Visita Corta
•Miércoles 8, Agosto del 74, 8 am•
•Miami•
~Alfred~
Los trasladaron donde el abuelo puede visitarlos seguido; era mentira que podriamos ocultarlo para siempre de él; así que los movimos cerca de su psicólogo y casa.
El tío Bear al enterarse, digamos que no fue lindo, incluso nos sacó de la casa, mandé a Sig a revisar en él y me informó que tuvo un colapso nervioso, algo que nunca creí que podría sucederle.
Literalmente aunque no nos guste, todos colapsan sin ellos, la manada no tiene a sus líderes que merecen, personas estables pero con la fuerza suficiente para ser pilares de nuestro mundo.
—¿Seguro te sientes bien para caminar? — pregunte ayudando a papá a levantarse.
—Alfred ya déjame caminar solo por favor. — súplica tratando de soltarse.
—Ya les dieron de alta, hay que regresar a casa, más tarde también deben ir a la cita con su psicólogo.
Ellos suspiran sin siquiera querer moverse.
—Antes de ir hay un lugar que debemos visitar antes. — El tío Phantom murmura.
—¿A dónde quieren ir? —Maight, algo cansado de estar también cuidándolo pregunta.
—El...el cementerio. — Creo que desean confirmar lo que vieron, incluso nosotros.
—Está bien, iremos más tarde.
—Ahora. — Evelyn ordena entre gruñidos.
—Bien bien, cálmense, hasta ahora los dejan salir del hospital. —Sigfrid ríe y aun con ese aire de miedo ayuda a Evelyn.
—¿Seguro que eso es lo que quieren? —Pregunto y ellos asienten sin siquiera pensarlo.
—Lo haremos solos, si necesitamos de ustedes les llamaremos. —no lo harán, de eso estooy seguro.
—Como ustedes quieran. — asentí y ellos desaparecen. —No los vigilen, quieren hacerlo por sí mismos.
•4:11 pm•
•Toledo•
~Narro~
Los tres portadores se dirigieron hacia el lugar donde su colapso empezó, las tumbas de sus conocidos.
—Este sitio siempre me ha dado pesadillas. — Fredd murmura acercándose a las tumbas.
—Bueno, no hay nadie aquí, ya nos podemos ir. — Phantom, incómodo habla pero al voltearse se encuentra cara a cara con su difunto padre. —Ay dios me acabo de orinar. —admite en voz alta sin siquiera pensarlo.
—Algunas cosas nunca cambian, aunque nos sorprendimos al ver lo que intentaron, y muchos también se enojaron por ello. El suicidio es peor, se quedarian atrapados. No se vayan, esta vez le dejaron la misión a los adultos, volteense.
Los tres al mismo tiempo se voltean, pero Fillet es el primero en tratar de escapar, sólo para ser sujeto por penumbras.
—¿No saludaras a tu propia madre Fredderick? —Cain ríe sentándose junto a la mujer. —Marta, te tiene miedo tu bebé. — ríe casi a carcajadas.
—Cain mejor regresa antes que los demás lleguen. —ella suspira viendo a su hijo.
—¿Por qué mejor no toman asiento? —ella sonríe lo cual su hijo niega entre lágrimas.
—¡Por favor vámonos, déjanos ir! ¡Esto es solo una pesadilla! —súplica entre llantos, su madre lo abraza tratando de consolarle.
—Mamá también te ama mucho, miren que tanto han crecido, ya creo hasta ver canas. — ríe sin soltarlo.
—Te extraño tanto, yo, perdóname, nunca quise lastimarte, lo juro, yo no, no puedo yo — murmura entre jadeos, queriendo abrazarla pero aun asustado.
—Está bien, los perdono y siempre lo hare, siempre estare con ustedes. —sonríe pero ve mal a Evelyn.
—Pero yo que hice? — pregunta asustada de la mujer.
—¡¿Que no le has hecho a mis hijos?! Y a mis nietos! —grita golpeando la cabeza de los tres. —¡Ustedes son irresponsables!
—Con razón dicen que las suegras son molestia. —Shadow susurra pero Marta la observa. —Oh no, me puede ver.
Cain ríe a carcajadas sujetando su estómago. —Si, si puede.
—Marta, Caín no molesten a los vivos. — escuchan una voz detrás suyo.
Ellos voltean esperando un rostro conocido, pero se decepcionan al no reconocer a la pareja a su lado. Aunque Evelyn observa los ojos violeta idénticos a los de su hermano Bear, pero el hombre de tez palida se asimila un poco mas a su hermano Cain gracias al cabello negro. A la mujer de cabello rojizo y ojos azules no se le asimiló a alguien que conocía, pero su esposo y sobrino notaron la similitud con Evelyn.
—¿Quién demonios son? —ella pregunta señalando a ambos, quienes con esa reacción estiran sus alas. —Oh también muertos, okay. Aun así ¿quiénes son?
—¿Cómo puedes estar tan tranquila? — la mujer pregunta acercándose.
—Ya sobrepasaron mi jodido límite del dia, solo con ver a Cain creo que superaron el límite del año. — responde enseñando sus colmillos como advertencia a que no se acerque.
—Tantos años te convirtieron en esto, una persona que pierde humanidad con el paso de los años, le has permitido demasiado a tu don, te consumirá junto a tu penumbra. —el hombre habla sujetando su rostro. —Eres casi idéntica a tu madre. —sonríe pero ella empieza a gruñir tratando de que la soltara.
—Ismael dejala ir. —Marta habló y él casi entristecido la suelta.
—¿No recuerdas nada? ¿No nos reconoces en lo absoluto? —la mujer también queriendo siquiera sentir su rostro pregunta.
El nombre resuena una y otra vez pero por alguna razón no lo reconoce.
—William hizo esto,te aparto de nosotros. — Ismael susurra negando.
—Son tus padres Evelyn. Bueno, nuestros padres. — Cain suspira acercándose y empujándola hacia ellos. —Ismael y Margaret Darek.
La mujer asiente y se acerca a ambos —¿Por qué no soy alta si ambos lo son? — fue lo primero que reclama lo cual hace reir a su padre.
—El carácter de tu abuelo, de eso estoy seguro. — sonríe y la abraza.
—Yo también quiero abrazarla. — Margaret sonríe y se une al abrazo.
—Que conmovedor, pero tenemos una misión, y el parlamento no es que tenga ya mucha paciencia con el primer intento fallido.
—¿Por qué quieren hablar con ellos tanto? —Phantom pregunta tratando de no acercarse a ninguno de ellos.
—No nosotros, pero como somos familia cercana pues nos enviaron a nosotros, pensaron que los demás serían buena idea pero al parecer ustedes se pusieron algo sentimentales. —Margaret ríe acariciando la cabeza de su hija.
—¿Y qué es ese tal parlamento?
—Solo dire que tienen un pase libre en la muerte, fue difícil de convencerlos, unos días en juicios pero la excusa de William funciono, pero por favor no lo arriesguen más, se estaban retractando al enterarse de lo que le hicieron a esos tres ángeles. —Ismael suspira y se aparta.
—Ellos no son ángeles, están bastante vivos, a menos que se hayan matado y sigan aquí.— Freddy habla y su madre solo le observa. —Ok, perdón.
—No están muertos, no estarian aquí en primer lugar, pero tampoco son portadores normales, es difícil explicar y solo podemos hacerlo con ellos. — Ismael suspira y Marta sonríe viendo a lo lejos.
—Es Miércoles. — Fredd susurra y ve cómo su padre deja caer el ramo de flores.
—Ya está, ya ya llegue a la demencia. —habla aceptando su estado mental.
—Viejo senil estoy aqui. — Ismael ríe y Margaret sonríe acercándose a Marta.
Christopher da un paso enfrente, pero de golpe corre hacia él, saltando a sus brazos y besándolo.
—Maldito idiota. — ríe y nota como los cuatro adultos, incluyendo a Caín, tenían las bocas en el suelo.
Margaret ríe a carcajadas y su hija se voltea hacia su dirección.
—"Cuando más arrugada la pasa, es más dulce la fruta." —Ismael se burla lo cual hace reir aun mas a Chris.
—¡¿QUÉ CARAJOS?! — Fredd grita sin entender nada.
—Ustedes no estarían aquí si William no hubiese interferido. Además los linajes necesitaban herederos, estábamos entre la espada y la pared.
—Literalmente. — Christopher rie.
—¿Ustedes sabían de esto? — Evelyn pregunta a su madre y suegra.
—Por supuesto que no al inicio, sospechaba que se perdía mucho tiempo después del trabajo, pero no tuve problema, ya conocía bastante a Chris, y tu padre me explicó todo desde que estaban en secundaria. Marta se enteró luego, pelearon si, pero también entiendo, es por eso que ustedes no tienen hermanos. Nos amamos y todo pero ustedes saben lo difícil que es olvidar a un portador si ya eres uno. Hija, Eve, eres tan obsesionada como tu padre.
—Entonces...¡¿papá es gay?!
—Bisexual Fredderick, tu mas que nadie deberia conocer la diferencia.
—¡No me importa lo que seas! ¡Eres amante del padre de mi esposa! —grita histérico.
—Y se mantiene bien para la edad. —Ismael susurra estirando los cachetes de su amado. —Arrugado pero bien, incluso en su estado fisico, viejo senil igual a tu padre.
—Insúltame una vez más a ver qué pasa. — le advierte también jalando sus mejillas. — Quisiera tener esa edad, me veía bien con todo mi cabello sin una sola cana. Te odio poste andante. te odio tanto que aun no puedo olvidar el sentimiento.
—Sigo aquí Chris. —Marta suspira y él tan solo la saluda. —Como Margaret dijo, no hay nada que los pueda separar, y al parecer ni la muerte o matrimonio.
—Entonces nos tuvieron a nosotros por? —Evelyn pregunta y su madre sonríe.
—Aunque no fue algo planeado no pudimos sacrificarte, y cuando la familia de tu padre se enteró tomamos la decisión de quedarnos contigo, a nuestra hermosa bebé. —sonríe y la abraza.
—Freddy fue porque mi padre me obligó. — Chris admite y su hijo lo observa ofendido. —Aceptalo que fuiste un accidente, si no hubiera regresado con Darek. — ríe y suspira cansado.
—Muy pronto Chis, ya solo aguanta un poco más.
—No insinues que él morirá pronto, le faltan como cuarenta años más. —Fred gruñe observando como sujeta a su padre.
—En verdad heredaron eso de sus padres, ambos linajes siendo inseparables, incluso en las siguientes generaciones. —Margaret sonríe pero su esposo le interrumpe.
—Como sea, no perdamos más el tiempo en ponernos al día, tendremos mucho tiempo en el futuro, por ahora necesitamos hablar con nuestros nietos. —suspira y sienta a Chris junto a una tumba, besándolo una vez más y haciéndolo desaparecer.
—Tales conejos en celo, ocho bebés y lo peor es que no tienen a ni uno junto a ustedes. — Marta algo decepcionada habló.
—Ya demostramos no ser buenos padres, no se quejen. ¿Quieren hablar solo con ellos o? — Phantom pregunta haciendo el llamado a su hijo.
Los tres de inmediato aparecen, ellos siendo casi tan altos como Ismael ante los ojos de todos.
—Ahí sus hijos si se hubieran quedado juntos. — Cain ríe entre susurros observando a Ismael.
—Chicos, ellos son sus abuelos, Ismael, Margaret y Marta. — Phantom habla pero Caín gruñó irritado.
—Y Caín, Phantom, yo soy tu abuelo Maight. — sonríe y el joven asiente lentamente observandolo directo a los ojos.
—Nos vamos. —él dice y los tres padres desaparecen.
—Si es un Black, nadie me ve directamente a los ojos sin mostrar emoción alguna por más de cinco minutos.
—Es perturbador lo que solo tus ojos pueden enseñar, Maight. — Alfred habla e Ismael sonríe.
—El parlamento tiene razón, estarán satisfechos al saberlo. —asiente y se acerca a ellos.
—No te atrevas a tocarme. — Alfred gruñe su cabello volviéndose negro. — Esos bastardos nos abandonaron, nos desterraron del paraíso, que se jodan. Nos quieren devuelta y se jodieron porque no vamos a regresar, o no por voluntad propia. — gruñe y los demás asienten.
—Luego hablamos. — Cain dice haciéndolos desaparecer. —Los vi nacer desde una nube, y esta vez no vere que sean consumidos por el pasado.
—El parlamento está arrepentido de haberlos desterrado, después de darse cuenta que les dieron una oportunidad, de lo que hacen con madre Nature.
—Ella no tiene nada que hacer en este tema. Es algo entre ellos y nosotros, no les incumbe en nada lo que hacemos o no en la tierra. — Sigfrid gruñe y Marta niega.
—Nos enviaron en son de paz, solo somos mensajeros.
—¿También desterraron a su mensajero o que? — Maight pregunta entre risas.
—La energía seguirá siendo extraída hasta que regresen al parlamento, ustedes saben que no los desterraron por querer, tenían una opción y decidieron caer, es un milagro que estén aquí. —Marta casi molesta por sus actitudes habla.
—Diganles que es todo un placer que se queden con la energía, pero jamás regresaremos al parlamento, no con vida.
—Eso parece ya no ser su decisión, ahora hay quienes decidan si lo harán o no, y por la información que recibimos Alfred ya está bastante atraído al tema.—Cain sonríe y una penumbra trata de golpearlo pero él esquiva. —Permitanos hablar con ellos, de ángel a ángel, sin superioridad.
—Los estamos vigilando. —Raguel advierte y sus cabellos vuelven a ser blancos por completo.
—¿Emm ustedes son? —Maight pregunta observando a los cuatro ángeles.
—Sus abuelos, pero antes de toda la charla, necesitan prepararse.Hay personas que están preocupados por ustedes, con dones similares y que saben que durante la adultez puede llegar a ser difícil si no liberan esa energía.
—Y vamos que otra vez somos bombas de energía, siquiera tenemos una luna llena. — Miaton hace berrinche tal niño pequeño, lo cual hace reir a su abuelo.
—No tendrán una luna llena, pero con cada paso de cierto tiempo empezaran a crear energía en cantidades colosales. Algo que están seguros que este mundo no soportará. —Margaret acercándose a Sigfrid sonríe, sujetando sus cachetes. —Se parece tanto a Chris. — sonríe y nota la raíz de su cabellera casi blanca.
—Y mamá se parece a ti, solo que tu eres amable. —ella sonrie abrazandola, sus alas saliendo de su camuflaje, ellos notando los detalles dorados ocultos entre el patron negro.
—Sus "protectores" estarán ayudando todo lo que puedan, empezando con el problema de la energía, no es mucho por ahora pero lo suficiente como para que puedan deshacerse del resto sin problema alguno. —Ismael habló y ellos asienten sin siquiera cuestionarlo.
—No entiendo como sus padres pudieron lastimar a tales personas tan hermosas y cachetonas. — Marta sonríe sujetando los cachetes de sus nietos.
—No toques mis cachetes mujer. — Frida gruñe tratando quitar su mano.
—Yo jalaré tus cachetes todo lo que quiera, son mis nietos que no he conocido hasta hoy. —sonríe y abraza a ambos.
—Sus padres ya pueden regresar y si quieren pueden irse, pero son bienvenidos en acompañarnos, solo será una pequeña conversación antes de irnos. —Ismael sonríe tomando asiento frente a una tumba.
—¿Cómo es allá arriba? — Maight pregunta de inmediato.
—Algún día ustedes lo verán por su propia cuenta, con tiempo. —Cain intenta no contarle más de lo necesario pero Maight niega.
—Sus hijos vendieron nuestras almas, ahora estamos atados a Luciferum incluso después de la muerte, esto es peor que el matrimonio.
—No es fácil negociar con él..hay que hablar con el parlamento sobre eso. — Ismael murmura empezando a frotar su barbilla. — No puedo creer que eso sucediera, ¿qué es lo que está pensando hacer con ellos ahí abajo? Incluso sabe que no son útiles si la energía lo quema, ¿entonces qué hará?
—Ahora entiendo de donde saco eso mamá de pensar tanto en voz alta. — Alfred ríe y su abuelo lo observa con una ceja levantada.
—Y tú has heredado las burlas de los Fillet. — habla tratando de ponerlo en su lugar.
—Al menos yo no tuve una hija psicopata y dejé que mi hermano empezara a cazar a mi familia. —sonríe y sus alas se estiran.
—La astucia de mi padre, serás un buen líder, si dejas las monerías de lado por supuesto.
—Gracias a dios no estuviste vivo mientras Evelyn nos crió, hubiese sido el doble de jaqueca tener que soportar a dos como ella. — Sigfrid suspira y se deja abrazar por sus dos abuelas.
—Me tomaré unas muy largas vacaciones de todo este dolor de cabeza de los portadores. — Wil suspira e Ismael rie sentandose frente suyo.
—Me recuerdas a mi durante la juventud, un líder nato que solo deseaba un vida pacífica, como vez llegue a la mitad de esta. — niega y Alfred toma asiento frente suyo.
—No somos iguales, eso te lo puedo asegurar.
—No, no lo somos, pero somos familia y tienes rasgos míos así como los tienes de tu madre y padre. No puedes negarlo, es genética, solo una pregunta, ¿ustedes heredaron algún.. tipo don de como ver emociones o algo asi? — pregunta interesado.
—Si preguntas por tu don, no, no lo heredamos,mamá lo hizo pero ella los huele, literalmente. Nosotros pues nos saltamos ese don, herencia de papá, saltamos el don pero no el suyo que es la manipulación de mentes. Lo que no entendemos es de qué parte hemos heredado las alas.
—Es un misterio que no podemos ayudarles en nada, queremos pero estaríamos en problemas grandes. Fue difícil contener a Caín durante tantos años. — sonríe y lo cual el nombrado le enseña el dedo corazón.
—Sip, es pareciente de maight. — Sigfrid asiente entre risas.
Los tres adultos aparecen de vuelta frente a sus padres.
—¿Ya hablaron? —Evelyn pregunta acaparando a sus padres, aunque más a su madre.
—Estarán bien, ¿podemos hablar de lo que pasa dentro la familia ahora? —Margaret suspira mientras frotaba la espalda de su hija.
—No está pasando nada grande, cosas pequeñas, no se preocupen por eso, nosotros nos encargamos. — Alfred asiente lo cual su padre niega.
—Casi te mueres en esa carrera y estoy segura que no quieren que él muera, ¿cierto? — Evelyn sonríe maliciosamente.
—Con el trato de almas que ustedes crearon por el momento no queremos eso. Pero es su vida, no podemos interferir, solo aconsejar. Y Evelyn, cariño, no seas cruel con tus hijos, se ganaron sus vidas justamente. —Marta sonríe lo cual hace que ella asienta.
—Aparte de eso, estoy haciendo mi trabajo junto a Importaciones automovilísticas blue, la mejor en compra y venta de piezas de autos Y autos. Encima representante número uno en las carreras de Blue, la tercera empresa más grande en el mundo. — sonríe orgulloso de sí mismo.
—¿TU ERES DUEÑO DE ESA MONSTRUOSIDAD? — Maight grita aterrado.
—Se cuidarme solo, invertir mis pagos en algo que daría frutos, no como ustedes que siguen esperando la oportunidad dorada que nunca llegará. — sonríe y su primo se pone pálido. —Ingresan millones por cada hora que transcurre, no tengo nada de que preocuparme por el resto de mi vida.
—¡Eres un bastardo alimentándose de nuestra empresa también! —Shadow grita y él empieza a reír.
—El tercer bastardo más joven y multibillonario en la década.
—Es un gen, saldrías igual que yo para manejar un negocio y sus finanzas. — ella sonríe orgullosa de sí misma.
—Eso lo sacaste de tu madre. — Ismael suspira y siento los ojos de su esposa sobre él.
—Me debes una parrillada bien cocinada Maight. —sonríe ocultando sus alas.
—Quemaré tu patio. — responde casi en llanto.
Caín se niega decepcionado. —Están evitando las preguntas, están desperdiciando su tiempo a propósito. — gruñó irritado.
—Cain tiene razón, si no hay nada que hablar será mejor regresar, no podemos mantener al parlamento esperando. —Ismael habla levantándose.
—Está bien..¿los volveremos a ver? — Fredd pregunta abrazando a su madre.
—Vengan el primer día del año, podremos hablar sin importar cuánto tiempo. Tengan cuidado en el futuro.
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