Kaisa paro el reproductor usando el dispositivo en su muñeca y la pista que había estado sonado se detuvo súbitamente.

-Lo siento chicas-

Fueron las escasas palabras de una jadeante Akali que intentaba en vano secar todas las gotas de sudor que recorrían su piel y empapaban su ropa deportiva, mientras mantenía aun la vista baja, oculta de las demás.

-Está bien- se apresuró Kaisa en animarle -Apenas llevamos algunos días de ensayo y ya has mejorado bastante, estoy segura de que...-

-¿De que la próxima vez nos detendremos en la misma parte?- Interrumpió Evelynn -De verdad, es la tercera vez que practicamos esta coreografía y siempre nos detenemos en el mismo sitio porque nuestro pequeño cachorrito callejero se desconcentra, olvida el paso siguiente o se adelanta-

-Basta, Eve. No seas tan dura con ella- Interrumpió la cuarta persona en el amplio salón de piso de madera y cubierto con espejos en las paredes. -Lo ha hecho bastante bien hasta ahora, para alguien que nunca había trabajado en una coreografía, y más aún en una grupal ha mejorado mucho, tal como dijo Kaisa. Solo, debemos darle un poco de tiempo y...-

-¿Solo necesita tiempo, dices? Pues, por si no lo has notado, nuestra primera presentación y debut es apenas en un par de semanas, ¿así que solo debemos darle a nuestra huérfana un poco de lo que no tenemos?-

Akali fue incapaz de seguir escuchando y simplemente abandono la sala, dando un portazo a la puerta de vidrio reforzado que chillo como si quisiera resquebrajarse.

-Te has pasado esta vez, Eve-

Evelynn no giro la vista de la puerta ante las palabras de la rubia y simplemente se encogió de hombros.

-Si prefiere hacer una rabieta que ensayar es su problema, pero nunca he arruinado mi presentación en un escenario, y no voy a hacerlo porque nuestra obra de caridad tiene problemas con un par de pasos-

-Enserio...-

Ahri suspiro ante las crueles palabras de la mayor pero no se esforzó en pedirle ser más amable, en parte porque tratándose de Evelynn seria en vano y también porque en cierta manera ella tenía razon. La presentación que sus productores y patrocinantes se habían encargado de anunciar con bombos y platillos y en la que habían dejado enormes cantidades de dinero estaba a la vuelta de la esquina, y ellas aun no estaban preparadas, lejos de la perfección que mencionaba la de cabello rosa, ni siquiera estaban listas.

Por suerte, si algo tenia Akali era que la música era algo que brotaba de su ser. El tiempo de más que habían empleado en las prácticas de baile lo había compensado con creces con las letras que la menor había escrito y que ahora eran algunos de sus sencillos.

-... De todas maneras, tomaremos un pequeño descanso creo que todas lo necesitamos-

......

Akali se mantenía sentada en el suelo del pasillo conjunto. Murmuraba y maldecía mientras se intentaba consolar y evitaba que las lágrimas impregnadas de angustia y enojo escaparan de sus orbes.

Había trabajado duro, era algo que incluso ella podía decirse a sí misma, pero aún le costaban muchas cosas. Para empezar, a pesar de que su sueño estaba justo frente a ella, no era del todo como lo había pensado. Mientras soñaba despierta en aquella pequeña habitación de alquiler, escribiendo las rimas que pasaban por su cabeza nunca llego a imaginar que el futuro que tanto anhelaba le llegaría tan rápido y de frente como el tren bala que tomó aquel día cuando abandono su país natal. Y por supuesto, mucho menos que ese futuro estaría compartido con otras tres demás talentosas cantantes, famosas, adineradas que le acogerían como una especie de familia sustituta.

La decepción de no solo no poder lograr algo que las otras hacían con aparente facilidad se sumaba con el pesar de no cumplir con las expectativas que sentía las demás tenían sobre ella, haciéndole sentir miserable, miserablemente enojada con ella misma y con esa insistente mujer que no paraba de recordarle lo insignificante que era en comparación con ellas.

El sonido de unos pasos acercándose le hizo sorber la nariz y secarse los ojos acuosos por instinto, solo tuvo que ver las calzas deportivas blancas y las estilizadas y finas piernas para adivinar de quien se trataba.

-Yo... Trabajare aún más duro, lo prometo-

Soltó incluso antes de levantar su vista para encarar a la rubia.

Ahri asintió satisfecha y amplio su sonrisa.

-Bien dicho, pero por ahora, tomemos un descanso. Ten-

Una botella de agua entro en su rango de visión y apenas aceptar lo que se le ofrecía, "Foxy" como insistía en que le llamara tomó asiento a su lado.

-Mantenerse hidratado es una manera fácil de mantener la piel suave y bonita- Mencionó Ahri mientras Akali destapaba y daba el primer sorbo a su bebida.

-¿Crees que me odia?-

Fue la pregunta completamente fuera de lugar de Akali, pero Ahri no tuvo problemas en saber a qué o mejor dicho, a quien se refería.

-No lo creo- Afirmo rotundamente encogiéndose de hombros -Si de verdad te odiara, ni siquiera estarías aquí... Caminando entre vivos, me refiero-

Akali ignoro lo que intuyo era una broma de parte de su líder pues no se sentía de ánimo y simplemente murmuro lo suficientemente fuerte para que su acompañante pudiese escuchar sus quejas.

-Entonces, ¿porque parece tener fijación por mí? Cada cosa que hago, nunca es suficiente o de lleno está mal, a pesar de que de verdad he intentado esforzarme al máximo y tratado llevarme bien con todas... Porque, bueno, se ser agradecida, y luego de conocerlas mejor, tú y Kaisa son bastante más agradables y muy distintas a lo que creí y...-

-Oh, sería interesante llegar a escuchar como creíste que seriamos- Le cortó Ahri, aun sonriendo pero manteniéndole la mirada fija, cosa que puso a Akali un poco nerviosa.

-Ejem, bueno ya sabes... Creí que eran algo así como... Las niñas ricas estereotipadas, es decir... Uhmm... pretenciosas, arrogantes, con el ego por los cielos y con prejuicios por las demás personas que bueno... No están en su "estrato"-

Ahri soltó una risilla que no tardó en ocultar con gracia en el dorso de su mano.

- Eh, me parece que era alguien más quien estaba llena de prejuicios-

Comento juguetona, haciendo reír a Akali también.

-Bueno, no puedo negarlo. Pero en mi defensa diré que aunque tú y Kaisa son personas agradables y dulces... Tanto que a veces incluso me aterra, Evelynn cae completamente en mi descripción-

Ahri no borro su sonrisa, pero el esfuerzo que hizo por mantenerla fue lo que le delato.

-Puede que... Ella parezca así. No, estoy segura que todos podrían pensar eso, después de todo es la imagen que Evelynn se ha encargado de crear para mantenerlos a todos a raya y que parece disfrutar. Pero, realmente no es todo sobre ella. Eve es realmente perfeccionista, entusiasta y puede ser tanto una fuente de concejos amables así como darte una bofetada cuando sienta que es necesario... No digo que sea un pan de dios, está muy lejos de serlo y me atrevería a decir que es todo lo contrario, pero en definitiva tampoco es una mala persona una vez que la conoces-

-Me parece que hablamos de personas distintas...-

Comento la joven rapera interrumpiendo a la rubia.

- Y lo hacemos, en cierta manera. Sé que hasta ahora solo ha tenido opiniones negativas sobre ella pero, del mismo modo que creíste mal de Bookie y yo, puede que también solo te estés dejando intimidar por la lengua afilada de Eve, aunque no puedo culparte por ello. Evelynn siempre ha sido del tipo de personas que prefieren alejar a todo y a todos, a menos claro, que quiera algo de ti-

Ahri se levantó de su lugar y se sacudió sus ropas aunque realmente no había una pizca de polvo en el suelo de madera pulida y luego miro a Akali una última vez.

-Te recomiendo que te des una oportunidad de conocerla más de cerca, a pesar de como parece ella puede ser bastante confiable con los pocos que acepta en su cerrado circulo, puede que sirva de algo.... Y si no, entonces les recomiendo que encuentren alguna manera de almenos aparentar que se llevan bien, después de todo, ambas son miembros de este grupo, sea lo que sea que elijan, Porfavor, no me hagan intervenir, ¿sí?-

Terminó, cerrando sus ojos en lo que parecía una cálida y sincera sonrisa demoniaca que hizo que un escalofrió recorriera la espalda de la menor.

-S-Si...-

-Bien, entonces. Ah, tomamos un pequeño descanso, aun tienes 10 minutos así que úsalos como desees pero no llegues tarde-

......

El ensayo de coreografía con Kaisa se reanudo durante un par de horas más, hasta que el móvil de Ahri resonó en la sala y luego de una corta charla y un par de suspiros de la rubia ésta se disculpó con todas, alegando que habían surgido un par de cosas que debía atender personalmente.

Kaisa se ofreció a acompañarle pero, para sorpresa de todas Ahri se negó, despidiéndose de la bailarina con un beso en los labios y un ademan de su mano para las otras dos.

Kaisa no tardo mucho más en dar por terminada la sesión, acercándose a ambas chicas para agradecerles su esfuerzo y felicitando en particular a Akali por lograr por primera vez finalizar la coreografía sin fallas, y sin más se dispuso a marcharse.

Evelynn, por su parte, salió del salón sin decir palabra pero si dedicándole una mirada a la menor antes de desaparecer por el portal de vidrio y sin ánimos de quedarse mucho más y de tomar una ducha lo antes posible Akali se dispuso también a recoger sus haberes para irse al cómodo y lujoso pero pequeño apartamento en el que Ahri le había permitido alojarse para efectos de cercanía.

Avanzo por los pasillos del lugar en dirección a la salida, aun preguntándose qué clase de cosas tenía que hacer uno para que otra persona le regalase un gimnasio entero, completamente equipado y con todos los lujos disponibles tal como lo había hecho Ahri con Kaisa aunque luego de darle un par de vueltas al asunto, al igual que todas las demás veces que le venía esa idea a la mente, terminó atribuyéndolo al hecho de que simplemente a la de aspecto zorruno le sobraba liquidación.

Su mente divagaba esa clase de cosas sin sentido, desde lo que haría luego de tomar una merecida ducha, hasta el tiempo que le quedaba libre antes de irse a la cama hasta que las palabras de la chica volvieron a su mente.

-"Deberías darte la oportunidad de conocerla más de cerca"-

Murmuro entre dientes, mientras meditaba si había algún otro significado.

-¿Que se supone que debo conocer? No necesito acercarme más, su ego puedo verlo a kilómetros y su arrogancia apesta aun desde lejos-

"Es la imagen que se ha encargado de crear para mantenerlos a todos a raya"

-Pues vaya que se le está dando de maravilla... A todo esto, ¿porque debo darle tantas vueltas? ¿Que más me da a mí que me trate como se le venga en gana? No es como que sea algo nuevo.... Y tampoco como que quisiera agradarle, particularmente. Como dijo Ahri, solo debo concentrarme en que no afecte mi estadía en el grupo o la imagen de este y ya está... No es como que...-

Mientras más intentaba cortar sus pensamientos, otra razon que al parecer por instinto intentaba negar venía a su mente y le encerraba en un círculo sin fin. Así que decidió acallar sus pensamientos, almenos durante el trayecto a casa y la mejor manera que se le ocurrió fue sacar sus auriculares y su reproductor.

Tomo el reproductor desde la mochila en la que había dejado todas sus cosas, sin embargo por más que busco y revolvió sus cosas, no conseguía sus siempre confiables auriculares, vacío toda la mochila e hizo un desastre con sus cosas en el suelo, pero seguía sin encontrarlos, imagino que se los había dejado en el salón en el que habían estado ensayando, así que volvió para buscarlos.

Apenas acercarse al lugar que creía estaba vacío, notó como del lugar provenía algo de música, la misma pista que había estado sonando toda la tarde una y otra vez.

Abrió con delicadeza la puerta, apenas para introducir parcialmente su rostro y dar un vistazo al interior, dándose cuenta de que el lugar no estaba vacío tal como había creído. En medio de la sala una silueta bailaba y se movía al ritmo, ejecutando los mismos pasos que había visto ya varias veces, en un principio pensó que se trataba de Kaisa, hasta que sus ojos se fijaron en un inconfundible y llamativo cabello color rosa.

A Akali le recordó a aquella vez que entro por primera vez a este lugar y observo bailar a Kaisa, sus movimientos eran tan naturales y fluidos que parecía que su cuerpo se movía como reacción natural a la música. Era como si esta se transmitiera a través de su cuerpo como las ondas en un estanque de agua cuando se arrojaba una piedra en el. Sus caderas se balanceaban libremente y parecían generar una ola que se extendía al resto de su cuerpo que se movía en respuesta, era simplemente exquisito verle bailar.

Pero ahora, por otro lado, los movimientos de la mujer que tenía en frente, aparentemente ensimismada en su baile le habían hipnotizado de otra manera, sus pasos, pese a que no eran tan naturales como los de la otra chica si tenían un toque más atrevido en ellos, con su movimiento parecía que todos sus atributos que de por sí ya eran bastante atractivos eran realzados y destacados, como aquellas piezas de arte que estaban siempre resaltadas para poder ser vistas pero con un aviso enorme de "No tocar" mientras sus movimientos realizaban una casi indecente invitación a quedarse mirando como danzaba al ritmo de la música.

Pero eso no era todo lo que hacía que Akali le mirara tan fijamente y se quedara absorta en ello. No era solo su forma de bailar y su cuerpo perfectamente esculpido, no, eran los rebeldes cabellos que habían escapado de su generalmente perfecto peinado y se adherían a su frente y su cuello, producto del constante movimiento. Era la fina capa de sudor que hacia brillar suavemente su generalmente pulcra y casi inmaculada piel y oscurecía el tono rosa brillante al que estaba ya acostumbrada. Eran los labios ligeramente más pálidos que cuando aplicaba algún producto labial en ellos. Era la forma tan... imperfecta que lucía en ese momento que hacían lucir a la aparentemente perfecta diva Evelynn como una chica común lo que hacía que Akali no pudiera despegar su vista de ella, incluso si aún no había notado que en definitiva le había mirado de más.

Hasta que los iris dorados se dirigieron a su dirección y una sonrisa maliciosa se ladeo en el rostro de la mujer.

-Vaya... No sabía que acostumbrabas a espiar a las personas-

Comento con su general tono sarcástico cortando inmediatamente lo que sea que Akali estuviese pensando en ese momento y haciéndole chasquear su lengua.

-No espiaba-

Se defendió.

-Simplemente quería saber si había dejado mis auriculares aquí en algún lugar...-

Evelynn rio por lo bajo.

-Oh, vamos. No tienes que inventar excusas al azar, no es como que me incomode que me miren, además, no puedo culpar tus buenos gustos-

-Que no te estaba espiando-

Repitió entrecerrando los ojos, provocando que la mayor levantara sus manos en señal de rendición pero sin eliminar la expresión de burla en su rostro.

Akali decidió ignorarla y se adentró finalmente al lugar a llevar acabo la búsqueda de sus aparatos, y al no encontrarlos en ningún lugar bufo exasperada, hasta que la mujer que se había detenido solo para mirarle se acercó a ella y extendió su mano, en su dirección, girándola y abriéndola, enseñando los pequeños auriculares en su palma.

Akali los miró y luego miro a Evelynn esperando a que dijera algo al respecto, pero luego de varios segundos de silencio, simplemente los tomó.

-... Gracias-

Soltó entre dientes.

-Tenía pensado devolvértelos, los encontré tirados en el suelo, y solo pude relacionarlos contigo-

Akali asintió, y no creyó necesario decir algo más para marcharse, pero fue Evelynn quien nuevamente agrego algo.

-Bien hecho-

Dijo, y Akali sintió las palabras tan fuera de lugar que tuvo que esforzarse de mas en que su expresión no delatara que se había sorprendido.

-Por lo de esta tarde- Se aclaró la peli rosa -Es la primera vez que no quedas en ridículo durante los ensayos con Kai, así que bien hecho-

Nuevamente Akali asintió, aun presa del pequeño shock que le causo escuchar esas palabras de la mujer frente a ella.

-Si... Claro, gracias. Seguiré esforzándome-

Evelynn solo sonrió, y por primera vez, una sonrisa en la que Akali no pudo distinguir algún deje de burla o sarcasmo, lo más cercano a una sonrisa sincera que había visto en la diva por primera vez.

Esta vez sí se marchó sin esperar nada más y apenas salir escucho que la música se reanudaba desde el salón, tomo sus audífonos mientras su cabeza intentaba asimilar la pequeña interacción de hacia un momento.

-Darme la oportunidad de conocerla... ¿Eh?-

No era la primera vez que repetía esas palabras en su cabeza, de hecho, debía ser la millonésima vez que lo hacía, solo en esa tarde... Pero era la primera vez que no sonaba tan imposible.

-----

#ImHakku