Ojalá la vida un día se apiade de mi y de mi mala suerte.
Ojalá la vida un día decida compartir un poco de felicidad a mi vida.
Ojalá la vida un día te presente ante mi,
Prometo quedarme quieta
Inmóvil de ser necesario
Quizá por dentro se produzca un terremoto, pero prometo que me mantendré en calma.
Si la vida me lo permite solo voy a sonreír;
Quizá darte la mano.

No necesito más
Solo verte;
Sentir por primera vez que no corro detrás de ti,
que no persigo tu sombra,
que no vivo de "casi alcanzarte"
sino mirarte de frente.
Rostro a rostro y sonreír.

Y aunque no me reconozcas o finjas no conocerme
estaré bien, todo estará bien.
¿Sabes porque?
Porque yo no he olvidado tu rostro
Yo seré suficiente por los dos
Yo te recordaré.