•Lunes 26, Noviembre del 68, 8:27 pm•

•Territorio Black•

~Narro~

Portadores perdiendo el control, es la peor forma para terminar el día. Y cuando se trata de seres como Alfred y compañía, la situación puede ser catastrófica.

—¡¡Cuidado!! —Sigfrida grito intentando cubrirse del impacto contra el árbol.

—¡Alfred deberías bajarle dos rayas! — Baltazar grita notando como partes del suelo se sacuden.

—¡Solo estamos entrenando! — rugio y algunos mechones de cabello se vuelven negros.

—Más bien intentando matarse entre sí.— Baltazar murmura y nota como un rayo de luz dirigido hacia Alfred.

Alfred cae al suelo con un ala herida.

—¿Parece que olvidan muy seguido nuestras leyes no es así?— escucharon a Evelyn.

Los tres jóvenes voltean hacia su posición, notando cómo mantiene su báculo a mano.

—¡Eso es juego sucio Alfred! ¡En el uno contra uno sin supervisión no se permiten dones!— Fred grita, aprobando la competitividad en sus hijos.

Shadow lo observa de reojo.

—¡Sin dones Alfred!— grita sonriéndole a su esposa.

Los padres se percatan de los gruñidos de su única hija, pero al intentar localizarla se les fue imposible.

La temperatura del bosque bajó drásticamente.

—Creo que sigfrid y maight están conspirando contra alfred.—Baltazar sonríe, con cada suspiro un poco de humo saliendo de su boca.

Una domo cubre al chico esté comenzando a desprender electricidad desde el interior.

—Esa técnica nunca falla. — Baltazar niega, tomando asiento.

—¿No los detendrás?—Freddy pregunta, acercándose un poco.

—Lo haría, pero no quiero terminar con algún hueso roto, ve tu mejor, eres uno de los padres y líderes principales, encargate tu de controlar a las manadas.

Y así jóvenes, es como un cobarde da un paso atrás.

Una esfera de luz aparece sobre el domo así esté desapareciendo. El chico retrocede recuperando la conciencia.

—Y aquí vamos, el maldito gato regresó. —Shalyn gruñe haciendo aparecer a sus hijos tras suyo. —No se muevan ni ataquen.

—Norahs, ¿que es lo que te trae por aquí?, en el mundo humano.— la líder pregunta con interés.

—Han hecho un muy buen trabajo.— sonríe.

—¿Buen trabajo? ¡ME ASESINO! —Walfred ruge furioso.

—Alfred, silencio. — Shalyn ordena lo cual el chico contra su voluntad obedece.

—Los problemas se acercan y necesitan ayuda.— sonríe acercándose hacia Alfred y ronroneando entre sus manos.

Alfred le acaricia y empieza a calmarse.

—Un toque de seda, común entre los de tu clase.— norahs sonrie saltando hacia la cabeza de sigfrid.

—¿Tú sabes lo que somos?—Maiton pregunta acercándose hacia el gato místico.

—Luz y oscuridad, eso es lo que ustedes son, balanzas entre ambos mundos. Necesitan que sus dones se desarrollen por completo para sobrevivir la guerra.— informa a la vez que su mirada se pierde entre los árboles.

—¿GUERRA?—Fredd pregunto acercandose pero Norahs desapareciendo.

—¿Alguien nos explica que está sucediendo? ¿O que diablos es una balanza?— Maight pregunta cruzándose de brazos.

—Hay que prepararnos. —Fredd murmura evitando responder la pregunta de su sobrino.

Y así es como esto se convierte en una reunión familiar, Nighantom apareciendo.

—La rata voladora me avisó que viniera, creo que esto se complicó.— gruñe observando a su hijo con algunos rasguños.

Sigfrida aprovecha la pequeña distracción y se acerca al báculo de su madre.

—Ni siquiera lo piensas. — Evelyn advierte. —No es un juguete. — informa haciendo su arma desaparecer.

—Es hora de la cena, ustedes vayan a casa de su tío Max, no se queden en casa solos. Iremos a patrullar. — Freddy le sonríe a sus hijos los cuales éstos le ignoran y se retiran.

•Martes 27, Noviembre del 68, 1 am•

•Valle de los Géiseres, Rusia•

—¿Cómo haremos esto? —Phantom pregunta observando la entrada metálica.

—Ir con camilo a abrir esa puerta, bloquear la zona y atacar, la quiero viva o muerta, preferible muerta. No cometeremos el error como con Owyn, y si lo ven, creo que ya tendrán en mente lo que debe suceder.

La guerra se aproxima, múltiples manadas involucradas en ello, el armagedon de mundos.

—Bear, te toca, ve con camilo maestro del sigilo. — su hermana sonríe y este desaparece junto a Camilo.

—¿Crees que lo logren?— Nighanton pregunta.

—Es el único que puede abrir la puerta, tiene sangre de un Amery después de todo. — ella confiada responde.

—Si es necesario llamaremos refuerzos. — Fredd susurra sujetando con fuerza su báculo.

—No me gustaría involucrarlos en algo tan personal...pero si es necesario lo haremos.

—Norahs menciono algo sobre el equilibrio...si llega a atraparlos...corromperlos. — Evelyn murmuró acariciando su vientre.

—El fin entre los mundos. — Black dice observando como la puerta se abre.

—Ahí nuestra señal señores, es hora de trabajar. — Ella se estira y sujeta su cabello. —Recuerden, entrar, atacar, salir. — susurra y los tres aparecen.

—No hay nadie aquí.— Bear suspira cansado.

—¿No que ella no salía de aquí nunca?— Phantom pregunta, la punta del báculo en cuello del chico.

—¡Juro que eso es lo que ella hace! ¡No he mentido!— súplica levantando ambas manos al aire.

—Phantom dejalo, lo necesitaremos. — ella dijo haciéndolo desaparecer.

Cada uno de ellos escucha el llamado de su manada, preocupados desaparecen pero no hallan a nadie.

—Emm, ¿no se supone que se encuentran aquí? —Fredd pregunta ansioso.

Un gruñido se escuchó tras ellos.

—Phantom, tu sabes identificar gruñidos, dime que era categoría uno. — la líder suplico.

—Ocho. — susurra entre tartamudeos.

—Mierdaaa. — Bear se queja observando a su hermana. —Pagarás por haberme arrastrado con ustedes.

—Si quieres salir con vida ayúdanos. — murmura y rápidamente se voltea disparándole a la monstruosidad de penumbra.

Aunque al voltear hacia su manada nota como ellos corrían alejándose de esta.

—¡¡Malditos cobardes!!— rugió evitando los ataques de la penumbra.

—Si no estuvieras embarazada. — su hermano susurro ayudando a contrarrestar las penumbras corrompidas.

De repente ambos aparecen dentro de una esfera, Nignanton transfiriendo parte de su energía a esta.

—Será mejor que ustedes dos se apresuren. — gruñe sus ojos brillando en verde.

—Abre un poco la protección.— Fredd dijo empuñando su arma.

—Sí señor.— el creador de la esfera asiente completando su orden.

Ambos líderes sacan la punta de los báculos, así unificando ambas energías y disparando.

Al primer contacto la penumbra absorbe la energía y multiplica su tamaño.

—Con eso logramos detener a los niños.— Shalyn murmura sin creer lo sucedido.

—Lo único que lograron es hacerlo enojar. — Bear murmuró.

La penumbra les arrebata los báculos y envuelve la esfera.

—¡Ciérrala, ciérrala!— Bear gritaba notando penumbras entrando a su protección.

Su sobrino rápidamente sin dudarlo cierra el resto de la esfera. Unas cuantas grietas se forman alrededor de esta.

Phantom empieza a jadear, dolor irradiando a través de su cuerpo.

—¡Está arrebatando la energía, está arrebatando mi energía! — ruge, el dolor aumentando.

—Freddy manda un mensaje, dile a Baltazar que por nada deje salir a los niños. Y de paso pide refuerzos. — Shalyn susurra transfiriendo energía vital hacia la esfera. —No me importa si debo entregar mi don, de aquí saldremos vivos.

Cada uno de ellos transfieren energía hacia su única protección.

—Creo que se ganó el título de categoría 11. — Uno de los black bromeó intentando liberar tensión.

—No buen momento. — Bear gruñe y la esfera colapsa.

Penumbras le sujetan y separan de unos del otro, una pequeña risa resonando a través de ese mundo.

—Parece que mi nueva creación funciona. — escuchan una voz emocionada.

—¡Maldita Amery!— Shalyn rugió intentando soltarse.

—En que así es como se siente tener a cada uno de los líderes bajo mi control. — sonríe con malicia, pensando en continuar su plan.

—Si es a nuestros hijos a quienes quieres, se te hará imposible, el resto de la manada está en camino. — El segundo líder habló.

—Awww ¿Qué tan seguros están de ello?— pregunta haciendo aparecer a la manada inconsciente. —No me digan, esta no es la suya.— sonríe haciendo aparecer una segunda manada más joven que la suya. —Después de todo, ambas tienen la misma sangre.

—Es la manada de Emily. — Shadow susurra al fondo de la mente de su portadora.

—Sobre sus hijos, digamos que mi objetivo principal era capturarlos a ustedes, quien sabe, puede ser que dos manadas sean lo suficiente para capturar a tres mocosos.

—Y tú crees que nosotros...—Phantom se detuvo a media oración.

—¿Ahora lo ven? Están justo donde yo deseo, desarmados, impotentes e indefensos. ¿No creen que deberían ser más listos? Después de todo, derrotaron al abuelo y a papá, el cual agradezco que lo hayan dejado salir, mal movimiento de su parte.

—Te dije que había que matarlo. — Bear susurra intentando escapar.

La penumbra oprime con mayor fuerza, inmovilizandolos por completo. La líder de manada sintiendo un leve dolor en su vientre.

Los tres báculos terminan en manos de Camely lo cual le emociona aún más.

—¡¡VAYA VAYA!! ¡¡MIREN QUE TENEMOS AQUI!

—¡¡Suelta eso!! ¡No son juguetes que tu no puedes utilizar!— Fredd grita luchando contra la penumbra, energía desprendiendo sin control alguno.

Una penumbra penetrando la piel en su nuca, aprovechando a tomar energía y aumentar su fuerza. El sin reacción alguna agacha la cabeza quedando inconsciente, la penumbra consumiendolo por completo.

Shalyn ruge maldiciones contra ella pero sin más ella es la siguiente; uno por uno consumidos por la penumbra.

—Una fase mas.— Camely sonríe observando a los portadores frente a ella. —Tengo muchos planes con ustedes.— dijo haciendo desaparecer a cada persona a su lado.

•Miércoles 28, Noviembre del 68, 7 am•

•Casa Fillet•

~Alfred~

Hoy nadie nos despertó, nos dijeron que regresarian antes del amanecer pero aquí estamos, esperando en la cocina, tomando el desayuno sin el resto de nuestra familia.

—Buenos días. — escuchamos al abuelo saludar, es el único que se despierta a estas horas.

—Buenos días abuelo. — Cada uno de nosotros saludamos.

—¿Ustedes no tienen escuela hoy? — nos pregunta preparando su café.

—Si, pero nadie ha llegado a avisarnos, y cuando tratamos de ir el tío Bal nos detuvo. — Sigfrid bosteza mientras come de su tazón de frutas.

—Otra vez ocultando cosas por lo que veo, ¿ya hablaron con su manada?— nos pregunta con interés sobre el paradero de la familia.

—No aparecen, estuvimos la última media hora llamando pero nadie responde. —Nanton habló por mi.

—Algo no cuadra. — hasta el abuelo lo nota.

—¿Podríamos ir a la biblioteca? Solo para buscar que estuvieron haciendo. — Pregunté con esperanza a que acepte mi petición.

—Claro, tienen todo el derecho de entrar a la biblioteca, después de todo, es a ustedes a quienes en algún momento les quedará como herencia familiar.

—Abuelo, aun te faltan muchos años de vida, no digas eso, preferimos leerlo un año o dos después de..bueno..— hasta wil se siente incómodo con ello.

—Yo solo digo que me dejes tu habitación, eso es lo que quiero, y que no la limpien nunca. — Sigfrid sonríe.

—Como quieras, pero el resto de la casa se la dejo a Serpi. — sonríe con malicia.

—Oh por favor, esa serpiente va a desaparecer antes de tu siguiente cumpleaños, y que te falta mínimo cuarenta años más.— estos en verdad tienen esperanza.

—Creo que será mejor ir a revisar la biblioteca. — dije levantándome.

Esto es incómodo hasta para mi.

—Si, creo que deberíamos ir.— gracias wil por apoyar mi idea.

•7:30 am•

Media hora se tardaron estos cinco para terminar su comida, aunque no me quejo, el abuelo ayudó mucho, hablando sobre todo y a la vez nada.

Es una gran ayuda para nosotros, como quisiera que el resto de la manada le conociera.

Nos encontramos en la biblioteca, viendo el registro de las últimas horas, y dios que es demasiado. Principalmente mapas, y algún par de libros.

Uno en especial, el de Rusia, creo que ya se adonde fueron.

Así que ese es nuestro nuevo destino.

Pero al llegar todo fue como un golpe directo, no físico sino mental.

Ahí están ellos, manos tras la espalda, miradas ausentes.

—Parece que el karma no se tardó nada.— escucho a Maight susurrar observando a su padre.

Hay más presencias que solo ellos, nadie diferente a quienes ya conocemos, están todos aquí. Hice la señal de avanzar y buscar.

Necesitan nuestra ayuda y nosotros se la otorgamos.

Entre largos pasillos que parecían ir bajo tierra escuchamos súplicas y chillidos a nuestro alrededor.

Sigfrid sin pensarlo abre la puerta...mala idea.

Una sola alarma se activa.Logramos abrir algunas cuantas puertas pero no tuvimos tiempo para salvar a los demás... Fue una retirada inmediata por nuestra parte.

No nos dirigimos a casa, si nos lograron rastrear preferimos luchar en espacios abiertos y no arriesgar la seguridad del abuelo.

—¡Debemos regresar!—Nan grita pero sujete su mano.

—No podemos hacerlo sin que nos atrapen también.— dije haciendo aparecer los báculos de nuestros padres haciéndolos flotar. —Esto nos será de gran ayuda.

—Pero solo ellos pueden activarlos. — sig tienes un muy buen punto.

—Hay que comprobar eso personalmente. — sonreí sujetando el arma de papá.

Nada.

—No exploto, te dije que solo ellos pueden usarlo,— mi hermana me regaña sujetando el báculo de mamá.

Mis alas de golpe aparecen y un gran rayo de luz se dispara hacia el cielo, la energía que fluye en estas cosas es sorprendente.

—Canaliza la energía. — sonrió notando como este se vuelve blanco en su totalidad, aunque noto los detalles dorados. —No tan cómodo para mi gusto pero funciona.

Unos segundos luego lo mismo sucede con sig, aunque el báculo de mama si que tiene energía, o más bien, toma bastante de su portador.

Maight no fue la excepción con el báculo del tío P.

—¿Ahora que?— preguntaron ambos esperando mis instrucciones.

Siento esa corriente intentar consumir el arma, podrá ser coincidencia o no, pero con lo que papá me enseñó, es energía corrompida.

—Al mundo oscuro, vamos a cazar una penumbra. — sonreí y mi manada asiente.

Es hora de probarnos a nosotros mismos, nunca hemos hecho esto sin supervisión, y mucho menos sin saber que nos espera.

Llegando al mundo lo primero que vemos es esa inmensa capa de viscosidad. Esto va a ser difícil.

Está despierta y consciente de nuestras presencias.

—Chicos, disparenle. — susurre sujetando con fuerza el báculo y el primer rayo disparado pareciese como si atravesara la penumbra.

No puedo con esta cosa, no entiendo...no entiendo como ellos si...¿será por esto que ellos nos entrenaban personalmente?

Trato de evitar el golpe pero es más rápido de lo previsto.

Nos preparaban para este tipo de situaciones.

Intentamos luchar, pero era casi imposible evitar sus ataques.

Jadeamos gracias al cansancio, esto si que consume tus fuerzas.

Runas blancas aparecen alrededor de la penumbra, cada rayo disparado dejando marcas que nosotros estábamos inconscientes de estas.

¿Parece euskera? Mamá nos estuvo enseñando un poco.

—La balanza entre mundos jamás caerá...— murmure leyendo los primeros signos.

Sin más un domo contiene la penumbra.

—¿Qué hiciste?—Maiton pregunta acercándose hacia mi.

—Solo lei las runas. — susurre y ambos continúan leyendo.

—Se mantendrá más fuerte de lo que se cree, así penumbras huir que su final se acerca. —Maight susurra y así sin más una fuerte luz evapora la penumbra frente nuestro y se esparce alrededor de este mundo.

Cada uno de los báculos vuelve a su color original, estos brillando con fuerza.

—Será mejor salir de aquí.— dije y rápidamente regresamos a casa.

Y ahí están, hablando como si nada con el abuelo.

Se que no quieren darle estres o algo, pero esto sí que es importante.

—De nada.— Sigfrida gruñe regresandole el arma a mamá.

Cada quien les regresa lo que les pertenece y ellos asienten.

—Luego hablaremos, ¿okay?— papá manda el mensaje mental y sin más nos hacen desaparecer.

—Parece que hoy nos explicaran un poco de lo que sucede.— Maight sonríe victorioso.

No contaría esto aun como victoria, no hasta saber que sucede...tuvimos que sacar a la otra manada cuando pudimos, eso fue una pérdida mayor.

•9 am•

Una hora esperando a que llegaran y aquí estamos, incómodos por no saber qué decir o por dónde comenzar.

—Así que ustedes...— ni siquiera mamá sabe que decir.

—¿Salvamos todos sus traseros por nuestra propia cuenta? Si, así es.— Maight, a veces deseo que fueras mudo.

—Gracias.— mamá está...¿ella nos agradece? —Si no fuera por ustedes...en verdad gracias.— solo puedo ver orgullo en su mirada.

Están orgullosos. Por primera vez, después de todos esos años de pesadilla, ¡ellos están orgullosos!

—Aunque estuvimos pensando volver a entrenar con ustedes, su trabajo si que es difícil. — Sigfrid murmura cansada.

—Claro, si eso es lo que quieren podemos volver a los entrenamientos.

En que así es como se siente un poco de estabilidad.

Y el abuelo aparece con lo que parece una bolsa llena de carne.

—Se levantan que hoy toca cena familiar y espero me ayuden a cocinar todo esto. — sonríe y el resto de personas aparecen, incluyendo al tío Max.

Si supieran que debemos quitarles los dispositivos en sus nucas....

•8 pm•

No puedo verla a los ojos ...no entiendo para que invitarla, después de todo fallamos en recuperar mínimo a una persona de su manada. Todos están platicando como si nada, fingiendo frente al abuelo y el tío Max, pero están conscientes de lo sucedido. Fallamos hoy.

No creo perdonarme esto.

El abuelo saluda a la líder de la manada que abandonamos, parece incómoda en el lugar, aunque al menos le devuelve el saludo al abuelo.

Con mi cabeza le señalé que se acerque, creo que está viendo los vendajes de no solo la batalla si no que el nuevo entrenamiento.

Debemos estar preparados por si hay un nuevo ataque.

Ella parecía dudar en acercarse pero finalmente lo hizo, sentándose frente a nosotros.

—Te dije que solo necesitaban un poco de ayuda. — sonreí evitando contarle lo sucedido.

—Me alegra que las cosas estén mejorando entre su manada,es de celebrar. —devuelve la sonrisa

—Y eso es lo que estamos haciendo, hace mucho no teníamos una comida así....toda la manada reunida. — maight callate callate maight.

—Si,la verdad se lo merecen un montón,es un gran avance. — si tan solo supieras

—La terapia de un día entero, nos tocará recordarles que se tomen sus medicamentos pero de ahí esperemos que todo esté bien.— hasta sig se dio cuenta de mis súplicas mentales

—Se están apoyando entre sí,es de esperar que dé buenos frutos y no dudó que lo haga.

—Gracias por interferir, sin que lo hubieras hecho lo más seguro estaríamos entrenando hasta la muerte.

—No hay de que, yo no hice nada, la iniciativa fue totalmente de ellos y de la gran influencia que tiene tu abuelo en ellos.

Si no fuera por ese señor...

—Pero si tú no hubieras presionado esa herida ellos no se hubieran movido. — dije en forma de metáfora, se merece un poco de méritos.

—Tal vez, cualquier otra persona lo podría haber hecho ,si yo les contaba todo lo hubiesen hecho ustedes. —Y vamos con los secretos.

—¿Contarnos todo sobre qué?

—No importa ahora ,tienen que comer.

—Es como el tercer plato. — Maight ríe mientras ve su carne encenderse en llamas. —Está fría. — pirómano.

—Si,lo dice el chico pirómano.— gracias, alguien que concuerda conmigo.

—Que no soy piromano, solo le tengo un gran interés al fuego que yo puedo crear.— esa es la definición de pirómano, maight.

—Gran forma de decirlo en otras palabras, es exactamente lo mismo, pero bueno, no estoy diciendo que sea malo. —otra desquiciada.

—Si como digan, ustedes locos del orden. — él bromea.

—¿Y porque me incluyes a mi? — ella preguntó no muy contenta.

—Tu no, estos cuatro si.

—Estás exagerando. —Sigfrid negó con la cabeza riendo.

—A ver, todo debe estar simétrico.

—No quiere decir nada. —Sig se encogió de hombros.

Maight, mejor te callas.

—Y hablan de mí.

—Cada quien tiene su obsesión. —Frida opino, a lo que se metía un bocado de carne a la boca.

—Y tu soqui, ¿cual será tu manía?— Wilfred preguntó.

—Es un milagro que me sepa mi nombre, no sabría decirte si tengo alguna manía

—Tienes toda una vida para averiguarlo. — suspire observando a papá, parece preocupado.

—Si, toda la vida. — ella se levanta y se dirige al comedor, parece un lobo atrapado intentando buscar una salida.

Una penumbra le hizo aparecer en el sillón a nuestro lado.

—No te escapes esta vez.

—No me escapó, solo me aparto para no estorbar

—Aquí no le estorbas a nadie, y además, debemos hablar sobre tu manada.— MAIGHT ESTÁS MUERTO.

—Aún tengo que buscarlos.

—Nosotros ya nos adelantamos bastante. —Dije intentando salvar la situación. —Solo necesitamos un plan.

—¿Ya los encontraron?

—Así es. Fue fácil, no sé cómo no encontraste sus energías.— sig, eres mi hermana favorita.

—Ah sí, bueno sabes que soy muy distraída.

—Aunque aún debemos dejar las heridas sanar por si hay que recurrir a otros métodos.

—No se preocupen, solo necesitaba que los encontrarán, puedo hacer lo demás.

—No sola, es un edificio bien resguardado.

—¿Dónde está?

—Al otro lado del mundo, cerca de Chernóbil, eso oculta bastante bien las energías.— mentí, no dejaré que se arriesgue así como nosotros.

—Ya veo, me las arreglaré para entrar.

—Que no te adelantes.

—Entonces sigue.

—Está justo bajo Chernóbil. Una de las zonas más productivas del mundo. — y la mentira continua.

—Claro que pensó en el lugar más tóxico del mundo para llevarlos.

—Así que hay que buscar una forma de que nuestras penumbras no se vuelvan locas por toda la energía.

—Solo puedo pensar en un domo bastante fuerte.

—Nada, salimos a duras penas de ahí. No pudimos adentrarnos tanto.

—Si va a requerir de un buen plan, uno en el que podamos entrar vivos y salir con ellos de la misma forma.

—Es por eso que seguimos planificando.

—Si, hay que hacerlo con tiempo para que no salga mal.

—O nos sale un tercer ojo. — Maight bromeó olfateando y corriendo hacia la cocina.

Y ahí va la pierna.

—No suena tan mal, pero creo que no quiero ver a los miembros de mi manada con dos brazos más.

—Será por eso que nos salió he pues...

—¿Les salió qué cosa? —mamá Shadow se acerca a nosotros, alguien está interesada, o solo es que escucho antes de entregarle el plato de comida a Soqui.

Recibe el plato con una sonrisa—Gracias,no tenían que preocuparse. — ignora por completo la pregunta que ella había hecho.

—Alfred, ¿qué están ocultando esta vez? — la noche iba tan bien.

—Se refieren a sus alas,no es normal que los portadores tengan alas. — otra razón por la que me agrades Emily.

—Otro tema que tampoco conocemos la respuesta. — Sig murmura jugando con su comida.

Preguntas sin respuestas, odiosas, pero se logra vivir.

—Supongo que el tiempo les dirá, no es algo de todos los días. — o ustedes ya saben.

Lo dejaré ir por hoy...solo esta vez.

~Soqui~

Comí rápidamente en silencio para luego levantarme con mi plato hacia el fregadero de la cocina.

—Estómago pequeño por lo que veo. — Christopher habla.

—Si,ya es mucho con que me hayan dado un plato. —le respondí terminando de lavar mi plato y otros que estaban ahí.

—Y ya es mucho que tú laves los platos.

—No es nada,solo son modales y una forma de agradecerles por dejarme quedar a dormir está noche.

—Puedes quedarte el tiempo que desees, es muy raro tener visitas en casa.

—Lo sé,pero no quiero abusar de sus buenos tratos.

—Deberías creer mi palabra cuando digo que no es para nada un problema..

—Confío bastante en su palabra, Señor Fillet, pero no me puedo permitir depender de los demás.

—Puedes llamarme Chris, y es bueno que seas independiente, pero a veces es bueno aceptar una mano amiga.

—Bueno, Chris, no lo niego pero no he hecho mucho por su familia, o por lo menos no cosas que sean buenas y me parece que están siendo muy buenos conmigo,solo estoy aquí para recuperar a mi manada.

—Y mi familia tampoco ha sido la mejor. No con tu manada. Tuve que hacer que siguieran terapia hace muchos años.

—La terapia les hace bien ,lo que nos hicieron fue por falta de eso y aunque no se los quiero perdonar,están ayudando a recuperar mi manada,solo les pedí eso por sobre todas las cosas.

—Si mal me equivoco, creo que ya los encontraron.

—Eso fue lo único que les pedí,les dije que el resto podría hacerlo yo pero las cosas cambiaron,no me dejaran ir yo sola.

—Nadie hará eso. Muy peligroso.

—Tengo que, son mi manada.

—Pero no sola.

—Porque ellos no me dejan.

—Porque piensan en tu seguridad también.

—No me la merezco.

—Si lo haces, todos lo hacen.

De cierta forma tiene razón.

—A veces siento que aún soy líder de esta manada— aunque me cueste. —Tal vez ya no sea el líder, pero si es el más sabio.

—¿Tan viejo estoy?

—La sabiduría no tiene edad a mi parecer.

—Gracias, ya te iba a contar un cuento de media hora. — bromeó volteando la carne.

—Se escucha entretenido,pero creo que mejor voy a darme una ducha antes de que se me pudra la piel. Hablamos luego, Chris. —me sequé las manos y tomé mi bolso para subir.

Escucho como la música y las conversaciones se vuelven más suaves mientras más lejos iba. No me sentía parte de la situación así que seguí mi camino al baño, cuando lo encontré entre para cerrar la puerta con seguro.

Suspiré frente al espejo. —Nunca dejan de pasar cosas. —Tomé mi bolso para salir del baño y bajar a la cocina.

Note como los más jóvenes no se encontraban, todos los adultos hablando entre sí sin darse cuenta de su ausencia. Pase en silencio para que me ignoraran y una vez que desaparecí de su vista, seguí la energía de esos niños y apareci en el lugar donde me llevo.

—Gracias por avisarme. —murmuré acercándome. —¿Qué han planeado? Parecen una secta. —reí al ver sus expresiones.

—Si, estábamos haciendo eso. — Alfred dijo haciendo desaparecer unas cuantas cosas.

— íbamos a sacrificar una gallina para que el tío Lucy ayudará. — Maight sonríe haciendo aparecer el animal en sus manos.

—Joder, me sorprendería de cualquier otra persona, pero como son ustedes no me sorprende. —me acerqué mirando a la gallina y sonreí negando con la cabeza. —Van a hacer brujería ¿no es mejor una cabra o un crío de vaca?

—Da lo mismo, es un animal vivo con sangre, además, creemos que al tío Lucy le gusta más el pollo que la cabra.

—¿Él nos los ayudaría así como así?

—No, es el tío Lucy el no ayuda.

—Ser de egoísmo, claro. ¿La van a sacrificar ya?

—¿Lo quieres hacer tú? La sangre de gallina no se quita así de fácil.

—Claro, el burro por delante. —tome la gallina entre mis manos —¿La puedo matar como quiera?

—Dentro del círculo por favor, no quieres terminar rostizados como Maight. — Frida ríe observando a su primo.

Maight soltó una risa irónica y yo me metí al círculo. Procedí a arrancarle el pescuezo a la gallina hasta separar su cabeza de su cuerpo.

—Bueno, sin misericordia a la gallina. — Alfred dijo tomando el cuerpo y escribiendo algo en latín, el cual no entiendo.

—Era un buen momento para desquitarme.

—Si, con el pollo. — maight continúa riendo hasta que llamaradas cubren el círculo por completo.

—Bien ¿Ahora lo van a cocinar?

—O nos va a cocinar, gracias a Dios, sal. — Sigfrida dice y las llamaradas se alejan. —Eso es, aléjate o acusado con tu papá.— bromeó.

—¿Cómo termine en un ritual de sacrificio con ustedes? Se supone que los tengo que cuidar. —puse mi mano en uno de mis cachetes negando sin poder evitar reír un poco.

—Hay muchas cosas que hacemos que es mejor mantenerlas como un pequeño secreto dentro de la manada. — Alfred dice viendo como su "tío" sale de entre las llamas..

Por alguna razón me causó emoción ver a Lucy y no pude evitar sonreír.

—Solo di que es lo que quieres a cambio. — el líder suspira cansado.

—Quiero que me ayudes a sacar a mi manada de una instalación en Chernóbil.

—Hay un precio que pagar antes.

—Dilo.

—Alma.

Enarque una ceja. —¿Hay otra cosa que pueda dar?

—Por parte tuya no.

—De acuerdo...

—No no no no no, esto no funciona así. — Nan nos interrumpe. —Ya tienes bastantes almas en el infierno, una más no hará la diferencia. ¿Qué es lo que quieres Lucy?

—¿Ustedes que creen que es lo que quiero? —con una sonrisa diabólica Lucy preguntó.

—¿En verdad, eso?

—Si. —respondió.

—¿De quién exactamente?

—Creo que Maight sabe muy bien la de quien. —él sin parar de sonreír miró al susodicho y yo no entendí por qué el misterio.

—¿La vas a regresar?

—Tal vez.

—Eso no...bien, Al date la vuelta.

Alfred suspiró para hacer lo que le pidió su primo pero interveni.

—No,no,no, alto. Al no va a dar su alma por mi manada, no va a pasar.

—¿Alma? No, este quiere algo más valioso. — Maight dice presionando la columna de su primo y así sus alas saliendo.

—¿Qué? ¡No! ¡Eso menos!

—No somos tontos, no le daré sus alas, ni que pudiera arrancarselas. — ríe arrancando la pluma más pequeña que tiene.

—¿Pero qué carajos quiere...? ¿Esa pluma?

—Tu no conoces el verdadero precio de esas plumas, con una sola se hacen maravillas. — luciferum sonríe sujetando la pluma.

—Si tu la quieres creo que puedo imaginarmelo. —Estaba algo inquieta al verlo con la pluma, sabiendo que ellos no iban a ir y aún así sacrificaban algo así.

—Ahora tú has tu trabajo.

—Con gusto. —Lucyferum hizo desaparecer la pluma y empezó a hacer ...no sabía ni qué estaba haciendo, solo veía fuego y escuchaba que hablaba en latín. —Y todo está hecho.

—¿Ya?

—Si.

—¿Entonces ya estaremos seguros cuando vayamos?

—Quien sabe.— ríe desapareciendo entre llamaradas

—Quedamos casi en las mismas, a la suerte.

—Pero con un truco bajo la manga. —Maight me sonríe.

—Que nos servirá en algún punto supongo.

—Si.

—Bien, esa fue la parte fácil, ahora toca la difícil.

—Hay que entrar.— Alfred sonríe, parece un poco más relajado.

—No, ustedes no.

—No vas a ir sola,

—Y ustedes no irán conmigo,

—Si iremos,

—No,no lo harán ¿Qué parte no entiendes?

—¿Y tú qué parte no entiendes que no irás sola?,

—La parte en la que es más peligroso para ustedes que para mí ir a ese lugar,

—Ya hemos estado muchas veces en peligro, esto no sería diferente,

—Creeme,esto es justo lo que no quieren enfrentar. Simplemente no irán, —Finalize y salí de ahí.

Están locos si piensan que dejaré que vayan.

~Alfred~

El engaño perfecto, jamás se enterará, así debe de ser.

Engaños, mentiras y secretos, así funciona la vida de un portador.