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Comenzaba a gustarle ir en avión, era mucho más tranquilo y silencioso que el auto y podías disfrutar del bonito paisaje aéreo. Se sentía bien estar sentada en un cómodo asiento de lujo, poder comer y beber lo que quería y estar en completa paz.
Ser discípula de Veramunt Patrick también tiene sus ventajas.
Pero su momento de relajación se vio opacado ante el sonido de notificación de su teléfono, no el del trabajo, sino el personal. Abrió sus ojos y tomó el aparato, encendiéndolo para leer el mensaje.
Suni no dejaba de ver la tierna foto en el chat, donde una gran pantera negra con una cicatriz en su ojo izquierdo posaba en un jardín.
Lancelot pregunta por ti.
Sin darse cuenta, una sonrisa pequeña apareció en su rostro y su corazón comenzó a latir más rápido de lo normal.
No quería admitirlo, pero estaba feliz de que Cain le hablara. Desde que fue secuestrada perdieron contacto, no porque quisiera, sino porque ella debía sanar física y mentalmente. Pero cuando estuvo lista para hablarle, se enteró sobre el enfrentamiento de la Academia Mundial contra los novatos de Frame; no sabía si él ganó o perdió, por lo que no consideraba oportuno conversar como si nada. Y luego perdió la noción de los días con sus entrenamientos y el papeleo.
Es por esa razón que no podía evitar sentirse feliz que fuese él quien iniciara la conversación, aun si era algo tan seco como eso.
No sabía que una bestia divina hablaba
No hablan, idiota, deberías saberlo
Como su dueño compartimos las emociones y sentimientos
Eso quiere decir que también me extrañas?
Suni suspiró divertida al ver que la dejaba en visto y se desconectaba, incluso si no lo veía sabía que estaba avergonzado o gritando enojado por algún lado.
Apagó el aparato dejándolo sobre la mesa y esperó pacientemente a que él respondiera o que el avión aterrizara, cualquiera de las dos sería bueno.
En estos momentos se dirigía hacia el territorio de Frame completamente sola en el avión privado. Le hubiera gustado que su maestro la acompañe, pero como top 10 tenía sus responsabilidades, además no podía abandonar su dominio como si nada. Más que todo era por precaución, si bien con Frame no eran enemigos, existía la posibilidad de que ataquen su territorio e incluso a él, si fueran despertados normales no serían nada para Veramunt, pero hay otros tres tops 10 afiliados a Frame; sería un baño de sangre si esos cuatro, sin contar a los demás, entran en guerra.
- Señorita Yim, estamos por aterrizar –habló el piloto por el micrófono.
Tal y como lo dijo, unos minutos después bastaron para que el avión frene en la amplia pista de aterrizaje. Cuando le dieron luz verde para bajar, Suni ajustó sus guantes negros y acomodó sobre sus hombros su blazer negro para asi dirigirse a la salida con la maleta en mano.
- ¡Bienvenida!
Ni bien puso un pie en tierra firme, algunos agentes de Frame se reverenciaron ante ella. Estos estaban repartidos perfectamente para formar un pasillo donde ella debía pasar.
Sin prestarles atención, Suni tomó la maleta y caminó por el espacio libre con la cabeza en alto y una expresión seria. Y todos ahí sudaron ligeramente ante el aura pesada que desprendía con solo pasar enfrente de ellos.
Les bastó una sola mirada para darse cuenta lo poderosa que era la Yim. Tenían sus dudas cuando escucharon sobre su hazaña en la Academia Mundial, nadie podía creer que haya podido dañar a tres del top 50 por si sola, pero toda incertidumbre se esfumó en un abrir y cerrar de ojos cuando la vieron.
Por mientras, Suni tragó saliva imperceptiblemente. A pesar de que ya podía estar cerca de la gente (sin tocarse, obviamente) todavía le daba ansiedad estar rodeada de tantas personas, más aún si son completo desconocidos.
En ese momento quiso estar con Jiwoo, pero cada uno se fue por sus propios medios. Si bien ambos eran discípulos de despertados fuertes, el trato hacia ella será mucho más formal que lo que será con Jiwoo, esto es debido a que Veramunt Patrick si es un despertado con un ranking oficial, mientras que Kayden no a pesar de ser reconocido por su fuerza.
- Es un placer conocerla –habló alguien al final del pasillo- Yo seré su guía aquí, señorita Suni.
- Es un gusto verlo nuevamente, joven Roist –inclinó ligeramente la cabeza.
- Las vueltas de la vida ¿no lo cree? –sonrió- Ahora si es la discípula del señor Patrick, en ese entonces no lo era.
- Surgieron cosas –se encogió de hombros.
- Por favor, acompáñeme, la guiaré hacia su habitación.
Suni asintió caminando a su lado sin llegar a tocarse, algo que la alivió ya que Roist pareció tener en cuenta su condición.
- Dígame, señorita ¿qué tal su viaje hasta aquí? –preguntó subiéndose al auto.
- Fue tranquilo, disfruté la larga distancia –respondió copiando su acción- Aquí también parece tranquilo, la nieve me da esa impresión.
- A la mayoría le gusta la nieve, aunque si no les gusta se pueden ir –sonrió divertido.
Antes de contestarle, el teléfono vibró en señal de un nuevo mensaje. Prendió la pantalla para ver la barra de notificaciones, sacándole una sonrisa y un tenue sonrojo al leer lo que decía.
Si, también te extraño
Eso querías escuchar?
Molesta
- Estoy de acuerdo con usted, joven Roist –dijo apagando el teléfono, luego le respondería- Si te gusta el durazno, debes aguantar la pelusa ¿no?
Apartó su mirada hacia la ventanilla del auto. No podía creer que su corazón latiera tan rápido por tres simples palabras. A pesar de no haberse hablado por casi dos meses, su reacción hacia él sigue siendo la misma.
Maldito Lutrein, culpa tuya estoy enferma.
- Llegamos –habló el chico bajando del auto.
Suni lo siguió hasta posicionarse a su lado, se mantuvo entretenida apreciando la gran estructura de las instalaciones de Frame, las cuales eran de un castillo estilo medieval; aunque tampoco le llamaba la atención.
- Esta será su habitación –señaló Roist deteniéndose frente a unas grandes puertas- La dejaré acomodarse, cualquier cosa que necesite no dude en llamarme, haré lo que esté a mi alcance.
- Gracias por guiarme –sonrió ligeramente- Antes de que se vaya ¿puedo hacerle una pregunta?
- Claro, lo que quiera.
- Jiwoo Seo ¿ya llegó? –inquirió.
- Si, ha llegado hace unos treinta minutos aproximadamente –respondió- ¿Le gustaría que la lleve hacia él?
- Si no es mucha molestia, pero antes me gustaría dejar la maleta y quitarme el saco.
- Aquí la espero.
Suni abrió las puertas, le dio una rápida mirada a su amplia y lujosa habitación para luego dejar a los pies de la cama su blazer junto a la maleta. Y antes de irse, movilizó algunas ondas de energía por el cuarto, buscando un indicio de alguna trampa u energía ajena. Aunque lo dudaba, Frame no haría nada que los metiera en problemas con Veramunt como intentar espiarla.
Como no encontró nada extraño, decidió salir cerrando detrás de ellas las puertas– Listo.
- Precavida, por lo que veo –comentó Roist comenzando a caminar.
- Supongo que es normal luego de lo ocurrido –dijo seria.
Ella no quería decirle a nadie externo sobre su antigua situación de secuestro y nueva fobia, pero tarde o temprano se iban a enterar, asi que decidió comentárselos ella misma. Después de todo, una vez ella abra la boca, nadie más la investigaría, aun si dice alguna mentira.
- Joven Roist ¿puedo saber lo que haré en estos días? –preguntó sin detener la caminata.
- ¿Tiene curiosidad, señorita? –devolvió con una sonrisa divertida- Simplemente sería un encuentro amistoso entre nuestros novatos, el joven Jiwoo Seo y usted. Además, nos gustaría llevarnos bien con la señorita, eso también es un deseo mío, ambos somos discípulos de un top 10 ¿no cree que nuestra relación debería mejorar?
- Usted me cae bien, Joven Roist –comentó tranquila- Mientras sigamos coincidiendo de manera agradable, todo estará bien.
- Me alegra oír eso de usted, señorita –sonrió gatunamente.
Ambos seguían caminando a un paso calmado, no era necesario acelerar. Iban por el pasillo que los llevaría a la habitación de Jiwoo, pero se encontraron con una presencia que venía de aquella dirección.
- Tú –gruñó furioso viéndola.
¿Y este quién es? ¿Lo conozco? Me olvido de la gente que no es importante.
- ¿Yo? –se señaló confundida.
- Tienes pelotas para venir sola –habló furioso acercándose a ella.
Y es que lo estaba, tener enfrente a la causante de tal vergüenza lo enfurece de sobremanera. Sigue sin creer que la Yim lo haya herido y dejado en tal mal estado, todavía recuerda la sensación de su piel abriéndose desde dentro por culpa de esas cintas y picos.
Era algo que no podía soportar. Ella solo era una mocosa sin nada de trayectoria, pero aun asi impidió que él y sus compañeros atacaran como corresponde.
- Mantente alejado, Sismo –ordenó Roist serio.
- ¿No me digas que tienes miedo que de que te toque? –se burló- ¿Acaso eres una idiota para decir tu debilidad a todos?
- ¿Debilidad? –repitió fríamente.
Inmediatamente, una onda de energía de sintió en todo el pasillo. Era sumamente pesada, demasiada, tanto que Sismo se tambaleó un segundo, si bien no cayó, no podía moverse. Sus pies estaban estancados en el suelo y su energía parecía estar bloqueada con algo, tampoco podía respirar normalmente.
Por otra parte, Roist no estaba siendo afectado por tal aura que expulsaba Suni; aquello lo hizo sonreír divertido y con un toque de picardía, ella estaba evitando tocarlo con su energía para solo enfocarse en Sismo.
- No te creas que lo dije con esa intención –continuó mirándolo inexpresiva- Solo fue un pequeño recordatorio de algo que me molesta, y que si se incumple, habría consecuencias. Esta vez lo dejaré pasar ya que no me tocaste, pero toma esto como una advertencia, la próxima no seré tan amable.
En menos de un segundo, toda esa aura desapareció permitiéndole respirar con normalidad y sentir de nuevo toda su energía.
Suni volvió a retomar la caminata hacia el dormitorio de su amigo, pero al ver que Roist no la seguía, giró para verlo– Joven Roist, no conozco el lugar ¿me guía?
- Claro que si –sonrió, pero antes de moverse le dedicó unas palabras frías a su compañero de organización- No me interesa nada de lo que hagas, pero ella está a mi cargo, vuelve a hacer una escena de niñito resentido y la señorita no será la única en herirte.
Dejándolo estático, el de marcas caminó travieso hacia la Yim para continuar el camino que fue interrumpido. Cuando ellos se fueron, el Sismo golpeó con furia la pared a su lado, otra vez había caído ante el poder de la peliazul.
Pero esta vez fue diferente, ella ni siquiera lo tocó, simplemente expulsó su energía para sofocarlo, eso indicaba lo fuerte que se había vuelto desde aquella en la Academia Mundial.
- Me las pagarás –gruñó apretando sus dientes.
Por otro lado, Suni rascó su oreja desinteresada– Joven Roist.
- ¿Si?
- ¿Quién era ese de antes? –preguntó ganándose una mirada sorprendida del chico.
- Es uno de los que atacaron la Academia Mundial de Despertados, Sismo –respondió luego de suspirar divertido.
- Ah –soltó recordando- Con razón se lo veía enojado.
- Está resentido por haber sido herido por usted –explicó- Fue un golpe para su orgullo, aun más cuando estuvo todo este tiempo en cama ya que no podían curar correctamente las heridas de sus piernas.
- Oh, espero que no haya rencores por eso –dijo tranquila- Fue una situación muy diferente a la que me encuentro hoy en día.
- No se preocupe, todos entendemos eso, ellos la atacaron y usted solo se defendió.
Suni sonrió ligeramente, por lo poco que llevaban conversando se notaba lo profesional que era, no le molestaba ni tampoco sentía hostilidad hacia ella. Le agradaba Roist.
- ¡Suni, hola! –saludó Jiwoo caminando en dirección a ellos.
- Parece que no me has visto hace décadas –bromeó deteniéndose.
Jiwoo rio rascándose la nuca, estaba feliz de ver a su amiga, ya no se sentía tan solo en un territorio desconocido.
- Usted debe ser la señorita Suni Yim –habló un peliverde haciendo una ligera reverencia- Es un gusto conocerla al fin.
- Compartimos el sentir, señor Mus –copio su acción.
- ¿Lo conoces? –preguntó Jiwoo confundido.
- Asi es, el señor Mus es el discípulo de la señora Supri Buster –dijo- Si bien es nuestra primera vez viéndonos, ya tenía conocimiento de él.
El Seo vio a los tres frente a él con un pequeño brillo de admiración, estaba delante de los discípulos de tres del top 10 del ranking mundial. Era realmente asombroso.
- ¿Hacia dónde te dirigías? –preguntó Suni.
- ¡Oh, estaba por ir a visitar a la maestra del señor Mus! –respondió algo tenso.
- ¿Le gustaría acompañarlos? –inquirió el peliverde con una sonrisa amable- A mi maestra no le molestaría que se sume.
- Está bien –accedió sin problemas, no podía ignorar a un top 10- Joven Roist ¿nos acompañará?
- De acuerdo, pero la esperaré en la puerta. No puedo dejarla sola.
De esta manera, los cuatros comenzaron a caminar, siendo los coreanos quienes iban atrás conversando de cualquier cosa que se les ocurría para pasar el rato. Y mientras iban caminando, Suni miró con una ceja alzada al felino anaranjado, el cual desvió la mirada al captar el significado de esos ojos negros.
Ay, señor Kayden.
Nota: nada para decir, me quedé en blanco asjjasjda
A ver, diganme un dato de ustedes. Primero yo, me llamo Noelia jujuju
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