Territorio
•Viernes 6, Mayo del 44, 7 am•
•Casa Black•
~Bear~
Una semana entera desde que ellas regresaron a casa.
Hemos estado dándoles tiempo para que se acoplen nuevamente a casa, han sufrido varios ataques de pánico durante la noche.
Los lobos también son un problema, y eso las asusta también. Hay tantas cosas que las asustan.
Caín ha estado haciendo más comida de lo usual, y entiendo que ellas necesiten alimentarse mucho más, pero no es para que gaste toda la comida del mes en una semana.
Aún trato de aumentar la condena a Amery, pero es casi imposible, ya hemos dado todo lo que está en contra de él.
Parte del caso ya está cerrado, pero aún hay cabos sueltos que pueden llegar a ser peligrosos.
Cada día ellas se vuelven más "cariñosas" por así llamarlo, ellas no nos dejan estar un metro alejados de ellas, nos necesitan, demasiado, entendí que necesitan sentirse protegidas, pero es difícil que se sientan así cuando debemos ir a trabajar y ellas se quedan con Meisy y a veces Mackintosh.
Cada día es una lucha diferente, sus poderes comenzaron a crecer sin una barrera que las detenga, y eso las debilita, ya que sus cuerpos absorben esa energía para curar heridas interminables.
Cada noche son gritos y lágrimas de terror, ellas no pueden dormir sin que nosotros las acompañemos hasta que se duerman, ellas simplemente no pueden estar solas.
Su motriz se está desarrollando tan rápido, pero siguen atrapadas en esa jaula mental, donde piensan que si no hay alguien a su lado ,ese monstruo regresará y las dañará.
Creo que es momento de cambiar la rutina, puede ser que sea muy temprano para esto, pero ellas necesitan sentirse libres.
Es por eso que pedí una semana libre, y no fue problema alguno, ya que sigo siendo su guardián y sabiendo por lo que han pasado, necesitan de mi.
— Muy bien todos, tomen sus mochilas, vamos a acampar. — dijo viendo a los tres animales recostados en el sofá.
Ellos me vieron.
Y me está dando miedo, ninguno de los tres se ha movido, ni gruñido, no están haciendo nada, solo me ven con esos ojos, llenos de oscuridad y no sé qué otro pensamiento.
— ¿Acampar? — finalmente me preguntó Caín.
— Así es, iremos a las montañas y cazaremos, acamparemos y descansaremos unos cinco días. — dije mientras les daba sus mochilas.
— ¿Qué es acampar? — Shadow me preguntó.
No sé quién es más curiosa, ella o Evelyn.
— Es cuando vamos a dormir en la naturaleza, sin luz, sin televisión, ni estufas. — dije viendo a Nightmare.
Aquí vamos.
Los tres comienzan a gruñir, Nightmare les enseño a no moverse en todo el día, en no salir al bosque y correr, ellas necesitan correr.
Dejar a sus lobas libres por al menos diez minutos.
Pero no, están en este sillón comiendo bolitas de queso mientras ven televisión.
— ¿Vamos a entrenar verdad? No quiero ir. — Caín dijo mientras comía otra bolita de queso.
Me está dando una de esas miradas que dicen 'no me jodas y vete a tomar por culo', si, esa mirada.
— Iras, los tres, quieran o no, necesitan correr en el bosque, necesitan no solo ganar peso, sino que musculatura también. — les recordé.
Ambas se levantaron y tomaron sus mochilas café y azul, eran algo livianas para mí, pero por sus heridas está bien para ellas.
Nightmare gruñe y se levanta, algún día lo sacaré de casa y lo dejaré viviendo en el bosque.
— ¿Ya nos vamos? — me pregunto aburrido.
— Caminando, como animales.
— No, Bear, la montaña está a media hora corriendo. — él me recordó mientras renegaba.
Y me llama infantil.
— Así es, será un buen cardio para empezar.
Ambas me gruñen y se sientan, oh vamos.
— Venga, podemos trotar al comienzo, tienen que correr, hace meses no hacen nada.
— Pero hay lobos y no hay luz ni calor. — Evelyn refunfuño mientras cruzaba sus brazos.
Suspira y sonríe Bear, no pelees con las copias de Caín.
— ¿Además, qué haríamos? El bosque es aburrido. — Shadow me dijo enojada.
Nunca volveré a dejarlas solas con Caín.
— Ya verán que será muy divertido, hay algunas aguas termales en nuestro campamento, también hay muchas liebres, podemos hacer una fogata y asar malvaviscos, o mejor, asar salchichas o carne. — dije mientras se agachaba a su altura.
— ¿Carne y dulce? — Evelyn me preguntó mientras me veía con esos grandes ojos azules.
— Mhm, y Nightmare puede cazar también con ustedes, no hay reglas donde marcar territorio y en ese lugar los lobos no se acercarán. — les sonreí.
Ambas sonríen y se levantan, no es difícil convencerlas, con el tiempo no se dejarán convencer así de fácil, y ellas aprenden muy rápido.
— Bien, vamos. — Caín dijo mientras tomaba su gran mochila negra y se la ponía.
— Caín, es temporada de alcé. — le dije sonriendo.
Su temporada favorita llegó, ya es legal cazar alces machos en la zona.
— Carne de alcé, eso sí me interesa, vamos chicas, yo guío. — le dijo mientras caminaba a la entrada.
Los cuatro salimos de la casa y yo hice desaparecer las mochilas. Cerré la casa por completo y los cuatro dejamos nuestros animales salir.
No puedo creer que la loba de Shadow sea casi gris, pensé que sería más como el lobo negro de Nightmare, pero ella es de otro color, tal vez depende del tipo de sombra y el tiempo que han estado separados.
Comenzamos a caminar entre los árboles, Nightmare les explicaba cómo se identificaban los territorios o cómo saber cuándo un animal está enfermo.
Yo solo miraba a nuestro alrededor, revisando si los lobos no se acercaban.
Nada, tal vez estaban de caza, es buen momento para avanzar.
Comienzo a trotar más rápido y los demás me siguen.
— ¿Los detectas? — Caín me preguntó.
— No, no están cerca, debemos correr ahora, o sabrán que estamos cerca.
— Si no están cerca tenemos tiempo de caminar. — él me gruño.
— No, si no están cerca tenemos la oportunidad de llegar más rápido y evitar accidentes. — le gruño aún más fuerte.
El siempre me reta, él sabe que no puedo controlar a mi lobo, nunca logré hacerlo nuevamente desde que mi conexión con Nightmare comenzó a morir.
Estos son los efectos cuando una sombra se separa demasiado del portador, pierdes el control y la sombra se vuelve cada vez más humana.
Es rara vez que él es una sombra, pero en este momento, sin control en mi poder, sabiendo que él está rentando me.
Sabiendo que ellas aún no son lo suficientemente fuertes para liderar nuestra manada familiar, ¡sabiendo que yo soy el beta de la familia! ¡Él sigue rentando me!
Lo ataque, no lo soporto más, él debe de aprender que hago todo lo que puedo por esta familia, ¡y él sigue tratando de llevarme a mi límite!
¡Él nunca aprende!
Él mordía mi lomo, patas o cuello, pero yo conozco sus puntos débiles, cerca de la cola y estómago.
Ambos estábamos viendo rojo y negro, toda la energía comenzaba a surgir y solo un gruñido nos detuvo.
Ambas estaban enseñando sus colmillos, sus pelajes se volvieron grises y ambos nos separamos.
No puedo creer que hayamos perdido el control frente a ellas.
Se suponía que las haría sentir seguras, pero fallamos, yo fallé.
Joder. Ellas son las mayores. Ellas son las que podrían matarnos si quisieran, es su manada por derecho, pero ellas no saben los efectos de sus poderes.
La teoría nunca podría superar la práctica, no en este caso.
Ellas se acercaban a nosotros y ambos nos alejamos, ellas heredaron algo el día que Ismael Darek murió, algo que nunca entenderemos, un tema que no puede ser enseñado por libros.
Es algo que ni yo ni Caín podemos ayudarlas.
Su poder es diferente al nuestro, incluso Shadow es una sombra distinta a Nightmare, ambas son diferentes, únicas.
Por eso Amery deseaba tanto tenerlas bajo control, porque el poder que ellas poseen, podría traer abajo cualquier sombra.
— No más peleas. — nos advirtió Evelyn con un tono fuerte.
Este será un largo camino.
Sus pelajes vuelven a su color original, ambos nos levantamos y nos vemos mutuamente.
Nightmare algún día irás a la marina, y yo me aseguraré que te hagan sufrir.
Si, buena idea, en la marina se compondrá.
— ¿Cuánto falta? — Shadow me preguntó, está cansada.
— Corremos unos siete minutos y llegaremos. — Caín les dijo mientras avanzaba.
Ambas lo siguen y yo las sigo.
Estuvimos corriendo en silencio un buen rato, hasta que ellas se adelantaron.
Son muy rápidas, más rápidas que Nightmare, y él es rápido.
Ellas nacieron para liderar.
En algo tenía razón Amery, nosotros no somos nada sin ellas.
Aunque las teníamos que guiar ellas solo estaban olfateando el aroma de los árboles y siguiéndolo.
Diez minutos después estábamos llegando al campamento.
Era un claro en el bosque con un pequeño lugar donde se pueden armar fogatas.
Ambas olfatean el lugar y se acercan al escondite de las mochilas.
Nightmare les enseño bien, al menos eso puede hacer bien.
Los cuatro nos volvemos a nuestras formas humanas. Algunas de las heridas aún estaban cerrando, me mordió con todo su hocico. Pero no fue el único que utilizó toda su fuerza vocal.
— Si vuelven a pelear nos iremos a casa. — Shadow nos gruñó y se cruzó de brazos.
Se ve pequeña e indefensa, pero ella, ambas, pueden ser peligrosas, todos lo saben, pueden ser hasta mortales.
Y ese hecho da miedo.
Me da miedo que las puedan usar, otra vez, ese es uno de mis grandes miedos, que alguien nos utilicen como armas.
— ¿Qué hacemos? — Evelyn nos preguntó.
Suspiro y veo a Caín — Ustedes vayan por algo de madera, yo iré sacando las tiendas. — les dije.
Ambas sonrieron y se le tomaron las manos a Nightmare.
— Más lento por favor, mis piernas ya no aguantan. — él suplicó cansado.
Los cuatro nos reímos y ellos se fueron.
Así serán las cosas Al parecer, nos tomará tiempo estabilizarnos, pero sé que lograremos evitar este tipo de peleas.
Tomó las mochilas y sacó las tiendas, tres en total.
Traje todo lo necesario, botanas, botiquín de primeros auxilios, algo de ropa, productos sanitarios, y sábanas, muchas sábanas, este lugar se vuelve frío durante la noche.
No se tardaron mucho ya que los vi regresar con una gran pila de palitos secos, bueno, Nightmare los cargaba mientras ellas jugaban con dos ramas que tenían en mano.
— Ves, no soy un holgazán, traje la madera. — él me dijo sonriendo.
— Él quería que nosotras cargáramos todo. — Evelyn me dijo la verdad.
¿En serio Nightmare? Lo quedé viendo en silencio.
— Ya veremos cómo les va a la hora de dormir. —él les gruñó mientras dejaba la madera en su lugar.
Vale, vayamos lento y seguro.
— ¿Quien me ayuda con esto? — les pregunté.
Nightmare solo se sienta y comienza la fogata. Creo que se olvidaron agregarle un cerebro.
Ambas se me acercan y se sientan a mi lado.
Le sonrió y comenzamos a armar las tiendas.
Todo está saliendo bien, ambas están riendo entre sí y Caín está cazando algún alcé mientras que yo vigiló la zona.
Nunca creí que algún día estaríamos los cuatro reunidos, perdimos a muchos durante el camino, pero lo logramos, finalmente estamos en casa.
Tenemos un hogar a donde regresar después de un largo día. Una familia que podemos proteger y amar.
Esta es ahora nuestra nueva vida, sin peligros mortales, libres, creciendo en un hogar estable.
Jamás podremos olvidar el pasado, pero nos volveremos fuertes gracias a ello, ellas lo harán, lo sé, estoy seguro de ello, ellas serán las mujeres más fuertes que alguna vez se conocerán.
Confío en mi instinto, se que ellas lo lograrán.
No, todos lo haremos, saldremos adelante, todos, juntos.
Huelo la sangre en el aire, se vuelve cada vez más fuerte.
— Atrapaste una muy buena presa Caín. — dije mientras miraba al lobo negro jalando el cuerpo de un gran alcé macho.
El se transforma y sonríe, algo que tenemos en común es el orgullo al atrapar presas grandes, y a crecido desde el momento que ellas llegaron, son instintos primarios, ellas son solo cachorras para nuestros lobos, pero nosotros sabemos que ellas casarían presas mucho más grandes de las que nosotros podemos.
— ¿Cruda o cocinada? — él nos preguntó.
— Cruda. — los tres nos reímos al contestar lo mismo.
— A comer se ha dicho. — dije mientras me levantaba y me transformaba en mi lobo.
Ambas me invitan pero ellas corren al alcé y comienzan a comer.
Se vuelven locas al oler sangre animal.
Caín también se acerca y comienza a comer, me apresuró antes de que me dejen a mí sin una mordida.
Un alcé de este tamaño podría alimentar a una docena de lobos, pero para nosotros nunca es suficiente.
Con el crecimiento de los poderes nuestros cuerpos requieren cada vez más energía y fuerza, y con tan solo dormir no es suficiente, la carne es un gran suplente de energía.
Ambas me quedan viendo, yo las estoy viendo. Los cuatro nos quedamos viendo.
La última pata.
Mía.
La tomo casi corriendo y salgo corriendo. Los tres me están siguiendo, pero está carne es ahora mía!
Un lobo saltó sobre mí, un lobo salvaje. Comienzo a atacar y él a mi, ambos estábamos luchando a muerte, la manada está cerca, estamos en su territorio, por metros del nuestro.
No es bueno, aquí nosotros somos los intrusos, y las chicas las que tienen territorio marcado sin protección.
Varios lobos nos acorralan, no podremos con todos a la vez.
O eso creo ya que ambas solo rugieron y los lobos retrocedieron. Ellas demostraban autoridad, fuerza.
Las piezas caen en su lugar, Amery no solo quería sus poderes, sino esa aura que mantiene en control a una manada, por eso los experimentos, el deseaba crear una manada que ellas mantendrían en orden.
Todo cobra sentido, pero aún hay una pieza faltante, y debemos encontrarla.
Los lobos retrocedían con las cabezas abajo, ellas solo me hicieron una seña y yo fui detrás de ellas.
No puedo creer que las más pequeñas en nuestra manada sean las que nos protejan, debería ser al revés , yo soy el que debería protegerlas, no ellas a nosotros.
Regresamos al campamento. Los cuatro nos transformamos y joder, ellas están empapadas en sangre.
Hago aparecer el botiquín de primeros auxilios y las cargo.
— Vamos a la laguna, el agua tibia les hará bien. — dije antes de desaparecer con ellas y entrar a las aguas termales.
Ellas chillaron en mis hombros pero les ayudará, el sangrado se detendrá por unos momentos y yo podré cambiarles las vendas.
Aun e incómodo, pero sino lo hago podrían infectarse e infringirles aún más dolor del que ya están.
Estas heridas son las peores, para cualquiera, son casi una pulgada de profundas, y gracias a que nuestros cuerpos rechazan los puntos, tienen que curar naturalmente.
Les cambié los vendajes y les di su ropa.
Estaba oscureciendo, el frío era notorio, no tanto como al comienzo del año, pero lo suficiente para sentir nuestra piel erizarse.
Regresamos al campamento y una cálida fogata nos dio la bienvenida.
— Al fin, ya tengo todo listo para la primera maravilla de la noche, s'mores. —Nightmare, tu mayor pecado es la gula.
Los tres nos acercamos al fuego para recuperar algo de calor.
Es una noche fría, para estar cerca del verano, es una noche realmente fría.
Solo puedo observar cómo ambas arrugan la nariz en el momento que Nightmare les da las golosinas.
Trato de no reír al ver sus caras cubiertas en malvaviscos y chocolate derretido, son un desastre tierno. A comparación de Caín, ellas al menos sí tienen un poco más de autocontrol que él.
—¿ Bear que andas pensando? — Caín me preguntó.
— ¿Qué?
— Tu s'mores ya se volvió a endurecer porque no lo has tocado. — él me dijo molesto.
Nunca hagas enojar a Caín con la comida, o se volverá la copia de Gordón Ramsay, solo que en vez de gritos te da esa mirada que te hará desear jamás haber nacido.
— Caín, déjame disfrutar este momento, ellas ganaron territorio sin nuestra ayuda, nos salvaron, ellas solas. Y están disfrutando una golosina como si eso no hubiera sucedido. ¿Sabes qué tan orgulloso estoy en este instante? Ellas nos superan.
Siempre supe que eras algo retrasado Caín, pero jamás a este extremo.
— Ya se que ellas nos superan, el truco es que no lo averigüen aun, sino será difícil entrenar con ellas retandonos. — él me ¿gruño?
— ¿Nos están escuchando? — le pregunté mientras observaba que ambas nos ignoraban por completo, algo muy extraño ya que a ellas les encanta escuchar todo lo que discutimos.
— ¿Crees que las dejaré escuchar lo que aún no deben saber? No soy nuevo en esto Bear, no podre ser el más inteligente, pero e que si ellas tienen mi jodido orgullo o peor el orgullo de tu lobo, estaremos perdidos y para bien, porque yo no trabajo con poderes y orgullo a la vez; tengo un camuflaje puesto, ellas no nos escuchan o notan que estamos hablando. —me equivoque en algo, el si tiene un cerebro, la cuestión es que casi nunca lo utiliza.
Y si lo utiliza no es por completo.
— ¿Sabes que ellas pueden detectar cuando usamos nuestros poderes si estamos demasiado cerca de su territorio? Y en este momento estamos en él. — le recordé la primera cosa que le enseñe
— Pero no saben de qué estamos hablando, eso es lo que importa. — me dijo con una sonrisa malvada.
Nightmare, jamás aprenderás la leyes de los territorios.
No cuando se trata de territorio familiar.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro