Mina golpeaba sus dedos contra la mesa al compás de la canción que sonaba en la radio de la cafetería. Suspiró y miró seriamente a su cita.

- Entiende...- Se acomodó en el asiento y siguió hablando.- Creo que nos deberíamos alejar, es por el bien de las dos.

La joven Chaeyoung agachó la mirada y apretó los puños por no gritar.

- Se que tu me quieres, Chaeyoungie... ¡Y yo también! Pero creo que dejar de ser amigas es una buena opción.

- ¿A-amigas...?

- Bueno...- Rascó su cuello por los nervios.- No sé exactamente que somos...

- No-no...novias.

- ¡¿Novias?!- Su gritó hizo que mucha gente, incluyendo al dueño de la cafetería, se quedasen mirándola. Esta se avergonzó tanto que sus mejillas se pusieron automáticamente rojas. - Chaeyoung, no somos novias...- Murmuró esta vez.

- S-si.

- No.

- Si.

- No.

- ¡SI!- Nuevamente las personas se quedaron calladas para presenciar la discusión de las dos muchachas.

- Chaeyoungie, no llevamos ni cuatro meses de habernos conocido.

- ¿Y-y...?

- Ah...- Suspiró.- ¿Tú antes tuviste un novio?

Negó con el dedo y se puso la pajita en los labios para dar un sorbo de su chocolatada fría.

- Las personas deben conocerse muy bien antes de empezar una relación.

- Y-yo te conozco bien...- Mina se quedó callada; Chaeyoung tenía mucha razón, aunque no hayan pasado muchos meses, ambas se conocían perfectamente.- Y-y te qu-quiero para mi...- Se señalo y dio otro sorbo mientras miraba hacia el techo.

- ¡Demonios! Te he citado aquí para que dejemos de hablar y... ¡No puedo!- Se tapó el rostro con sus manos.- ¿Por qué me haces esto, Chaeyoung?

- ¿Qué te h-hago?

Descubrió su cara y la miró.- Ser tan irresistible.

La menor se encogió de hombros, y no porque no sepa la respuesta, si no porque no sabía que significaba esa palabra tan extraña.

- Chaeyoung, en serio, no se que hacer contigo.

- A-amarme...

Suspiró nuevamente y puso sus ojos en blancos. - Lamentablemente ya lo hago.

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Les dejo una Chaeyoungie posando. 😊