Escena XIV: La reunión de todos los lobos marinos para la segunda batalla

Fecha: 9 de enero del 2015 (Día)

Lugar: La vivienda de Obillo – El pueblo Lobullo

Personajes:

· Kapo

· Kupa

· Onina

· Obillo

· Lobo macho 1

· Lobo macho 2

· Lobo macho 3

· Lobo macho 4

· Lobo macho 5

· Loba hembra 1

· Loba hembra 2

· Loba hembra 3

(Descripción del lugar: La vivienda de Obillo es un espacio amplio que contiene los siguientes aspectos. Por el lado derecho, se puede apreciar una roca grande que se ubica sobre la arena. Esta roca tiene pinturas de colores marrones, blancos y negros. Estas pinturas representan a las orcas marinas y los lobos marinos. Por el lado izquierdo, se puede observar mucha arena marrón que luce oscura por el ambiente nocturno de la escena)

(Se abre el telón) (Ingresan Kapo, Onina, Kupa, Obillo y todos los demás lobos machos y hembras caminando por el pasillo derecho hacia el escenario) (Todos los lobos marinos comienzan a hablar entre ellos) (Kapo comienza a calmarse y se muestra reflexivo a todos los demás personajes de la escena)

Kapo: (reflexivo a Kupa) Padre, hemos ganado esta batalla, pero las orcas no se rendirán hasta destruirnos. No sabes cuánto detesto a Yenko que sería capaz de matarlo para honrar la memoria de Jilo y proteger a la isla

Kupa: (honesto a Kapo) Hijo, puedo comprender tu molestia. Jilo fue un mártir de nuestro pueblo y eso no se puede negar. Era la única ave que habitaba con nosotros y merece ser recordado por todos los lobos que vivimos aquí

Kapo: (reflexivo a Kupa) ¿Será necesario que aumentamos nuestras defensas para protegernos? Yo conozco a algunos peces que podrían apoyarnos para distraer a las orcas, pero tendría que regresar al mar para avisarles sobre la guerra

Kupa: (honesto a Kapo) ¿Peces? Creo que yo también conocía a algunos peces y me contaron sobre dónde estabas. Ellos me dijeron que te llevaste un poco de alga proveniente del mar, Kapo

(Kapo recuerda a Girto, Huro, Motyo y Ijo cuando se los encontró mientras él exploraba el mar)

Kapo: (sincero a Kupa) ¡Ya me acordé! Los dos nos encontramos con los mismos peces y tal vez ellos serían útiles para despistar a las orcas con el fin de ganar tiempo para prepararnos bien en cada batalla.

Obillo: (sabio a Kapo)Kapo, considero que debes comunicarles con los peces que se encontraron tú y tu padre. Los grandes aliados que podemos tener en este momento son los que siempre nos seguirán en las grandes dificultades como la guerra en la que estamos ahora.

Kapo: (sincero a Obillo) Completamente de acuerdo, Obillo. Debo retornar al océano para comunicarme con los peces cuánto antes. Trataré de volver rápido para que las orcas no se den cuenta de mi presencia en el mar.

Onina: (alarmada a Kapo) Hijo, no demores mucho en regresar a la orilla por favor. Yenko anda hambriento junto a su grupo de orcas y no quiero que mueras. No deseo perder a otro miembro más de nuestro pueblo y menos a mi propio hijo, Kapo.

Kapo: (sincero a Onina) Madre, es cierto sobre el peligro que representa Yenko para mí. Creo que mejor regresaré al mar en otro momento para evitar que haya otra batalla imprevista por parte de las orcas hacia nosotros.

Loba hembra 1: (preocupada a Onina) ¿De qué tipo de peces está hablando Kapo? Esos peces deberían ser nuestros aliados o sino mejor es preferible que terminen como nuestro almuerzo dentro de nuestra barriga para acabar con nuestra hambruna diaria, Onina.

Onina: (honesta a la loba hembra 1) Desconozco el nombre de esos peces, pero Kapo ha dicho que los conoce y probablemente formen parte de nuestra defensa contra las orcas. Aunque yo no esté tan segura de confiar absolutamente en esos pececitos. ¡Debes vigilar a tuhijo! ¡Por favor!

Loba hembra 2: (intranquila a Onina) Te entiendo completamente, Onina. Cualquier animal marino fuera de la orilla es un posible enemigo para nuestra supervivencia en la isla incluyendo a los peces que menciona tu hijo. ¡Debes vigilar a tu hijo! ¡Por favor!

Lobo macho 2: (hambriento a la loba hembra 2) ¿Kapo teniendo unos amigos que son peces para comer? ¡Qué estúpido! ¡Mejor esos peces deberían ser nuestro almuerzo! ¡Mi apetito solo desea devorarse esos pescados de una vez sin vuelta atrás! 

Obillo: (sabio a el lobo macho 2) Lo más ridículo que escuché de ti es que relaciones los amigos de Kapo con tu propio bien. ¿Acaso no eres consciente que tener a los peces como aliados es beneficioso para nosotros?

Lobo macho 3: (impaciente a Obillo) ¿Sabes alguna forma de contactar con los peces? Cualquier medida rápida para nosotros puede dirigirse hacia nuestro favor, Obillo. Usted debe aportar alguna idea útil para ganar la guerra totalmente. Se lo ruego, Obillo.

Obillo: (sabio a el lobo macho 3) Usted carece de paciencia para escuchar mi propuesta de sabiduría. Esta guerra no es solo responsabilidad mía, sino la de todos los lobos que habitamos dentro de la isla. ¿Me entendió o se lo vuelvo a repetir? 

Lobo macho 4: (cansado a Kupa) Kupa, yo me encuentro muy cansado por la batalla que tuvimos antes ¿Crees que pueda reposar durante un par de horas para que mañana me encuentre mejor y más activo para pelear en la guerra?

Kupa: (honesto a el lobo macho 4) Está bien. Te recuerdo que, en cualquier día, tarde o noche las orcas pueden regresar hacia esta orilla para seguir atacándonos de forma salvaje y cruda. No bajes la guardia para que las orcas no se aprovechen de ti. En esta guerra, solo podemos confiar en nosotros mismo o al menos por ahora.

Lobo macho 5: (agotado a Kupa) Yo igual me encuentro fatigado, Kupa. Yo quisiera descansar para que luego ande más participativo en las batallas que vengan próximamente dentro del pueblo o en la orilla de la isla. Te lo suplico, Kupa.

Kupa: (sincero a el lobo macho 5) No te preocupes. Ahora todo el pueblo puede tomar un descanso mientras las orcas se encuentren lejos de nuestro territorio. Aunque debemos estar alertas por el posible regreso de las orcas. El peligro nos acecha desde ayer y no sabemos cuándo regresará

Obillo: (sabio a Kupa) Me agrada tu optimismo y tu empatía, Kupa. Solo te recomiendo que controles un poco tu frustración en esta guerra. A veces nuestras preocupaciones suelen causarnos un malestar en contra de nosotros. Te sugiero que no olvides mis palabras por favor.

Kupa: (honesto a Obillo) Obillo, gracias por tu sabiduría incesante. Mi frustración parece no terminar, pero tampoco ignoraré tus palabras. Mi malestar no será causado por mis preocupaciones, sino porque me importan las personas que amo. Valoro tus consejos, Obillo

Kapo: (sincero a Kupa) Padre, me parece que ahora podemos reposar por un corto tiempo para que mañana volvamos a estar activos y enérgicos como sucedió anoche. Hemos ganado y merecemos descansar lo más pronto posible. Me siento tan exhausto que ya no quiero caminar.

(Todos los lobos marinos rugen de forma cansada y se agrupan en un solo grupo para protegerse y defenderse de cualquier peligro) (Todos los lobos marinos quieren descansar y dormir)

(Música épica) (Todos los lobos marinos se retiran caminando en la arena del escenario por el pasillo izquierdo del escenario) 

(Cierre del telón) (Fin de la escena XIV)