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Un Ambiente distinto

•Martes 31, Mayo del 44, 4 am•

~Evelyn~

Ellos están de caza, dijeron que nos quedáramos aquí, pero algo aún sigue preocupándome, ¿y Shadow insiste? Si, insiste que vayamos a revisar qué es.

Tal vez tenga razón, pero ellos se enojaran si se dan cuenta que no estamos en casa.

— Poquito, ya verás que será rápido. —Shadow promete cosas ... .pero ....a veces no las cumple.

Pero él puede seguir asustado.

— Un poquito. —Me sonríe y toma mis manos.

Aparecemos frente a Fox. Él gritó asustado pero Shadow lo callo.

Nos tiene miedo.

— Queremos hablar. —le dije. Está asustado de nosotras, quiero irme a casa.

Shadow lo dejó hablar.

— ¿Qué hacen aquí? —se escucha asustado, parece que busca algo con su mirada, algo con que protegerse creo.

— No te haremos daño, lo prometemos. —Trato de calmarlo pero no funciona.

— ¿Tenemos mucho que explicar cierto? —Shadow si puede calmarlo.

— Son hermanas de Nightmare y tienen poderes, creo que sí tienen mucho que explicar. —está ahora enojado, mmm no entiendo por qué.

— Si, así es, pero te salvé el pellejo zorro.

— ¿Qué hacías tan tarde en ese lugar? —era cierto que es peligroso estar afuera solo, Bear no nos deja salir de la casa durante esa hora,

— Meg se enfermó, y Spring la cuidaba mientras yo iba por medicina, eso es solo un atajó. —habla demasiado, hay algo más.

— ¿Qué tan malo es?

— Solo es una tos y fiebre, este callejón es un camino corto a casa.

— Ok, solo, no te acerques mucho al territorio de Nightmare ¿va? —Shadow está tranquila, demasiado, ¿por qué todos me ocultan cosas?

— También es nuestro. —le recordé.

— Por parte de Bear, por salvarlo él nos quitó su parte. No te acerques y estarás bien.

— Como quieran, no es el único atajo que existe.

Ambas sonreímos al escuchar eso.

— Tenemos que irnos. —Es cierto, ellos pueden regresar en cualquier momento.

— Adiós Fox. —le dije antes de desaparecer junto a Shadow.

— ¿En dónde estaban? —oh oh, Bear está en nuestra cama.

— ¿Afuera? —Tal vez me cree.

— ¿Por qué será que no las detectamos afuera, si nosotros estábamos de caza? Ustedes son un par de lobas muy escurridizas.

Ambas suspiramos, no podemos engañarlo, trabaja con la policía.

— Estábamos hablando con Fox.

— ¿Seguras?

— Mhm.

— Mírenme a los ojos y digan donde estaban.

Ambas lo hacemos y le dijimos la verdad, es malo mentir, mejor ser honestas.

— Les creo, como sea, las buscaba porque tenemos un regalito adelantado para ambas. —Él sonrió al decir eso.

¿Un regalo? Los regalos son en días especiales, pero dijo que era adelantado. ¿Nuestro cumpleaños es importante?

— Hoy en la mañana llegaron dos paquetes para ustedes.

— ¿Alguien nos envió algo?

— Así es, algo que esperaban desde que regresaron a casa, ¿se acuerdan el que?

¡Si!

¡Ambas corremos a la sala y vemos dos cajas! ¡Al fin llegaron!

— Hola. — ¿Por qué Nightmare tiene un ojo morado?

— Tal vez por eso estaba gritando Bear en la mañana. —escuché a Shadow desarme a través de nuestra conexión. Era como si estuviera en mi cabeza.

Parece que se arrepiente de algo, pero no sé qué le dijo a Bear para que lo golpeará así.

¿Ambas lo quedamos observando pero él nos abraza?

Esto es demasiado confuso.

— Son demasiado tiernas por su propio bien, solo por eso se las dejaré pasar, pero otra y le digo a Bear lo que hicieron. —el susurro.

— ¿Decirme el que? —oh oh.

— Nada. —le dije, sí Bear descubre lo que Shadow y yo hicimos se enojara mucho, con todos.

— No soy tierna. —Shadow.... Cállate.... Por favor.

— Si lo eres, ambas lo son. —Bear nunca nos miente.

— Molesta, pero tierna. —Nightmare eres un oso apestoso.

Shadow deja salir sus garras y toma una caja.

— Esperen. —Bear dijo antes de hacer aparecer una cámara y encenderla. — Vale, pueden hacerlo.

Todo mi caja y sacó una de mis garras.

Ambas abrimos las cajas y vemos otra caja negra.

¡Finalmente podremos ver algo más que gris!

Abrimos las cajas negras y habían unos lentes extraños, parecen los lentes que Bear usa cuando hay sol y vamos a pescar, pero tienen un color más claro pero también oscuro. Se ven raros los vidrios.

— ¿Por qué no se los prueban? Y ven si hay alguna diferencia.

Bear se acerca a nosotras y nos sonríe, está feliz, eso es bueno.

Ser feliz es bueno.

— No será mucho al comienzo, pero con el tiempo irán mejorando, por ahora son solo los colores primarios, y talvez el negro y eso pero irán mejorando, lo prometo.

Ambas asentimos y nos ponemos los lentes.

Es diferente, el amarillo se ve mucho en el lugar, también el azul y rojo, casi naranja por la madera, parpadeo varias veces y lentamente los colores se ajustan a mi vista.

Como si fuera magia, Bear dice que mejoraremos pero todo se ve tan normal.

— ¿Qué tal?

Ambas los vemos y los abrazamos. Ellos nos devolvieron el color.

— Todo mejorará de ahora en adelante. Nada tiene que cambiar, ¿saben por qué? Porque ahora ustedes deciden.

¡Nightmare acepto mi abrazo! ¡Ya no está molesto!

— Nada les podrá suceder, ya todo terminó. —nos dijo en susurros, es feliz.

Nosotras somos felices.

Gracias hermanos, gracias.

•Domingo 4, Septiembre del 44, 9:37 am•

~Bear~

Es el quinto mes desde que las chicas regresaron, septiembre ha comenzado y el frío se vuelve más notorio.

Ellas han mejorado bastante durante estos meses. El pánico hacia las personas comenzó a desaparecer. Las peleas fueron terminando, todo es paz y tranquilidad.

Tuvieron su cumpleaños, todo el equipo vino y el resto de ellos logró conectar con ellas. Las heridas sanan lentamente y eso ayudó a mantenerlas relajadas todo el día.

No sabía que Stone tenía un punto débil por los niños.

Como decía, ellas estudian en casa con ayuda de Caín y mía, hicieron los exámenes de la departamental y están niveladas ya por completo. Segundo básico, tan pequeñas y ya están estudiando su octavo grado.

Pero, se ven aburridas ahora, no es suficiente que solo hablen con cuatro personas en toda su vida. Y hablar con animales no creo que sea muy sano, necesitan una vida social.
Es por eso que Meisy y Mackintosh hicieron exámenes para asegurarnos que son mentalmente capaces de ser integradas a una sociedad donde puedan interactuar y defenderse como cualquier otro joven de su edad.

Investigue algunos colegios y encontré el perfecto. No el mejor que pude encontrar, pero en niveles de bullying y disciplina el perfecto.

Mandé la papelería, hablé con el director, y todo está listo. Están algo atrasadas, por un mes, ya que comenzaron en agosto.

Solo queda darles la noticia.

— Caín detén la clase.

Él me ve enojado, le gusta enseñarles, no creo que a él le guste esto.

— Chicas tengo una sorpresa. —les dije mientras me acercaba.

— ¿Una sorpresa? —Shadow me preguntó.

Ella siempre habla primero, creo que esa costumbre jamás se le quitará.

— Así es, ¿que dicen si conocen a más chicos de su edad?

— ¿Como el orfanato? —Esta vez Evelyn me pregunta.

— Si, pero regresarán a casa a las cuatro PM.

— Escuela. —Nightmare gruño y se cruzó de brazos, está enojado.

— ¿Una escuela? ¿Con profesores y más personas? —Evelyn está emocionada. Eso significa que Shadow también querrá.

— Mientras me saquen de esta casa yo estoy bien. —Ahí está la sombra Shadow.

— ¿Y yo qué? ¿Me quedaré solo en casa otra vez?

— Si, ellas tienen que socializar, y lo harán. —le enseñé mis colmillos mientras le sonreía.

— Bien.

— ¿Que dicen si vamos a preparar uniformes y materiales? Mañana es su primer día.

Ambas me abrazan y corren a su habitación.

— Te odio Bear. —Caín me gruño. — Además, ¿cómo irán las dos? Shadow no sabe ni cómo mantener su cola escondida.

— Ira como una sombra, pero podrá tomar el control, ambas se estarán turnando.

Escuché dos latidos extras

— Dejen de espiar. —les dije y ambas salen de sus escondites.

— ¿Por qué como una sombra? —Shadow me preguntó.

— Tu tienes más dificultades en controlar tu poder, y Mackintosh mencionó algo sobre arranques de ira, con poderes no sería muy seguro. Pero se turnaran cuando quieran, ambas.

— Bien. —me respondió molesta.

— Y yo las estaré dejando y recogiendo.

— ¿Y tu trabajo? — los tres me preguntaron.

Evitó reírme, son idénticos.

— Como su guardián es mi trabajo cuidarlas hasta que cumplan 18 años. Tengo permitido dejarlas e ir a traerlas de la escuela. Y no se preocupen, Meisy estará revisando en ustedes de vez en cuando.

— Okay.

Ambas desaparecieron.

Solo quieren salir de aquí y aventurarse en nuevos ambientes, espero no estar tomando una mala decisión.

•Lunes 5, Septiembre del 44, 3:40 am•

Evelyn baja las gradas corriendo mientras tenía su mochila a mano. Se mira feliz.

El uniforme no es tan malo, solo cambié la camisa dé manga corta por una formal blanca de manga larga, igual las medias, exactamente por la rodilla. La falda no es corta tampoco, de un color azul oscuro con dos pliegues enfrente.

Él director no tiene problemas, ya que es el uniforme de invierno, y ya está informado de su situación.

Las vendas están bien puestas para que no tengan problemas por sí comienzan a sangrar más de lo usual, me asegure que no vayan a manchar el uniforme.

La sangre no sale fácilmente de la ropa, mucho menos si es blanca.

— ¿Nos vamos? —Ambas me preguntaron mientras tenían el control a la vez.

Shalyn, así es como la llamaría Ismael cuando tuvieran ambas el control o eso decía la nota que encontré en sus libros.

— Nada de poderes, va para ambas. Además ahí fue donde Caín y yo estudiamos.

Esa era también otra razón por la que las inscribí ahí.

Ambas me ven entusiasmadas.

— Vamos al auto, o se hará tarde para cuando lleguemos. —dije mientras tomaba mis cosas y mis llaves.

Los tres subimos al auto y arrancó.

— Si quieren pueden dormir, es un viaje largo.

— ¿Por qué no usas una sombra?

— Porque después necesito usarlas para ir a mi trabajo, llevar un auto entero requiere bastante energía.

— ¿Lo hacemos nosotras?

— No, necesitan todas sus energías para la escuela.

Ella bosteza.

— Duerman, yo las despierto cuando estemos cerca.

Se recostó en el asiento trasero, y se volvió en loba.

— Como quieran, mientras estén cómodas. —murmuré mientras aceleraba por la solitaria carretera.

Tres horas después y estamos llegando a la escuela.

Está vacío, están a punto de cerrar.

— Recuerden lo que hablamos, pasaré por ustedes a las 4, si nadie ha llegado entren al bosque o.

Shadow me interrumpe. — Tomamos un autobús, pero a ti no te gusta la idea así que iremos por una sombra porque es más seguro.

Le sonreí, eres idéntica a Caín, pero si te lo dijera me atacarías.

— Suerte.

Ella me abraza desde el asiento trasero.

— Nos vemos. —dijo antes de salir del colegio.

~Evelyn~

Hola Emily Montessori, es grande. Parece que el bosque está tras de la escuela. Camino hacia el gran edificio y abro una de las puertas de metal. Está vacío.

Pero hay mucho ruido. Hay también, creo que se llamaban casilleros, son oscuros, tal vez cafés o azules, no lo sé .

Bear nos dijo que teníamos que ir a la oficina del director y él nos daría algo, creo que las llaves de los casilleros y mi horario de clases.

Comencé a caminar por los pasillos, habían muchas puertas con ventanas. Tenían placas a su lado.... Se parecen a las que él utilizaba en las puertas...

No me gustan.

— Rayito, vamos a llegar tarde si no te concentras.

Cierto.

Después de un rato buscando, encontré una puerta que decía dirección, tal vez aquí es.

Toque la puerta con cuidado, Nightmare dijo que si lo hacía muy fuerte podría romperla.

La puerta se abrió y un hombre de cabello negro y ojos café abrió la puerta. Parece que no es mayor que Bear. Tal vez no sea tan malo.

— ¿Buenos días, necesitas algo?

Asentí —Buenos días, soy Evelyn Black, creo que mi hermano hablo con usted.

— Oh, Black, si, pase adelante. —es amable, creo que eso es bueno.

Entré a su oficina y me senté en una de las sillas.

Él se sentó tras su escritorio y tomó unas cosas de uno de sus cajones.

— Muy bien, aquí está su horario y llaves de su casillero, si tiene algún problema con su enfermedad puede acudir a la enfermería, usted tiene acceso a esta y no se preocupe ya se le ha informado a las enfermeras. —¿qué? ¿Qué acaba de decir?

— ¿Mi hermano le dijo? —pero él dijo que no le contáramos a nadie.

— Si, su hermano al matricularla me explicó que era algo especial.

— Lo está diciendo como si fuera algo malo. —Shadow gruñó en mi oído.

Tiene razón pero no podemos hacer nada.

— Vaya a su altura, es tarde.

— Ya sé porque Nightmare habla mal del director, es molesto. — Shadow se cruzó de brazos.

Salí de la oficina y vi el folleto que me dio, tiene un mapa, eso es algo de ayuda.

— Ya se porque Bear no quiso que vinieras también. —le dije a través de mi mente.

No saben cuánto tuvimos que caminar para llegar hasta esta aula.

Me tuve que apoyar en la pared al lado de la puerta, ahora sí es tarde. Ni con un mapa pudimos llegar a la clase.

— Te dije que era a la derecha. —Shadow cállate.

La ignore y toqué la puerta

Una señora abrió la puerta, es mayor que Mackintosh, estoy segura, su cabello es rubio, sus ojos café, piel arrugada. Es una pasa fea.

— Tu debes ser Evelyn. —me dijo sonriendo, es amable, o eso da a ver.

— Así es señora. —le sonreí.

— Sigues nerviosa. —canturreo Shadow.

— Pasa adelante. —se alejó de la puerta y yo entré.

Habían muchos alumnos, me están viendo, sus miradas clavadas en mí, me dan miedo.

— Vale chicos, hoy tenemos a una nueva compañera. Preséntate por favor.

¿Qué? Pero.....bien.

— Hola, yo soy Evelyn Black, tengo 14 años, y espero que podamos ser amigos. — No sé qué más decir pero creo que eso está bien.

— ¿Y cuáles son tus gustos Evelyn? —la profesora me preguntó.

Preguntas, ¿estaremos así todo el día?

—Emmm me gusta tocar la guitarra y leer.

Por favor que esta tortura termine rápido.

— Puedes sentarte atrás. —dijo la profesora.

Yo le asentí y vi un lugar vacío. Estaba entre una chica rubia y .....un pelirrojo alto que ya conocemos.

— ¿Qué hacen aquí? —Foxi nos preguntó susurrando.

— Estudiar. — Shadow le dijo tomando el control.

— ¡No tomes el control! ¡Eso no vale! —le grite mientras flotaba sobre ella.

Ella trató no de no reírse mientras sacaba uno de mis cuadernos de la mochila.

Que raro, huele raro. Y está cerca, aunque ...huele bien.

Huele muy bien.

No puedo evitar ronronear, se siente tan bien, huele tan bien, tengo que encontrar de donde viene.

Deje mi nariz trabajar y olfateó todo el salón, las mochilas, algunos estudiantes ... .muchos apestan como el carro de Meisy.

Me estuve diez minutos olfateando hasta que a unos asientos tras el mío lo olí otra vez.

Me concentre un poco más e hice lo que Bear me enseñó, a ver un poquito de color por unos segundos.

Era un chico de cabello castaño y sujeto con una pequeña coleta blanca, sus ojos eran de un lindo azul, más oscuros que los míos. Su nariz es perfecta para su rostro algo ovalado. Su piel es algo oscura, no mucho, solo un poquito más que la mía.

Sus labios, son delgados y asimétricos, se ven... suaves.

Me acerco un poco más a él, es muy mono, aunque tiene ojeras, se ve cansado y nervioso, quiero saber por qué, quiero que se sienta protegido y calmado.

No sé por qué siento esto, pero me siento bien, y creo que Shadow también lo siente, pero ella no puede verlo sin dejar el cuerpo o voltearse a hacerlo.

Y eso creo que sería incómodo para él, alguien desconocido no dejándolo de ver. Está mal estar tan cerca pero.... Pero es tan tan.... No lo sé, no sé qué es esto.

— Evelyn, tú turno. —escuché a Shadow decir mentalmente.

Quiero tocarlo pero Shadow me regresa el control.

— Concéntrate, es el primer día, y se que Bear nos hará muchas preguntas después. —ella me dijo casi como un regaño.

Tiene razón, pero él....

No pude hacer nada más que suspirar y concentrarme en lo que decía la profesora.

Tres horas después la campana sonó. Si no me equivoco debería ser la hora de desayuno o como Nightmare le dice receso.

Muchos tomaron sus loncheras y se fueron del salón, pero Fox se paró frente a mi y se acercó a mí rostro.

— ¿Por qué escogieron este colegio? —nos preguntó, creo que no le gusta que estemos aquí también.

Shadow tomó el control.

— ¿Ahora no podemos estudiar en un colegio zorro? —se molesto.

— Shadow — él susurró su nombre, ya no sé si está asustado o molesto.

— Tan solo unos meses después y nos volvemos a encontrar, no te preocupes, Nightmare no se acercara si yo estoy aquí. —le aseguro.

Es cierto, él y Nightmare no se llevan bien.

— ¿Y cómo siguen los demás? —le pregunto.

— Hubo un incidente pero de ahí todo bien, pero la escuela sigue siendo aburrida, los tres nos turnamos con el trabajo.

¿Un incidente?

— Yo que tengo que escuchar a Nightmare todo el día, crees que eso no es aburrido, al menos aquí si cambiamos de aula. —le dijo animada.

Cierto, es más divertido que estar en casa haciendo nada más que estar en el sofá.

— Además, aquí tengo planes. —le sonrío malévolamente.

Oh oh

— ¿Qué planeas? —Fox le preguntó.

— Tu serás el que me enseñe el lugar, me expliques cómo funcionan las cosas aquí, no sé.

Lo sabía.

— Cisa número uno, el pudin manda.

¿Qué?

— ¿Qué es eso? —Shadow le preguntó también confundida, nunca había escuchado del pudín.

— Es el mejor postre del mundo, ¿cómo es que no lo han probado?

— Nunca escuche eso, ¿será como el flan? —le pregunté a Shadow sabiendo que solo ella me escucha.

Ella sintió, tampoco sabe.

— ¿Qué más? —le pregunto.

— No hay nada especial de la escuela, solo si hacen actividades nos avisan antes. — no dijo mientras buscaba algo en su mochila.

— ¿Qué más? — Shadow le preguntó.

— Nada, sígueme, te enseñaré la escuela. —nos dijo mientras cerraba su mochila y Shadow lo seguía.

Pero ....yo no quiero ir, el chico castaño sigue aquí, parece dormido, si tan solo pudiera hablarle.

— ¿Quién eres? —pregunte sabiendo que no me escucharía.

Shadow se volteó y vio al chico.

— ¿Oye zorro quien es él? —le pregunto antes de señalar al chico.

— Es solo Freddy, actúa raro, déjalo, parece cansado, me uniría a la siesta pero ustedes llegaron.

— ¿Freddy que? — Shadow le preguntó.

Él bufó cansado de sus preguntas. — Yo que sé, solo vámonos antes que el pudin se acabe.

— Como quieras. —Shadow le dijo.

Ambos salen del salón pero noto como Freddy levanta la cabeza y ve a nuestra dirección. Está interesado en algo, se nota en su mirada..... Tal vez...no, no es posible, no nos conocemos.

No me di cuenta en qué momento estábamos en los pasillos mientras Fox decía muchas cosas sin sentido pero nos daba direcciones.

— Shadow, recuerda que dijo Nightmare, nuestra lonchera debería estar en nuestro casillero. —le dije mientras miraba mi casillero.

Ella se acercó y lo abrió pero no había nada.

— Se olvidó de nuestra comida. —Shadow murmuró molesta.

Antes de cerrar la lonchera apareció y Shadow la tomó de golpe. Alguien pudo haber visto eso.

Espero que Bear no se vaya a dar cuenta, aún sigue molesto con él.

Shadow regresa donde estaba Fox. Entramos a una gran cafetería. Había muchos chicos de diferentes edades.

Todos siendo diferentes, hay tanto que conocer en este lugar.

— Bienvenida a la cafetería, la zona de guerra. —dijo mientras buscaba algo con la mirada.

¿Qué dijo? ¿Guerra?

Tomé el control y le pregunté confundida.

— ¿Perdona que?

— Si llegas temprano comiste, llegas tarde y mueres de hambre, o comienzan una guerra de comida. —dijo mientras buscaba algo con la mirada.

— Entiendo. — respondí.

— No te muevas de aquí. —me dijo mientras me enseñaba una mesa vacía y se iba.

— ¡¿Pero qué le pasa?! —grito Shadow molesta.

— Solo fue a buscar algo.... Creo. —le susurré antes de abrir mi lonchera y ver un sándwich y trozos de sandía.

Vamos a morir de hambre si esto es para el resto del día.

— Hola. —me saludó la chica rubia que se sienta a lado mío durante las clases.

WoW, sus ojos son como los de Bear pero son más oscuros que los de él.

— Soy Annabelle, pero me llaman Anne, ¿tú eres Evelyn cierto? —me pregunto con una gran sonrisa.

Yo asentí, es muy alegre, me agrada, me recuerda a Meisy.

Un chico también rubio se sentó a su lado, pero sus ojos eran grises, que raro, nunca vi a alguien con los ojos grises, no aparte de Shadow.

— Soy Gonzalo. —me dijo un poco más calmado el chico rubio.

— Hola. —escuché una pequeña voz a mi lado.

Me hizo saltar un poco gracias al susto.

Shadow se ríe de mí, no me quiso avisar.

Vi a mi lado y era otra chica, ¿azabache y ojos rojos? Que extraño color de ojos, tal vez sea como Anne y Bear, pero en vez de morados, rojos.

— Soy Bonnie. —aww su voz es tan linda.

—Evelyn. —le devolví el saludo.

Estuvimos al menos diez minutos hablando y conociéndonos. Ellos son divertidos de pasar el tiempo. Me preguntaron muchas cosas y yo respondí sin que sospechara en nada o mencionarles lo que sucedió hace unos meses.

Nos estábamos divirtiendo hasta que sentí como alguien me golpeó muy suave la cabeza.

— Hola Fox. —dijo Anne contenta al verlo.

— ¿De qué hablan? —nos preguntó — ¿Y por qué la rubia está sentada con Anne?

Shadow trata de no reír pero por accidente toma el control y se rio.

— Perdón, ¿pero ustedes ya se conocen? —Shadow les pregunta.

— Vive conmigo desde hace un mes y es una molestia. —fox respondió. Se escucha molesto por alguna razón.

— Al menos limpio. —Gonzalo le respondió.

— Trajiste a una paloma a mi casa, de mascota.

No puedo evitarlo, eso es gracioso.

— Paloma asada, yumi. —¡Shadow cierra el hocico!

Todos se le quedan viendo, ay dios, qué pena.

— ¿Qué? —les pregunto con una gran sonrisa.

— ¿Has comido paloma? — Gonzalo le pregunta, no sé si asqueado o en shock.

— He comido cosas peores. —le respondió sonriendo.

— Callate por favor. —le dije o más bien le suplique.

— Okay —dijo Fox alargando la palabra.

Shadow te voy matar cuando tenga la oportunidad.

— ¿Fox, adivina qué intentará hacer ahora? —Gonzalo.

— No otra vez. —dijo mientras pasaba su mano por su cara.

Creo que no le gusta escuchar eso.

— Anne, no creo que sea buena idea. —Bonnie le dijo.

Ella si es tierna, no sé cómo Bear dice que nosotras somos tiernas.

— ¿Y qué quieres hacer? —Shadow le pregunto a Anne, algo interesada en el tema.

— Verás, cada año la escuela organiza un festival, música, teatro, arte, todo eso que tenga que ver con el campo de artística.

— Me apunto. —dijo un pensarlo.

Tome el control — Mejor no. —dije negando.

— Vamos rayito, ¡será divertido! —me suplico.

— Tenemos a otra bipolar. —Fox no quiero dejarte en las garras de Nightmare.

— ¿Y cómo se conocieron? Parecen ya bastante amigos. —preguntó Gonzalo.

¿Está pensando que yo y Fox?....No gracias.

— Estuvimos en el mismo orfanato. —le expliqué para que no tuviera algún tipo de idea rara.

— Y yo conozco a su hermano.

— Aun me la debes. —murmuré molesta.

Bear y Shadow estaban muy molestos cuando se dieron cuenta.

— Ya no te la debo, te guíe por la escuela. —¿Qué acaba de decir está mierda roja?

— Bien, estamos a mano. —no puedo revelar el secreto, así que se la dejo pasar.

— ¿Y quien quiere apuntarse en el festival este año? — Anne nos preguntó.

— Después del desastre del primer año no. — Gonzalo dijo mientras abría su lonchera.

Ya han participado al parecer y no les fue muy bien.

— Venga chicos, una vez más.

Shadow tomó el control, esto me está mareando, yo también quiero socializar.

— Yo creo que sería divertido. —ella le dijo a los demás.

¡No llevamos ni medio día en la escuela, y ya nos estás apuntando a algo que yo no quiero hacer!

— ¿Enserio? — le pregunto contenta.

No quiero hacerla sentir mal.... Pero tampoco quiero participar en algo que no conozco cómo funciona.

— Si, soy buena cantando, y Fox es bueno en la batería. —Shadow le respondió.

Cierto, la batería y fox....

Shadow sin que nadie lo notarán hizo aparecer una viejas baquetas dentro de nuestra lonchera. Finge buscarlas y las toma enseñándoles.

— Las dejaste en el orfanato..... Ellos estarían orgullosos, sabes.... —Shadow murmuró mientras le daba las baquetas.

Tocó fondo. Muy fondo. Es poco lo que nos había contado sobre él.... Accidente, pero sabemos cómo se siente. Sé cómo se siente.

Él se quedó observando un buen rato hasta que dijo.

— Me uno. —se sentó a nuestro lado.

Está feliz, eso es bueno.

— Has logrado que Aiden Fox se uniera a la competencia, así yo me uno también. —Gonzalo dijo sorprendido.

Shadow sonríe y ve a las dos chicas.

— ¿Se unen? —les pregunto.

— ¡Vamos Bonnie! ¡A por la boleta! — gritó antes de salir corriendo junto a ella.

— Y así, chicos, es como se tranquiliza a una furia, dándole lo que quiere— dijo antes de tomar un pedazo de sandía

— Aprendiste de Nightmare. —le dije casi riendo.

Es cierto, eso es lo que él hace siempre.

Ambas escuchamos un grito que los demás no. Anne gritó.

Shadow sin pensarlo corrió hasta uno de los pasillos más solitarios que he visto. Y eso no es todo, tenemos a dos idiotas enormes frente a nosotras.

Ollie y Ozzie.

Bonnie estaba en el suelo inconscientemente, un golpe muy feo en el rostro..... Se han pasado de la raya, y en un instituto.

— Pero qué tenemos aquí. Que le están haciendo a esta pobre chica. —dijo Shadow mientras se acercaba tal loba a un ciervo.

— ¡Oh sombra qué gusto volver a verte! —dijo Ollie con una sonrisa falsa, idéntico a Nightmare.

Odio sentirme así pero.... Los odio.... La lastimaron....

Trato de tomar el control pero Shadow no me lo da. Ahora ambas lo tenemos. Al mismo tiempo, esto será divertido.

— Este no es su territorio, así que fuera. —les informé.

— ¿Tu territorio? —Ollie me preguntó.

Ambos se rieron, como si dijéramos una mentira que ya conocían.

— Esta escuela está dentro del territorio de los Nightmare, y el jefe dijo que tú ya no eras parte de este. —Ozzie se burló.

— Porque no mejor van y le avisan al tonto de mi hermano que se ande con rodeos, que ahora este es mi territorio. Ustedes han lastimado a una chica dentro de mi territorio sin excusa alguna así que déjenla en paz. O seré peor pesadilla que Nightmare. — solo así comprenden.

Ambos asintieron asustados y trataron de irse.

— Y mándenle a decir a ese oso que si alguno de ustedes se vuelve a meter en mi territorio comenzaré una guerra y ustedes saben quien terminará ganando. —con Bear de nuestro lado, Nightmare jamás tendría oportunidad.

Ambos se van corriendo, como debe de ser.

Corrí hacia Bonnie y veo que sigue inconsciente. Ella es algo pequeña y Ozzie es más grande que Fox.

— ¿Cómo o por qué? —Anne parecía no poder moverse.

Creo que ellos han estado haciendo esto antes. Bueno ya tenemos con que chantajear a Caín.

— Asuntos familiares. —le dije antes de cargar a Bonnie.

No pesa demasiado, pero si las heridas sangran Bear se enojara y mucho.

— Debemos ir a la enfermería, no sé qué tan fuerte la golpearon.

Ella solo me quedó viendo sorprendida..... Es verdad.... Muchas de las personas normales no logran cargar a alguien como si fueran plumas.

— Es pequeña, no pesa casi nada, no te sorprendas. —le dije escondiendo me tras esa verdad.

Boom. Sentí como mi espalda se abría lentamente, el ardor comenzando a ser notable.

Solo pude ignorar el dolor y comenzar a caminar.

— ¿Cómo puedes aguantar tanto? —Anne me preguntó.

Bueno, aquí es cuando digo media verdad media mentir.

— Uno de mis hermanos trabaja con la policía, a él le gusta entrenar mucho. —le di una excusa tonta pero funcional.

— Se nota. — murmuro para si misma creyendo que no la escucharía.

Seguimos caminando hasta llegar a la enfermería, estaba vacía. La dejamos en la camilla y suspiro. Él dolor está creciendo pero es soportable.

— Justo cuando la enfermera no está. —Anne dijo molesta no sé con quién, pero sí sería algo de ayuda.

Shadow me quitó por completo el control y ella se acercó a uno de los gabinetes.

— No necesitamos a la enfermera para esto. —dijo mientras preparaba una ¿inyección?

— Shadow deja eso, tú nunca pasaste esa prueba. —le recordé preocupándome por el bien de Bonnie.

Me ignoró y se acercó a Bonnie. Limpio una parte de su cuello y prepara la jeringa.

— ¿Sabes lo que haces?— Anne tartamudeo, ¡ya que nadie confía en una chica de 14 años en poner una inyección!

— Experiencia propia. —le dijo confiada antes de ponerle la inyección.

— Con cuidado. — dije viendo cómo colocaba la jeringa con un poco de fuerza.

Tomo el algodón, saco la aguja y puso presión. Todo se ve bien, creo que finalmente pudo colocar una inyección.

Mientras que ella ponía presión, comenzaba a limpiar sus heridas del rostro. Pasaron unos buenos minutos, le colocaron algunas vendas y curitas.

Shadow suspira cansada al terminar.

— Ozzie te voy a matar. — escuche ese pensamiento pasar a través de nuestra conexión.

Shadow se sentó y me dio el control. Lo primero que me golpeó fue la sensación de ardor a través de mi cuerpo. Heridas ardiendo como el fuego me recibieron con las manos abiertas.

Sentía la sangre correr cada vez más.

— ¿Anne, me manche de sangre y no me di cuenta? —le pregunté enseñándole la parte de atrás del uniforme.

— Si. —me dijo señalando una mancha que no podía ver.

Esto es malo. Muy muy malo.

— Mierda, nuestro primer día y manche el uniforme de sangre, en una camisa blanca, estoy muerta. — Shadow dijo desapareciendo.

— ¡Gracias por abandonarme! —le grité mentalmente.

— Tendré que ir a cambiarme. —murmuré.

— ¿Cómo sabías hacer esto? — Anne me preguntó mientras se acercaba a Bonnie.

— Ya te lo dije, tengo algo de experiencia en esto. Mi hermano es policía así que sabe mucho sobre estas cosas. Y mi otro hermano sabe de heridas musculares, ambos me enseñan este tipo de cosas. —le tuve que decir un poco la verdad, para no levantar sospechas.

— Al parecer tenés una vida algo emocionante. —me dijo sonriendo.

— No la llamaría así, pero si tú lo dices. —le dije antes de tomar el alcohol. — Iré a cambiarme la camisa. Nos vemos luego...creo. —le dije antes de salir corriendo de la enfermería.

Desapareció y me encerré en mi baño.

Me quite el uniforme como loca y abrí el bote de alcohol. Sin pensarlo dos veces me quité las vendas y Dios, sí que parecía que me había bañado en sangre.

— Esto dolerá. —susurre para mí misma antes de echarme la botella entera encima.

Quiero gritar, el dolor es inexplicable, como que me quema por todo el cuerpo.

Hago aparecer las vendas y me las pongo como Meisy me enseño.

Puedo dar final entre un suspiro. El dolor comenzó a disminuir. Pude ponerme un nuevo uniforme y aparecer en el baño de la escuela

Escuchó la campana sonar, me perdí todo el recreo. Pero valdrá la pena.

Me dirigí a la enfermería y vi que Anne no se había ido.

— Deberían ir a clases. —le dije acercándome a ellas.

— Diría lo mismo. —me respondió.

Yo suspiré y negué —No, yo tengo que revisar que siga bien. —le dije sinceramente.

— Mejor ve antes que no te dejen entrar.

— Perdón por esto. —me dijo apenada. — ¿Ellos eran tus hermanos? —me preguntó.

Yo me reí a tal tontería.

— No, su líder es mi hermano, Nightmare puede ser horriblemente terco cuando hablo de mi parte.

— ¿Ya has hablado con él sobre esto? —está haciendo muchas preguntas.

— Si.... Pero no hace nada, si él no lo hace yo lo haré, conmigo no se quiera meter, lo derrumbare ...en algún momento. —murmuré, aún puede ganarme.

— ¿Es el mayor verdad?—¿para qué quiere saber eso?

— Si. Pero no significa que no lo haré caer de cara. — Shadow dijo mientras tomaba el control.

— Sabía que me agregarías desde que entraste al salón—ella admitió sonriendo

— ¿Amigas? —Shadow le preguntó dándole la mano.

— Mejores amigas. —dijo antes de tomarle la mano.

¿Parece que no es normal darle la mano a alguien? Porque veo que está algo extrañada con ese gesto.

— Gracias por ayudarnos con lo del festival. —me dijo antes de voltearse a Bonnie.

Yo asentí y ella volteó hacia ella también.

No creo que despierte en un rato. Ozzie es el doble de grande que ella. Si en al menos dos horas no despierta, creo que pediremos ayuda de alguien más.

Una hora y nada.

Dos horas y sigue sin despertar, esperamos una hora más a ver si se despierta. Estuvimos ya tres horas hablando de tonterías y cosas de la escuela.

Al parecer cada año es este festival, comida, arte, y cosas así.

Hasta que se vino un tema que a mí me interesa, bueno más bien, yo le pregunté

— ¿Y Anne, tú conoces a un tal Freddy? Está en nuestra clase.

— Ah freddy. —decía asintiendo — Yo no sé, él no habla con casi nadie, lo han visto hablarse a sí mismo. — Fue lo que me dijo.

¿Se habla a sí mismo? Eso es raro ...muy raro. Vale, creo que se le fue la canica al chico.

— Algunos lo molestan por ello, pero yo creo que solo necesita un descanso; siempre se ve cansado, todos tienen problemas, algunos más que otros, él solo necesita en quien confiar ...pero él no quiere nuestra ayuda. — ¿Ella confío en mí para decirme todo esto o lo hizo solo porque no le agrada Freddy en realidad?

— Parece que lo conoces bien. —le dije sin pensar mientras la miraba de reojo.

— ¡Celosa! —canturreo Shadow en mi oído.

— Cállate sombra. —le dije mentalmente, molestando por su nombre.

— Al comienzo del colegio hablamos, pero con el paso del tiempo comenzó a alejarse de los demás, ya casi no hablamos. —se escucha triste cuando habla de él.

— ¿Sabes su apellido? —le seguí preguntando.

Solo necesito su nombre, eso es todo, podría buscarlo por la computadora de Bear, él dijo que ahí tenía el nombre e información de muchas personas. Tal vez pueda ayudarlo.

— Fillet, es un apellido raro, pero mi mami dijo que no me metiera con él por alguna razón. Se llama Frederick Fillet. —Anne me dijo mientras me miraba como si sospechara algo.

— ¿Has dicho Fillet? —¿por qué siento que lo he escuchado en algún otro sitio?

Ella asintió aún sospechando.

Me tomará días convencerla de que no haré nada malo.

— Y ...¿Qué fue lo que pasó en el festival? Ustedes dijeron que lo que pasó fue malo. —le pregunté.

Quiero saber porque no quieren participar, bueno, no querían participar.

— Éramos muy unidos en ese tiempo, y no practicamos, salimos desincronizados a la primera ronda

Mmm falta de organización y coordinación, eso se resuelve rápido. Esto es fácil, el profe de música nos enseñó cómo organizar una orquesta, podremos con una pequeña banda.

— Yo me encargare de todo eso de sincronizar y las prácticas, de mí no se salvan. — dije mientras asentía.

Anne comenzó a reírse.

— Esos dos se fueron corriendo como gallinas sin cabeza. —dijo aún riendo.

No puedo evitar reírme si parecían gallinas cuando corrían.

— Ellos ya vieron la buena pelea que le di a Nightmare; se la ganó a decir verdad. —le dije mientras tomaba aire.

Esa pelea.

— ¿Y tus padres no se molestan por ello? —me pregunto sin saber.

Padres .... Ellos son como mis padres, pero son mis hermanos. Mmmm me gustaría acordarme de cómo eran ellos.

Le sonreí para que no sospechara. Ya sabe mucho de mí.

— Siempre saben lo que pasa en toda la familia, creo, ellos vigilan más, aunque siempre estoy con mis hermanos.

— Eso es lindo.

— ¿Y tú tienes hermanos?

— No, soy solo yo, pero hay ventajas en ser hija única, siempre te ponen más atención cuando solo eres tú.

Ambas escuchamos a Bonnie despertar. Se está quejando del dolor de cabeza.

— Al menos los moretones ya no están hinchados.

— Te lo dije, sé de estas cosas.

— ¿Qué pasó? —Bonnie preguntó tocándose la cara.

— Se te ha ido la hoya Bonnie, te noquearon.

— ¿Qué? ¿Pero si estábamos en el pasillo? ¿Ustedes me trajeron aquí?

Ambas asentimos y yo le veo las heridas, se ven bien para que la hubieran noqueado.

— Debes defenderte Bonnie. — Anne le dijo molesta.

En que esto ya había pasado antes.

Ella negó mientras se sentaba

Shadow tomó el control y está vez estoy de acuerdo con ello.

— Conejita si no lo haces ellos tendrán liebre asada como cena, mejor levanta puños antes que ellos, y no te preocupes, yo cubro su espalda.

— Gracias. —murmuró.

La campana se escuchó otra vez en los pasillos. El almuerzo, Bear me matará.

No, matará Caín, si, a Nightmare.

— ¿Por qué no vamos a buscar a los demás? —les pregunté mientras ayudaba a Bonnie a pararse.

Al fin vamos de vuelta a la cafetería. Vi a Fox buscarnos por todos lados. Hasta que le saludé y corrió hacia nosotras.

— ¿Tu por qué no me avisaste que esos dos los molestan? —le pregunté sentándome con los demás.

— No sabía ni que ibas a venir aquí. —me dijo molesto sentándose de golpe.

— ¿Aha, entonces, la banda, integrantes completos o que? —les pregunte viendo a cada uno de ellos.

— Podríamos preguntarle a Freddy. — Gonzalo comentó.

— ¿A Freddy? ¿Segura? Hace tiempo no hablamos. —Fox le dijo tomando un cartón de no se, ¿jugó? ¿O gelatina? No sé.

Pero aquí se acaba de abrir una puerta para mí.

— Yo le hablaré, tal vez logre ayudarlo en algo o yo que se. —les dije con un tono no interesado.

¡Podré hablarle sin que él sospeche!.... Eso se escuchó mal.

— Ese chico me da mala espina. —Shadow admitió.

Calla que le voy a hablar.

— Tendrías solo cuatro días para convencerlo, ¿segura quieres hacer eso? Podríamos participar sin él.—Anne me dijo no muy segura de la idea.

— Pan comido. —respondí antes de ir por mi lonchera y crear un plan.

Ya estábamos terminando las clases. Todo ha estado bien. Hasta que Fox me tomó del brazo y me arrastró hasta un salón.

— ¡¿Pero qué te pasa?! —le grite molesta.

Él señala a alguien tras mío y me volteo.

— ¡Meg! —grité antes de abrazarla.

¡Hace tanto que no nos vemos! Pero su ojo, está muy lastimado.

— ¿Quién te hizo eso? —le pregunté sintiendo lo mismo cuando cazaba a alguien, como una fiera desatándose dentro mío.

Meg se dio cuenta y me tomó del rostro.

— Solo fue un accidente, estoy bien.

Shadow tomó el control.

— ¡Un ojo Megan! ¡Eso no es estar bien! —le grito molesta pero preocupada.

— Ya ratos estás hablando verdad Shadow. —Fox le preguntó.

¡Lo sabía! ¡Se nota cuando Shadow toma el control!

— Zorro ha sido malo todo el día, no quería ayudarnos en nada, casi me pierdo al ir a clase de historia.

— ¡¿Qué?! —él le gritó.

— ¡Fox! —Meg le gritó de vuelta.

Aprovecho a reírme porque no pueden escucharme y ambos hermanos me estarían tirando fuego.

Mala suerte que Spring no está. Tal vez mañana lo logré ver.

Solo pudimos hablar diez minutos porque ya estaban cerrando la escuela. Me senté en una banca esperando a Bear.

— No creo que llegue. —Shadow suspiro.

— ¡Nos vemos chicos! —les grite a los demás mientras se iban.

Ya era tarde y no podían quedarse más tiempo.

— Bear nos abandonó. —Shadow se quejó exagerando como siempre.

Ambas nos callamos al oler ese mismo aroma.

Me vuelvo y veo esa gran melena alejarse de la escuela.

— Creo que deberíamos ir por el bosque. — Shadow me dijo pero yo ya estaba siguiéndole casi a escondidas.

— Necesito hablar con él. —le dije mentalmente.

— Entonces hazlo y deja de seguirlo como si te lo fueras a comer.

Me escondí en una sombra y continúe con mi misión hasta que llegó a una casa, supongo que es la suya.

Asentí y regresé al bosque.

— Sabemos donde vive.

— Si stalkeadora.

— Callate loba. — dije antes de desaparecer y aparecer en la casa.

— Se tardaron, ¿por qué? —Nightmare nos preguntó y ni hola nos dijo.

— ¿Por qué no nos fueron a buscar? —Shadow le preguntó molesta tratando de salvarnos las colas.

Bear se acercó a nosotras.

— Perdón, iba en camino pero alguien casi quemó la casa. — Fue lo que dijo antes de desaparecer.

— Hoy hay pay de manzana extra crujiente. —Nightmare dijo mientras tomaba un pai negro.

— Siiii, que rico. — ¿Algo es algo no es así?

— Iremos por comida china. —puso el pay en el mostrador de la cocina y tomó su billetera.

Gracias dios, no que soy mal agradecida pero eso huele horrendo.

— ¿Y cómo les fue hoy? —nos preguntó mientras buscaba algo.

— ¡Ollie y Ozzie casi matan a una alumna a golpes! —Shadow le gritó.

— Se habrá metido en nuestro territorio y no habrá querido pagar.

— Estaban en nuestro territorio, dentro de la escuela. Eso puede causar una guerra Nightmare. —le dije molesta.

— ¿Una semana solo de carne de venado arregla los asuntos? —nos preguntó.

— Y le devuelven todo lo que le han quitado. —le dije.

Él me gruñó pero asintió — ¿Entonces cómo les fue?

— Nos encontramos con Fox y los demás.

— ¿Él? — se me olvidaba que Nightmare lo odia.

— Somos compañeros en el aula y con otros chicos queremos hacer una banda para un supuesto festival.

— Como quieran, solo diviértanse. ¿Pero ya conocen a los demás integrantes?

— Sip, casi a todos, solo hay uno que es algo tímido pero lo más seguro se abrirá con el tiempo. —le respondió tomando mi abrigo..

Hace más frío que antes.

— No crean que no olfatee el olor a sangre fresca en su baño. — Dijo tomando su abrigo.

— ¿Qué sangre? — Shadow le pregunto evitando decirle.

— También encontré un uniforme en sangre, lo que explica todo, ¿que dijimos de cargar cosas pesadas o sus heridas se abrirán y tardarían en cerrar? —¿nos regañó solo por que queríamos ayudar?

— No hubiera pasado si esos dos no hubieran golpeado a nuestra amiga. —le gruñí.

Era cierto, es su culpa.

— ¿Cómo están las heridas? —me pregunto evitando aceptar la culpa.

— Vendajes nuevos—le respondí bajando un poco la manga de mi camisa.

Él asiente y me toma la mano.

— Solo vamos por la comida. —nos dijo y desaparecimos.

Quién diría que la escuela sería tan agotadora.

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