Taehyung apretó la mano del alfa con fuerza, sintiéndose nervioso mientras esperaban ser llamados por la recepcionista y pasar a la oficina. Jungkook llevó su mano hasta sus labios, dejando un rastro de su aroma en busca de calmarlo conforme esperaban. 

—Me siento nervioso y ni siquiera puedo entender porqué, ya he hablado con él anteriormente.—Murmuró, soltando una carcajada. 

—Es normal, sabes que no lo estamos visitando por alguna razón que tenga que ver con alguna invitación o pedido de él, sino por algo serio.—Inclinándose, olfateó su mejilla hasta provocarle una pequeña risa que lo hizo sonreír.—Tranquilo, todo saldrá bien. 

—Lo sé, pero mi lobo aún así se encuentra inquieto con ello.—Soltando un suspiro, cerró los ojos al mismo tiempo que escuchó su nombre ser llamado. 

—¿Señores Jeon?—La voz de la mujer los hizo levantar la mirada.—Pueden pasar, el señor Lee los estará recibiendo en su oficina. 

El alfa fue el primero en levantarse, ayudando al omega mientras sostenía su mano antes de pasar a un costado de la mujer.—Gracias.

Caminaron con las manos entrelazadas por el pasillo, encontrando en la última puerta del pasillo el nombre de "Lee Jiyun" tallado en una placa sobre la madera. Tocando la puerta, esperaron el permiso para entrar, siendo recibiendo por un hombre con una gran sonrisa mientras se apartaba para dejarlos pasar. 

—Kim Taehyung, el mejor repostero de la ciudad.—Halagó con un tono emocionado.—¿Qué te hace venir el día de hoy? 

—Buen día, señor Lee.—Ofreciendo una reverencia, sonrió.—Venimos por un asunto importante, creemos que usted nos puede ayudar. 

El hombre se percató de la presencia del alfa detrás del omega.—Oh, ¿Usted me es conocido...? 

—Jeon Jungkook, nos hemos encontrado en un par de eventos, pero tratarnos de manera directa no lo hemos hecho.—Tendiendo su mano en dirección contraria, esperó para estrechar sus palmas. 

—Señor Lee, él es mi alfa. Jungkook, él es el señor Lee, ya nos hemos conocido porque en varias ocasiones me pidió ayuda para la organización de un par de eventos. 

—Y debo confesar que son los mejores postres de toda la ciudad.—Con una carcajada, los guió a través de la oficina para ofrecerles sentarse.—¿A qué se debe su visita? Puedo sentir que es algo sumamente importante. 

—Nos interesa saber si usted nos puede ayudar con un par de cosas, creo que usted puede tener noción del tema o puede darse una idea.—Comenzó a hablar el omega, apretando el sobre amarillo entre sus manos. 

—Por supuesto, ¿En qué les puedo ayudar? 

—¿Conoce a Kim MunHee? 

La pregunta lo tomó desprevenido, pero asintió.—He tratado con él un par de veces, anteriormente estuvimos cerrando un contrato. ¿Pasa algo con él? 

Compartiendo una mirada, fue el turno del alfa hablar.—¿Es consciente de lo que se dedica Munhee? 

—Me comentó que ayuda a remodelar negocios, le gusta el diseño y me enseñó su portafolio, debo confesar que su trabajo me parece impecable y tiene una buena técnica.—Mientras divagaba, solo pudo observar un gesto de extrañeza de la pareja, haciéndolo detenerse.—¿Su trabajo tiene algo que ver con su visita por aquí? 

—MunHee anteriormente fue un socio de mi empresa; básicamente le puedo decir que mi trabajo es poder financiar proyectos a quienes lo necesitan, y entre mis clientes él era muy destacado por sus pagos puntuales y porque siempre me pareció un buen hombre. Al principio me pareció una persona excelente por su capacidad de trabajo, la forma en que siempre llegaba a contarme todos sus proyectos fue de sorprenderme, pero cuando la primera persona llegó a reclamarme de porqué financiaba a un hombre que le quitó su negocio, comprendí que cometí un error en confiar en alguien como él.—Dejando el sobre en la mesa de centro, desplegó documentos y fotografías encima de la superficie.—No sabía en ese momento de qué se trataba, pero investigando logré recolectar varios testimonios de sus desfalcos a negocios ajenos. Llega a persuadirlos con ofrecer unan remodelación a los lugares, si bien su trabajo es muy bueno, los convence con su portafolio y cuando aceptan, en el contrato se estípula que si no están de acuerdo con la primera remodelación, como compensación de ambas partes implicadas él se encargará de darles una cantidad de dinero, pero a su vez él se quedará con el local por la inversión de su trabajo. El dinero que les ofrece ni siquiera es la cantidad suficiente para volver a abrir un nuevo negocio, él simplemente se adueña del lugar y no vuelven a saber de él porque trabaja por medio de representantes. 

Jungkook remarcaba cada palabra de la copia del contrato, detallando los puntos que hacían perjudicar a las personas y favorecer únicamente al alfa. Conforme el alfa contrario escuchaba, su rostro se distorsionaba a una de horror, escuchando de manera atenta todo lo que tenían por decir mientras las evidencias se mostraban delante suyo. 

—La última persona a la que recurrió por este medio es a mi omega, llegó a la cafetería con la intención de apropiarse de ella. Estamos tratando de detenerlo, pero no solo para que no perjudique a Taehyung, sino que se haga pagar por sus acciones y ayudar a las personas que ya perdieron sus negocios por culpa de él, pero creemos que usted de alguna manera pudiera ayudar con nuestro testimonio.—Tomando la primera fotografía con la cual el omega había reconocido la conexión, la colocó frente a todos los documentos.—Trabaja por medio de su constructora, esto es un problema que puede no solo perjudicar a MunHee, sino a usted y a toda la administración como signo de poder y autoridad. 

—Yo... Sinceramente no sé qué decir, él me mostraba siempre sus progresos en sus trabajos y jamás ví ninguna anomalía, no me podría imaginar que todo esto ocurría. 

—MunHee logra trabajar muy bien bajo la mesa, su movimiento sorpresa es una vez que termina la remodelación y no es el gusto del propietario, es cuando saca las cláusulas del contrato y se apropia del lugar. Teniendo el consentimiento escrito en el contrato, no hay mucho por hacer porque de cierta manera es legal en ese aspecto, pero la técnica de por medio, siendo tan deshonesto es lo que hace ver mal el acto. 

—Señor Lee, si usted nos puede ayudar de alguna manera con todo esto, algo en que nos pueda indicar qué hacer o cómo proceder...—El omega expresó una mueca cansada, observando al mayor.—Sé que todo esto es algo nuevo para usted, es demasiada información de la cual no estaba enterado y es algo delicado de ver, pero le pido de su ayuda porque no quiero perder mi cafetería. Con mucho trabajo he conseguido abrir esta segunda sucursal, usted me conoce desde hace tiempo y sabe cuánto aprecio mi trabajo porque es algo que disfruto hacer, y por una negligencia mía de no estar más atento es por lo que estoy a punto de perder mi negocio. 

El alfa tragó en seco, intercambiando miradas con la pareja frente suyo. Consternado por la información, volvió su vista a todos los documentos presentados mientras trataba de encontrar alguna respuesta razonable, pero nada llegaba a él. 

—Sabes que me gustaría ayudarte, Taehyung. También soy consciente de todo lo que te has esforzado para abrir un segundo local y lo bien que te va, ¡Todos aman tus postres!—Sonrió nervioso, pasando una mano por su cuello.—Pero en estos momentos no encuentro la forma de proceder. No tengo una respuesta, o no una que pueda ayudarlos ahora, pero si me dan algo de tiempo puedo hablar con MunHee para que desista de esto, o encontrar alguna cláusula legal que pueda romper su contrato. 

Jungkook frunció la frente, incrédulo por lo que escuchaba.—Esto no se trata de ayudar solamente a mi omega, señor Lee. Estamos presentándole todo un caso concreto de los desfalcos hechos por MunHee, no solo estamos aquí para tratar de deslindar a Taehyung de esto, lo que queremos es detenerlo porque solo seguirá perjudicando a más personas que no tienen porqué perder sus negocios si algo se puede hacer contra él. 

—Lo entiendo, señor Jeon.—Soltando un suspiro, cerró sus ojos.—Lo veré con el departamento legal de la alcaldía, y me pondré en contacto tan pronto como obtenga respuesta, pero no estoy seguro de cuánto pueda tardar. Si les puedo ayudar de alguna otra manera, pueden hacérmelo saber, pero por esta parte tomará tiempo. 

Taehyung asintió, comprendiendo sus palabras aún y cuando se sentía mal por su respuesta.—Está bien, agradecemos de su tiempo. Estaremos al tanto de su resolución, de todas maneras tiene mi contacto agendado. 

—Lo siento por no poder ayudar de alguna otra manera...—Se levantó al tiempo que la pareja lo hizo, acompañándolos a la puerta. 

Sin decir una palabra más, el alfa guió al omega fuera de la oficina con un gesto serio, Taehyung se despidió con una pequeña sonrisa antes de ser llevado por el pasillo en dirección a la salida del lugar. Por medio del lazo y del aroma que desprendía su pareja, podía sentir su molestia por lo sucedido, y no fue hasta que estuvieron dentro del automóvil que decidió hablar. 

—¿Dejarás los documentos en su oficina? 

Asintió.—Tengo una copia de todos ellos. 

—Alfa, ¿Podrías calmarte por un segundo? Me estás poniendo nervioso.—Girándose sobre el asiento, acunó el rostro del alfa para lograr que lo viera.—Sé que no fue lo que buscábamos en realidad, pero es mejor tener eso a no tener nada. 

—Taehyuhg, el hombre está ciego por MunHee, puedo sentir cómo dudó de todo lo que le dijimos sin importar toda la evidencia. Podrá comprobarlo por su cuenta, pero preferirá posponer esa respuesta hasta que sepa qué hacer para deslindarse también. 

Sin saber qué más decir, bajó sus manos a su regazo.—Jungkook, ¿Y si cedo la cafetería? A estas alturas será difícil no perderla. Aún tengo la cafetería central, de todas maneras ahí comencé a trabajar y no será algo malo para mí, a lo mejor en un futuro pueda recuperar todo ello y podremos hacer como si nada ocurriera. 

—Pero no se trata solo de ceder y olvidar, omega. Sabes que su forma de trabajar no es buena, pero nadie lo detiene porque miedo o por no saber cómo hacerlo. Si tengo la oportunidad, haré lo posible para detener sus hazañas porque no quiero ni imaginar a cuántas personas más pueda afectar, ¿Sabes cuántas han recurrido a mí para ayudarlos a volver a financiar sus negocios? O, ¿Cuántas más han llegado pensando que apruebo ese tipo de negocios? Soy consciente del daño que hace y no puedo ignorarlo si tenemos toda esta evidencia reunida y no podemos hacer algo al respecto. 

Asintiendo ante sus palabras, se inclinó para depositar un beso sobre la comisura de sus labios, acariciando con una de sus manos la parte trasera de su cuello.—Te apoyaré en esto, aún podemos encontrar alguna forma para detenerlo, ¿Sabes algo de Namjoon? 

—Mi celular vibró estando allá, quiero suponer que se trata de él.—Con una última mirada al lugar, hizo una mueca.—Salgamos de aquí, en casa veremos qué otra manera procederemos. 

Solo deseaban tener más posibilidades de las que tenían contempladas.