Al día siguiente en el bosque Reik y el castaño se encontraban caminando, el castaño estaba algo frustrado por el incesante parloteo de parte de la pelinegra.

- Una vez cuando perdí un pendiente que me regaló Mason me volví totalmente LOCA, lo busqué por 3 días seguidos, tenía que cubrir mis orejas con unas orejeras que me regaló Mason, eran de gatito era tan adorable.- Rió.- Entonces lo busqué en el bosque, pero solo encontré rocas, un río y pasto, a lo que me di un tremento chapuzón, EL AGUA ESTABA BIEN FRÍA, pero luego de un rato estaba calentita  es lo raro de nadar siempre te da frío cuando entras pero luego el agua está caliente, o aveces es porque alguien se hizo pis, pero yo estaba sola en ese momento, PE-PERO NO ME HICE PIS EN UN RÍO NO LO HARÍA.- Miró hacia atrás.- Tal vez.- Rió.- O tal vez no, porque aveces te dan ganas pero luego recuerdas que hay personas que van a ese río, además Mason dice "Es anti-higiénico, no te metas al lago, te vas a enfermar" Pero yo no creo eso son panplinas, aunque extrañamente siento la nariz tapada al día siguiente, PERO ESO NO TIENE NADA QUE VER, además a Mason no le gusta mojarse con ropa, se pone de mal humor, PERO SU CARA ES TAN ADORABLE.- Apretó su cara con sus manos.- ESOS CACHETITOS REGORDETES, KYAA~ ES TAN TIERNO Y BELLO Y... LO EXTRAÑO.- Llora.- Extraño a mi Mason.- El llanto se intensificó.- ¡Quiero a mi gruñón pero tierno Mason! Es que...

- ¡YA, YA CÁLLATE DE UNA VEZ POR FAVOR!.- Gritó Pines muy enojado.

Pero Reik solo cerró los ojos y lloró aún más fuerte, dañando los oidos del castaño con su llanto.

- Me... Me gritaste.- Dijo entre lágrimas.- Yo... Solo quiero a Mason.- Comenzó su llanto otra vez.

- ¡Ya!.- Le tapó la boca a la joven.- Lo-lo siento pero... Necesito silencio para poder saber donde estamos.- Reik abrió los ojos y grió un poco la cabeza.- Para encontrar a Mason.- Ella asintió.

Él le quitó la mano de la boca y siguieron caminando.

- Croar.- Dijo Bob.

- Tienes razón Bob, volveremos a ver a Mason pronto.- Le dió un beso a la rana.

Pero de repente ambos sintieron un gran temblor.

- ¿Qué está pasando?.- Preguntó Reik.

- No tengo idea.- Tomó su arma que llevaba en la espalda.

Reik tomó al Pines y lo elevó.

- ¿Ves algo?.- Preguntó Reik.

- Allá.- Señaló a lo lejos una nube de humo que avanzaba.

- ¿Es un tren?. - Preguntó Reik.

- Son antorchas, el ejército de la Reina está avanzando, ¡ocúltanos!. - Reik obedeció y descendió hasta alejarse y esconderse entre los árboles.

Qué aburrido.

Pensó Azul mientras caminaba con una canasta de manzana.

No me gusta ser la rata de laboratorio.

Le dió una mordida a la manzana.

- No puede ser.- Dijo al ver cómo un ave se acercaba a ella.

Tomo de su pata una nota.

"Volveré pronto de cacería.

- Dipper Gleeful"

Ella suspiró.

- No soportaré un día más siendo vigilada por esos raro.- Dijo mientras le daba la vuelta al papel y escribía.- Seguramente cuándo vuelvas estaré comiendo pedazos de madera.

Lo enrolló y lo ató a la pata del ave para que se fuera volando.

Al caminar varios metros más notó que ya era tarde, ella bufó, desplegó sus alas y comenzó a volar.

En un instante sintió un agonizante dolor en su ala izquierda que provocó que cayera bruscamente al suelo.

- Vaya vaya.- Parecía un cazador.- Linda señorita.

Sus compañeros se reían.

En los arbustos se escabullía algo.

- Parece que puede valer mucho dinero. ¿Qué dicen muchachos?

- Pagarán una buena cantidad.- Dijo uno de ellos.

- Creo que podemos probar el producto.- Se acercaron peligrosamente a ella.

- No ...- Dijo Azul antes de caer inconsciente.

- Perfecta oportunidad muchachos. ¿Quién empieza?

De los arbustos apareció Pines apuntándoles con un arma, detrás de este apareció Reik molestacon Bob en su cabeza.

- Sigan su camino, no tienen nada que ver en esto.- Dijo el líder del grupo.

- Dejen a la chica en paz y no les haré daño.- Dijo Pines mientras cargaba el arma.

- Yo creo que no, vamos a jugar con ella un rato.

- Oye jefe, ella se parece a la chica.- Señaló a Reik.

- Vaya, ¿Son gemelas?.- Le apuntó con su arma.- Si te entregas no mataré al sujeto, ¿Qué dices?

- No les contestes Reik.- Dijo Masón apuntando a la cabeza del líder.

- Vamos muñeca, te divertirás.- Dijo uno mientras reía.

- Te gustará tenerme dentro.- Se rió otro.

Vió cómo uno tomaba a Azul y comenzaba a besarla mientras que otro lamía su brazo.

- Si hay algo que odio.- Dejo a Bob en el suelo, se levantó y su rostro no expresaba ninguna emoción.- Es a los abusadores, uno.

Uno de ellos de explotó la cabeza provocando que los demás comenzarán a disparar.

Pines logró darle en el hombro a dos dejándolos inconscientes.

- Dos.- Dijo Reik, sus ojos se volvieron negros, el que besaba a Azul le explotó la cabeza.- Tres.

En ese instante, a los demás integrantes de la banda les explotó la cabeza, la mirada de Reik se perdía en el suelo.

Pines observó atemorizado cómo sus ojos eran negros con pupilas rojo sangre y no pudo evitar apuntarle a la cpabeza.

- Croar.

- Volvió en sí.- Vaya, no te despegues pequeño.- Dijo Reik mientras colocaba a Bob encima de su cabeza.- ¿Estás bien Pines?.- Preguntó mientras reía.

- Ah ...- Bajó el arma.- Si claro. ¿Te sientes bien?

- Me siento mejor que un bebé Panda con su tallo de bambú.- Sonrió.

Pines hizo caso omiso y se acercó a Azul.

La alejaron lo más lejos posible.

Montaron una carpa y sanaron su ala lastimada.

- Toma pescadito.- Dijo Reik mientras le acercaba un palo con un pez clavado a Pines.- Ñam ñam.- Comenzó a comer.

- Croar.

- Tú no puedes comer pescado.- Rió.- Tú comes moscas.

- Mmm ...- Reik y Pines se voltearon, vieron que Azul estaba despertando.

- Buenas noches.- Dijo alegre.- ¡Tenemos pescado si quieres comer!.- Señaló una vara con pescado.

- Se quejó de dolor, vió su ala lastimada y vendada.- Debe ser una broma ...

- Él es Pines.- Lo señaló, este saludó.- Es el Dipper de esta dimensión.

- Se levantó y se acercó a ellos.- Por favor díganme qué mataron a esos sujetos.

- No te preocupes, no te lastimarán.- Dijo Reik mientras le daba una mordida al pez.

- Croar.

- Tienes una... rana en la cabeza.- Dijo Azul.

- Él es Bob, es mi mejor amigo.- Sonrió.

- Croar.

- Esto es una completa broma ... No puede ser que esté contigo.- Dijo mientras se frotaba la cabeza.

- Pues sí, no te preocupes yo te citaré y cuidaré hasta que te sientas mucho mejor.- La abrazó.- Seremos mejores amigas.

Mejores amigas.

Una cara perturbadora se reflejaba en Azul.

Estaba con la persona que no toleraba, hasta podría decir que la odia un poco.