Juicio
•Viernes 30, Octubre del 43, 4 am•
~Narro~
Un par de meses han transcurrido lo cual les dio el tiempo suficiente para que su confianza creciera entre ellos, así el estado mental de ambas chicas ha mejorado. Sus heridas se abrieron pero al mismo instante cerrándose y aunque estuvieran ya estaban acostumbradas al dolor no era sano..
Ellas sonreían todo el día, ambos hermanos enseñándoles todo lo que ellos saben sobre la vida y pasó a paso ellas aprendían. Meisy también era de mucha ayuda, una vez las acompañó a una caminata por el bosque y Nightmare les permitió marcar su propio territorio, desde ese momento les encanta ir a pasear. Caminar a través de la naturaleza, cazar, divertirse junto a su familia, Bear incluso les enseñó algunos trucos suyos, como crear metal directamente de las penumbras.
Ellas eran felices, ellas eran libres.
Lo eran...
~Bear~
Meses investigando entre gobiernos y continentes, y ese hombre desapareció de la faz de la tierra, lo cual eso no me gusta.
He investigado sin descanso alguno pero no lo encuentro, le he pedido ayuda a muchos de mis compañeros, pero cada uno de ellos abandona el caso al no encontrar rastro alguno sobre él. Todos se rinden lo más rápido que pueden.
No debería estresarme por ello, solo han pasado unos cuantos MESES, pero es William Amery, un psicópata con poderes, lo necesito fuera de las calles, ahora.
Veo la foto con mis hermanas y Caín, ellos han luchado, nosotros hemos luchado durante años solo para saborear está vida, y yo no me arriesgaré a que lo pierdan.
Escucho el timbre de mi teléfono así que respondo. — Aquí Black, ¿quién habla? — pregunté mientras leía uno de los archivos del año pasado.
—Bear. — escucho a Stone ¿preocupado?
—¿Stone, sucede algo? — le pregunté dejando a un lado el archivo.
— Está en la comisaría, repito Amery se encuentra en la comisaría, trae refuerzos, es una masacre ahí dentro. — lo escuché.
Amery.
Cuelgo la llamada y presione la alerta — Aquí el capitán Black, equipo Alpha los quiero a todos en los helicópteros, coordenadas -4.0226300 39.8581000, encontramos a Amery, repito, encontramos a Amery. — Informe tranquilo de la situación.
Pero al tan solo apagar la alarma salgo disparado a tomar mis cosas e ir hacia el helipuerto.
Todos suben a los helicópteros y partimos, diez minutos después y nos encontramos en Toledo, hay oficiales rodeando la comisaría, los helicópteros aterrizan algo lejos del lugar y todos bajamos.
—Equipo Alpha, rodeen el lugar, si trata de escapar no duden en abrir fuego mortal. Equipo beta, aire, preparense por si comienza una persecución. Yo entraré primero, intentaré hablar y hacerlo entrar en razón. Si escuchan disparos continuen con el plan. — dije antes que todos partieramos hacia la comisaría.
¿Por qué apareció de la nada? ¿Por qué se dejó ver de esa manera? Algo planea, lo sé, él no se dejaría encontrar sin antes no tener un plan.
Entró por la puerta trasera de la comisaría, pude olfatear sangre, varias respiraciones, son veinte, espero que oficiales.
Ahí estás. Le apuntó con mi arma, pero él se voltea y me ve de frente.
—Manos arriba, Amery. — dije sin dejar de apuntar. No te tengo miedo hijo de perra.
—Oh Bear, es un placer volver a verte, mira qué grande estás, te pareces tanto a tu padre. — sonríe con el gesto más falso que he visto alguna vez.
Si pudiera disparar cuando yo deseara, ya hubiera vaciado dos cartuchos.
—He dicho manos arriba. — le repetí.
—¿Y por qué sería eso?— me pregunta aun sonriendo.
—¿Tan rápido te olvidaste de lo que has hecho? ¿A todas las personas que lastimaste? Encontramos más de 200 cadáveres en tu propiedad Amery. —Le informo manteniendo mi rabia bajo control.
—Pero Bear, yo no he estado en ningún otro lugar que no sea América del Sur. — ya está delirando. —O no me crees?
América del Sur, estaba buscando en el lugar equivocado todo este tiempo.
—Tenemos pruebas contra ti, Amery, las suficientes para mandarte a prisión.
—No lo creo. — él me dijo y dio un paso adelante.
— ¡No te muevas! — gritó y disparó, no voy a desperdiciar más tiempo con él.
Varios del equipo Alpha entran y apuntan hacia su dirección.
William frunce el ceño y levanta las manos.
—William Amery, estás bajo arresto por los cargos de homicidio y maltrato infantil. — dije mientras uno de mis compañeros lo esposaba. — Llévenlo a la base de contención central. — les indiqué antes de que se lo llevarán.
•7 am•
Tras tres horas de viaje finalmente pudimos tomar un pequeño descanso, excepto para mí, aparezco en casa y observé a Caín apagando la televisión.
—¿Lo tienes? — me preguntó.
Yo asiento acercándome — ¿Y las chicas? — pregunté tomando asiento a su lado.
—Fueron a pasear con Meisy, están cerca de la casa si a eso te refieres. — él me respondió bostezando.
—Bien, refuerza el domo y asegurate que ellas no se enteren, no aun.
—Ellas no lo averiguaran si no le decimos. — dijo y se dirigió hacia el bosque.
•Oficinas GEO, Guadalajara España•
•7:06 am•
De regreso en las oficinas, me encuentro en camino hacia la sala de interrogación.
Y por supuesto que tiene a un abogado junto a él, pero las pruebas dicen mucho más que solo un par de delitos menores.
Al entrar tomó asiento frente suyo, colocando mis archivos sobre la mesa; una pila de papeles de ocho centímetros, y esos son solo los delitos resumidos.
—¿Reconoce por qué se encuentra aquí, señor Amery? — pregunté juntando mis manos.
—No. — niega sin reacción alguna.
—Estos papeles. — dije empujandolos hacia ambos — son todos los cargos y evidencia en su contra,señor Amery. — le informo con simpleza — los principales cargos se tratan de homicidio y maltrato infantil de múltiples infantes.
—¿Cómo es eso posible o cuales son las pruebas que apunten a mi cliente, oficial?— su abogado me pregunta tomando notas.
—Su cliente tiene un largo historial en Rusia, incluso, tráfico de animales, dos lobos adultos de la propiedad Darek fueron encontrados muertos en tu propiedad, lobos de la reserva natural de Toledo, España. Al igual que se encontraron dos cachorras mal heridas, se les presento atención médica y fueron liberadas en la reserva.
Él se me queda viendo con molestia, ya sabe a quienes me refiero.
—Sin mencionar que se encontraron a dos adolescentes con rasgos de desnutrición y abuso, dentro de una jaula animal. También existe una demanda por parte de Caín Black, ya que esas dos adolescentes se tratan de sus hermanas menores, y él está pidiendo la condena de muerte. Todo eso dándose a cabo dentro de su propiedad. — en verdad intenté no sonreír gracias a eso. — ¿Algo que decir?— pregunté.
—Primero, esa propiedad era utilizada como una vieja zona de guerra, los cadáveres que mencionaste han de ser de ese lugar, segundo, esos lobos se encontraban cerca de mi propiedad, y la naturaleza hizo su trabajo así aparecieron las cachorras, tercero, esas chicas, son mis sobrinas, yo era el único con la custodia cuando mi hermano falleció. Y me niego rotundamente aceptar creer que ellas se encontraban dentro una jaula, yo las deje con una amiga mía en mi propiedad, mientras yo hacía negocios en América del Sur. — responde; tu pequeño mentiroso.
—Si así sucedieron las cosas, debes de aceptar la responsabilidad de que ellas estaban muriendo bajo tu cuidado.
—No, no lo acepto, ya que por lo que tengo entendido, aquí nadie tiene sus custodias, yo solo hice lo que pude, pero al parecer, sus hermanos mayores tampoco pudieron cuidarlas.
—Espere un momento, usted acaba de mencionar que usted era quien poseía de esa custodia, así que ¿por qué duda de ello?— pregunte revisando uno de los archivos que comprueba lo que he dicho. —Señor Amery, por favor es requerida la honestidad, no queremos aumentar cargos.
—Están en verdad ardidos por lo que sucede con tus hermanas no es así? — intenta provocarme, cambiar de tema, eso no funciona conmigo Amery, yo no soy Caín.
—Esto no tiene nada que ver conmigo, Amery, mientras que estoy en servicio, nada de mi vida personal debería afectar el caso. — le informé, entregando el archivo seleccionado hacia su abogado.
—No es apropiado que un miembro de la base tenga un caso tan personal, capitán Black. — usted que sabrá sobre qué es apropiado y que no, si está representando a un monstruo con mucha "carisma"; o eso es lo que siempre decía en el laboratorio.
—Mis superiores reconocen que yo pondría la seguridad nacional sobre mi vida, así como muchos más en este lugar.
—¿Y esa sería una de las razones por las que no se preocupó por sus hermanas? —¿Quién está haciendo las preguntas aquí, él o yo?
—Me preocupé en mi tiempo como civil, pero el caso no fue abierto hasta después que uno de nuestros oficiales pidiera refuerzos, por supuesto puse las denuncias sobre su desaparición. — le expliqué, sin tener demasiados problemas al responder a su pregunta.
Tengo cada rincón cubierto.
—¿Y sus padres? — William William, si que eres un sociópata al preguntar eso.
—Fallecidos, el principal sospechoso es su cliente, ya que era una nueve milímetros el arma homicida, la cual rastreamos que el dueño se trata de Amery. —Esta vez dirijo mi palabra hacia su abogado, entregando otro de los tantos archivos.
—¿Crees que asesinaría a mi propia familia?— William preguntó en un tono ofendido, dirigiendo su mano hacia su pecho.
—Señor Amery, yo no soy quien confirmó el tipo de bala, simplemente estoy llevando el caso acabó. — le informe entregando el archivo sobre la bala.
—El caso es algo rígido, pero aún no sabemos el estado de las dos jovencitas. — su abogado me explicó regresándome algunos de los archivos.
—Ellas están bajo mi custodia y la de Caín Black, la doctora Winters las ha estado monitoreando durante los últimos meses.
El abogado asiente sin dudar lo que acabo de explicar.
Como dije, lo tengo todo cubierto.
—Por lo que veo, señor Amery, usted puso una demanda por la custodia de las chicas, ¿o me equivoco? — pregunte; está loco ahí la explicación.
—Así es. — William asiente.
Si no estuviera trabajando, y este abogado no estuviera aquí, estuviéramos peleando a muerte.
—¿Y eso porque sería? Sabiendo lo que sucedió con ellas solo por un viaje de negocios, ¿no cree que la responsabilidad es demasiada? — pregunte.
—Conozco a esas niñas desde que tienen cuatro años, se que ellas quieren regresar conmigo. —Sonríe creyendo su propia mentira.
Él cree eso, piensa que ellas regresarán, ellas no son tontas, lo sé, ellas lo saben.
—Eso veremos durante la corte, señor Amery, por ahora, quisiera hacer unas preguntas sobre su profesión.
—Pregunté lo que quiere, Capitán-Black— responde burlándose de MI profesión.
Calmate Bear, solo unas horas y podrás mandarlo a matar.
—Bien, comencemos.
•3 pm•
Esto a sido horas de tortura, la rabia que contengo en este momento es infinita. Deseo verlo muerto, necesito verlo muerto, él torturó a tantos, asesinó a tantos, le arruinó la vida a dos niñas que no se lo merecían.
Me encuentro llenando el papeleo, mañana en la mañana será el juicio, será aquí en la ciudad, y el juez; amigo mío por cierto; me pidió que trajera a las chicas, lo primero que debemos resolver es sobre la custodia de ambas menores, luego se dará comienzo a los cargos, y por último la demanda que Caín puso encima.
•11 pm•
•Territorio Black•
Son las 11 de la noche y al fin regreso a casa, todas las luces apagadas, ya han de estar dormidos. Subí las escaleras y me dirigí a su habitación, como supuse, ya estaban dormidas. Me acerco a su cama y me arrodilló junto a esta.
Esto es por ellas, para protegerlas, necesitan protección. Aparezco en medio de su cama y ambas me abrasan
—Deberían estar durmiendo. — susurre aceptando sus abrazos.
Ellas solo me ignoraron y se recostaron sobre mí, así finalmente se durmieron abrazándome, pero necesito ir a darme una ducha.
Ya que, cinco minutos no caerían mal.
•Sábado 31,Octubre del 43, 6: 53 am•
No tuve que dormir ahí, Cain me ayudó con las chicas pero llegaremos un poco tarde, no para el juicio pero sí para llegar a Barcelona, es realmente tarde.
—Listo. — dijo Caín mientras le tomaba las manos a las chicas. — ¿Seguro no tengo que ir? — me pregunto sin confiar en mí.
—No, y no llegues, no tardaremos nada o ese es el plan. — dije mientras tomaba mi portafolios y luego las manos de ambas.
Los tres aparecemos frente a la puerta de la corte. Meisy se acerca hacia nosotros sonriendo al ver a mis hermanas.
—Cuidalas bien, esperemos que el juez no quiera verlas. — dije antes de entrar al estrado y dirigiéndome hacia mi lugar.
Cinco minutos antes de que el juicio comenzará, William ya se encontraba esperando junto a su abogado, tan solo los ignore sentándome al lado de una silla vacía. El jurado entra, cada uno de ellos toma asiento y el juez llega a la corte junto a varios policías. Esto está a punto de comenzar.
Él toma asiento y dice — Pueden tomar asiento. — Así que cada persona en este lugar sigue su palabra.
Es un hombre algo viejo, pero con mucha experiencia, un juez que ha trabajado en los casos de la organización durante mucho tiempo. A él no lo compran con nada, por eso mi confianza. Lee la papelería que se le dio y nos observa.
—¿Agente Black, y su Fiscal? — él preguntó notando que me encontraba solo.
—Yo representaría a la parte demandante durante el juicio, su señoría. — respondo implorando que este no sea uno de esos casos en donde necesito un Fiscal y el demandante; atte Cain; necesitan estar presentes.
Él asiente y observa a William; gracias a dios, no necesito a ni uno de ellos.
Este bastardo puede ser actor, convencerá a muchos, pero a mí no me engaña, jamás lo hará.
—Agente Black, presente su caso. — él secretario dijo y los demás me observan.
Me levanto de mi asiento y adjunto mis archivos.
—Su señoría, la noche del 20 de marzo del 2039, yo y mi equipo estábamos en una misión de rescatar y atrapar, ya que uno de los oficiales había pedido refuerzos. Lastimosamente no pudimos localizar a este hombre, pero después de años de investigación, la noche del 30 de Enero del año 2043, encontramos su base, en territorio ruso, y lo que yo personalmente buscaba, a mis hermanas, las cuales se encontraban dentro una jaula como un animal gracias a este "hombre" , si se le puede llamara así. — explique mientras lo observo a él y luego al juzgado.
Muchos veían a William no sé con qué sentimiento, pero no huele a inocencia.
—¡Objeción! — gritó el abogado defensor.
Estás en la cuerda floja, Amery y apenas empieza el juicio.
—Concedida. — dijo el juez. Solo viene comenzando el juicio, sí o sí debía dársela.
—Su señoría mi cliente tiene pruebas de su estadía fuera del país ruso, durante los últimos 6 años. — su abogado corrupto al parecer, dijo.
Son más de 6 años William, ellas tienen 13.
—¿Es eso cierto, señor Amery? — le preguntó el juez con sospecha.
—Por supuesto que lo es, su señoría. — responde William.
Espero que esto termine rápido. El abogado de William abre su portafolio y toma una gran carpeta, registros falsos, estoy seguro, pero sé que de alguna u otra forma los ha legalizado.
Él se levanta y se los entrega al juez. Él se mantuvo unos momentos leyendo papelería y luego me vio.
—¿Capitan Black, usted tiene pruebas de lo que dice? — me pregunto.
Yo asiento — Así es su señoría. — contestó, tomé mi maletín y saqué una gran pila con todas las pruebas resumidas y con imágenes, entregándolas — Aquí está, su señoría. — dije y luego tome el reporte de la misión y también dándolo.
Él estuvo diez minutos leyendo los documentos, todos manteniéndonos en silencio, él le pasó la papelería al juzgado y ellos lo leyeron. Todo en silencio, el silencio justo antes de la tormenta.
—Ambos parecen legalizados. — suspiro observandome — ¿Capitán Black, cree ser responsable de sus hermanas por el cargo en el que está postulado?— me pregunto, ya tomando una decisión.
—Ellas estuvieron ya ocho meses bajo mi jurisdicción, podré con el cargo, su señoría. — respondo.
—¡No permitiré que te lleves a mis únicas sobrinas Bear! Señoría, ellas son las hijas de mi difunto hermano, por favor. — el bastardo suplico y el juez lo observa, pensativo.
¡Que no lo intente!
—¿Ahora sientes lastima? ¿En dónde estuviste cuando él murió? ¡Oh si! Torturando a mis hermanas — dije cruzándome de brazos.
—¡¿Y tu donde estabas eh?! ¡¿Dónde te metiste y Caín?! —grito levantándose.
—¡Jamás te lo diré William! — le gritó perdiendo el juicio.
—¡Orden en la corte!— gritó el juez golpeando su martillo, tuvimos que cerrar la boca.
•7:32 am•
Estuvimos al menos media hora discutiendo el caso, él ponía excusas de cómo me dejaba llevar gracias a que son mi familia, aunque esté siempre ha sido mi método de resolver los casos. Media hora discutiendo y unas cuantas amenazas de parte del juez, hacia ambos.
Él suspira — Aquí solo tengo una opción, traigan a las niñas. — él dijo a uno de los miembros del personal.
Dios no, al solo ver a William ellas, no creo que esos meses de confianza sean suficientes para ganar la lealtad de años.
—Señoría no puede hacer eso. — le supliqué.
—¿Está juzgando mis decisiones capitán Black? — él me preguntó, amenazandome con la mirada.
Me quedé en silencio un momento — No, su señoría, prosiga por favor. — respondió mientras miraba que se abrían las puertas.
Ambas caminaban hacia nosotros y Meisy solo las seguía sin entrar al estrado. Ellas se quedan paradas en el medio viéndome y luego a William, están aterradas, eso es claro.
—Jovencitas. — el juez les llamó la atención.
Ambas se voltean y lo miran.
—¿Con quién desean vivir? ¿Con su tío Amery o su hermano Bear?— él les pregunta sonriendo.
Ambas voltean hacia William y luego me observan a mi.
—Chicas, respiren, pueden hacerlo. — les dijo Meisy.
Ellas asintieron e inhalaron. Ambas me ven pero William se levanta y las queda viendo.
—Objeción, manipulación. —dije observandole.
—Denegado. — responde y por fuerza debo de sentarme.
—No le pongan atención, él no las puede dañar. — Meisy trataba de calmarlas, pero es imposible.
Ellas lo miran y luego a mi, me observaron con lástima, no no, no chicas, por favor vean más allá de sus miedos.
Se acercan a William y se paran frente a él. Mierda.
—Deseamos irnos con el tío William. — dijo Shadow y Evelyn asintió.
Ay mierda.
—Su señoría, creo que ya sabe que hacer, ellas no quieren vivir con el capitán Black. — dijo el abogado de William, quien las toma con cuidado de los hombres y las ve entre sí — ¿O no es así chicas? — él les preguntó sonriendo, fingiendo ser su padre.
Ambas asienten rápidamente.
—Las pruebas son insuficientes, el reporte no es muy claro, su señoría, mi cliente, el señor Amery, tiene las pruebas suficientes. — su abogado habló intentando convencerlo.
—Se llevará a cabo una votación por el jurado. — él nos informó.
Por favor, denlo por culpable, culpable dios.
Cinco minutos después, han decidido...
—Su señoría, el juzgado ha decidido por mayoría que el señor Amery, es el único tutor legal de ambas menores, y siendo inocente ante los cargos. — dijo el representante del jurado.
Esto se fue a la mierda, en picada, a la basura. Si quiera hablamos de los cargos, toda esa gente está vendida.
—Siendo así, al capitán Black se le es negada la custodia de Evelyn y Shadow Darek, y los cargos hacia el señor Amery son anulados por falta de pruebas. — dijo y yo asiento cerrando mi portafolios. — Señor Amery, una agente de servicios infantiles irá a verificar la situación en la que ellas se encontrarán el siguiente mes.
Él desaparecerá con ellas antes de la semana, y toda la investigación se irá al carajo.
—Me parece bien. — respondió William sonriendo.
—Doy por este caso, cerrado. — nos informó golpeando su martillo.
Todos nos levantamos y nos dirigimos a la salida.
Voy tras Amery y mis hermanas solo para vigilar de lejos.
William se ríe en voz baja — Sé que estás escuchando sus latidos Bear, escuchalos bien, tan rápidos como los de una liebre asustada. — él dijo como el psicópata que es.
—Esto no se quedará así William, seré como ojos en tu espalda, un solo error con pruebas y te haré caer. — susurré solo para que él me escuchara.
—Suerte con eso, porque esta vez no se te será tan fácil, saluda a Caín de mi parte. — dice viendo a mi dirección y abriendo la puerta.
—Perdón. — escuche en el aire la voz de Evelyn.
—Avancen sin nosotras, somos solo peso muerto. — susurra Shadow.
Ellas no quisieron ir con él, ellas nos protegen.
Ambas entran al auto.
—Tienen razón, son peso MUERTO. — escuché a William gruñir antes de que entrara a su auto y echarlo a andar.
Caín me matará.
—¿Ahora que? — preguntó Meisy a mi lado.
—Esperar, regresa a casa Meisy, yo me encargo de esto. — dije antes de desaparecer.
Él me ve pero gruñe al notar que regrese solo. — Las perdiste, ahora me toca a mí. — dijo entre gruñidos, esto es malo.
—Caín, no lo mates, si te descubren...— le advertía sujetando su muñeca.
—Él ya está muerto para mi, solo lo regresare al infierno, donde pertenece. — responde enseñando sus colmillos.
—Nightmare, yo miraré que hacer, ¿bien? — le sugerí sin soltarlo.
—Si él les toca un solo cabello a mis hermanas lo voy ¡a!— él me rugía y yo solo le tapó la boca, me duele la cabeza.
—Bien, si mi plan falla haz lo que quieras. — dije quitando mi mano de su boca.
—Un golpe es todo lo que conlleva Bear, una sola marca y lo matare lentamente. — gruñe antes de salir de la casa.
~Shadow~
Estamos en el auto de....William.....tuvimos que hacerlo, solo con haber visto a Bear y luego a nosotras, él lo iba a dañar, no podemos dejar que eso suceda. Ellos nos protegieron todo lo que pudieron, ahora nosotras regresaremos el favor.
No los veremos otra vez, él se hará cargo de ello, les dije que él regresaría, siempre lo hace.
Y no pasaron ni diez minutos antes que él nos gritara.
—¡Cuantas más veces tendré que decirles que si alguien les encontraba tenían que hallar una manera de escapar y regresar a mi! — nos gritó, y no como si fuera una pregunta.
Trato de no gruñir o podría matarnos a ambas.
—No sabíamos en dónde se encontraba. — Evelyn puso una excusa, así es rayito.
—¡¡Oh sí que sabían!! ¡¡Porque los militares llegaron a la base!! ¡Traidoras! —vuelve a gritarnos.
Bueno, Caín me enseñó algo, y es a mentir por nuestro bien.
—No, no lo hicimos. — dije manteniendo mis latidos bajos.
—¡No quieres que te corte la lengua Shadow! — me amenaza acelerando.
Aún le tengo miedo, pero nos dijeron que si él nos dañaba podríamos regresar con ellos, solo tienen que encontrarnos.
El auto desaparece junto a nosotros.
Nos está haciendo recordar el camino, esto no puede ser.
—Será mejor que los olviden. — él nos advirtió.
—No. — rayito concuerdo contigo pero no es el momento de hacerlo enojar más.
—¿Qué has dicho?
— Dije que no. — ella responde entre gruñidos.
Como dice Nightmare, ya jodimos.
—Y eso no te costará un castigo. — él gruñe con ironía.
Ambas vemos por las ventanas, es un bosque negro, escuchamos sus gruñidos otra vez.
—Las han vuelto débiles, están asustadas.
—Es normal tener miedo. — le gruñó enseñando los colmillos.
— ¡¡El miedo es para los débiles!! — él rugió volteandose hacia mi.
Eso es, estoy harta.
—¡No lo es! ¡Tú eres el cobarde aquí! ¡Tu pedazo de mierda perruna!— le rugía devuelta.
Acabo de firmar mi sentencia de muerte y solo hay una forma de escapar.
—Será mejor que cierres la boca. — dijo calmado, me asesinara.
Agachó la cabeza — Si.
—¿Si que? — me pregunta.
Voy a vomitar.
—Sí, amo William. — respondí agachando la cabeza.
—Buena chica. — dijo con un tono tranquilo.
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