Martes, 22 de Octubre, 2024

Hola de nuevo mi Layne,

Palomitas de maíz, así quiero empezar con esta segunda carta, porque en la anterior no enfatice en lo lindo y tierno que te ves cada vez que las comías mi Layne. Cuando estuve en el cine, todo mi anhelo eras tú mientras comía y comía sin parar las Palomitas de maíz, las que se han convertido en un dulce gusto, del que antes no había tenido, y todo es por ti, porque te gustaban y se veía a lo lejos.

Ahora estoy aquí sentada en mi escritorio, escribiéndote esta nueva carta, porque siento el deseo de hablarte y pensarte.
Te veo sonriendo con tu cartucho de Palomitas de maíz y comiéndotelas con ganas.
Provocas mucha ternura, esa ternura que aún me cautiva y me hace suspirar.
Te quiero mucho, Layne.
Ahora cada vez que me compre un cartucho de Palomitas lo haré pensando en ti y en lo tanto que te gustaban.
Te quiero.

Siempre tuya
Stephanie.