022
Los besos del azabache provocaban un intenso cosquilleo en la piel del menor, los chasquidos resonaban en toda la habitación mientras los labios delgados presionaban en la piel de los hombros del rubio
La sensación de estar juntos hacia que el rubio sintiera una calidez en su corazón, las manos de Jungkook acariciaban su cintura y muslos con las yemas de sus dedos
Hacer el amor jamás se había sentido tan intenso
El rubio sonrió cuando los labios del mayor besaron su cuello causando un leve cosquilleo
~Oh Kookie...me da cosquillas
El azabache rio y volvió a repetir la acción
~ ¡Kook!
~ ¿Te da cosquillas mi amor?
~ Si...- las risitas del menor pararon conforme lo hicieron los labios del mayor, jadeantes y con brillos en sus ojos ambos se miraron, sus cuerpos estaban desnudos en una posición de cucharita
- Te quiero Jimin...
- Yo te quiero a ti
El azabache acarició las mejillas llenitas y rosadas del rubio, dejando un beso en la punta de la nariz del mismo, para luego bajar su mano en una caricia desde su mejilla hasta su vientre abultado
¿Vientre abultado?
El rubio bajo su mirada encontrando una pequeña pancita abultada bajo las sábanas
- También quiero a nuestro bebé.
Las palabras del azabache llenaron sus oídos y su corazón, de repente las lágrimas se apoderaron de sus ojos cuando las grandes manos de Jungkook empezaron a acariciar la pancita con delicadeza, mientras sonreía
Entonces Jimin supo que no podía ser real
Con una mano en el pecho se despertó asustado mirando la alarma en la mesa de noche, apenas eran las 6:00 AM, por lo tanto el sol empezaba a salir
Aquel sueño le había causado un estrago en su corazón, mirar a su alrededor en la habitación de Jungkook y darse cuenta que estaba solo, le hacía darse cuenta de su realidad
Paso sus manos con frustración por su cara mientras pensaba una y otra vez que hacer, su embarazo empezaría a notarse y si sacaba cuentas ya debía tener un mes, pues hace un mes Jungkook se había ido a dar inicio a su gira
¿Cómo se lo diría?
No quería hacerlo por vídeo llamada, no quería hacerlo a través de un teléfono, ellos necesitaban hablar, necesitaban llegar a un acuerdo o lo que sea necesario para que la paternidad sea compartida por ambos
Hoseok tenía razón, Jungkook también era responsable de ese bebé, no podía dejarlo solo ¿Verdad?
Con los ánimos por el suelo el rubio se levantó mirando a su alrededor, la casa de Jungkook siempre estaba bastante oscura a pesar de tener las luces encendidas, y eso se debía a que el mayor no dejaba entrar luz natural a través de los ventanales
Pero el no estaba ahora y quizás podía hacer eso ¿No?
El rubio se estiró un poco y luego empezó a subir las persianas de la habitación del mayor, mirando el amanecer tan hermoso con destellos naranjas que adornaban el cielo
Su cuerpo estaba caliente al igual que todo su entorno, de verdad la calidez de la casa del azabache era increíble, podía estar descalzo sin sentir un poco de frío, Jungkook era bastante afortunado de tener un hogar así solo para el
Jimin decidió que su mañana sería productiva, por eso antes de darse un baño caliente para ir a la universidad, el rubio quiso hacer un desayuno ligero, un café caliente quizás algunas frutas e ir con la batería recargada a clases
Y así lo hizo, solo que el tiempo le jugó una mala jugada y termino por ir tarde a la universidad
Termino de poner su pantalón holgado mirando la hora en su teléfono, estaba cinco minutos tarde, además de la espera en la parada y caminar hacia la estrada de la urbanización, sería un caos completamente
Sin embargo...
La mente del rubio empezó a trabajar y concluyó que solo por esta vez tomaría su auto, quizás lo estacione un poco lejos de la universidad así no llamaría la atención y listo
Si, era un buen plan
Así que con eso en mente el rubio puso su plan en marcha
A Jimin no le gustaba tener la atención de los demás sobre el, lo hacía sentir incómodo, por eso que lo vieran llegando en ese auto no era una opción, nisiquiera Hoseok sabía que Jimin tenía ese auto
Al llegar a su salón correspondiente notó que todos ya estaban calentando
No sabía que tocaba hoy, pero sea lo que sea el necesitaba distraer su mente, para luego pensar una manera de decirle a Jungkook que estaba embarazado
A pesar de que intento mantener su mente en aquellos pasos de tango, le fue imposible concentrarse llevándolo a cometer varios errores, frustrandolo por completo decidió que era mejor darse un respiro
- Oh Minie no te agobies si- Murmuro Hoseok acercandose a su amigo para darle apoyo - todo mejorará...
El rubio asintió desganado
- Lo se - termino por susurrar, aún que la situación no pintara sus mejores colores el debía mantenerse positivo en que todo mejorará, debía aferrarse a esa idea...
Cuando la tarde llegó si turno en el café también lo hizo, Jimin tenía mucha fuerza de voluntad, pues los olores de los pasteles y dulces en los mostradores le daban náuseas
Así que debía reprimir con todas sus fuerzas el vomito que aveces amenazaba con salir, Jimin necesitaba el empleo, sus cuentas no se pagaban solas, además de la comida y las pocas cosas personales que podía adquirir
No era demasiado pero era lo necesario para el estar bien
Tampoco vivía de manera miserable, de hecho considerando su edad, el hecho de que estudia y trabaja al mismo tiempo, se podía decir que Jimin tenía una buena vida
Entonces el pensamiento de su bebé lo hacía sentir triste una vez más, es que a pesar de audacia el vivía con limitaciones, unas muy necesarias para tener el control de sus ingresos, ¿Cómo haría con el bebé?
Si bien eran una máquina de gastar pañales y leche, los mismos insumos que no eran muy económicos que digamos
¿Cómo le compraria ropa? ¿O una cuna decente? ¿Cómo podría siquiera vivir con el en ese departamento?
¿Y si lo daba en adopción?
¿Y si solo se lo daba a Jungkook?
¿Que estaba pensando?
Se sentía como un cobarde de lo peor pensado en la manera de como deshacerse de su hijo
Las lágrimas empezaron a picar en sus ojos, hasta que la campanilla anunció un nuevo cliente
Rápidamente Jimin limpió sus ojos y miro al frente intentando mantener una sonrisa
Pero para su mala suerte Kai estaba ahí, con una hipócrita sonrisa y su característica actitud coqueta
Como si quisiera conquistar a todo el mundo
- ¡Jimin! ¿Cómo...
- ¿Cómo te atreves? ¿Cómo puedes venir a verme la cara después de todo? Maldito hipócrita- el tono de voz del rubio era tan intimidante que incluso Kai tuvo que tragar grueso abriendo sus ojos con demasía
- Jimin...
- No vuelvas a nombrarme ni acercarte a mi, eres un traidor, eres de lo peor
- Yo...
- ¡Lárgate Kai! Ve y dile a ese Manager de cuarta que fallaste en el objetivo y que nunca engañare a Jungkook, ni contigo ni con nadie.
El rubio guío su mirada al ordenador fingiendo estar escribiendo algo en el, sin embargo aquello solo le servía de escudo para no romperse a llorar por la idea de que alguien estaba intentando hacerlo quedar mal delante del azabache, era algo inmoral y malvado para el
Sin embargo ninguno sabía que Jungkook estaba tan aferrado a Jimin que no iba a dejarlo ir por nada ni por nadie.
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