdón. Nunca debí irme. O debí llevarte conmigo, todo esto es mi culpa. No te traje aquí para asustarte, si no mas bien por qué te he traído un obsequio de Liverpool - asobaba mi espalda y eso me tranquilizó - Ven aquí - nos soltamos del abrazo, para que me sentara en su cama - Cierra los ojos - Lo se cerré aunque a mi no me gustan las sorpresas por el contrario - Abrelos - había una caja enfrente de mi, la abrí con curiosidad, era un vestido rojo muy lindo -

-No imagino cuanto te costó - en esta época no todas las mujeres pueden comprar vestidos, no hay telas incluso hay mujeres que de hacen vestidos con cortinas, que Nic me hubiera dado esto es tan único - No debiste molestarte -

-Pontelo quiero ver como luces - dijo entusiasmado, fui a su pequeño baño a probarme el vestido, color rojo, estilo de los cuarenta claro pero elegante, con mangas no muy largas, por debajo de las rodillas.  -

-Antes de salir aclaro - soné nerviosa - no tengo la mejor figura -

-Para mi eres perfecta - subió su tono de voz - Ahora sal de ahí - salí dudando un poco pero al final lo hice -

-¿Qué te parece? - me miró de pies a cabeza, tomando su tiempo al hacerlo, se acerca mi, tomó mano e hizo que girará para apreciarlo mejor - Luces realmente hermosa - mordió su labio inferior - Me gusta como se te ve, aunque en este momento muero por quitártelo - me tomó por la cintura pegándome a él, nos besabamos agitados. De una maniobra Nic me quitó el vestido, fuimos retrocediendo hasta que sentí que la cama estaba detrás nuestro, nos remontamos poco a poco. Me costó algo de trabajo quitarle la ropa, sobretodo los botones. Cuando estábamos a nada de consumar nuestro acto pensé ¿Si no usamos preservativo?  Estaba por decir algo cuando sentí como entraba en mi, arqueé la espalda mientras gemía. Esta época apesta, los preservativos son prohibidos, y lo serán incluso después de la guerra. No pensé mucho en eso debido a lo que hacía en ese momento. Al terminar exhaustos, abrazados, me recosté sobre su pecho mientras el acariciaba mi cabello - Sabes creo que le gustas a Daniel hay no paro de hablar de ti. - desvío la mirada - Me sentí celoso - acaricie su rostro con dulzura y lo besé -
-Ya te he dicho que me encantas, que me gustas  como nadie - me dedico una hermosa sonrisa -

A la siguiente noche cuando estaba a punto de ir al baile con mi príncipe inglés vibró mi teléfono y al leer de quien era la llamada me di cuenta que era de Daniel el chico que tanto me gustaba.

-Bueno - mi corazón latía como loco -

-Hola hermosa - sentí que mis pómulos ardían - Hace algo de tiempo que no te veo, después de ese día en que salimos juntos -

-¿Tu recuerdas que pasó? Yo estuve en cama ¿A ti te pasó lo mismo? - lo sabía había salido con el ese día, el último día en mi tiempo -

-Tuvimos un accidente. Te buscaron por tres días pero no te encontraron. Yo estuve inconsciente un mes y cuando desperté me di cuenta que... - se escuchaba triste, y yo asustada, me buscaron solo tres días y ¿después que? ¡Quiero salir de aquí! - El accidente fue tan grande que me ¡amputaron las dos piernas! - se escuchaba como su nariz escurría por el llanto - ¡Ahora soy un maldito inválido! ¡Y lo que te hice... Por Dios! - no entendí muy bien eso último -

-No puede ser Daniel cuanto lo lamento pero yo... ¡Yo estoy en otro tiempo Daniel! Desperté en 1940 ¡Quiero volver a casa! También estuve en cama, pero solo tuve un par de rasguños y un fuerte dolor de cabeza - no sabia como hacerlo sentir mejor, lo que le pasó es terrible -

-¿Cómo puede ser posible? me pone peor saber tu situación, si tan solo ese día no... - Yo no recuerdo exactamente todo, quizá la verdad sea dolorosa pero es reconfortante -

-¿Qué sucedió Daniel?  - ya me había acabado de vestir solo esperaba a que Nic pasara por mi, solo que esperaba que no llegará ahora - Todo fue mi culpa - se soltó a llorar -  Si tan solo yo...-

-No te mortifiques no fue tu culpa - la piel se me erizó, la sangre se me enfrió -

- Si lo fue, si ese día no hubiera bebido como lo hice... ¡Tú y yo no estaríamos así! ¡yo tendría mis piernas y te tendría a ti de vuelta! ¡Soy un imbécil! - sentí un cosquilleo en mi mano como si alguien la estuviera sosteniendo, además de él sonido de las maquinas de los hospitales cuando indican que la presión se esta desplomado - Ya tengo que irme, espero que regreses pronto. ¡Hazlo por mi bonita! - la llamada se cortó estrepitosamente, tocaron a mi puerta. Me acomodé el cabello y me fije por última vez en el espejo, luego fui a abrir, la hermosa e implacable presencia de Nic me hizo sentir tranquila -

-Hola amor - me tomó por la cintura y me pego a el para unirnos en un tierno y delicado beso - Luces aun mas hermosa de lo que lucías ayer. Vas a deslumbrar a todos -

-No me importan ellos me importas tu - me extendió su brazos para irnos, ambos entrelazados por nuestros brazos Caminamos hasta el gran salón luminoso-

La música se podía escuchar desde unos metros antes. Al entrar quede impresionada, aquel lugar sombrío se veía iluminado, había adornos con luces y la música era alegre, habían personas bailando, otras sentadas en unas mesas que tenían un mantel blanco común, todas comiendo o bebiendo, se veían felices, olvidaban por un segundo la guerra. Mallory que ya estaba mejor de la pierna se acercó a saludar apoyándose de un bastón.

-Capitán - ambos se estrecharon las manos, no parecen ser enemigos solo no son muy expresivos - Madeline - me dió un fuerte abrazo y un beso en la mejilla -

-Mallory - cerré los ojos al instante de darnos el abrazo -Me alegro De que ya estés mejor - nos soltamos del abrazo debido a que Nic carraspeo la garganta en señal de incomodidad -

- Bueno fue gracias a ti, no hay forma de saber en que parte me suturaron -

-Capitán Nicholls veo que viene con la compañía de esta hermosa dama - el Coronel McMichael se levantó de su silla para saludar, me dió aun abrazo de improvisto - Oh Madeline luces bellísima - muchas personas no veían sorprendidos, había llegado del brazo de uno de los Capitanes más guapos que es Nic pero que el Coronel se expresara de esa forma de una mujer era mas que raro - Vengan a sentarme - se sentía cohibido -
Mesero traiga por favor un par de copas - alzó la mano al joven que atendía mesas -

-No yo no tomo - nos trajeron una copa de licor, dios sabe de qué está hecho es la guerra -

-En fin se que estas cosas no se discuten aquí pero gracias a tus dotes de analítica, salvamos a cien hombres - el Coronel encendió un cigarrillo al igual que Mallory y Nic -

No puedo decir que me haya  gustado mucho esos momentos, aun que cuando Nic se levantó para ir a hablar con Jamie y Mallory, Daniel me pidió bailar con el, no quería pero sentí que se lo debía después de todo el me salvó de que Jamie casi me matara. Fuimos a bailar a una de las esquinas del lugar donde no mucha gente bailaba.
Nos fuimos a la pista, era una canción lenta, poco a poco fui agarrando el ritmo todo iba bien hasta que el Coronel intentó besarme. Yo lo separe de mi con fuerza, enojada

-¿Qué le sucede? - me veía algo apenado -

-Lo lamento yo... No se que me paso es que... - intentó acercarse a mi pero retrocedí - Se que es raro decir esto - nadie nos veía feo en realidad la música estaba bastante fuerte como para que no se escuchara lo que hablábamos - Te conozco hace relativamente poco pero... Tú me gustas mucho. Desde que te vi - comenzó a desacomodar su cabello, las forma en que lo hacía me daba miedo, parecía loco - Quisiera que sintieras como mi corazón late, cada día que te veo es una tortura, esa sonrisa, vas por ahí sonriente cautivando al mundo con tu belleza, yo te quiero Madeline. No me rendiré no soy un hombre que se rinda fácil, ni en esta guerra dónde lo más probable es que valla a morir. Haré todo lo que esté en mis manos para estar junto a ti - se veía seguro de cada palabra, lo decía en serio, podía ver la verdad en sus ojos, la confesión lo estaba liberando -

-Daniel yo...  Es decir tu - estaba buscando las palabras adecuadas pero nunca eh sido una chica que tenga las mejores palabras en el momento preciso - Es decir eres realmente guapo pero, yo no soy la chica que necesitas, si tan solo jeje - reí nerviosa - Estuvieras conmigo un día entero te enfadadas de mi -

-No vas a convencer me, bebí del veneno del amor aun sabiendo que moriría - se acercó a mi, me miró directo a los ojos descifrando mi alma - No voy a rendirme, haré todo lo que pueda por hacer que algún día tu me quieras, y se que pasará por que - tomó mi mano y la puso en su pecho podía sentí su corazón latir muy rápido - Esto es sincero y no hay nada mejor que eso - Nic se acercó a ver que sucedía, en cuanto lo vi desvíe la mirada. Nic llego hasta donde estábamos, me sujetó del brazo, fulminó con la mirada a Daniel y viceversa -

-Dejala está incómoda - dijo entre dientes Nic -

-Eso tu no lo sabes - inconscientemente Nic me apretaba muy fuerte el brazo provocando me dolor, clavabando sus uñas -

-Nic me lastimas intenté soltar me pero estaban hipnotizados de furia -

-¡Nic! ¿Acaso no escuchas?  La lastimas, para - Mallory llego e interpuso su mano entre Nic y Daniel los cuales ni por un segundo dejaron de sostener la mirada, cada vez había más tensión, yo forcejeaba por soltarme, Mallory pidiendo que me soltará, y Nic y Daniel en un duelo de miradas - ¡Vasta! Suéltala - dijo una vez más colmando su paciencia -

-Nic, Daniel por favor dejen de hacer eso - solo fueron unos segundos que parecían horas, hasta que de pronto Mallory soltó un golpe a la cara de ambos, con ambas manos fue muy ágil, lo vi como en cámara lenta, su puño golpeando sus caras y estas moviéndose músculo por músculo, abrí los ojos sorprendida. Al sentir el golpe Nic me soltó. Ambos sostenían su rostro, asobando se, intentando aliviar su dolor, miraron a Mallory molestos, como Leones cazando su presa. Daniel se lanzó dándole un puñetazo en el estómago a Mallory y este calló al piso del dolor, luego Nic le dio un golpe en la cara tal como el que le habían dado hacía unos segundos, me quede sircunspecta ¡no supe que hacer! Cuando Mallory estaba en el piso Daniel aprovechó para darle un puñetazo a Nic, y éste a su vez le dio un gancho al hígado, cuando Mallory se incorporó golpeo a Daniel en el estómago y este calló al piso, después intento golpear a Nic pero este detuvo el golpe pero con la otra mano le dio un golpe en un costado. Hubo un punto en que estaban en bola intentando golpearse. Me acerqué a ellos, y apliqué mis conocimientos en medicina, a Mallory le di un golpe en el pecho de arriba hacia abajo para tensar los músculos, a Daniel un golpe en los bajos, con Nic fue más difícil no quería lastimar lo, le di un último puñetazo en la cara, los tres callejón al piso ¡Nunca me subestimen! -

-¡Son unos idiotas! - mientras se retorcían en el piso me miraban fijamente - ¡No deben comportarse así! - les gritaba fuerte, la furia me puso roja - Yo me voy quédense, golpeándose como cavernicolas - me di media vuelta y me fui, tenían tanto dolor que no me siguieron solo por que no se podían levantar. No me fui a mi habitación sabía que ahí irían a buscar me, así que subí a la balanza que estaba cerca del lago, reme hasta adentrarme en lo más profundo del lago, estaba obscuro y había neblina era la perfecta escena de terror y estaba por serlo.
Comenzé a alucinar, y entre la niebla, lo vi, el accidente. Salíamos del bar, Daniel y yo estábamos algo pasados de copas, íbamos por la interestatal, el detuvo la velocidad del auto, y después de esperar ese momento por meses Daniel y yo por fin nos besamos, cuando de pronto un trailer nos cegó con la luz, el trailer aventó el auto, Daniel no salio disparado por el cinturón de seguridad pero yo no lo llevaba puesto y salí disparada por la ventana. Me recosté en el pequeño bote mientras lloraba, podía recordar verme, como si mi fantasma estuviera viendo me ahí, ensangrentada. Pero aun sigue la duda ¿Cómo llegué aquí?

Chic@s esto es nuevo en realidad, pero si alguno de ustedes tiene sugerencias, o quiere aportar unas lineas para la novela, puede mandar un mensaje privado. No es que no tenga mas ideas, solo que me gustaría que sea exacto lo que quieren leer.

Los quiero mucho y gracias por leer :3 y ojalá los reyes les hayan traído lo que querían