~Narro~

Veamooooos, no queremos ver primeros pasos, peor regresar a la época de escuela, ¿seguir los pasos del padre? No no no, todos estos capítulos son aburridos, son copias exactas de sus padres, pero excepto las alas. Uuuy, el hijo de Sigfrid no tiene dones, eso es interesante para el bienestar de la manada, pero no para nosotros, quién quisiera saber sobre un Fillet sin dones? Para eso nos saltariamos hacia los mellizos Hernandez.

A veer, ¿qué tal catorce años? Creo que es lo indicado, no queremos meternos en sus vidas como adultos, sería como seguir a portadores cualquiera, solo echaremos un vistazo, a la siguiente generación.

¡¿UN MOMENTO MAIGHT SOLO TUVO UN HIJO?! ¡¿NO SE SUPONE QUE FOLLA TAL CONEJO?! AÚN MEJOR, SE LLAMA CAÍN ¡JA! EN TU CARA PHANTOM.

Ya ya, me relajo.Luz y Whale tuvieron a una niña llamada Lulu, todos siguiendo la carrera de sus padres, incluso los gemelos F y T han continuado con estas, nada en lo especial si me lo preguntan.

•Lunes 14, Febrero del 92 10 am•

•Casa Fillet Hernandez•

—¡Abuelo ya baja! — Alexa grita tratando de que Fredd bajase de la barra.

—No hasta romper el récord de cabeza. — sonríe y su rostro cada vez más rojo.

—Por eso el abuelo Chris te regaña — Nicolle ríe mientras estira.

—Una palabra a su abuelo Chris y me aseguro que sea su abuela quien los entrene. —se burla dejándose caer.

—¡Al fin! La competencia es en unos días y ustedes no nos dejan practicar.

—Les irá bien por dios, entrenan desde los cinco años.

Ella niega y se cruza de brazos —El entrenamiento de papá es aburrido, solo estirar, correr y ya, apenas usamos penumbras.

—Alfred tiene sus razones, son niños aun, y no son tan fuertes como para usar penumbras.

—¡Pero Greg si puede! — Nicolle grito molesta con lo que dijo.

—Claaro, así como yo sigo joven. — dice sarcásticamente y de golpe una penumbra lo deja de cabeza.

—Por supuesto abuelo. Te vuelves lento.

—¿Me están retando? ¡Llevo más de 40 años esquivando balas y penumbras, escapando de tu abuela, no tienen oportunidad contra mi!

Ambas empezaron a reír al delirio de su abuelo y sacudiendo la penumbra.

—¡Sueltenme par de locas! —ruge y lo único que hace es hacerlas reír más. —¿En dónde rayos está Gred? Él sí me respeta

—Está con papá en la pista. — Alexa sonrió burlándose.

—A Cindy le encantará escuchar eso. — esta vez él sonrió apareciendo junto a su hijo.

Alfred lo ve de reojo y continua observando al auto en la pista.

—¿Quién está conduciendo? —pregunta molestando.

Wil toma la radio —Greg, a los pits, ahora.

El auto acelera hacia los pits y se parquea de forma perfecta.

—¿Qué pasó? — el chico pregunta quitándose el casco.

—Tu abuelo nos quiere delatar, ayudame. — dice ayudándole a salir del auto.

—¿Por qué cada vez que te quedas solo con tu papa se escapan a este lugar. — suspira revisando que no esté herido.

—Porque estoy apunto de superarlo, solo necesito mas practica. — sonríe entregando las llaves a su padre.

—No quiero que te pase lo mismo que a él, casi muere el día de tu nacimiento.

—Mentira, solo estuve inconsciente un par de horas. — le recuerda.

En mi opinión solo tenía parte del motor en su pecho.

—Por supuesto.

—El solo shoko y ya, está bien. Yo puedo aguantar más.

—Tu no eres una balanza y tus probabilidades de ser una son bajas. El demostró el don desde pequeño y tú apenas usas los tuyos, lo cual si tu papá te toca con una penumbra blanca te quemas. —en que el niño no es una balanza, debe dar pena ser el hijo de un ángel y no tener ni uno de sus dones.

—Eso no me detendrá. — entre gruñidos le pone en claro su cometido, intentar seguir los pasos del padre y fallar.

—Le diré a Cindy, no voy a perder a quien es el único candidato a líder de manada, fue difícil que el hijo de Sig no tuviera don alguno, no me imagino perder a uno más. — suspira desapareciendo.

—Greg regresa a clases. —Wil pidió y su hijo obedeció sin problema. No entiendo por qué le temen a una persona sin don.

Ambos Fillet regresan a casa, Cindy tomando su desayuno en silencio.

—¿En dónde está Greg? — fue lo único que pregunta.

—Le dije que regresara a la escuela. —responde tomando asiento a su lado.

—Solo cuídalo bien o esto no te lo perdonare. —le advierte continuando su desayuno.

—Te lo prometo.

¡YA! Esto es peor que aburrido, adelantemos un poquitito más. Me sorprende que su capítulo no se haya cerrado hace años, pero por eso aquí estamos.

Ahora sus hijos con 25 años, la mayoría aún trabajando en la compañía y...a alguien le llegó su hora. Quedémonos aquí.

•Viernes 17, Febrero del 2102 10 pm•

—¿Cómo sigue? — Fredd pregunta al médico.

—No creemos que soporte la noche, lo lamento. — da las noticias al hijo.

Fredd asiente y entra a la habitación, donde su padre sonrió con debilidad.

—Te dije que no trabajaras, te advertí que no era bueno para tu salud, pero no, querías preparar como siempre los pasteles de san valentín. — le regaña tratando de no llorar.

—¿Bromeas? Joder he aguantado mas de 100 años Freddy, ¡ya que la muerte me lleve con Ismael! — sonríe casi riendo.

—¿No entiendes que vas a morir lo más seguro mientras duermes?

—Pero qué fina la muerte, no sufriré. —Ahora si que lo perdió por completo.

—Se me olvidaba que estas demente. — sonríe abrazandolo. —Te quiero papá.

—Chicos, ¿podrían irse? Yo ya viví mi vida,mi muerte no debe detener la suya. —sonríe y frota su mano. —No te atrevas a cerrar mi pastelería niño, o el desde donde sea que vaya te maldeciré y te arrepentirás.

—No puedo dejarte. — murmura sin dejar ir su mano.

—Si no me dejas aquí solo en este instante haré que llores mucho más que cuando eras niño.

—Prefiero eso que dejarte. —lo abraza y su padre acepta el gesto.

—Te quiero, a ambos, a todos, protejanlos. Aprovechen todo lo que puedan, porque en verdad siento mi estomago raro. — murmura de a poco dejándolo ir.

Su hijo lo suelta y al ver una serena sonrisa en su rostro entiende que se ha ido.

—Te extrañaremos. — sonríe quebrando en llanto.

Así continuando, uno por uno cayendo tal moscas, Evelyn no había llorado tanto hasta el día que su único hermano falleció en labor. Un año después, todos quienes no tienen don alguno fueron muriendo, empezando con Rebecca, luego Matias, Pine ...y por último Max.

•Lunes 27, Octubre del 2121 1 pm•

~Walfred~

Nunca antes los había visto tan desesperados, siquiera cuando el abuelo murió. Noto como empieza a volar cada vez más rápido en dirección al hospital. Si el corazón no estuviese involucrado estoy seguro que el tio Phantom lo hubiese sanado, dandole mas tiempo de vida, pero su edad es como una bomba, en cualquier momento solo...

Aterrizamos en la terraza y creamos el camuflaje apareciendo en la sala de espera donde no había nadie. Mala señal.

Maight se acerca a la enfermera.

—¿Dónde está Max Martinez? — pregunto casi gritando.

—Habitación 184 pero —oh no..

—¿Pero qué?

—Maight ven aquí. — dije tratando de sujetarlo pero él solo me grita intentando soltarse.

—¡¿Pero qué?! ¡¿Qué le pasó a mi papá?!

Vemos al tío Phantom acercarse para abrazar a Maight.

—¿Llegamos tarde no es así? —No podemos dejarlo esta vez.

—¿Qué te dijo? —no empeores esto Maight, solo intenta procesarlo.

—Él..—solo respondele Phantom, Maight no está para bromas hoy.

—¡¿QUÉ TE DIJO?!

—Sig, vámonos. — dije y ella asiente.

—No te preocupes, no es tu culpa.

Y con eso dicho ambos quebraron en llanto.

¿Quien más tendremos que perder? Nosotros apenas nos vemos de 25 pero los demás envejecen cada vez más rápido. Creíamos que los portadores vivíamos bastante así como el abuelo Chris, pero esto ya es exagerado, tenemos que crear un camuflaje que nos haga ver de la edad que tenemos y...no sabemos qué sigue.

•Jueves 29, Enero del 2128 1 pm•

~Narro~

Te diré que sigue Alfred, tus padres, pero al parecer eso siquiera te afecto, a ni uno de los hijos biológicos les importo lo suficiente como para llorar.

—¿Hasta ahora les importa? —Frida pregunta hacia los demás.

—Ellos nos llamaron aquí, si no hubiese pasado eso estaríamos con nuestros padres. —Fran habla sin siquiera entrar a la habitación.

—¡Están muriendo y a ustedes no les importa!. —Wil grita intentando que entrarán también.

—¡Ya callense joder! ¡Ni en nuestras últimas horas nos dejan descansar! —Evelyn grito intentando crear una penumbra que los golpee, pero apenas lo hace.

Alfred suspira y se acerca a ellos.

—Perdón, tienen razón, no es el momento. —Alfred suspira y sujeta sus manos.

—¿Cómo sigue Maight? — Freddy pregunta casi cerrando los ojos.

—Aún no sale del cementerio.

—El jodido de Phantom se ha de estar burlando de nosotros. —Shadow ríe intentando no suspirar gracias al cansancio.

Al fondo se escucha un tiroteo los padres como si fuera un reflejo se levantan pero Alfred les ayuda a recostarse de regreso.

—Dejen que alguien más se encargue. — les pidió y ellas se niegan.

—Si ustedes no irán nosotros lo haremos. — Fred entre gruñidos dijo.

—No podemos dejarlos solos, no tienen tiempo y no podemos dejarlos solos. —Sigfrid dijo sin moverse de su lugar.

Ellos hacen aparecer sus báculos, pero con la energía utilizada los dejan caer al suelo, exhaustos.

—Esta bien, solo no se muevan de aquí. — sonríen y ellos desaparecen.

—Ahora ustedes cuatro ahí fuera, vengan aquí. — Evelyn suspira y al verlos entrar dos penumbras les entregan los báculos. —Sabemos que no somos muy conocidos, pero deben cuidarse entre ustedes y a los demás, son protectores literalmente entre las sombras, sigan haciéndolo.

—¿Por qué hacen esto? Saben que ya no hay tiempo. — Franny suspira viendo el báculo.

—No podemos distraerlos con nosotros mismos, hicimos eso durante años, ahora son libres y esta despedida ellos no deben de estar. — Fredd empezando a toser dice.

—Van a sufrir durante un tiempo, pero estarán bien. —Fran suspira y le entrega el báculo. —Deberían relajarse que...sabían que era el momento, ¿eh? — ríe y le señala a los demás para que se retiren, él siguiendoles el paso.

Ven como un médico estaba apunto de entrar pero ellos niegan. Unos minutos después los cuatro llegan corriendo entrando a la habitación, solo se escuchó su negación, pero ningún grito o llanto.

Finalmente la manada paso a la otra vida.

Pero no, esto no acaba aquí. La otra vida es lo que vio Alfred el momento que se suicidó, oscuridad y frío, nada más, cada uno de ellos solos en su propio infierno.

Lastimosamente el destino no planeó que fuese por siempre, tenían que sacarlos después de un par de años, unos 20 a 30 años (aunque parece que no les afectó para nada.)

—¿Freddy? — El nombrado mira para todos lados, buscando la voz de su hermano.

—¡¿Fred?!

—¡¿Dónde coño están los tres?! —escucharon los gritos de Evelyn.

—¿En dónde estamos? — Escuchan como Shadow se acerca.

—Se llama limbo, el lugar entre mundos, fue el castigo que recibieron. —Ismael habla, aún molesto con ellos. —No lo suficiente malos para el infierno, no lo suficiente para el cielo, el limbo, espero que hayan pensado en lo que hicieron durante sus vidas paternales. Pero al parecer no pueden quedarse aquí. Vengan, síganme. — suspira caminando hacia la luz.

Ellos empezaron a seguirlo casi corriendo tras suyo, al pasar la luz cayendo sobre lo que parecen nubes y una gran reja de metal dorada. Tras esas rejas lograron ver a "personas", casas, praderas verdes y animales, todo en armonía.

—¿Qué es este lugar? —Evelyn pregunta confundida al ver a su padre abrir las rejas.

—Son los primeros en salir del limbo y pasar por estas rejas, felicidades. —dice y ellos al pasar sienten un gran ardor en sus espaldas.

—Perdón, olvide ese detalle, es lo que sus hijos sintieron al liberar sus dones, o parte de ellos. —sonríe y escucha un par de huesos romperse lo cual los hace gritar aún más. —Y ahí están, bueno, no son por completo blancas, pero es un milagro que tenga un poco.

—¿Alas? —Shadow se pregunta moviendo las suyas.

—¡Ay mi niño! —escuchan el grito de una mujer.

—¡Mamá! — ambos Fillet gritan corriendo hacia ella y abrazándola.

—Hasta que les llegó la hora. —Phantom suspira cerrando sus alas.

—Sabía que ibas a terminar aquí. — Shadow dice levantándose.

—No sin ir al limbo antes, salí hace diez años, no se ni como Max convenció al parlamento de sacarnos de ahí antes. — sonríe ayudándoles a levantarse.

—Gracias. —

—Tenemos mucho de qué hablar. —Ismael suspira guiandolos hasta donde se encontraban los tres linajes por completo. —Una zona de solo portadores, es solo como una compensación por el trabajo en la tierra.

—Oh Freddy~ —Chris canturreo pero quien corre hacia él es Evelyn.

—Te extrañe tanto. —susurra sin soltar.

—También te extrañe Eve. —sonríe abrazándola de vuelta.

Ambas Darek son atacadas por Cain quien las abraza con fuerza.

Ellas sonríen y aceptan el abrazo.

—Aún estás gordo. — Shadow se burla.

—Y tu una varilla. —ríe pero siente una pequeña patada en su pierna.

—Ambos arriba, no entrarán en la casa sucios. — Bear habla agachándose a su altura.

—Hola. —Shadow sonríe.

—Vamos, los demás Darek tienen años esperando a conocerlas, el abuelo es muy paciente.

—Y ustedes con su bisabuelo y abuelo, ambos estuvieron esperando mucho tiempo. — Chris dice guiando a sus hijos hacia la gran casa, muchas más tras esta.

—Vamos, necesitan conocer a su familia. —Bear dice llevándolas hacia la casa contraria a la de los FIllet.

Regresemos a la tierra, donde los tres ángeles se encontraban en un tejado cerca del parque, donde parecía que inauguraron una estatua de los tres héroes de la ciudad. Con ese gesto de inmediato pensaron en sus vidas, retirándose de sus puestos en la compañía y dejándolas a sus hijos. Continuaron el negocio que su abuelo empezó, su pastelería, agrandando de a poco intentando mantener la calidad y amor; como le decía su abuelo; de los productos.

Pero cuando menos se dieron cuenta, los años ocurrieron, esta vez perdiendo a las personas de su generación, comenzando con sus amigos, continuando con sus parejas y terminando con sus hijos..

Sigfrid gritaba del dolor, su único hijo siendo enterrado junto al padre, acompañando al resto de su familia.

La tormenta el día de su funeral, todo creado por la madre destrozada.

—¡Sigfrid debemos irnos! — Wal le grita sujetándola desde la cintura.

—¡Es mi bebé! ¡Alfred es mi bebé! —continúa gritando sin querer dejar el lugar.

—Si alguien nos ve aquí empezaran a preguntarse cómo seguimos vivos, debemos desaparecer. ¡Se que duele, pero ya no hay nada que podamos hacer por él!

Wal sin más opciones la carga en contra su voluntad y empieza su vuelo dirigiéndose a la casa del bosque, la casa que sus padres le entregaron a Mike.

—Vemos Sig, dejame te ayudo. —Mike sonríe tratando de que ella se levantase del suelo.

—Iré a revisar a Maight, cuidala por mi por favor. — Alfred pide, secando sus alas y sacudiendolas.

—Y tu estas bien Al?

—Estoy bien. —responde monótonamente, dirigiéndose a la habitación de Black.

Lo han perdido todo y a todos, desde sus identidades hasta sus seres amados. Ahora se encuentran solos en un mundo que los cree muertos, cuando sienten que lo están.

Muertos por dentro pero con la responsabilidad de salvar al resto.