"-El trato entre cazadores y lobos 1. Parte 3"

Ya con todo preparado y listo Derek hizo una fogata en medio de el circulo rojo, y todos entramos a este. Kai y Dein con las manos amarradas como esposas.

–Cierren los ojos y todos pongan toda su concentración en pensamientos calmados y constantes, como contar ovejas o algo así.

Cuando la vi vertír una de las sustancias a la llama de la hoguera cerré los ojos al igual que todos, creo.

~Derek~

Cuando todos, excepto Eli y yo, cerraron los ojos empezaron a salir un montón de cosas del fuego, la loba a mi lado dejó caer unas cuantas hierbas junto a otro par de pociones, cuando estos tocaron la flama ésta se volvió de colores brillantes formando un arcoiris, una espesa niebla invadió todo nuestro alrededor y nuestros pies se llevaron de agua pura que salia del fuego, Eli susurro el hechizo de la visión y pudimos presenciar por unos segundos un hilo rojo que unía nuestros dedos a los de los cazadores, lo cual me pareció raro y me enojó un poco. Este era un hechizo diferente al que Eli les prometió. La oí decir unos cuantos improperios en voz alta lo que alertó a Ian y lo hizo abrir los ojos, desasiéndose el hechizo justo a tiempo.

–Ahora–. Habló alto Eli–, tienen que darnos algo que represente su vida, Sellaremos el trato y los dejaremos libres.

En mi interior estaba muriendo de risa aunque por fuera estuviera igual de serio que la chica a mi lado.

Kai se agachó un momento y vio a Ben con una pequeña sonrisa.

–No tengo cosas valiosas, pero esto es lo que más se acerca–. Miró su mano y volvió la vista al niño–. Toma ese anillo en mi dedo, es valioso para mí–. El lobito lo sacó de a poco, intentando ser delicado para no arruinar el momento–, no lo pierdas por favor.

–¡No lo haré!–. Se apresuró a decir apretando el objeto en sus pequeñas manos.

Dein estaba quemándose el cerebro pensando qué le daría, no quería perder lo unico que le daba esperanza en la vida.

–Me vas a dar algo o qué–. Brusca como siempre.

–M-mi collar–. Dijo quitándoselo lento y tortuoso, no quería e iba a hacer una pataleta–. Cuid...

–Mira, no te estoy obligando, sólo dame algo, no importa qué.

Dein se decidió.

–No, tomalo.

–Esta bien, lo cuidaré y todo eso.

–Pero quiero que lo lleves siempre puesto, por favor.

–Bueno...

Ahora seguían Caperucita y El lobo feroz.

–Así que... ¿Qué me darás?

Ian, rojo como tomate, se acercó y le entregó algo en la mano. Derek por la textura sabía que era y no pudo hacer nada más que sonreír y tragarse los besos que estaba muriendo por darle.

–Bueno, eso es todo, el sol ya se puso. Shu, shu.

–Eli, no nos eches como perros.

–Seguro ya notaran que ustedes faltan, no?

–En realidad... Nos podríamos quedar más, mañana es día libre.

–¿Día libre?

–Si.

–¿Para los tres?

–Si.

–¿El mismo día?

–Si.

–No te creo.

–Oh, vamos. Ya les dimos una clase de promesa estúpida. Deberían confiar en nosotros.

–Es cierto–. Dijo lejano Ian–. Tenemos el día libre, podríamos quedarnos.

–Ugh, está bien.

N/A:

Bueno dije 4 partes pero solo son estas tres. Luego viene el especial de recuerdos.

Y no, no les diré, aún, que le dio Ian a Derek v: pero cuando lo sepan van a gritar :v

Bai pequeños escritores y grandes lectores.

Atte: HF2