Al separarme de los brazos del chico noté que nos estabas mirando. Y no pude hacer nada más que apartar la mirada de ti y concentrarme en el chico a mi lado. Seguro que piensas que soy una ilusa, tirándome en los brazos del primer chico que vea y me diga una que otra palabra de consuelo. Pero no lo puedo evitar, un buen amigo es lo único que necesito en estos momentos.

El chico me ayuda a pararme de la banca.

"Hay que alejarnos de lo que nos hace daño." me dice.

Me jala del brazo para que lo siga por el camino de piedra. Caminamos codo a codo en un silencio cómodo mientras miro el paisaje a mi alrededor.

"Y dime, ¿Qué te hace tan difícil el superarlo?" Vuelve a hablar.

Largo un tenso suspiro. "Yo lo amaba, ¿Sabes? Y es difícil olvidar todo ese amor de un día para otro." Una lágrima resbala por mi mejilla y la limpio rápidamente.

"Lo entiendo" Suspira. "Yo también estuve enamorado alguna vez."

Lo miro con ternura. No lo dudo.

"¿Y qué pasó?" Cuestiono.

"Sólo no funcionó. Ella no podía olvidar a este chico y eso nos ocasionó probemas." Sus ojos se llenan de melancolía.

Nos quedamos en silencio. El amor nos ha decepcionado a los dos.