Eileen.

24 de Diciembre.

Parece ser todos van a ir a la fiesta que Yeoreom había organizado. Al principio, cuando vi que me había invitado, no tenía pensado asistir. Yeoreom no es mi amiga y la verdad es que me daba algo de palo tener que fingirlo. Por otra parte, tampoco me veía con ánimos de celebrar la Nochebuena. De hecho, hace más de una década que no la celebro y la verdad es que no tenía ese espíritu que todos los demás sentían. Yo lo que quería hacer ese día era pasarme el día durmiendo y desear que todas estas fiestas pasaran rápido.

Pero Jungkook... Jungkook me convenció.

- ¿De verdad no vas a ir? - me preguntó una noche mientras trabajábamos cuando ese día había comunicado por el grupo que Yeoreom había creado que no iba a ir. Niego con la cabeza. - Ni siquiera trabajamos ese día.

Era la única noche que Namjoon decidía cerrar el bar para poder pasarla con la familia.

- No me apetece, la verdad - contesto indiferente y evitando sus ojos mientras preparaba unos cocteles. Se encuentra a mi lado observando cada movimiento que realizaba.

- Qué pena - suelta y levanto la mirada para verlo sonreír. Me apoyo en una pierna y espero que siga hablando para que me sorprenda - Yo que quería molestarte.

- ¿Tú a mí? - le pregunto atónica. - Normalmente es al revés.

- Normalmente. - asiente con la cabeza y su sonrisa brilla en su cara.

- ¿Quieres que vaya? - le pregunto directa y le enseño mi sonrisa de lado.

- Sí. - contesta - Va a ser muy aburrido si tú no estás - me sale una sonrisa feliz de lo que me confiesa.

Entonces, me veo en el espejo después de darme una ducha caliente, me seco el cuerpo con la toalla y desde abajo me coloco un vestido color granate, de satén y corto hasta las rodillas. Me volteo para observar mi espalda desnuda y sonrío satisfecha de lo bien que me encajaba en el cuerpo. Tenía un despliegue en la parte de delante donde dejaba al aire mis piernas al andar. Se trataba de un vestido elegante y perfecto para la etiqueta que se pedía en una fiesta como la Nochebuena. Opto por calzarme unos tacones negros con una tobillera de cadena y tacón de aguja.

Me deshago de la toalla que envolvía mi pelo mojado para peinarlo y pasar el secador. Luego me quedo mirándome, pensando qué podría hacerme en él. Suelto me quedaba bien pero recogido en un moño un poco más arreglado de los que normalmente me hacía, me quedaba de magnífico. Luego procedo a maquillarme. Tapo mi ojeras con base, delineo mis ojos, aplico un poco de polvos para darle color a mi cara y finalmente tomo un tinte de labios rojo.

Salgo de casa bien abrigada con una gabardina y rezando para no resbalarme con restos de hielo que puede haber en el pavimento de camino a la casa de Yeoreom.

...

Toco el timbre de su piso, accedo al ascensor y marco el piso número 20. Yeoreom vive en un apartamento lujoso en la zona adinerada de Seúl. Aprovecho para mirarme en el espejo del ascensor para arreglar algún pelo loco. Me encontraba algo nerviosa y no sabía el por qué.

Cuando las puertas se abren se puede escuchar música y gente hablando y riendo que provienen de su casa. La puerta de su casa se abre y veo a Yeoreom con un vestido corto de color azul de terciopelo. Me sonríe plenamente al verme ahí.

- Eileen, qué bien que ya llegaste - me saluda y le muestro una sonrisa por cortesía. - Adelante - se echa a un lado y me deja entrar en su grandioso apartamento. La sigo por el pasillo y me indica que puedo dejar mis pertenencias en un cuarto. Entro en él y me deshago del abrigo y dejo mi bolso encima de la cama justo con otras chaquetas de los invitados.

Salgo del cuarto y me encamino al salón donde robo las miradas de todos los que ahí estaban.

- ¡Eileen! - grita Hyelin contenta al verme llegar. Doy un rápido vistazo y mi mirada se fija en Jungkook que se encuentra sentado en el sofá con las piernas cruzadas. Se ve poderoso vestido todo de negro y su cabello levemente ondulado cayendo por su rostro. Me tiemblan las piernas al verlo ahí y se me acelera el corazón como nunca cuando veo su sonrisa en sus labios. Sus ojos me miran de arribabajo, analizando cada detalle de mi cuerpo y se me seca la boca cuando me doy cuenta de ello.

Los brazos de Eunseo me bajan de la nube y reacciono rápidamente y algo titubeante.

- ¡Estas espectacular! - me halaga Eunseo después de alejarse de mí. Veo que todos me miran y decido dedicarles un saludo general. En esa sala se encontraba Taehyung sentado junto con Jungkook que parece ser les había interrumpido cuando llegué. Al lado estaba Yoongi con una copa de vino en la mano hablando con un chico que desconocía por el momento. Por otro lado se encontraban las chicas Eunseo, Hyelin, Soobin hablando entre ellas mientras picoteaban el aperitivo que se encontraba en una gran mesa decorada con estilo navideño con sus platos y tenedores perfectamente colocados para la cena.

Sonaba música de fondo, sin molestar ya que todos estaban hablando entre ellos. Me siento algo insegura, no sé dónde ir, estoy nerviosa con la presencia de Jungkook y no sé disimular que no puedo dejar de mirarlo.

Estaba hasta avergonzada y eso que yo muchas veces desconocía la palabra vergüenza.

- Jungkook - Yeoreom entra en la sala y este se gira para mirarla - ¿Puedes ayudarme con la cena?

- Claro. - dice él y se levanta del sofá para dirigirse a la cocina. Babeo fuertemente viendo lo bien que le quedaba esa camisa de botones ajustada y esos pantalones negros destacando sus piernas y su perfecto trasero.

Me encamino a uno de los sofás libres para tomar asiento. Las chicas me siguen y toman asiento a mi lado.

- ¿Cómo estás? - me pregunta Taehyung que también se veía muy bien en traje. La verdad es que todos se habían puesto muy elegantes para la ocasión.

- Bien, hambrienta, la verdad - respondo y asiente con la cabeza de acuerdo conmigo. Veo que el chico que desconozco me mira y cuando fijo mi mirada en él se sobresalta al darse cuenta.

- Hola! Soy amigo de Yeoreom - empieza hablarme y me muestra una sonrisa. Me parecía un chico muy guapo, tiene el pelo negro y viste muy bien - Me llamo Hoseok ¿y tú?

- Yo Eileen - me presento.

- Encantado - me muestra una sonrisa.

Yoongi sigue hablando con Hoseok sobre música y parece ser que se llevan muy bien. Taehyung y yo entablamos una conversación en la que realmente me la paso pensando cuando Jungkook iba a volver de la cocina.

- ¡A cenar! - anuncia la voz de Yeoreom mientras Jungkook va tras ella con una sopa en una gran olla. Lo deja encima de la mesa y todos nos acercamos para tomar asiento. La verdad es que esa sopa olía muy bien y aquello hizo que mi hambre aumentara. Tomo asiento y observo que Jungkook se sienta enfrente de mí. Me echa una mirada retadora de la cual le devuelvo.

Me paso toda la cena observando cada detalle de Jungkook, sus manos encima de la mesa, la forma en la que se lleva la cuchara en esa boca tan apetecible de probar, como se pasa la mano por su cabello y como me echa miradas.

De repente siento que su pierna choca con la mía y me sorprende aquella acción, Jungkook se aguanta la risa pero esa era su forma de llamarme la atención para que dejara de mirarlo de aquella forma. Al final me paso toda la cena jugueteando con sus piernas que no paraban de intentar molestarme. Me muerdo el labio y decido servirme una buena copa de vino y bebérmela de una.

La necesito.

La cena pasa de forma agradable y la comida está deliciosa. A parte, también hay un buen ambiente entre nosotros y nos reímos fuertemente con las anécdotas de Taehyung. Al terminar de cenar, Yeoreom le sube el volumen a la música y sacan varias botellas de alcohol para empezar la fiesta. Me quedo mirando qué escoger para beber mientras los demás ya estaban cantando en el karaoke y hablando entre ellos.

- ¿Te sirvo algo? - la voz de Jungkook me pone los pelos de punta.

- Estaba mirando cuál de estos tiene más alcohol para llegar al coma etílico lo antes posible - comento y se ríe fuertemente con mi idea. Esta a mi lado y su presencia me pone nerviosa. Dios, qué clase de tortura es esta.

Veo que Jungkook toma una botella de soju.

- Eso no me va a hacer nada - le anuncio indignada cuando veo que me sirve un chupito y eleva su cabeza para mirarme a los ojos.

- Mejor. No quisiera tener que aguantarte borracha - me ofrece la botella de soju y espera que yo misma le sirva. Lo tomo y su mano roza con la mía. La tensión que siento me va a matar. De verdad estaba a punto de beberme todo el contenido de la botella. Vierto el contenido en un chupito y dejo la botella a un lado. Jungkook toma su vaso y yo el mío y veo que espera que brinde con él.

- ¿A qué brindamos? - le pregunto y le sale una sonrisa cuando va a contestarme.

- Porque "creo que va a ser una noche inolvidable." - dice intentando imitar mi voz de aquella primera noche donde salimos de fiesta. Me sale una sonrisa.

Brindamos, apoyamos el vaso en la mesa con esas risas tontas y cómplices que nos sale y bebemos todo el contenido de una. El liquido moja sus labios y siento el calor invadiéndome el cuerpo cuando no puedo quitar ojo de ellos. Quiero probarlos con todo mi ser. Quiero besarlos.

- ¡Chicos! Vamos a jugar - anuncia Yeoreom felizmente y su voz hace sobresaltarme en mi sitio. Jungkook se voltea para escuchar a Yeoreom.

- ¿A qué? - cuestiona una de las chicas que se ven emocionadas por la idea.

- Verdad o reto.

...

- Eileen ¿Verdad o reto? - me pregunta Soobin cuando es mi turno.

- Verdad. - toma una de las cartas del montón de "verdad". El juego tenía retos y preguntas muy picantes, la verdad es que a mí estos juegos me gustaban.

- ¿Con cuántas personas te has acostado? - lee en voz alta Soobin. Estábamos todos sentados en los sofás y algunos en unas sillas haciendo un circulo para vernos las caras. A mis lados tengo a Hoseok y a Soobin, justo al lado de Hoseok se encuentra Eunseo, siguiendo Yoongi, Taehyung, , Hyelin, Yeoreom y a su lado Jungkook. Todos me miran esperando que conteste mientras yo me llevo una mano a la barbilla.

- Mmm - me quedo pensativa - No sé, con muchas. - contesto directa y sin tapujos. La verdad es que me daba un poco igual.

- ¡Wow! - dice Hyelin.

Seguimos el orden, Hoseok tiene que hacernos un baile subidito de tono y todos le gritamos riéndonos con sus pasos. Luego le toca a Eunseo que decide coger carta del montón de Verdad y le preguntan si alguna vez había fingido un orgasmo. Se queda pensando unos segundos.

- Tristemente... más de lo que pensaba - responde fingiendo decepción y nos sale una risa.

En el turno de Yoongi también quiere coger carta de Verdad.

- ¿Besarías a tu mejor amigo durante un minuto por 10000 wones? - lee Eunseo aguantándose la risa. La cara de Yoongi cambia a una de muerto absoluto mientras Taehyung se carcajea y lo mira alzando sus cejas esperando que contestara.

- Antes me tiro por la ventana - contesta Yoongi serio. Taehyung se ofende.

Unos turnos más tarde le toca a Jungkook.

- Verdad. - escoge y Yeoreom toma la carta.

- ¿A qué edad perdiste la virginidad y con quién? - lee la pregunta.

- Con 18 - responde Jungkook sin más - con la que era mi novia en ese entonces.

- Oye, venga, vamos a atrevernos con los retos ¿no? - incita Taehyung que parece que se aburre.

- Yeoreom ¿Verdad o reto? - pregunta Soobin cuando le toca el turno de Yeoreom.

- Bueno... Vale, elijo reto.

Soobin toma la carta y suelta una risita al leer el reto que le tocaba.

- Besa a la persona que tienes a tu derecha - lee y todos gritan emocionados por el reto - Tiene que ser un beso largo - Soobin gira la carta para enseñárnosla por si no la creíamos. Escucho las risitas de los demás mientras yo siento mi corazón estrujarse al darme cuenta que a quién tenía que besar era a Jungkook. Yeoreom se ve sorprendida y mira a Jungkook que no expresa nada.

- ¡Venga! Al menos cinco segundos - anima Eunseo junto con la chicas. Los chicos se reían por lo bajo. Yo era la única que se estaba mordiendo la lengua para no saltar en ese momento - ¡Si es solo un beso!

- ¡Eso! - grita Hoseok animando.

- ¿Puedo? - le pregunta Yeoreom por lo bajo y Jungkook le mira a la cara y parece que le da igual, parece que va a dejarse besar por Yeoreom y yo siento que me quiero morir.

- Está bien - responde Jungkook y algo arde dentro de mí. Mi respiración se altera e intento disimular que nada de lo que está pasando me esta afectando, por suerte, todos los ojos estaban enfocados a ellos dos.

- Bueno... - dice Yeoreom algo inquieta poniéndose enfrente de Jungkook, observo como coloca sus manos en su cara y finalmente acorta la distancia plantando sus labios con los suyos. Los demás se ríen mientras hacen una cuenta atrás de cinco segundos. Yeoreom le besa moviendo sus labios contra los suyos y sus manos permanecían en el rostro de Jungkook. Los ojos los mantenían cerrados y cuando finalmente llega la cuenta atrás a cero se separan rápidamente. Yeoreom tiene completamente la cara roja y los demás se divierten por lo sucedido. A Jungkook le sale una pequeña sonrisa y evito a toda costa su mirada divertida cuando gira su cabeza. Le doy un gran trago a la copa de vino que tenía en mis manos. No podía creerme lo que acaba de presenciar.

- Eileen ¿Verdad o reto?

- Reto - digo seria y tomo yo directamente la carta. Estaba hasta los cojones de ese juego. Esperaba un reto de mierda pero cuando leo la carta me sale una sonrisa triunfadora. El creador de este juego le gusta ver el mundo arder.

- De los que tienes a tus lados, elige a uno para darle un besito - leo en alto y tiro la carta. Los demás gritan.

- Un besito - mascullo y me río poniéndome recta y mostrándome segura. Iban a ver lo que es un besito de los míos. Miro a Soobin que esta a mi lado - Lo siento, Soobin. A la próxima te beso a ti - le digo graciosa y esta se ríe fuertemente y luego me posiciono enfrente de Hoseok que me mira con los ojos abiertos.

- Te elegí - le comunico señalándole y con una sonrisa. Hoseok se ve sorprendido con mi atrevimiento pero finalmente asiente con la cabeza.

Acorto la distancia tomando su cara y planto mis labios contra los suyos. El besito se convierte en un beso cuando no me aparto y muevo mis labios contra los suyos. Pillo a Hoseok por sorpresa pero por suerte no se aparta y me sigue el beso. Sonrío contra ellos cuando sé que todos me están mirando y empiezan a perder la cabeza cuando se dan cuenta que no me separo de él.

Me separo con una sonrisa en la cara y mis ojos se van a los de Jungkook que me mira serio, sin expresión alguna.

- ¡Qué calor! - dice Yeoreom riéndose después de lo ocurrido. Hoseok no se creía lo que acababa de pasar. Me levanto de la silla y me acerco a servirme más vino. Aquello hace que los demás me copien y parece ser que el juego queda pausado.

Me sirvo un poco de vino, le doy un par de sorbos y cuando me volteo observo que las chicas ponen las música fuerte y obligan a los chicos a bailar. Empiezan a dar saltos y a reírse entre ellos.

Mi corazón se altera cuando reconozco a Jungkook en la puerta que da al pasillo apoyado en el marco. Este fija su mirada en la mía y con un movimiento de cabeza me indica que le siga. Me da la espalda y lo veo desaparecer en el oscuro pasillo.

Dejo mi copa de vino encima de la mesa y hago lo que me pide. Sin pensármelo dos veces. Yo lo iba a seguir a dónde él me ordenara.

Me adentro en la oscuridad del pasillo y lentamente doy pasos hasta que logro distinguirlo apoyado en la pared.

- ¿Te has divertido, cierto? - me pregunta con un tono serio y un escalofrío baja por mi columna. Me sale una risa y me pongo a su lado sintiendo su brazo junto al mío.

- Sí, mucho ¿y tú? - le devuelvo la pregunta.

- Yo también, pero a partir de ahora me lo voy a pasar mejor - anuncia y me quedo atónica cuando su mano toma mi brazo y rápidamente me mete en el baño. Cierra la puerta detrás de mí y la luz se enciende dejándome ver sus ojos profundos mirando los míos. Toma mis hombros y me acorrala contra la puerta y mis piernas tiemblan cuando su rostro está a centímetros de la mía. Se inclina hacia a mi y siento su aliento en mi cuello.

- Eres muy mala. - me susurra al oído y cuando vuelve a mirarme su mirada me deja sin habla.

Me fijo en su pelo perfectamente desordenado, en sus ojos mirando los míos, esos labios que iban hacerme perder la cordura. Su caliente cuerpo me estaba excitando como nunca había sentido.

- ¿Por qué tan molesto, cariño? - articulo intentando mostrarme dura pero no sé hasta qué punto podría seguir aguantando. - ¿Te has puesto celoso? - Gruñe cuando paso una de mis manos por su pecho y rápidamente posa su mano en mi cadera y me aprieta contra el suyo mientras con otra mano me mantiene acorralada. Me tiembla las piernas al notar su mano en la parte baja de mi espalda y la forma en la que me tiene tan cerca suya. Definitivamente ya me tiene en sus manos, puede hacer conmigo lo que quiera.

- Te gusta verme sufrir - murmura cerca de mis labios y muerdo los míos fuertemente contenta de lo que le estaba causando.

- Lo mismo digo. Aunque seguro que cuando has visto como besaba a Hoseok te has muerto de la envidia - rozo mis labios con los suyos provocándole. No creo que aguantaría más así.

- Eres lo peor - su aliento acaricia mis labios y me quiero morir en ese momento si no llego a probar sus labios ya. La tensión que sentimos puede conmigo. Sus ojos paran en mis labios y luego vuelve a subirlos para fijarlos en los míos, sé que esta luchando contra si mismo.

- Jungkook, bésame de una maldita vez. - le ruego. Ya no aguanto más la tensión que nos está envolviendo. Puedo ver el deseo en sus ojos y me calienta todo el cuerpo.

- Maldita sea. - masculla con un chasquido de lengua y finalmente sus labios se encuentran con los míos.

Nos besamos con una desesperación que jadeos salen sin mi permiso de la garganta. Sus labios calientes encajan con los míos a la perfección y dejo que su lengua juegue con la mía. Explora mi boca y yo la suya y no quiero que se separe de mí. Mi mano agarra fuerte su cabello para no apartarlo y su cuerpo me aprieta contra la puerta sintiendo su cadera contra la mía. El calor sube cada vez más y siento que me estoy sofocando. La exigencia con la que me besa provoca que mis piernas tiemblen y cuando muerde mi labio inferior emito un leve gruñido contra su boca.

Estoy perdiendo la cordura.

Toma mis piernas desnudas y me eleva unos centímetros haciendo que las rodeara con su cuerpo, se mueve sin dejar de besarme y me sienta contra el lavabo posicionándose entre mis piernas. Siento sus manos acariciar mi espalda desnuda poniéndome la piel de gallina y mis manos temblorosas acarician su cabello.

Cuando estamos faltos de aire se separa unos centímetros y puedo ver su profunda mirada que me quema por dentro. Nuestras respiraciones agitadas se mezclan intentando recuperarnos, mechones de mi pelo caen delante de mi cara y sus dedos los aparta mostrándome una sonrisa. A la mierda el peinado.

Decido atacar su perfecto cuello donde dejo besos por su suave piel. Huele muy bien y cierro los ojos disfrutando de su perfume. Mis besos provoca que su cuerpo se tense y algunos jadeos salen de su boca poniéndome a cien. Sus manos aprietan mi espalda y me revoluciono. Subo mis besos y vuelvo apoderarme de esos labios tan adictivos. Mi cuerpo echa chispas cuando corresponde mis besos con la misma desesperación que sentía.

Siento contra mis labios como se le forma una sonrisa y cuando baja sus manos hasta mis piernas mi respiración se corta con su tacto. Sabe lo que me esta provocando con sus caricias y sonríe triunfador cuando jadeo contra su boca.

- ¿De qué te ríes? - le pregunto agitada en sus labios - Acabas de perder contra mí - se separa unos centímetros para mirarme juguetón y ya estoy extrañándolo.

- Te equivocas - su mano derecha sube a mi rostro y su pulgar acaricia mis labios que estarían hinchados. Se ve tan potente que moriría por él en ese mismo instante - Aún no ha perdido nadie, el juego acaba de comenzar.

- Dios, Jungkook - expreso desesperada y pongo mis manos en su cuello - ¡Cómo me pones!

Suelta una pequeña carcajada y lo vuelvo acercar a mí.

Dejo que sus manos se adentren en mi vestido volviéndome loca por sus manos apretando mis muslos y yo bajo las mías por su pecho. Su camisa me molesta, quiero quitársela, quiero reventar todos los botones que la mantiene cerrada. Los besos de Jungkook bajan por mi cuello y le jadeo en el oído. Necesitaba aire, iba a derretirme sintiendo sus besos húmedos en mi cuello.

*toc toc*

Alguien toca la puerta y ambos nos separamos completamente asustados. Jungkook pega un salto alejándose de mi y yo me bajo del lavabo arreglándome el vestido.

- ¿Jungkook? ¿Eileen? ¿Estáis ahí? - era Yeoreom. Compartimos una mirada de pánico absoluto ¿Y ahora a qué? Jungkook va abrir la boca y entonces veo el váter y me pasa una idea por la cabeza.

- ¡Buaaaaaagh! - emito y abro la tapa del váter para meter la cabeza en el y fingir que estoy vomitando. La cara de Jungkook es de sorpresa pero entonces me sigue el juego.

- Sí, Yeore - habla Jungkook tranquilo y se acerca a la puerta arreglándose la ropa y el cabello lo más rápido posible. Abre la puerta y sigo fingiendo que estoy vomitando produciendo aquel ruido tan molesto.

- ¡Oh Dios! - lamenta Yeoreom al verme arrodillada y con la cabeza en el váter.

- Parece ser que bebió demasiado... - comenta Jungkook con una sonrisa nerviosa, Yeoreom quiere entrar pero Jungkook se lo impide disimuladamente.

- Vaya... Voy a mirar de traerle algo - Yeoreom parece preocupada por mi estado.

- Ehh... Quizás un poco de agua... Dice que está muy mareada - pide Jungkook y vuelvo a hacer que vomito. Yeoreom sale corriendo y Jungkook cierra la puerta dándome la espalda. Se voltea cuando escucha que tiro de la cadena y me ve con una sonrisa en mis labios que le contagio.

- Eres increíble - me dice cuando me encamino al lavabo. Le guiño el ojo.

Sigo con la farsa de que me encuentro mal. Jungkook se sorprende cuando cambio mi rostro a uno donde parecía que realmente estaba mareada. Yeoreom vuelve y me encuentra echándome un poco de agua en la cara.

- Ay, qué mal - lamenta ella y me ofrece un vaso con agua.

- Qué mareo... - finjo poniéndome una mano en la cabeza.

- Vamos a tumbarla en una cama - propone Yeoreom y voy dando tumbos, Jungkook pasa su brazo por mi cadera y Yeoreom nos guía. Le muestro una sonrisa cómplice a Jungkook cuando esta no nos ve.

- Quiero irme a casa - digo fingiendo dificultad al hablar. Yeoreom se gira y me mira preocupada.

- Podría acompañarla - toma la iniciativa Jungkook y me tengo que aguantar la sonrisa que me provoca que Jungkook también quiera salir de ahí junto a mí.

- De acuerdo, es lo mejor... - acepta Yeoreom. Me encamino junto con Jungkook al cuarto donde estaban nuestras pertenencias. Me ayuda a ponerme el abrigo ya que los ojos de Yeoreom sigue puestos en mí. - ¿Luego vuelves? - le pregunta a Jungkook mientras se coloca la chaqueta.

- Claro - contesta él con una sonrisa.

Qué mentiroso. No va a volver. Se va a quedar conmigo todo el resto de la noche.

Salimos del apartamento y Jungkook llama al ascensor manteniéndome a su lado, ya que yo seguía con el papel de que no podía conmigo misma hasta que Yeoreom cerrase la puerta y nos dejase en paz. Jungkook se despide de ella cuando el ascensor llega al piso y nos adentramos en él. Las puertas se cierran y me pongo recta y una risa me sale de los labios.

- Increíble. Qué mal me siento por mentir - me confiesa Jungkook pero tan mal no se sentía si no podía ni borrar esa sonrisa de su cara. - ¿Y ahora qué?

Tomo su mano con la mía y suavemente entrelazamos nuestros dedos. Se ve sorprendido por mi acto pero no la aparta. Su mano es grande y suave y me doy cuenta que no creo que pueda soltarla en toda la noche. Las puertas se abren y decido contestar a la cuestión que me había hecho.

- Ahora... Ahora vamos a aprovechar la noche. - tomo la iniciativa y levemente le tiro para salir del ascensor y cuando abro el portón empiezo andar cada vez más y más rápido.

- ¿Por qué corres? - me pregunta al no entender por qué tanta prisa.

- ¿Y por qué no? - comparto una mirada con él y le sale una sonrisa divertida.

- Entiendo ¿Pero puedes correr con esos tacones?- me pregunta con las cejas fruncidas.

- No me subestimes. Claro que puedo - le aseguro y aprieta mi mano revolucionándome de nuevo el corazón.

- Pues a correr - anuncia y sin apartar su mano de la mía empieza a correr adelantándome y ahora siendo yo arrastrada por él.

Mi corazón late fuerte en este momento, me siento muy feliz y quiero correr, quiero correr a su lado. Quiero sentirme libre y sobre todo, ver qué nos deparará la larga y mágica noche que estaba siendo.

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Más de 4000 palabras. Se me fue la flapa.

AAAAAAAAAAAAAAAA grito mucho por este capitulo. Sin duda, de mis favoritos.

El primer beso de estos dos bobos, juro que me derrito imaginándomelo. Espero que de verdad os haya gustado este capítulo. Esto ya empieza a escalar y cada vez va a ir a más <3 Estoy muy feliz de haber llegado por fin a este momento. :')

¿Qué os ha aparecido? Os leo como siempre.

Muchas gracias por dedicar tu tiempo libre en leerme.

Esperad con ansias el próximo capítulo, os encantará.

¡Adiós! <3