Amycus P.O.V. I
N. A. : Cronológicamente, éste capítulo debería aparecer mucho antes en la historia, pero recién ahora se me ocurrió lo del cambio en el punto de vista y quería dar un pequeño resumen de la visión Carrow acerca de los muggles, los sangre pura y Jamie Roberts. Por lo tanto, consideren este capítulo entre el IV y el V, más o menos.
P.D.: Lo revisé y en efecto, es entre el IV y el V. Besitos.
...
3:00 a.m.
Me despertó un arañazo en la espalda. No, no era Norah, hace mucho que dejó de dormir en mi cama luego del sexo. Era Nemesio, que se apretujó entre mi cuerpo y la orilla de la cama como si no hubiera otro lugar disponible. Estúpido gato. Lo tomé con sumo cuidado, él se retorció porque no quería irse de su lugar favorito de la cama y cuando lo coloqué del otro lado, volvió a insistir. Sí, ese era su lado. Le permití quedarse y me aparté un poco hacia el centro para que tuviera más lugar. De nuevo se apretujó contra mí. Debía tener frío en esta época del año. Le hice algunos mimos antes de volver a cerrar los ojos. Rabastan hacía un extraño ruido por la nariz cada vez que exhalaba... Para dormir, yo requería del silencio más absoluto, al igual que la oscuridad, por lo que me acostaba antes que nadie. Ahora el enervante ruidito de la nariz de Lestrange me impediría dormir. Me puse a pensar en un hechizo para taparle la nariz de una vez para que se callara... Por supuesto, no podía hacerlo pero me entretuve pensándolo.
Pensar en torturas era una de mis diversiones favoritas a la hora del insomnio. Norah me decía que cuando no pudiera dormir, pensara en ella. Vaya petición absurda. Insistía en sus frases cursis, como si no se diera por enterada de que no somos novios. La primera vez que accedió a acostarse conmigo, le dije que me gustaría repetirlo y allí se puso como loca. De felicidad, creo. Antes de eso éramos amigos, pero luego... De verdad se puso muy absorvente. Lo tolero, porque ella tiene sus ventajas y supongo que no tengo que especificarlas.
Teniendo a Norah, ya no tengo que preocuparme como los demás chicos de esta edad. Verlos haciendo las locuras más idiotas por impresionar a una chica me causa risa y vergüenza ajena al mismo tiempo. Todo lo hacen por el sexo. El año pasado, era el único tema del que se hablaba en los dormitorios de chicos. Quién se había acostado con quién. Cuando Norah entró en mi lista, las experiencias de los demás parecieron simples juegos de niños. Ella era la más inalcanzable de las chicas de sexto y ahora es mía. Y ni siquiera tengo que darle un nombre a nuestra relación.
Nemesio se movía de un lado a otro. Quizás tenía una pesadilla o algo... Lo observé moverse de lado a lado, procurando que no se cayera de la cama. Cualquiera que me viera haciendo eso se preocuparía por mí, porque piensan que no soy del tipo de persona que quiere a los animales. Pero siempre he pensado que los verdaderos animales son en realidad los seres humanos. Los muggles para ser preciso.
Y también todas sus mezclas extrañas. La primera vez que supe que existían mezclas de muggles con magos, me dieron ganas de vomitar. Pensar que magos han deseado sexualmente a muggles... No puedo creer tanta asquerosidad junta. Los muggles que presentan magia ahora estudian aquí. Junto a nosotpros, como si los directores, el ministro de magia y todos los demás quisieran promover esa perversión: quieren que convivamos. He visto chicos de sangre limpia siendo amigos de los sangre sucia. He visto parejas de sangre limpia con muggles "mágicos" tomados de las manos, incluso besándose en público. Y cuando hago notar lo desagradable que me resulta, saltan los típicos de siempre a defender a esos asquerosos. Potter, Black, siempre salen al ruedo. Los defensores de los sangre sucia. Ambos sangre limpia, ambos unos renegados.
Y esa Roberts... Oh, esa Roberts. Si hablamos de defensores, ella se gana las palmas. Defendiendo a Bode como si no pudiera defenderse solito. Unasangre sucia defendiendo a un sangre limpia. Babeando por todos lados detrás de ese chico que no se fijaría en ella ni aunque le bailara desnuda con un sombrero de payaso.
Lo que ella no entiende es que Bode estaría tranquilito si ella no se empecinara en estar con él. No despreciamos a Bode porque sea homosexual, sino porque fraterniza con ese gryffindor sangre sucia, Geller creo que se apellida, ¿Jason, se llama? Y con la Roberts, también. Al principio me parecía gracioso que ella lo defendiera, que insistiera en ponerse por delante cuando Rabastan aparecía. Era gracioso que se defendiera, que se creyera capaz de enfrentarnos. Pero ahora ya es bastante molesto.
Esa mirada altiva, esa voz autoritaria, son sumamente irritantes. Se pasea por la escuela como si fuera dueña de todo, como si fuera su casa. No lo es. Lo he hablado con varios slytherins y también lo he escuchado decir a mi padre. Mi hermana lo repitió en la cena de ayer: ellos no pertenecen aquí. Cada uno de esos sangre sucia ha sido invitado aquí por aquellos magos, autoridades idiotas que no se atreven a cerrarles el paso. Son invitados, no son dueños. Aquí los dueños somos nosotros.
Si al menos demostraran humildad, podría concederles el beneficio de la duda. Los elfos domésticos son muy humildes con nosotros, a ellos no los he lastimado en la vida. Pero los sangre sucia insisten en creerse como nosotros, cuando no lo son, ni lo serán nunca.
Roberts. A veces, al verla allí, con esa expresión altanera, me dan ganas de... de retorcerle ese cuellito frágil hasta que deje de mirarme así. Pero al mismo tiempo siento un asco inmenso a tocarla, incluso si fuera para retorcerle el cuello. No merece que la toque ni con un palo. Me dan asco sus manos, que son tan pequeñas como las de un ratón, me da asco incluso cómo las mueve al caminar, como si creyera que al moverlas así parece más delicada... Cuando las puso sobre mí, tuve que controlarme verdaderamente para no rompérselas en ese mismo instante. Habría podido. Sé que habría podido.
Pero si lo hubiera hecho, me habrían expulsado; este colegio insiste en la convivencia. Debo tener clases con ella. Debo incluso formar pareja con ella en clase. Encantamientos. La estúpida llegó tarde, corriendo y con dos zapatos diferentes. ¿Crees que Flitwick la castigó? Lo dudo mucho. Él nos puso en parejas y por supuesto, me correspondió trabajar con Roberts. Ella estaba muy orgullosa de que su insignificante hechizo glacius salió a la perfección. Yo hubiera podido hacer ese hechizo con los ojos cerrados, pero estaba distraído. Me daba asco ese aroma floral que parecía emanar de ella, al parecer era su shampoo. Cada vez que agitaba el pelo ( y lo hacía bastante) manaba ese olor directo a mi nariz. Y fue así toda la maldita hora.
Ese aroma quedó en mi mente grabado a fuego. Violetas, al parecer. Ahora mismo, si cierro los ojos, puedo recordarlo a la perfección. Sé que parece raro, pero supongo que los aromas desagradables son más fáciles de recordar para mí.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro