019
🕴🏻Capítulo corto🕴🏻
Gilbert Blythe
—¡Si! Claro que si me quiero casar contigo.— respondo, las lágrimas cayendo por mis mejillas como cascadas. Alizee me pone el anillo en el dedo y salto de emoción llevándola conmigo y haciéndola caer. Rodamos por la arena de la playa y ella se une a mi en el llanto.
—¡Nos vamos a casar!— chilla, aún llorando y me abraza con fuerza.
—Eres una tonta, yo quería pedírtelo a ti.
—Eso es muy normal para nosotros. La idea fue de Bash, me ayudó a elegir el anillo.— aún tirados en la arena, pongo mis manos en sus mejillas retirando sus lágrimas con mis pulgares, llevándome también los granos de arena.
—No puedo creer que al fin serás mía para siempre, y no podré gritárselo a todo el mundo al volver.— ella sujeta mis muñecas y acerca nuestros rostros, sus manos se mueven rápidamente a mi nuca y se lleva todo mi aliento con un beso.
—Te amo.
—Te amo.— repito.
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—Ay, ya ni al caso Gilbert. Admite que eres un mandilón.— dice Bash.
—No soy un mandilón.— refunfuño, con un puchero. Levanto la cabeza de las piernas de mi prometida para mirarla y pongo ojos tristes.— Cariño, dile que no soy un mandilón.
— Gil no es un mandilón, Bash. — dice sin levantar la vista de su libro.
—¿Entonces qué es, el de los pantalones en la relación?— suelta una risotada y Alizee lo sigue con otra.
—¿Qué es tan gracioso?— me siento derecho y Bashse limpia una lagrima de la mejilla, resultado de tanto reírse.
—Por favor, Gilbert. Alizee mata las cucarachas por ti.
—Cariño, anoche no te dormiste hasta que te conté un cuento.
—Primero que nada, eso pasó en confianza y discreción, Bash no tenía por qué enterarse de eso. Me hiere que no respetes nuestra privacidad. — dramatizo. —Segundo, eso solo que porque tuve una pesadilla.
—Niñita.—Sebastian finge toser.
—¡Oye!— vuelvo a quejarme. —Soy el hombre de la relación, literalmente soy quien lleva los pantalones.
—Sigue diciéndote eso mientras miras la sortija que ella puso en tu dedo, amiguito.
—Ya no lo molestes, Bash.— vuelve a decir Alizee y le saco la lengua a mi amigo disfrutando mi victoria.
—Yi ni li milistis, Bish. Por eso me caes mal, estúpido niño blanco e insípido... Gilbert, ¿no comienzas hoy tus prácticas con ese doctor de Charlottetown?
Me levanto de las piernas de Alizee de un salto, quedando sentado aún entre ellas con el corazón latiéndome casi inmediatamente a un paso que no creo sea muy saludable.
—¿¡Eso es hoy!?— Alizee me pone la mano en la cabeza y me empuja hasta que me vuelvo a acostar.
—Te está molestando, es domingo.
—¡Maldito Bash! Se lo voy a decir a Mary.
—No me importa, yo no soy mandilón, como tú.
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Este libro ya llegó al punto que siempre me da flojera en los fanfics, tener que volver a ver la serie para poder saber con exactitud qué pasa y editarlo.
Al menos ya se que pasará y como terminará el libro, así que eso hace todo más fácil :D
Gracias por leer y lamento la demora ❤️
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