Querido Tweek,

Ayer te vi algo asustado, por lo que dude si escribirte o no está carta, pero al ver que tu nuevo novio te calmo, sentí dos cosas:

Primero, que podía seguir mandote estas cartas y saber que no entrarás en pánico total.

Y segundo, un gran dolor.

¿Nunca has sentido dolor a ver a alguien? Seguro que si, pues eso siento yo cuando te veo con ese chico emo.

Por eso te escribo esto, para detener mi dolor.

Me duele al verte con alguien mas, siempre me ha dolido verte con alguien mas, solo que antes creo que no le tomaba importancia, o al menos no la necesaria. Quizás ya sepas quien soy, o tal vez no, conociendote no lo sabes.

Siempre has sido tan lento, pero esa es una cosa que me gusta de ti. No te preocupes, mañana te diré mi nombre, aunque eso seguro nos alejara más.

                                -Anónimo-

Tweek bajo la carta, la cual encontró en su escritorio en la clase de álgebra III.

Sentir dolor al ver a alguien

Claro que lo ha sentido, siempre que tiene que ver a su ex novio con su novio, le duele. Craig Tucker, quien lo había dejado para andar con Stan Marsh; era doloroso verlo por los pasillos de la preparatoria, después de tanto tiempo saliendo.

Quizás por eso no pensaba que era el mismo Craig quien le escribió esas dos cartas, y quien lo veía fuera del salón con tristeza y arrepentimiento. Eso hasta que Pete se acercó a él y lo alejo de la puerta.

-¿Que haces aquí Tucker?

-¿Que te importa emo?

-Escucha Tucker, más te vale no acercarte a Tweek. Él esta mejor sin ti, conformista.

Craig no dijo nada, solo le hizo su típica seña y se fue de allí, solo para ver como el chico gótico entraba al salón en donde estaba su ex novio.