❝ Si el diablo estuviera dormido, él lo despertaría por completo.❞

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El desastre se definirá con el nuevo mundo que se infecta de humanos que desean desgarrar carne con sus propios dientes. Nadie puede sobrevivir demasiado tiempo estando solo en la tierra de muertos vivientes. La cordura de la mente se pierde y el cuerpo pierde rumbo entre tantos humanos muertos que devoran a todo aquel que se cruce en su camino sin rumbo por la ciudad infectada.

Los gobiernos no han dado una respuesta ante lo que sucede porque nadie sabe en el realidad cuan infectada esta la ciudad del todo, el apocalipsis esta comenzando apenas ahora.

Los doctores reciben un llamado de emergencia en todo el hospital cuando un paciente sujetado a una camilla intenta morder a los paramédicos que lo llevan hacia dentro del hospital cuando su cuerpo presenta heridas múltiples en todas sus extremidades y la sangre brota de estas como también de su boca hambrienta. 

La camilla con ese extraño paciente sobre ella es dirigida por muchos paramédicos con deprisa hacia la sala de enfermería para que muchos doctores que aguardan allí puedan examinar la situación y saber que decisión tomar luego con ese paciente.

— ¡Paciente herido, múltiples heridas... ¿Dientes humanos? — Dijo un doctor que lo examinaba con cuidado cuando este paciente intentaba abalanzarse hacia el con intención de morder y eso alertó a todos los doctores alrededor de la camilla, incluso enfermeras asustadas por la apariencia de ese hombre con un rostro con sangre en sus labios como su dentadura.

—¿Qué ocurre? ¿Por que intenta morder a cada uno de nosotros? Sus heridas dan miedo, es la primera vez en mi vida al ver una situación tan atroz como esta. —Expresa una de las enfermeras presentes en la sala y rápidamente se aleja del paciente con un rostro asombrado.

—¿Aun conserva su vida?  Tantas heridas pueden causarle la muerte rápida ahora mismo.

Todos los doctores y enfermeras retroceden cuando ese hombre sujetado con fuerza a la camilla, intenta abalanzarse a ellos con querer morder a todos pero solo puede gruñir hambriento y agresivo cuando enseña sus dientes manchados de sangre hacia los ojos de todos.

Sus rostros horrorizados al ver tal cuerpo herido era un completo shock y no sabían que decisión tomar ahora mismo. Ese hombre no parecía humano con tantas heridas en su cuerpo. Era difícil de explicar como seguía con vida.

—Esto es... inhumano. — Susurró un doctor que se quitaba sus lentes sorprendido y sin más palabras que decir cuando su mente se encuentra en blanco.

—¡Debemos ayudarlo! ¡Debemos sanar sus heridas! —Dijo el paramédico, quien tomó rápidamente un botiquín y se aproximó con rapidez hacia el paciente pero los doctores intentaron detenerlo pero fue tarde cuando el hombre herido aproximó con rapidez su cabeza hacia el brazo de ese paramédico.

La reacción lenta de los doctores y enfermeras por causa de un shock del momento, provocó que ese paramédico fuera herido en su antebrazo que por suerte logró zafarse de los dientes de ese paciente hambriento. Un grito desgarrador sacó a todos del trance en toda la sala y las enfermeras se aproximaron al paramédico herido, lejos del paciente.

—¿Qué haremos, doctor?— Preguntó una enfermera preocupada hacia uno de los doctores que se giro hacia ella con un rostro atónito.

No era suficiente tiempo para responder y tampoco para pensar cuando el paciente con una fuerza desconocida logro zafarse de los agarres de la camilla para moverse rápidamente hacia otro humano logrando abalanzarse sobre este y morder su cuello con brutalidad.

La sala de enfermería logró ser un desastre en pocos minutos mientras que en otra parte del gran hospital los pacientes esperaban con tranquilidad ser atendidos por doctores en sus respectivos consultorios como si nada ocurría.

Pero el anuncio de las autoridades en las noticias, transmitidas en televisores de los pasillos de todo el hospital, anuncian que las personas en las calles han comenzado a devorar personas sin piedad.

El caos comienza desde ahora. Los pacientes demuestran sus expresiones de horror ante las imágenes de personas comiendo de otras y rápidamente se ponen de pie en los pasillos mientras gritan desesperados del miedo por salir del hospital.

𝐂𝐀𝐑𝐍𝐀𝐆𝐄
Un día antes.

Todas las noches son lo mismo para un bailarín exótico. Dormir, comer y bailar. Los clientes millonarios de la ciudad lo adoran, todo el dinero es para él. Sus mejores movimientos de baile son para todo aquel adore comprar su cuerpo por una noche pero un bailarín como Park es tan costoso y difícil de obtener. El precio es tan alto que podrías pasar toda tu vida pagando por su cuerpo y jamás lo lograrás.

Todos creen que Park realmente ya no es puro de cuerpo porque corre el rumor que un millonario ya pagó por obtener su primera vez en la cama y la verdad es que el rumor jamás fue cierto pero ellos creen que Park no es puro. En realidad, Park siempre fue puro y jamás nadie lo ha tocado más allá de un toque en su mejilla. Nunca ha tenido su primer beso, tampoco su primera vez junto a alguien, es un secreto.

El secreto que debe mantener, ya que el club no acepta hombres puros y prefieren hombres impuros con experiencia para obtener más dinero cuando todos esos millonarios paguen por sus cuerpos en una noche.

Ni siquiera Park sabe cómo ha escapado de todos esos hombre que no han pagado lo suficiente para obtenerlo en la cama pero intentaron tocarlo más allá de un abrazo. Tenía buena habilidad en escapar de todos esos millonarios que intentaban aprovecharse de su cuerpo y les robaba su dinero cuando los golpeaba en sus cabezas para dejarlos inconscientes para luego escapar.

Dormir, comer y bailar.

Sus pies ya no duelen como antes cuando solía ser un novato en el club y ya no tiene vergüenza de bailar frente a tantos hombres que lo observaban con sus ojos deseosos de poseer algo tan costoso como Park.

En el club existe una regla que no permite que sus bailarines demuestren personalidades rebeldes ya que pueden ser expulsados de por vida y eso es algo difícil para el rubio. Park solía poseer una personalidad única, rebelde, egoísta y muy descarada pero al ser el mejor bailarín, el dueño del club no puede expulsarlo ya que atrae demasiado dinero.

Y la realidad es que Jimin tiene todo al club comiendo de su mano gracias a que se ha vuelto el bailarín más cortejado de todo el club y todo el dinero cae solo para él. Los demás bailarines lo detestan cuando el rubio tiene el pasatiempo de robarle los clientes a todos los demás.

La seda roja que viste su cuerpo es tan costosa como un baile de ese ángel rubio que baila ahora mismo arriba de una plataforma redonda y alta pero lejos de todos esos hombres que lo observan con deseo pero con sus manos hechas puños cuando solo se contienen de no correr hasta el rubio y tomarlo allí mismo.

El movimiento de sus caderas puede enloquecer a todo aquel que las observe, sus ojos tiene una mirada encantadora y feroz que atraen pero hipnotizan. El maquillaje en su rostro lo vuelve sexy y sus expresiones se contemplan mejor. Sus manos emitan el movimiento de un abanico elegante al cerrarse para crear un movimiento al ritmo de su cuerpo en movimientos lentos y sensuales.

La iluminación del salón del club se tornan de color rojo como su vestimenta delicada y provocativa que no deja nada a la imaginación. Su torso desnudo decorado de pequeños diamantes pegados a su piel aceitada, la mitad de su rostro cubierto con una tela roja que evita mostrar sus belfos gruesos y su nariz, solo sus ojos estan expuestos.

Sus pies desnudos bajan de la plataforma cuando su presentación acaba y debe improvisar a su siguiente parte del show. Camina y baja cada escalón de la plataforma como si fuera un felino en busca de un hombre. Movimento de caderas y una caminata sensual hasta llegar al sector de múltiples mesas redondas dónde se encuentran demasiados hombres sentados bebiendo sus tragos mientras lo observan.

Su espalda desnuda y delgada es sensual a la vista porque muchos pueden contemplarla y desear besarla mientras imaginan que tienen a ese rubio entre sus brazos en una noche de fantasía. El bello tatuaje rojo de un dragón decora su espalda tan bien que los ojos de todos sus clientes no pueden dejar de contemplarlo cuando les da la espalda.

Sus piernas se mueven en una caminata felina y sus caderas siguen el mismo movimiento sensual de un lado a otro sin ser tan exagerado. Su cuerpo se detiene repentinamente entre tantos hombres que lo observan sin poder tocarlo pero el rubio demuestra su postura recta mientras su mirada encantadora observa a cada cliente a los ojos. Todo su cuerpo es perfecto de un bailarín. Es envidiable y su sensual figura es difícil de obtener.

Se aproxima a un hombre al azar y sus delicados dedos acarician la mejilla de ese hombre pero se aleja rápidamente cuando este millonario intenta devolverle la acaricia. Se niega y voltea hacia otro cliente para acariciarlo de la misma manera, así repetidas veces con cada hombres, alimentando cada fantasía que tenían esos millonarios con tocarlo y desean hasta doler poder tenerlo alguna vez.

El rubio pasa lentamente sus manos por su torso desnudo frente a un hombre intentando alimentar sus fantasías en las que Park es protagonista. Distrae al hombre con ese movimiento y sabe que ahora puede robarle su dinero de su traje cuando se aproxima a él lo suficiente para hacerlo para después alejarse como si nada hubiera sucedido. Ocultó el dinero dentro de sus telas y continúo con su siguiente víctima.

Cuando cree que le arrebato suficiente dinero a sus clientes, entonces vuelve a sus bailes lentos cerca de todos esos hombres y ignora todas sus miradas llenas de lujuria. Acaricia su propio cuerpo antes de darse la vuelta en regreso a la plataforma de baile pero es interrumpido por un grito de horror en todo el club y se paraliza cuando muchos bailarines corren fuera de sus habitaciones hacia el salón donde se encuentra el rubio.

Todos los clientes se ponen de pie rápidamente ignorando que Park se encontraba entre ellos y solo posaron toda su atención en extraños gruñidos que provenían de los pasillos del club. Nadie dió un paso más hasta que se oyeron múltiples pasos en dirección hacia el salón acompañado de gruñidos como si fueran animales.

El rostro del bailarín rubio se volvió horrorizado cuando sus ojos observaron como se aproximaban por los pasillos humanos heridos gravemente y con sus labios cubiertos de sangre como también sus dientes.

—¿Qué-

No podía moverse. Su cuerpo se paralizó cuando todos esos humanos corrían hacia los hombres del salón con fuertes ganas de devorarlos y presenció cómo eran devorados. Los gritos de dolor de todos esos hombres bajo los dientes de otros que rasgaban sus carnes con facilidad y hambre.

Park subió a la plataforma rápidamente con demasiado miedo recorriendo su cuerpo completo y luego observó como algunos de esos humanos corrían ahora hacia él con más ansías de comer su cuerpo. El rubio no se quedaría allí y fue así que corrió hasta su camarín saliendo por la parte de entrada de la plataforma.

Corrió por los pasillos sobre sus pies desnudos y intentó buscar con su mirada su camerino mientras que en el camino se chocaba con muchos bailarines que no comprendían lo que sucedía con Park, algunos de ellos rieron por su comportamiento torpe y miedoso pero se llevaron una sorpresa de horror cuando observaron al final del pasillo un montón de zombies corriendo y chocando con las paredes en busca de carne humana.

Lamentablemente, esos bailarines no lograron salvarse con rapidez ya que sus mentes se bloquearon de sorpresa y cuando intentaron escapar ya era demasiado tarde porque se encontraban siendo devorados mientras que desde sus labios gritaban por ayuda. Park podía oírlos desde lejos gritar por ayuda pero no podía ayudarlos ya que podría acabar como ellos.

Sus lágrimas se deslizan por sus mejillas rosadas levemente y muerde su labio inferior de miedo pero logra entrar a su camarín. Bloquea la puerta con un armario algo pesado pero las fuerzas de querer sobrevivir lo ayudan a mantenerse a salvo y se aleja de la puerta bloqueada.

Puede oírlos correr por el pasillo buscando el cuerpo del bailarín gracias a el exquisito aroma del rubio que se encontraba en el aire del ambiente y golpean la puerta del camarín en busca de él.

Park choca su espalda contra una pared y se desliza por esta hasta sentarse en el suelo mientras abraza sus propias piernas desnudas. Su cuerpo se eriza y siente miedo cuando sabe que estar atrapado de esta forma le hace imaginar cuánto tiempo podrá sobrevivir aquí. Tiene el horror recorriendo por su sangre y sus ojos dejan que las lágrimas caigan por sus mejillas.

Los gruñidos no cesan, esos zombies no se detienen con sus gruñidos hambrientos desde el otro lado de la puerta y Park lleva sus manos a cada oreja para no seguir escuchando.

—¡Cállense! ¡No, no, no!

Ya no quiere oírlos. Puede oír incluso los dientes de esos zombies castañar de hambre y realmente es molesto pero muy aterrador.

Aún no sabe cuándo fue que sus ojos se cerraron esperando a que alguien lo salve de ese nuevo infierno.

[Dos horas antes del desastre.]

Y como todas las noches, al salir del club, aquellos miembros de una pequeña pandilla siempre lo acorralan en el callejón del club con la intención de obtener el dinero que Park debe a causa de una deuda que su propio padre le dejó y nunca le importó si su hijo podía sufrir en su lugar.

—¿Te olvidas de pagar nuevamente?

Su pequeño cuerpo se siente atrapado entre la pared húmeda del callejón y los cuerpos de esos tres hombres con malas apariencias además de malos rostros de enojo provocado por ese bailarín.

El hombre frente a él que le preguntó segundos antes, vuelve hacerlo una vez más para que el rubio se asegure de escuchar cada palabra de sus labios.

—Tu padre tiene agallas de escapar y dejar a toda una pandilla esperando por el dinero que debe pagar su deuda. ¿Ahora trabajas aquí? Es buena manera de obtener dinero más fácil, ¿No crees? Bailarín exótico. —Las última palabras de ese hombre fueron en un tono de burla hacia Jimin, quien bajó su cabeza con miedo de ser golpeado nuevamente. Tenía miedo a la violencia y esos tipos le causaron mucho miedo a ser golpeado.

—Juro pagaré la deuda, aún debo obtener más dinero. Ya casi obtengo el precio de la-

Y sus rosados labios se apretaron con fuerza cuando la punta del bate del hombre a su derecha chocó a un lado de su cabeza y contra la pared detrás de esta. Ese sonido de choque del objeto provocó que el oído de Park sufra un pequeño aturdimiento.

—¿No has escuchado lo que decimos? Paga ahora o mueres. No lo entiendes aún. ¿No crees que llevas mucho tiempo intentando pagarla? Seguramente tu baile no sea del mejor si el dinero aún no ha llegado a nuestras manos, angelito.

—No es cierto. No volveré a pedir más tiempo del que me han dado, lo agradezco, puedo pagar la deuda esta noche. — Susurró con miedo aquel bailarín carizbajo.

—Mas te vale, sabes que si no pagas a tiempo, algo más lo hará. —Dijo el hombre a su izquierda mientras tomaba su mentón para observar esos ojos azules como el oceano en el día y contemplar su expresión de miedo que lo volvía todo un ángel con ese cabello dorado. —Tu cuerpo puede pagarnos, ¿No es lo que deseas o si?

Jimin negó rápidamente mientras sus ojos azules se acumulan pequeñas lágrimas de miedo y su mirada de miedo se conectan con los ojos rudos de ese hombre, quien siente que puede caer a los pies de ese ángel con una apariencia hermosa. Y vuelve a hablar el hombre frente a él.

—¿Sabes que es lo que me pone tan triste?

El bailarín vuelve a negar y desvía su mirada hacia el hombre frente a él. Su mentón es tomado ahora por el mismo hombre que le habla otra vez, quitando la mano de allí del otro hombre a su lado.

—Me pone tan triste de que tengas que pagar una deuda por tu padre. Si yo fuera otra persona, quizás podría dejarte pasar la deuda y pagarla todo yo mismo para no verte sufrir, bonito. —Dijo el hombre para luego soltarle el mentón con fuerza y abofetear su mejilla sin aguardar más tiempo.

Park llevó una mano a su mejilla golpeada y su piel se siente arder por el picor de la palma de la mano de ese hombre que estrelló en su rostro. Deseó dejar salir sus lágrimas de miedo pero es mejor retenerlas porque sabe que esos hombres odian verlo llorar.

— Será mejor que pagues o ese golpe que acabo de darte será peor la próxima vez.

Y fue así que los tres hombres se marcharon del callejón riendo entre ellos en la manera que logran intimidar al rubio mientras que en sus mentes desean que la deuda sea paga con el cuerpo del rubio. Lo deseaban, deseaban a ese rubio y también deseaban que Park jamás logré pagar la deuda para obtener una excusa para obtener el cuerpo de ese bailarin.

Mientras tanto, el bailarín sufre por todo lo que debe soportar noche tras noche antes del club y después del club cuando esos hombres lo persiguen sea a dónde vaya. Lo intimidan, golpean su rostro como su cuerpo y sus palabras lo hieren como dagas en la piel.

Odia como es que su padre puede abandonar a su hijo en una situación como esta. Pagar una deuda que su padre tenía y luego decir que su hijo podría hacerlo en su lugar. Si no fuera por la deuda, Park sería feliz estudiando su deseo de ser un doctor.

Mentalmente, Park no se encuentra en el club. Está perdido, no sabe cómo acabará su vida y no puede percibir que sea un buen camino el que ha tomado ahora mismo. No ve un futuro más allá de los días que comienzan a pasar, se ve a él mismo siendo golpeado todo el tiempo y bailando para personas que no desea ver nunca más en las noches.

Saca un cigarrillo del bolsillo de su abrigo largo y oscuro, luego saca un mechero del mismo bolsillo y lleva el cigarrillo entre sus gruesos belfos para luego abrir el mechero con el objetivo de encender la punta del cigarrillo. Logrando encenderlo, sus labios inhalan un poco y luego lo deja salir todo en el aire del ambiente.

Cada calada que le da a su cigarrillo, sus lágrimas caen, rodan y se deslizan por sus mejillas rosadas provocadas por el frío mientras su mente se pierde lejos del mundo en el que vive ahora.

Las personas como Park no desean seguir con una vida donde la comida es escasa, el dinero que recibe es porque siempre baila en un club de hombres perversos, dormir en una casa absolutamente casi en ruinas, el dinero nunca es para él porque siempre es para la deuda y al final del día jamás tiene un billete para pagar su comida. Su hambre aumenta mientras que dormir le crea pesadillas de violencia dónde le recuerdan como es golpeado y los hematomas de su piel se cubren con maquillaje. Sus huesos duelen de tanto bailar para nada y su mente se rompe en pedazos cada día porque lo que deseó nunca fue esto.

Todas las jodidas noches debe cuidar sus propias espaldas para que ningún hombre lo secuestre en la noche al salir del club y se aproveche de su cuerpo cuando camina hacia su vieja casa. Tiene miedo de todo aquel que puede golpearlo y tiembla cuando la pandilla esta cerca de él.

— Desearía estar muerto.

☣

❝La muerte, las decisiones de vida o muerte y la existencia de una humanidad que se encuentra muerta.
¿A dónde podemos ir los sobrevivientes como tú y yo?
Rezaré para ambos porque desde mi punto de vista este mundo es una carnicería para un carnicero.❞ — CARNAGE (Carnicería).